Partida Rol por web

El confiado ataque del soldado contra mi fue recibido por un gran paso hacia el lado y una profunda puñalada en sus costillas. Tal acto de destreza me sorprendía viniendo de mí, pero por ahora no me lo cuestionaría. Mis compañeros lograron resultados similares, aunque el proceso que más sorprendió fue el de la señorita Delilah...

Las muertes se sentían tan irreales, de la misma forma que se sintió la muerte del doctor en la plaza del pueblo...

Sin tiempo para preocuparse, con la disposición clara de todos por sobrevivir y los rebeldes cayendo por todos lados, es momento de huir como sea.

- Lleguemos al bosque y luego Jhon nos guiará. -

Dije respondiendo a las palabras de la joven, dando el primer paso para escapar y luego un salto para caer dando un corte  en el cuello de un soldado que estaba dándonos la espalda, ocupado hasta un momento con un rebelde y ahora ocupado desangrándose.

Me volteé para ver si los demás hacían algo distinto. No me gustaría irme en una dirección y luego encontrarme sólo.

El hombre miró extrañado a la rubia por su respuesta, pero asintió y no dijo nada más acerca del tema. Seguía luchando contra los soldados, la verdad es que bastante bien, como si practicara esgrima cada día. 

De repente señaló hacia una dirección - por ahí, allí hay un sitio seguro- dijo el hombre entre jadeos - yo debo quedarme, pero cuando acabe os buscaré, venga ¡moveos! 

No estaba muy por la labor de seguir a Dantalion, seguía luchando a brazo partido contra los soldados e indicando a los heridos que aún podían moverse que huyesen de ahí. 

- Pero, tío, no puedo dejarte aquí...-replicó Delilah intentando esquivar golpes de soldados y devolviéndolos, atravesando a otros tantos con su hacha. Le seguía horrorizando, pero tenía que sacar a su tío de allí. 

Sin embargo el número aumentaba, llegaban por todas partes y arrasaban con todo aquello que se ponía en su camino. Delilah no sabía si aguantaría mucho más tiempo. 

- Está bien... suerte-alcanzó a su tío para darle un escueto beso en la mejilla antes de salir corriendo en la dirección que indicaba. Delilah se sentía mal consigo misma abandonando así a su tío.. pero no quedaba otra. 

Dan casi suelta su espada un momento. La pequeña negativa a moverse de John le había devuelto lo suficiente a la realidad como para reconocer lo que le pasaba. "Escéptico o no, esto es definitivamente real."

Un no tan suave estado de shock y temporal insensibilidad hacia el asesinato tal y como es. Aún en defensa propia, la forma en que se sentía la carne siendo cortada, transmitiendo la sensación del tope del hueso y músculo contra la espada hasta sus manos que no debilitaban el ataque. Siguió el ejemplo de sus compañeros cortando a uno que otro soldado que se venía sobre ellos mientras retrocedía hacia ellos.

No era el momento de cuestionarse su sorpresiva habilidad de combate ni si estará bien matar, pero la mente de Dantalion se distraía cada vez que caía quien estaba frente a él. Lo suficiente para que llegara otro soldado y se repitiera el proceso... al menos titubeaba cuando podía y no cuando contaba.

A la primera señal de retirada siguió a Delilah, manteniendo en su pecho una creciente sensación de repugnancia hacia la situación, que rápidamente se transformaba en enojo e ira. Mientras su rostro se mantenía en un neutro pensativo que pocos sabrían interpretar como un conflicto interno. Por ahora sólo actuaba, siguiendo las instrucciones de en quienes por alguna razón "confiaba".

Os dirigisteis por el camino que se os había indicado, atravesando aquel campo de batalla, dirección al bosque. El bosque parecía muerto, con esos árboles retorcidos, todo de color gris y ninguna actividad animal. Al menos lo que habíais dejado atrás, era casi menos espeluznante que esta estampa. 

Os abríais paso en el bosque, cada vez más y más, dejando atrás el eco de la batalla. No sabíais cuanto tiempo había pasado desde vuestra inmersión, pero al final encontrasteis un refugio. Una pequeña cabaña de madera, algo mohosa y destartalada. No parecía tener ocupante alguno, entonces...

Crack

Detrás de vosotros, sin ninguna delicadeza, apreció un crío de unos 16 años de edad. Bastante delgado, de cabellos rubios y ojos claros. Con su mirada y el puñal que sostenía en una de sus manos estaba clara sus intenciones, no dudaría en atacaros.

-¿Quiénes sois? 

Delilah corre junto a su compañero, quien al parecer es el mismo Robin Hood. Esto es de locos...

Encontraron un pequeño refugio donde poder resguardarse y descansar hasta que pasase todo. Pensaron, erróneamente que estaban solos, hasta que la voz del muchacho los sobresaltó. Delilah miró el hacha que llevaba en la mano y al muchacho después, si había visto el hacha y aún así seguía dispuesto a atacar con un puñal o bien era muy bueno en el combate o bien era un insensato. Por si acaso, la rubia prefirió no arriesgarse con la última opción.

- D...-iba a a decir su nombre pero recordó que no era ese y corrigió- Alicia. No queremos hacerte nada, solo buscamos un escondite temporal, no sabíamos que estabas aquí... ¿quién eres tú? 

Corrieron por el bosque muerto y torcido, quizás por efecto de la magia "muriendo", tal vez una criatura o bruja viviendo en el bosque. De cualquier forma Dan no estaba seguro de las prioridades; la reina roja y su guerra demente. La fuente de la muerte del bosque. Volver a Storybrook. Y qué podrían hacer ellos para remediar cualquiera de esos problemas. No importa que los llamen Alicia y Robin Hood, el hecho es que son sólo humanos.

Al ver entrar al joven, Dantalion finalmente enfunda la espada suavemente como gesto de "paz". La batalla había quedado ya atrás y el combate más inminente era contra un chiquillo algo maltrecho con un puñal. Dada la necesidad, sus manos desnudas y la diferencia de altura bastarían contra eso.

- Yo soy Dantalion - Dijo un tanto extrañado al escuchar a Delilah presentarse como "Alicia". - Venimos en paz. -

Trató de reafirmar lo que decía Delilah y calmar al muchacho. Pero el constante recapacitar sobre agregar algo que los pudiera condenar lo asaltaba en cada idea, lo que terminó haciendo que todo lo que dijera sonara bastante cortante. Y al sumar las manchas de sangre por la batalla, deben haber parecido bastante sospechosos.

John nos indicó este camino, el chiquillo reconocería las armas? sería aliado o enemigo de John? un chico abandonado a sus suerte que nos vendería a la reina por una comida?

Chasqueó la lengua al ver que veníais en son de paz. No era tan loco como para enfrentarse a dos adultos armados - Soy Peter - dijo el chaval algo tosco - ¿qué hacéis aquí? ¿escapáis de los soldados de la Reina?  O....

Os volvió a mirar con desconfianza -¿Dantalion? ¿Acaso tu tampoco eres de aquí?- miró hacia la cabaña -Ey Hansel, sal, estos tipos parecen inofensivos.

De la cabaña salió un crío de unos 10 años de edad. Era Nick Mills, el hijo adoptivo de la alcaldesa, pero... os resultaba familiar. Juraríais que guardaba un cierto parecido con Sebastian Lawler -¿Estás seguro Peter? A ver si te la están jugando...

- Exacto, están atacando un campamento cercano aquí-confirma Delilah. 

Al ver al muchacho, el hijo de la alcaldesa, Delilah da un pequeño paso hacia él, pero sin parecer amenazante, simplemente para poder verlo mejor.

- Tú... tú eres el hijo de Regina, Nick, ¿verdad?-se agacha un poco para ponerse a su altura.

Al escuchar Peter y Hansel, Dantalion bajó la poca guardia que le quedaba. Ya se le estaba haciendo una mala costumbre en ese mundo "mágico" el relacionar todo con los cuentos.

- Aparentemente muchos hemos sido "traidos aquí. - Dijo tratando de tranquilizar las dudas del segundo muchacho, con las esperanzas de que no salte y los apuñale POR no ser de allí. - Saben algo de lo que está pasando? - 

No trató de ser muy reconfortante en su trato, realmente no podía ser reconfortante en estos momentos. Si lo forzaba sólo se vería tétrico ante dos nerviosos "niños", así que por lo menos sería transparente.

Hansel alzó una ceja mirando a Delilah - Si, ese era yo en Storybrooke... ¿qué haces con el hacha de mi padres?

Peter puso los ojos en blanco y resopló - Es cosa de la Reina Malvada, se está cargando este mundo y los otros también... Ha robado el corazón de este mundo, por eso la magia muere...

Miró dirección donde estaba el campamento - esos infelices quería asaltar el castillo y detener a la Reina... Los pobre seguramente estén muertos dentro de poco.

Con atención escuchó a los chicos decir lo que ya habían escuchado por parte de Jhon. Lo curioso es el interés de todos en el hacha.

- Ya veo, entonces ustedes chicos al no saber, querer o poder ayudar, sólo buscaban dónde ocultarse. -

No logró pensar en una forma en que eso no sonara ofensivo, así que sólo hizo lo posible por sonar hasta comprensivo, tratar de alejarse todo lo posible de la condescendencia.

Miró el hacha con cierta curiosidad, examinándola detenidamente por primera vez. Y mientras lo hacía, prosiguió.

- Pero cómo se enteraron todos de lo que ha hecho la reina? -

¿El hacha de sus padres?

- ¿Quiénes son tus padres, cielo?-preguntó la muchacha-. La encontré por ahí-no quiso decirle dónde la había encontrado porque quizás significaba que sus padres no habrían salido de ese lugar. 

Escuchó la explicación de Peter y apretó los puños, no quería pensar en eso, quería pensar que su tío estaba bien y que se encontraría con él pronto. 

- ¿Reina malvada? ¿Hay alguna forma de pararla?

Hansel echó una mala mirada sobre Delilah - mi padre era Sebastian el leñador ¿dónde dices que lo encontraste? - se cruzó de brazos, esperando la respuesta de la rubia mientras daba unos golpecitos con el pie.

Peter carraspeó un poco y se fijo en Dantalion, el cual había hecho una pregunta algo curiosa - bueno... - miró ahora al suelo algo avergonzado - yo le estaba ayudando, pero... pero no sabía que este era el precio- dijo refiriéndose al bosque - si este bosque está así, Nunca Jamás debe estar pasando por lo mismo.

Se quedó un momento en silencio, mirando el suelo preocupado porque su hogar podría sufrir de la misma manera- supongo que la mejor forma de hacerle frente es ir directamente a por ella en su castillo...

Delilah puso los ojos en blanco. No quería responderle al niño, pero nunca se le habían dado bien, no le gustaban los niños, no sabía tratarlos y se sentía incómoda con ellos. 

- Se la robé a una bruja, estaba en su casa-contesta al fin. Que el niño interpretase lo que quisiera-. Lo siento-se disculpa de todos modos. 

Así que ese otro niño era Peter Pan... y ayudaba a la bruja malvada, aunque parecía arrepentido. La muchacha gruñó un poco, descontenta por sus respuestas. 

- Está claro que los cuatro no podemos ir a por la reina. Creo que lo mejor sería esperar aquí a mi tío, él sabrá qué hacer... 

Si el muchachito estaba tan preocupado de que el hacha no estuviese acompañada de su padre, con la aclaración de Delilah es bastante obvio ahora que algo le debe haber pasado. Pobre Hansel... pero no debiera tener una hermana?

Ante la respuesta de Peter, Dan aguantaba los deseos de cuestionarle y todas las dudas que surgían del procedimiento por el cual robaron el "corazón del mundo". Después de todo, el irresponsable Peter Pan de los cuentos es famoso por evadir a los adultos que lo presionan a tomar responsabilidad de sus actos... ¡¿Cómo puedes no darte cuenta que robar el corazón de algo es malo?!. Tal vez él quería hacer algo similar y fue "traicionado" por la reina.

Dantalion ni siquiera se inmutó cuando el joven miró al suelo, clásica evasión de infante pero en un adolescente. Esto terminó de arruinar el humor de Dantalion al ser una desagradable muestra de mundo real en un lugar que se definía a si mismo como mundo de cuentos de hadas...

- Señorita, lamento tener que decirlo, pero creo que lo su tío esperaba ir con un ejército a hacerle frente en su castillo... Y tal vez nos ha dado una oportunidad. - Sabía que había poco tacto en lo que dijo, aún así centró su mirada en Peter y continuó - Ya que ha trabajado con la reina malvada, sabe alguna forma de evitar a los guardias y soldados? Además de cómo reconocer al "corazón de la magia"? - 

Estaba considerando el hecho de que el ejército había salido del castillo a luchar contra los rebeldes y aún si el combate ya había terminado, como grupo inmenso de personas se moverían más lento que un pequeño grupo como el de nosotros actualmente.

Peter torció un poco los labios - no sé nada del castillo de la Reina, pero si ha atacado a los rebeldes, habrá mandado a la mayoría de los pocos hombres que le quedan...

Mientras tanto, Hansel alternaba la mirada entre el hacha y Delilah. Peter continuó hablando - el "corazón" tiene forma de una piedra de color rojizo, palpitante. Lo debe tener bien escondido, es bastante grande...

Suspiró un poco, algo alicaído - si vais, nosotros vamos a ayudaros - en cuanto el niño rubio dijo eso, Hansel le echó una mirada de reproche. 

Fulminó a Dantalion con la mirada, pero no dijo nada. Se limitó a fruncir los labios y apretar los puños, no era el momento. 

Suspiró y se pasó una mano por el pelo.

- ¿Entonces que sugerís? ¿Que vayamos a buscar ese corazón?-pregunta, confundida-, la verdad, no creo que dos adultos y dos niños vayamos a hacer mucho contra la reina...-dice, siendo realista-. Aunque a decir verdad, tampoco nos queda otra... ¿sabéis dónde puede haber más gente que sepa o que pueda ayudarnos con esto?-preguntó a los niños. 

Escuchó a los muchachos observando el comportamiento y expresiones de ambos. Aún no confiaba en ellos y con la ultima mirada de Hansel cuando Peter se ofreció, realmente se notaba que había algo raro.

Algo me decía que en cualquier momento, Hansel trataba de robar el hacha y huir. Estaría atento a ello.

- Arriba el ánimo señorita, la última vez que vi a esta "reina", ella estaba corriendo de un pequeño grupo de personas comunes y corrientes. Si sorteamos a los guardias, algo podremos lograr. - 

Dice tratando de reducir en algo alguna de las aparentes preocupaciones de Delilah.

"No es como el jefe final de los videojuegos, en la realidad una persona es una persona tan frágil como cualquiera." Aunque tal vez la forma de pensar de Dan no era adecuada para este mundo."

- Pero es cierto que un par de personas no nos vendrían mal... - 

Agrega mirando a los muchachos.

De cualquier forma, mientras caminaran tendría que encontrar algún momento para decirle a Hansel que hasta que encontremos a su padre, es mejor que Delilah lleve el hacha, ella ha demostrado poder usarla capazmente y a alguien tan joven como él le pesaría demasiado.