Partida Rol por web

- Cómo lo deseen, tendremos mucho que hablar en el camino o en ese lugar. Seguro que cuando intercambiemos lo que sabemos cada uno, más de uno se soprenderá. - Espero que comiencen a andar, pero creo que va a ser difícil viendo que una de ellos está más entretenida con un dragón. - Mailen. ¿Qué se puede hacer con esas crías? - Seguramente ella sabe mucho más que nosotros sobre esto.

Miro a Jose

-Ella no va a hacer nada con las crías, la dragona se las encargó a Emily- "Esto me da mala espina"

Mailen se acerca hasta Mathew y le da una palmada en la espalda.

Tranquilo hombreton, no le voy a quitar los dragones a tu chica. Pueden venirse si lo desean, los dragones son seres nobles y poderosos, cuando crezcan pueden ser muy buenos aliados.

Gira la cabeza para dirigirse a Emily.

Respecto a tu pregunta, no os estoy echando la culpa, se que todo es obra del mago oscuro, pero que esteis en este mundo ha creado una anomalia que, de no detenerse, acabara destruyendo tanto mi mundo como el vuestro. El emperador me ha enviado a por vosotros para buscar una solucion.

Como ha dicho Dafne, debemos ir al norte. Debeis recuperar fuerzas y el mejor lugar es la posada del camino.

La recien llegada da la vuelta, se acerca a Jose Maria y le pone una mano sobre el hombro.

Vamos, ahora ya estamos todos. Arreglemos esto pronto y luego vengaremos a Gaulf.

Luego emprende el camino hacia el norte esperando que la sigais.

El dragoncito rojo aletea hasta posarse en el hombro de Emily, al lado de la ardilla que ahora parece algo nerviosa.

Ruaaag!

El dragoncito rojo aletea hasta posarse en el hombro de Emily, al lado de la ardilla que ahora parece algo nerviosa.

Emily! Pequeñajo quietecito, comida? No comer amigocompañero!

Me quedo un poco sorprendida porque el dragón ya sea capaz de aletear, con lo pequeño que es. Le doy una palmadita amistosa en la cabeza al dragón, contenta de que por fin lo haya entendido...o eso creo.

-Muy bien, así me gusta pequeñajo. Scricky, no te preocupes que no dejaré que te haga nada. Además, con lo pequeño que es no creo que sea demasiado rápido, ¿no?

Se sabe mi nombre...

Sin creerme del todo las palabras de esa mujer que parece tan confiada, me cuelgo el bastón en la mochila, pero lo dejo de una manera que en cuanto sea necesario pueda sacarlo rápidamente.

Me acerco hacia Matth, aunque por el lado que no está la tal Mailen, no me fío de ella.

-El tuyo parece más tranquilo, si sigue durmiendo no creo que dé problemas...esperemos que no den mucho la nota, ¿verdad? Creo, que se parece un poco a tí, Matth. Siempre sabiendo lo que hay que hacer.

Un poco sonrojada por esa comparación tan tonta que he dicho, me acerco al resto del grupo, incluido Jose. Cuando estoy lo suficientemente cerca, le susurro con vehemencia.

-Al viejo no le quisiste creer, pero parece que en ella confías sin problemas...no me gusta que me digan lo que tengo que hacer, Jose. Además, ¿quién es ese Gaulf?

- Era un mercenario que mandó al emperador para matar al viejo que nos trajo, dado que los orcos no son del tipo de gente que se ve afectada por su magia. Yo torpemente  lo alejé de su objetivo queriendo protegerlo a el y a ustedes, sin saber que todo esto se podría haber evitado. Terminamos viviendo muchas cosas en muy poco tiempo... muy poco. - Bajo la cabeza un momento, la imagen de el sacrificando todo por mi, por logar esto... Maldito Garth, maldito seas... - Hice bien en nunca confiar en ese viejo, enfrenté duras pruebas para saberlo, hasta se que no todos tenemos un corazón puro. - No miro a nadie en especial, solo hacia el Norte, nuestro destino. - Muchas personas han muerto para que nosotros sigamos vivos y ahora juntos, gente que merecen más seguir en pie que los que los que los mataron. Pero no podemos cambiar eso, lo que si podemos hacer, es evitar que todo se vaya al demonio. - Comienzo a caminar sin esperarlos, junto a Mailen. Ya demasiadas cosas han cambiado en mi desde que llegué y eso que todavía no han pasado más que un par de días.

Le agradezco con un leve gesto a Mailen el apoyo que me está brindando, pero miro a el grupo que sigue con algunas heridas. - ¿Te importaría ayudarlos? No tuvieron la suerte de tenerte como yo. -

-Pues yo sí me fío de él, Jose. Aunque nos trajera aquí sin preguntarnos, nos brindó su apoyo y nos dio su dinero. Se preocupaba por nosotros, y no te puedes quejar de él, porque para empezar nada más conocerlo te fuiste corriendo de la taberna. Así que no sé por qué a esta mujer la crees y al viejo no. Me parece ciertamente sospechoso, y no voy a hacer lo que digáis.

Me quedo plantada, con los brazos cruzados testarudamente.

- Yo voto por ir a donde teníamos planeado desde el principio, y no acompañaros a un sitio simplemente porque lo ordenéis. Habrá muerto gente, como dices, pero cuando estuvimos peleando contra unos insectos gigantes que estaban matando a gente, el viejo nos salvó la vida, y la de los aldeanos. A ver quién es el que ha de demostrar su inocencia.

Asiento ante las palabras de mi amiga

-Yo estoy con ella…vosotros haced lo que queráis

Sonrío a la chica, acercándome un paso hacia ella.

La joven responde a Math dando otro paso hacia el, quedando a varios centimetros de distancia.

Me parece que no escuchais. He dicho que vamos hacia el norte, vosotros vais hacia el norte. Tal vez en vuestro mundo la inteligencia sea un privilegio que pocos posean, o tal vez sois duros de oido simplemente. Vais a venir conmigo, querais o no querais. No puedo ni quiero mataros, pero si debo dejaros inconscientes no me lo pensare demasiado.

El ambiente se va tornando tenso a cada instante que pasa. Mailen no parece estar echandose un farol respecto a lo de llevaros con ella. Jose Maria es el unico de momento que coincide con la chica.

Miro a la mujer

-¿Dejarnos inconcientes?¿Y así quieres que confiemos en ti? Yo, por mi parte, me niego a ir

"Ahora es el momento voz…te necesito"

La voz vuelve a tu cabeza, esta vez mucho mas clara que en veces anteriores, e incluso te parece ver una silueta difusa a tu derecha.

Mathew, no te fies de esta chica. Si esta aliada con el emperador tal vez haya conseguido engañar al chico para que se una a ella. Aun asi, con el poder que te he otorgado no deberiais tener problemas. Tal vez seria mejor seguirle la corriente hasta descubrir su verdadero proposito.

En estos momentos estais bastante debiles. Tanto tu como Emily habeis gastado casi todo vuestro poder magico, necesitais descansar para recuperarlo.

Me quedo pensativo y miro a Mailen

-Bueno…ir con vosotros, si vamos en la misma dirección quizás sea lo mejor- le susurro al oído a Emily -Iremos con ellos, así estaremos protegidos, y más adelante nos marcharemos en cuanto se presente la oportunidad

Miro a Edgar y Dafne.

El ambiente esta cada vez mas tenso. Parece que entre Moggur y el emperador hay una guerra de intereses y cada uno tiene a sus aliados, pero no queda claro quien es el malvado de esta historia. Tal vez lo mejor sea conseguir toda la informacion necesaria antes de actuar en consecuencia. Recuerdas unas palabras de Jose Maria que rondan por tu cabeza por algun motivo.

Cita:

Cuando comienzan a discutir que dirección tomar me acluquillo, cojo un palo y empiezo a hacer dibujitos en el suelo.

¿Por qué discutimos si todos vamos hacia la misma dirección?, sea como sea no pienso perder de vista a Matth

No, el simbolo de la villa de la hoja no era del todo así. Falta algo y no me acuerdo... ahora, así sí. Ahora la arena.

Voy susurrando mientras sigo dibujando, cuando parece que la conversación está llegando a un punto de encuentro dejo el bastón en el suelo, me levanto y sacudo las manos.

No me ha dado tiempo de acabar el mapa completo, como vuelvan a discutir lo termino y empiezo a dibujar a personajes de One piece, ¿debería empezar por Luffy o Zoro?

Miro hacia al norte.

Así que parece que nos vamos todos hacia el norte, los peligros serán más fáciles de sortear entre tanta gente.