Partida Rol por web

Lee la nota y lo primero que piensa es "¿Quién mierda dice maléfica?", pero al notar la mayúscula que indica nombre propio, pasa a comprometerse a buscar y estudiar un libro al respecto de los cuentos de hada. El no saber quien era quien aunque le dijeran el nombre empezaba a estresarla. Le apartó  el pelo de la frente al doc con suavidad, y beso su mejilla, como quien acaricia a un niño dormido. Luego, vuelve a salir a la sala, con el papel en mano, y se lo entrega a James.

Aquí tienes, líder - dice guiñándole un ojo - ¿Reconoces la letra?

Will está con fiebre, no lo puedo dejar solo, lo siento en el alma morena mía. <3

Entiendo. Si empeora avisame y voy a verlo. Tu secretaria es de fiar, pensé que debías saberlo.

Cualquier cosa te aviso, gracias... de fiar? como sabes eso?

Es parte de la revolución. Estoy dentro. Cuando te vea te hablaré del resto... Tu solo mantente alejada de Crystal y Nessa.

Ok, eso está hecho. 

Se relaja bastante al sentir la mano de Zack en su cabello, una sensación familiar agradable la invade y se acomoda para dormir. Por supuesto, no deja de escuchar todo lo que dice, pero al querer hablar parece que sus labios pesan bastante y está tan cómoda que no quiere moverse.

Esboza una débil sonrisa porque tendrá ayuda en la búsqueda de sus hermanos, restaurar Nunca Jamás y de sus recuerdos. Wendy se acomoda para sentir parte del cuerpo de Zack y respira hondo para sacar fuerzas de algún lado.

-Gracias, Zack... y no molestas...

Quedándose más dormida que despierta, le toma la mano cuando deja de tocarle el cabello y sus últimas palabras son:

-Espero que hayas leído "El Mundo de Sofía".

Si lo dijo de manera consciente o no, no se sabe. Wendy se ha quedado dormida para reponer fuerzas luego de un día agitado.

El hombre mira el papel un par de veces y niega- me temo que no- se lo pasa a Erick, el cual también examina la letra, pero acaba dando una negativa. James te devuelve el papel - ¿de dónde lo has sacado? 

Estaba en la pieza de... en la pieza. - contestó. 

De pronto, recordó una de las cosas que le había dicho Sebastian. Todos esos locos y enfermos que llegaban al hospital, como aquel que se había electrocutado, no eran casualidad. Miró a James con cara de interrogante.

¿Que hace que la gente se enferme? - quizás si lo supiera, podría ayudar al novio de su amiga.

Se rasca la nuca, no sabe muy bien que contestar a esa pregunta- bueno verás, no lo sabemos con exactitud... creemos que puede ser que no logran soportar recordar dos vidas- suspira un poco- es una locura tener dos vidas en tu cabeza y no saber cual es la real y cual es la inventada por la maldición. 

Eso explicaría los delirios, la agresividad y la confusión pero... ¿La fiebre? - respondió escéptica. Luego, algo le resonó en la cabeza - Que... ¿que quieres decir con inventada por la maldición? Entiendo que seamos reencarnaciones, pero yo estoy segura que viví lo que viví. Mierda, yo no habría elegido esta puta vida. Y sería una mierda de maldición si tuviese preferencias... ¿Por qué me habría jodido a mí, específicamente?

Negó con la cabeza.

No, yo fui niña. Yo lo recuerdo. Lo recuerdo tan bien como cuando fui niña cuando mi nombre era Fa Mulan. No puede ser una invención. 

¿reencarnaciones? - pregunta Erick sorprendido- en absoluto... la maldición nos alejó de nuestro verdadero hogar - coge aire y lo suelta poco a poco, para tranquilizarte e intentar explicarte mejor la situación - la maldición consiste en alejarnos de nuestras casas y nuestras vidas. Pero no nacimos aquí y nunca crecimos aquí. Por eso la maldición es tan cruel, borra tus recuerdos, te pone unos nuevos, crea una vida falsa aquí, en este mundo, de la que estás convencido de que es real- guarda silencio durante un momento- pero no es así, tus padres de aquí no son tus padres. Quizás sean habitantes del Bosque Encantado u otro lugar... la maldición te creó ese recuerdo...

Pero... pero eso no es justo... - susurra, aunque con un tono obviamente dolido - ¡¿Por qué tú pudiste ser el niño rico mientras yo tuve una vida de mierda?! Tú te diste la vida, yo tuve que sacrificar todo por una vida decente, desde mis valores a mi tiempo o mis creencias... ¿Por qué tu pudiste tener todo y yo nada? ¿Que mierda te hace mejor que yo?

Se da la vuelta y bota una lámpara* que estaba sobre una mesa. 

Explícame por qué yo tengo que vivir sintiéndome inferior y culpable aunque no haya hecho nada malo, y todos ustedes niñitos de mamá con vida perfecta pueden mandarse cagada tras otra y jamás nadie los ha mirado mal en su puta vida. ¡Mierda! ¡Ni siquiera yo los he mirado mal cuando eso ha pasado! - grita enojada, recordando lo recién ocurrido con Zach - ¡Exijo saber por qué mierda todos tienen familias felices o gente que los quiera y cuando yo por primera vez consigo algo así, termina muerto!

Erick se queda atónito y da un paso atrás por tu reacción. En cambio James está más rápido y te coge de ambos brazos con fuerza, para intentar inmovilizarte - ¡Raphaelle! Escucha joder, todo eso que recuerdas es mentira, así no fue tu vida, solo son recuerdos ¡¿me entiendes?! - te mira a los ojos muy serio - Tu vida de verdad es la de Fa Mulan, Raphaelle Hyde solo tiene dos años reales de vida que es lo que la maldición lleva en funcionamiento. Lo demás solo es producto de la maldición. Pero todos tenemos algo aquí que nos pesa Raphaelle... todos como habitantes de Storybrooke tenemos una carga. Yo perdí a un hermano. Erick puede ser rico, pero no tiene el cariño de sus padres. Olivia es huérfana. Pero lo peor no es eso... siguen pasando cosas malas para los habitantes, sobre todo si intentan salir del pueblo, si intentan huir... Por eso hay que detener esto. 

La reacción de Erick la hizo detenerse por un minuto, pero el agarre de James volvió a tensarla inmediatamente, intentando en vano quitárselo de encima. Veintiseis años sin quejarse de su mala fortuna y sintiendo que se merecía el odio del resto aunque su cerebro le dijera que no hacían que aquella noticia detonara la bomba de tiempo. Todos esos años cargando con ello en silencio, ¿Para que ahora le dijeran que no era real? A la mierda eso, ella recordaba cada segundo de desprecio, más real que eso no había. ¿Y que además era un invento aleatorio de la maldición? ¡Eso era lo peor de todo!

Oh, vamos... tu perdiste tu hermano, yo perdí mi amor y mi vida entera a manos de este pueblo de mierda. Erick no tendrá el amor de sus padres, pero al menos no pasa frio ni hambre, como yo lo hice, y Olivia será huérfana, pero no tiene que mantener al par de parásitos responsables de su infancia de mierda y de una adolescencia desesperada. -contestó aún enfurecida - ¡No es justo que todo me tocara a mi! Mierda, no fue hasta ya adulta que tuve mi primer amiga, la primera que no me despreció o solo me uso para luego desecharme... No es justo... Yo nunca tuve nada, tuve que hacerme mi propio camino entre la basura que me tiraban encima cuando cualquiera se hubiera rendido... No me puedes decir que no es real, yo lo viví... por más que hubiese deseado tener la valentía para dejar de respirar, me quedé... lo viví... no es un recuerdo fabricado, no puede serlo... - sus ojos se llenan de lágrimas, agachando la cabeza.

Elsa sonrió amablemente a la chica y asintió con la cabeza dando un paso hacia ella para ponerse frente a Olivia ahora y despedirse de ella con la mano antes de que se vaya. — Gracias a ti también, Olivia. — Dice antes de que la chica se marche y luego se despide también de la otra mujer para después darse la vuelta y continuar con Eileen. — Creo que eres una persona que preferiría no tener compañía, pero... ¿Sabes? Yo estoy aquí para hacerte cambiar eso, la compañía es necesaria... Créeme, conozco bien la soledad. — Baja el tono de su voz conforme va hablando recordando sus momentos más duros de la infancia mientras empiezan a alejarse.

El más joven, coloca una mano sobre uno de los brazos de James. El hombre tuerce el gesto y se aparta un poco. Entonces es cuando Erick te abraza, no con mucha fuerza, no tendrás problema de zafarte si quisieras -No sé cuales son las palabras correctas, pero tienes razón, no es justo para ti... tienes derecho a enfadarte, patalear y gritar - suelta un leve suspiro y se aparta un poco de ti- pero eso no va a solucionarte nada, ni a ti, ni al resto del pueblo. Si sigues por ahí lo único que vas hacer es caer y serás igual que ellos. Sinceramente, creo que eres mucho mejor que esos malnacidos que se atreven a jugar con los demás. 

Fue con aquel abrazo de un extraño, evento más poco frecuente que el paso del cometa Halley, que Raphaelle se quedo quieta. Demasiado quieta, en un principio, sin saber como reaccionar. Pero tras un eterno minuto, abrazó a Erick con fuerza y apoyando su cabeza en el hombro del chico, se permitió sollozar.  Tras un corto período de tiempo, se separa de él y se limpia las lágrimas, mientras con la otra mano acaricia el hombro y brazo del chico.

Gracias... Lo siento - se disculpa, mirandolo a los ojos pero profundamente incómoda. - ¿Quieren algo para comer, beber, lo que sea? - empezó a caminar a la cocina, cambiando el tema 

El muchacho sonríe de forma amplia y sincera - no tienes que darlas- después mira a James que resopla, algo fatigado. Ambos niegan con la cabeza ante tu invitación de comer o beber algo. 

-No, preciosa. Tenemos cosas que hacer primero- te dice James con un intento de sonar amable- pero esperaremos a que termines.