Partida Rol por web

Once upon a time: Revelaciones

Storybrooke: Martes 18 de Noviembre

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30/11/2014, 23:30
Narradora

No fue una noche muy difícil en el Black Rose. Había poca clientela, ya sea por el mal tiempo o que los pueblerinos no estaban muy animados por los recientes acontecimientos. Cerrasteis medio pronto, era tarde y no creías que alguien más apareciese a última hora. Te fuiste a tu apartamento y empezaste a reflexionar sobre como había sido el día. Si tuvieras que calificarlo, sería raro, muy raro. No podías parar de pensar en el señor Mayard, no sabías muy bien porque. Así que decidiste ir a dormir, necesitabas despejar la cabeza y estar fresco para el día siguiente. 

Sueñas contigo de niño, estás en la playa y el mar se ve tranquilo. Se respira calma y tranquilidad. A lo lejos ves a tu padre que te hace señas para que le sigas y comienza a caminar. Comienzas a correr detrás de él, pero no lo alcanzas y cada vez estás más y más lejos. Con todas tus fuerzas intentas avanzar pero es imposible. Poco a poco sientes como tus músculos se agarrotan y no puedes moverte. Caes de bruces en la arena incapaz de sostenerte de pie. Lo último que ves es la playa infinita y ningún rastro de tu padre.

Suena el despertador y te incorporas de la cama sobresaltado. Miras a tu alrededor, no estás en la playa, eso te da un pequeño alivio. Un nuevo día comienza y el Black Rose debe abrir. 

 

Entonces llaman a tu teléfono, siendo tan temprano nada bueno sería, seguro. Así que coges el teléfono esperando que algún transportista te dijese que hoy no te traían la cerveza -¿Señor Maynard? Bueno días le llamamos del Hospital de Storybrooke , es sobre Eileen, se encuentra hospitalizada. No es nada grave, ¿puede venir por favor? Necesitamos que rellene unos datos mientras ella se encuentra encamada. 

Notas de juego

Si es que no te dejan tranquilo :(

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30/11/2014, 23:42
Narradora

Duermes abrazada a tu compañero, tu amigo, tu... no sabías bien que más podía ser para ti. Después de una noche rara donde compartiste tu primer beso con el chico que ahora mismo duerme a tu lado. Había sido un día raro y duro para ambos, pero este momento no te lo podía quitar nadie y poco a poco cedes al sueño.

Estas volando, muy, muy alto sobre el pueblo. Es una sensación de libertad y sabes que no puede pasar nada malo. Alzas las cabeza sonriente. En el horizonte ves dos estrellas gemelas que brillan con fuerza... 

Pero de repente comienzas a caer en picado, sin control. En tu caída no puedes evitar escuchar algo, algo que te es familiar.

Despiertas sobresaltada, sudando y con un dolor en el pecho, en la zona del corazón. Cuando miras a tu lado, Zacharias no está. Como te dijo se marchó antes de que despertaras. Miras a tu otro lado y encuentras un pos-it pegado al libro de cuentos.

"Lo siento, lo siento mucho, Antye"

Notas de juego

Se me olvidó decirte que mires en tu ficha, donde las habilidades ;)

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30/11/2014, 23:53
Narradora

Tu día ha sido raro, el más raro de tu vida podrías decir. Primero un paciente que se autolesiona y acaba muriendo al poco tiempo. Después un paciente algo escandaloso que parecía que te quería emparejar con su sobrina. Cansado del día y del trabajo decides que es hora de descansar. La copiosa lluvia no acompaña para salir a tomar algo, así que decides que es mejor tomarse la copa en casa. Llega la hora de acostarse y no te cuesta mucho trabajo ceder al sueño.

Estás en un bosque, un enorme bosque que sientes como si fuera tu hogar. Podrías andar por todo el bosque con los ojos cerrados. Caminas feliz, animado e incluso silbas alguna cacioncilla. Pero conforme avanzas, miras a tu alrededor y no ves nada. Esa nada es lo que te molesta, te hace sentir triste, solo y desamparado. 

El despertador suena y te levantas con esa sensación de soledad. Cuando miras a todos lados ves que estás en tu habitación y un pequeño suspiro de alivio sale de tus labios. Es un nuevo día en Sotrybrooke y toca ponerse en pie. 

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01/12/2014, 00:02
Antye Tausch

Antye despierta sobresaltada en el sillón. Por unos momentos sólo puede enfocarse en aquél extraño sueño que había tenido. Esa sensación de libertad no le era familiar en ese pueblo, pero en ese mundo onírico sí lo fue, incluso más real que Storybrooke. La pelirroja intenta respirar para tranquilizarse y que así el dolor en su pecho disminuya. Se incorpora para tomar agua y es cuando nota una ausencia que le pesa: Zack ya no está.

La joven lee la nota en su libro de cuentos y, aunque el sol ilumina cálidamente a través de las ventanas, para Antye el astro no parece calentar muy bien. Él se fue a costa de su vida por un crimen que no cometió... <<Cuídate mucho, Zack>>. Se lleva la nota a la altura de su corazón y deja que una lágrima silenciosa ruede. Dobla el papel y va a su cuarto para guardarlo en uno de los cajones. 

Estando ahí aprovecha para darse una ducha y colocarse el uniforme de la escuela. Esta vez cuando intenta prepararse su típico emparedado de pavo, Antye alza una ceja y busca en su refrigerador hasta dar con un par de huevos y termina cocinándolos, agradeciendo ingerir algo fuera de la rutina. Minutos después se lava los dientes y toma sus cosas para ir a la escuela.

La chiquilla ve el libro de cuentos, pensando si llevarlo o no debido a su poco cuidado y fragileza. A su mente llega la sugerencia de Zack de tenerlo siempre consigo por una corazonada, Antye lo guarda en su mochila con sumo cuidado. Antes de irse de su casa, observa el lugar que compartió con el chico esa noche que acaba de pasar. Con una mezcla de añoranza, melancolía y tristeza, la joven cierra la puerta tras de sí rumbo al instituto mientras medita en el bienestar de Zack, su sueño y los extraños acontecimientos del pueblo.

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01/12/2014, 00:12
Narradora

Fuiste como todas las noches al Black Rose. Habías tenido un día raro, el suceso de aquel muchacho y el desmayo en tu piso. Además de que tu tío no acudió aquella noche, como lo hacía todas, aunque no hubo mucha clientela esa noche. Cerrasteis medianamente pronto el Black Rose. Cuando llegaste a casa sola ya era hora de acostarse, te tomaste un trago y no tes costó conciliar el sueño.

Eres tú de pequeña, en un laberinto hecho de rosas rojas que gotean. No huelen bien como todas las rosas, el olor que desprenden es nauseabundo. Comienzas a correr, no sabes bien por qué, pero sientes que alguien te busca, te persigue. Tienes miedo, mucho miedo y aquel laberinto comienza a cerrarte el paso.

La luz del sol comienza a molestarte y consigues despertar de esa pesadilla. Un día nuevo te espera en Storybrooke, aunque sigues con esa sensación de ser perseguida. 

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01/12/2014, 00:14
Narradora

Duermes acurrucada a William, algo que echabas de menos. El sueño se apodera de ambos y quedáis dormidos plácidamente uno al lado del otro. Entonces comienzas a soñar.

Te ves a ti misma superando muchas pruebas, a cada cual más y más dura. Hasta que llegas a un torreón. Alzas la vista y allí la ves en la ventana, la princesa que debes liberar. Pero es imposible acceder a ella. Cuando vuelves alzar la vista la princesa no está, pero si escuchas su llanto. Un llanto de soledad tan desgarrador que te duele.

Despiertas molesta por el sueño, el llanto te martillea la cabeza. Cuando te das la vuelta para abrazar a tu chico, te das cuenta de que en su lugar está Sam, pero ni rastro de William. Entonces comienza a sonar tu móvil. 

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01/12/2014, 00:28
Narradora

Comienza a llover con fuerza, tanto que empiezas a temer por tu huerto. Antes de poder hablar con Erick, decides que es mejor que te asegures de que esté todo bien. Erick se ofrece a llevarte a tu casa y así lo hace. Cuando llegas te aseguras que todo está bien y por suerte es así. La lluvia poco a poco cesa y puedes quedarte tranquila. Marchas a dormir, recordando el sueño de la noche anterior. Poco a poco cedes al sueño...

Estás de nuevo en ese bosque tan extraño. Ante ti vuelve a surgir aquella extraña figura cubierta por una túnica y encapuchada. No se mueve, pero las sombras que la rodean comienzan a envolverte y sientes como rodean tu cuello. Sientes como te quedas sin respiración y poco a poco pierdes el conocimiento. Aún así escuchas aquel latido de corazón, acompañado de una risa de ultra tumba que te hiela la sangre.

Despiertas de día sobresaltada por aquel sueño tan extraño. Mueves la cabeza para ubicarte y entonces escuchas unos pequeños arañazos en la puerta principal, seguramente Kida. 

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01/12/2014, 00:39
Narradora

Pasas lo que te queda de día con aquel niño llamado Sean. De tanto trajín e intentar entretener al muchacho, acabas rendido y decides que es hora de ir a descansar. Cuando consigues que el crío se vaya a la cama, no te cuesta demasiado conciliar el sueño. Aquel niño era un misterio y no sabías muy bien de donde había salido, ni de donde venía. Poco a poco tus ojos se cierran.

Entonces estás tú más joven, en un enorme prado, verde muy verde. Parece que estás intentando hacer algo con un pelele de paja que tienes al fondo. Lo miras y te concentras y no ocurre nada. Te frustras, te enfadas y le pegas patadas a una piedra. Vuelves a mirar al pelele muy enfadado y le maldices. Cuando haces eso de tus manos sale una bola de fuego que impacta de llego sobre la paja haciendo que comience arder muy rápido.

Despiertas sintiendo que alguien tira de ti, ves a Sean que te llama. Tiene hambre y quiere desayunar. Es un nuevo día en Storybrooke. No sabes que va a deparar el día, pero para empezar debes pensar que hacer con el niño.

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01/12/2014, 00:46
Narradora

El sheriff Wolf toma nota de todo, lo que le cuentas. Te promete que se encargará de investigar todo lo posible y decide acompañarte a casa para que te sientas algo más segura. Llegas a tu casa, cansada y algo asustada. Preparas las cosas para el día siguiente, hoy no habías dado clase, pero mañana debías ocuparte de tus alumnos. Llega la hora de dormir y el sueño te vence.

Comienzas a correr por el bosque, alguien te sigue. No logra alcanzarte, tu eres más rápida. Sigues corriendo y consigues esconderte en una vieja mina. Algo golpea en tus pies, cuando bajas la mirada, ves una manzana roja, muy lustrosa. Cuando te agachas para coger la manzana, está comienza a deshacerse mientras se pudre. 

Suena el despertador, un nuevo día en Storybrooke. Parece que tu subconsciente no te deja descansar de aquellas manzanas que recibiste. Pero el día continua y es hora de ir a clase. 

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01/12/2014, 00:57
Narradora

Llegas a casa solo, esta noche no has conseguido compañía. Pero te ha faltado poco. Vuelves a revisar aquella arena dorada y sigues sin comprender muy bien que es. Es la hora de dormir y no te cuesta conciliar el sueño.

Estás en un camino de baldosas amarillas, al fondo ves Storybrooke. Intentas avanzar pero no lo consigues. Intentas retroceder y tampoco lo consigues. Entonces las baldosas comienzan a convertirse en arena dorada que comienza a tragarte poco a poco. Haces lo posible por salir, pero siguen arrastrando de ti con violencia, hasta que no puedes más.

Despiertas alterado y por la ventana ves que ya ha amanecido. Miras alterado a la arena dorada que sigue en su probeta, brillando igual que el día anterior. 

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01/12/2014, 01:02
Narradora

Después de una buena cena de disculpas y unas copas, acompañas a Sebastian a su casa. Efectivamente no hay rastro de Sally por ningún lado. En la noche disfrutáis de la compañía uno del otro. Hasta que Morfeo os vence y el sueño llega a vosotros.

Estás cabalgando sobre Khan, con una coraza asiática. Hace frío por donde cabalgas, tanto que tú y el animal comenzáis a resentiros por las bajas temperaturas. Pero seguís avanzando, debes informar de algo. Aunque no sabes bien de que. A lo lejos ves un campamento y las fuerzas vuelven a ti, pero de repente el campamento es devorado por un alud, dejándolo sepultado bajo la nieve.

Despiertas y miras a tu alrededor. No estás en tu habitación, si no en la de Sebastian que no está contigo. Cuando le buscas por la casa, junto a unas llaves de la casa encuentras una nota.

He tenido que salir por una emergencia en el hospital. Estás en tu casa.

PD: desayuna antes de venir a trabajar. 

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01/12/2014, 01:44
Dominique Laveau
Sólo para el director

Habíamos pasado una tarde-noche como hace mucho no hacíamos, después de cenar y ver alguna peli solo por la excusa de echarnos en el sofá, terminamos en la habitación desatando nuestros mas básicos instintos, exhaustos aunque contentos nos acomodamos para dormir abrazados, y sumergirme en un sueño que a priori esperaba placido.

Me desperté de golpe acongojada y aturdida, en mis mi cabeza aún podía oír aquel llanto que me erizaba la piel y me entristecía profundamente, me pase las manos por la cara un par de veces y giré mi rostro  para mirar a mi chico pero en su lugar, Sam dormía plácidamente.

Alcé una ceja, no oía ruido en el baño y cuando iba a levantarme para buscarle y de paso comenzar a preparar el desayuno mi teléfono comienza a sonar… - Dominique Laveau – dije como saludo a quien llamaba.

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01/12/2014, 02:14
Raphaelle Lawler Hyde

¿Que demonios fue eso? Cada vez me pongo más creativa con mis sueños...

Se levanta de la cama y tras bajar al primer piso, en busca de Sebastian y la comida, se encuentra con una nota sobre la mesa del comedor. Normalmente no desayunaría antes de trabajar, pero ya veía que la interrogarían al llegar, así que sacó un yoghurt y lo comió rápidamente, para luego ir a ducharse y vestirse. 

Tras eso, salió de la casa y cerró con llave, para ir en dirección al Black Rose por su café matutino, como todos los días. Aunque a diferencia de los otros días, anoche había tenido una velada bastante digna de recordar.

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01/12/2014, 02:53
Nessa Aldrich

Cuando sales por la puerta de casa, te topas con tu vecina Nessa Aldrich, que estaba apunto de llamar a tu puerta. Una mujer de unos treinta y pico años que vive en la casa de al lado tuya. Por lo poco que sabes de ella es la jueza de Storybrooke. Una sonrisa se dibuja en su rostro cuando te ve - Debe ser la señorita Tausch ¿cierto?- te mira algo altiva -me gustaría hablar con usted. 

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01/12/2014, 02:58
Narradora

Al otro lado del teléfono suena la voz de una mujer -Buenos días señorita Laveau. Le llamamos desde el hospital de Storybrook. El señor Morgan se encuentra hospitalizado, no es nada grave, pero necesitamos que rellene algunos documentos, por favor.

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01/12/2014, 14:36
Dominique Laveau
Sólo para el director

Las palabras de mi interlocutora me dejaron helada, ¿hospitalizado? ¿pero en qué momento? - pensé, y por mas que la muchacha me dijese que no era nada grave comencé a ser presa de un ataque de ansiedad - Voy para allá - respondí y colgando el teléfono me puse en marcha de inmediato, me puse unos vaqueros, botas negras con tacón fino, camiseta y chaqueta de cuero, cogí mis gafas de sol, me fije si estaba el DeLorean fuera, sino cogería la moto directamente, y antes de salir les dejé comida y agua a los animales, para salir volando en dirección al hospital.

Notas de juego

Al hospital.

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01/12/2014, 19:49
Kenneth Maynard
Sólo para el director

Un nuevo día y de nuevo un mal despertar. Y esta vez no recuerdo haber pillado ninguna borrachera la noche anterior, ni siquiera fue noche de póker... El extraño sueño sigue aún presente en mi pensamiento, la impotencia y la frustración de no alcanzar a mi padre. Seguro que Freud diría algo ingenioso al respecto. Trato de despejarme y me muevo perezosamente por mi cuarto hasta que suena mi móvil. Lo cojo, aún medio dormido. No hay que decir que me despierto de golpe cuando oigo las palabras Hospital, Eileen, ingreso.

-Por supuesto, voy en seguida- respondo muy serio. Parece que alguien nos ha lanzado un mal de ojo porque no hay manera de abrir el bar ni un sólo día de forma normal. En fin. Me visto con algo de prisa y salgo de casa en dirección al hospital. Con las velocidades casi me dejo el móvil y las llaves, casi. Vuelvo a usar el mismo cartelito de ayer y lo cuelgo en la puerta del bar. Esta vez no hay clientes inesperados al acecho, como ayer. Cierro con llave y me marcho al hospital.

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01/12/2014, 21:44
Dylan Smith
Sólo para el director

Gracias a mi predicción meteorológica, logré llegar a mi huerto antes de que lloviera mucho. Por suerte Smith ya había recogido casi todo. 

A la hora de dormir siento como unas mariposillas de nervios inundaban mi estómago. Quizás volvería a soñar con aquel extraño lugar... Quizás... 

Al despertarme, la misma sensación extraña que la mañana anterior recorre mi cuerpo, pero el sonido de la puerta proviniente de Kida hace que mi humor mejore. 

- Buenos días bonita.- Le digo abriéndole la puerta y yendo directamente a ponerle el desayuno a ella y a su familia que como de costumbre, me estaba esperando en el porche. 

- Os tengo mal acostumbrados.- Les digo. 

Como hoy no era día de abrir el huerto, le doy los buenos días a Smith y me dirijo a casa de Erick, a ver si podía hablar con él esta vez. 

Notas de juego

¿Me acuerdo de algo del sueño? 

p.d: Creo que ya sé quien soy... ^_^

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01/12/2014, 22:19
Narradora

Notas de juego

El Black Rose está cerrado ¿otro sitio o al hospital?

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01/12/2014, 22:24
Raphaelle Lawler Hyde

Notas de juego

Al hospital, y de humor a lo grumpy cat por la falta de café