Partida Rol por web

¡¿Ma… maldiciones con represarías?! -se sorprende Anna-. ¿Y qué nos pasará?

Puede que sea peligroso enfrentarse a Udo estando “malditos”.

La joven inglesa nunca fue en extremo supersticiosa, pero no dudaba de los poderes de los imaginarios. A fin de cuentas uno le había salvado la vida con solo tocarla…

"Ah, ¿maldiciones de ese tipo? No, no creo que Ciren sea capaz, su poder radica en su fuerza, que es considerable. Creí que se referían a su grosera forma de hablar" replica Bavarica.

No os queda claro si la estatua bromeaba con vosotros o hablaba en serio. Después de todo, es un ser totalmente inhumano y su forma de pensar es bastante distinta a la vuestra...

¡Puff, menos mal! -suspira la joven, aliviada-. Por un momento pensé que podría influirnos en nuestro cometido… O algo peor.

Anna, mucho más serena trata de recordar las palabras de la deidad antes de la interrupción del buen doctor.

Y díganos, ¿la catedral de la Marienplatz tiene algún vínculo con su mundo, mi señora? ¿Hay algo de “Imaginario” en ella?

"Realmente ese bello edificio no tiene nada de mágico más alla de la magia que le otorgan los mortales a eso que llaman religión, por eso no sabemos qué lleva a Udo a frecuentar la cercanía de dicho lugar", responde Bavarica. "A no ser que repartan comida gratuitamente, claro", termina.

Helena intenta recordar si en aquel lugar repartían comida gratis.

- ¿Alguno sabe si reparten comida?- la verdad no podía pensar muy bien debido a su cansancio, a su hambre y a su debilitado aspecto.- Creo que ya tenemos todo lo que necesitábamos ¿no es sí Señora Bavarica?

"Ciertamente tienen lo que pidieron, lo que hagan con dicha información ya es asunto de ustedes" asiente Bavarica "Aunque quizás deberías descansar antes, mi querida niña. La noche pasada en el bosque no parece haberte sentado muy bien".

No creéis que haya tenderetes con comida gratis ni cerca de la catedral ni en la misma explanada del Oktoberfeast, más bien será de pago todo aunque quizás en el segundo lugar los precios sean más económicos por estar sufragado en parte por la ciudad. Ya la cuestión subyacente es cómo buscar a Udo en uno de esos dos lugares, y cómo.

-Bien creo que va siendo hora de ir a por nuestro merecido baño y descanso. La investigación puede esperar un poco.

Iba siendo hora de descansar y buscar mas detalles con la mente despejada y tranquila así que espera a que sus compañeros se decidan a partir.

-Ha gracias Bavarica por la información, estaremos por los alrededores unos días. Espero despedirme antes de que partamos. Ha sido una experiencia muy grata el conoceros.

La majestuosa estatua asiente y responde "Id en paz", mientras tanto ella como su corte se despiden de vosotros agitando las manos (o patas, o lo que sea que tengan como apéndices prensiles).

Ante las palabras de Bavarica y la conversación que mantiene con sus compañeros, Pedro se mantiene en silencio meditando las palabras que cruzan.
Una vez que sus compañeros, o al menos el bueno de el doctor, han decido que ha llegado el momento de que se tomen por fin su muy merecido descanso Pedro habla.

-Por mi de acuerdo. Estoy deseando de meterme algo en la tripa y descansar los pies.

Una vez que Bavarica se retira Pedro se despide:

-Señora... quizás no les hubiera ayudado mucho pero lo que si estaba claro es que los había tratado con educación y respeto.

Anna coincide claramente con los demás: ¡Necesitan un descanso como agua de mayo!

Si seguimos por más tiempo sin pegar ojo, cuando lleguemos ante Udo, nos tumbará con un soplido -suspira mientras suben de nuevo la escalinata que les conduciría al exterior-. Necesitamos estar fuertes para nuestra misión. Sé que debemos resolver esto con celeridad, pero, señores, no somos máquinas, debemos comer y descansar. Reponer fuerzas.