Partida Rol por web

Recientemente, habéis fundado un pequeño club de mercenarios junto a unas cuantas personas más debido a ciertas causas: que no os aceptaron en la sociedad u os tienen de becarios, os sirve para entrenar, necesitáis más dinero para vivir, aburrimiento...

A pesar de que no tenéis experiencia de campo y vuestra armadura está prácticamente nueva, habéis anunciado a vuestro grupo por las cercanías de vuestras casas, con la esperanza de que alguien os contrate para labraros un nombre.

Han pasado unos días, cae el atardecer en Golarion y cada uno está haciendo vida normal...

Kiriabii se ha tomado muy en serio el tema de la hacerse conocer, ha tabajado duro para darse a conocer y ha preguntado por posibles trabajos y ha intentado hacer contactos con los comerciantes ambulantes, pero tanto trato con humanos ya la estaba abrumando asíque fue a las cercanías del bosque a recoger componentes mágicos y con suerte plantas para infusiones, junto a su familiar Biri.

Mirando el cielo Kiriabii bosteza.

Biri, es hora de ir volviendo

Le estaba costando adaptarse al horario diurno pero si quería disfrutar de las comodidades de la civilización tenía que adaptarse.

Empezó su marcha hacia el pueblo, midiendo con satisfacción el peso de la bolsa recién comprada donde estába metiendo las plantas.

Kayne y Willow habían pasado toda la tarde colocando carteles por la ciudad. Habían pasado mucho tiempo pintándolos con los colores más estravagantes que habían encontrado en la basura de la tintorería. Kayne estaba muy contenta con el resultado, aunque Willow no estaba convencida para nada.

Ya veras, con esto conseguiremos un montón de dinero y podremos ir muy muy lejos de aquí! - Exclama, mientras vuelve a casa - Quiero ir al desierto de Qadira! Explorar la extensión Mwangi! Quién sabe, incluso puede que acabemos en el espacio! Wiiiii

No sé que decirte.... - Suspira Willow - A mi me parece que eres demasiado optimista. No has puesto el nombre de nuestro "Club de aventureros", ni tenemos una base de operaciones, ni nada. ¿Cómo van a saber dónde ir?

Cansada de volar, se posa gracilmente en los hombros de Kayne.

Además no me convence en absoluto esto que me has puesto. Es muy incómodo! No puedo ni volar a gusto... - Se queja, señalando su armadura de láminas.

Eh... Tú crees que hacía falta eso? Y por qué no me lo has dicho antes! Pfff - Kayne se desinfla un poco, pero de un salto vuelve a su estado de humor habitual - Ya se, deberíamos preguntare a los demás si han pensado en algún nombre! ¡¡Y luego solo tenemos que cambiar todos los carteles que hemos colocado!! - Sus ojos brillan de emoción!

Sobre la armadura... no te quejes. Seguro que evita que te lleves un flechazo o dos! De todas formas no tienes por qué llevarla puesta todo el rato, sabes? Quién nos puede atacar en un lugar como este? Jajajaja! - Exclama, mientras pasan por el callejón más oscuro del barrio más chungo de la ciudad. Por cierto, hemos ido muy lejos a colocar carteles... tu recuerdas como llegar a casa?

A mí qué me preguntas! Mira, pronto será de noche. Solo tienes que mirar al cielo y escuchar a esa diosa tuya... Seguro que te guía por un camino menos peligroso que este - Dice Willow, mientras mira a su alrededor inquieta. - Ains... con lo bien que estaba yo metida en ese árbol...

Cuando llegas al pueblo, ves a una semiorco con un papel en la mano. No la has visto en tu vida, así que supones que no vive aqui. Está preguntando algo a la poca gente que queda por las calles sin éxito.

kiriabii se sorprende ante la posible oportunidad. Toma aire, pone su mejor cara y se acerca a preguntar al semi-orco.

-Disculpe caballero, ¿Puedo ayudarle?

-Perdone señorita, pero yo soy una mujer- Dice visiblemente molesta -Aunque bueno, no puedo enfadarme contigo, no eres la única que se confunde, supongo que en nuestra raza somos todos iguales. Cambiando de tema, sí, me puedes ayudar- Te muestra el papel que lleva en la mano, es el mismo que estábais colocando para anunciar vuestro club -¿Sabes donde está su sede o conoces a alguno de ellos?-

Mientras camináis por el callejón, una figura encapuchada os detiene y dice -Vaya, vaya, ¿Qué hacen unas señoritas por aquí y a estas horas?-

¡Disculpe, la confundí por el angulo de la luz! ¡Qué descortés por mi parte!

Dice Kiriabii mientras se disculpa.

Respecto al anuncio yo formo parte del grupo de mercenarios, si lo desea podemos ir a nuestra sede y hablar.

Hola buen señor! Se nos ha hecho tarde, la verdad. Podría darnos indicaciones para llegar al distrito de la Vid?

Unas palabras resuenan en tu cabeza: https://www.youtube.com/watch?v=meOCdyS7ORE

-Tengo que declinar su oferta señorita, mi tiempo es escaso y me estoy jugando el cuello. Reune si puedes a unos cuantos compañeros y nos veremos de nuevo mañana al mediodía en el puerto de Absalom. Allí la contaré todos los detalles de su tarea, si está interesada, claro. No se preocupe por el pago, será muy generoso- Dice Ulisha. Se despide y se marcha con cierta prisa

Hm... no me termino de fiar de este señor, mejor me doy la vuelta...

Oh! Acabo de recordar el camino! Es juuuusto en dirección contraria! Vámonos Willow. Un placer conocerle señor!

Kayne se aleja lentamente sin perder de vista a ese tipo tan extraño

-¡Quietas!- Dice el extraño mientras saca una daga -¡Habéis entrado en mi territorio y tenéis que pagar un peaje!-

Peaje?? Mierda, sabía que en el distrito del muelle eran muy careros, pero peaje por pasar por un callejón... qué cosas inventan

Oh! No lo sabíamos... Pero bueno, como aún no hemos pasado estrictamente hablando, no tenemos que pagar... verdad?

Fijandose en la daga, Kayne trata de alcanzar el cuchillo estrella atado a su cadera