Partida Rol por web

No puede ser...- pienso. Es demasiado rápido. No dispongo de tanto tiempo...

El nigromante lanza un ataque directo contra mí. Tengo que jugarmela.

Quieto.- me digo. Quieto. Quieto. Aguanta. No te muevas.

Cuando la daga del nigromante está apunto de atravesarme el pecho, caigo de rodillas atacando al vientre de mi adversario.

Noto la resistencia de su carne al ser rasgada por mi daga; y veo que está manchada de sangre.

Por fin...- murmuro

Barnoth volvió a lanzar un nuevo ataque contra otro de los "indefensos" zombies abriendole el pecho y haciendo que se desprendiese parte de uno de sus brazos.

Shekaroth se abalanza animoso contra el zombie próximo al que le havia cogido mania, pero con la emoción del golpe sólo le causa un rasguño.

Los zombies van recibiendo vuestros ataques como si fuesen muñecos de entrenamiento. El pobre Roger sigue debatiendose contra su locura permanente en el suelo, ha tirado su espada a un lado y se da golpes en su casco. Por contra, el mago Khahan se ha visto liberado del hechizo que le paralizaba, está listo para actuar otra vez.

El nigromante intenta acuchillar con su daga a Elssa pero éste es escurridizo y muy habil, no es objetivo fácil y falla.

La pelea se está conviertiendo en una danza peligrosa. Fintas y ataques se suceden una y otra vez.

Roogeeeeerrr!!. Despierta!!! Te necesitamos aquí!!!!.- grito tratando de sacar a mi compañero del extraño comportamiento en el que se haya inmerso

Evitar los ataques de nigromante no está siendo nada fácil. Parar sus cuchilladas es tarea casi imposible.

En uno de estos elegantes lances, amago un tajo con mi daga. El nigromante, hábilmente escurre su cuerpo hacia el lado contrario... pero no cuenta con que en ese instante, y como aparecidad de la nada, se materializa otra daga en mi mano izquierda que se clava hasta la empuñadura de nuevo en su vientre.

La sangre mana abundantemente. Esta sí puede haber sido una herida importante.

Shekaroth, mientras intenta deshacerse del zombie al que ataca, considera  que delante la situación en que los zombies no se mueven ir directamente contra el Nigromante, aunque tal opción seria bastante peligrosa ya que no es que fuera hombre de combate, pero Elssa estaba enfrascado en el combate y parecia necesitar refuerzos. Después de vacilar pensó que después de darle otro golpe al zombie iria en ayuda de Elssa fuera cual fuera el resultado del zombie.

-Aguanta Elssa, a ver si entre todos podemos tumbarle - al menor signo que el NIgromante intentase lanzar un hechizo, Shekaroth saltaria hacia la trayectoria del sortilegi para intentar pararlo con su Escudo.

Por fin me encontré suelto y con los movimientos de mis articulaciones libres de cualquier atadura del conjuro que producí y se volvió contra mi, la situación no era muy alentadora, además estaba debilitado mágicamente pues notaba en mi cuerpo que mi poder estaba muy debilitado además que no sabía si tendría alguna otra protección mágica el dichoso nigromante, así que decidido me lancé a la ayuda de Elssa para intentar acabar con el dichoso mago...

Elssa y Khahan se encontraban dando buena cuenta del nigromante mientras Roger parecía estar volviendo en sí.

Viendo que el zombie al que previamente le había golpeado se resistía en caer, esta vez el gran hacha terminó por partir el torso ya muy dañado del cadaver andante.

Los zombies van recibiendo vuestros ataques como si fuesen muñecos de entrenamiento. El pobre Roger sigue debatiendose contra su locura permanente en el suelo, parece que las imagenes que visionó el Nigromante en su cabeza fueron muy impactantes...

El Nigromante recibe la cuchillada de Elssa, cae un chorro de sangre negra de ha herida, pero parece que el Nigromante aún sigue en posición de luchar.

-Aahhhhgggg!- Dice mientras escupe sangre negra. Vuelve a atacar a Elssa pero falla por muy poco.

Shekaroth deja el resto de zombies en paz después de ver como el que hasta ahora estaba atacando le rebienta la cabeza a causa del último golpe, y corre para ayudar a Elssa a atacar al Nigromante.

Puedes atacar ya, edita tu mensaje si quieres

Veo que el nigromante empieza a debilitarse e intento asestarle un último ataque que acabe con su vida. Su rapidez ha disminuido debido a sus heridas y vuelvo a acertarle con una de mis dagas.

Echando un vistazo alrededor grito para hacerme oír: Dejad a los zombis!!! Son solo marionetas!!! El nigromante no tiene concentración suficiente para manejarlos!!! Atacadle a él!!.- voceo mientras sigo enfrascado en el combate.

Veo con gran satisfacción que Elssa se desenvuelve muy bien, y a echo una profunda herida al nigromante, este por consiguiente intenta atacar en un descuido, pero Elssa es muy hábil y logra esquivarlo en el último instante...
Aprovechando la situación que está distraido con Elssa, con mi bastón le propino con todas mis fuerzas un fuerte golpe...

El nigromante recibe estos dos golpes graves y cae al suelo en un surco de sangre negra.

- A..a....alto.... no me mateis....- Dice entre estornudos de sangre. Su aliento huele a podrido y sus dientes están amarillos y manchados de sangre.

Los zombies parecian seguir estáticos, aunque seguramente el nigromante continuaba teniendo su control. De todas formas Barnoth se acercó a él y mostrandole su gran arma le respondió.

No dudaste lo más mínimo a la hora de querer vernos muertos, ¿porque deberíamos de hacerte caso?...¡mago!

La última palabra de Barnoth sonó de forma muy despectiva.

Realmente la desconfianza contra el mago negro era muy alta, nunca se sabe con qué sucio truco te sorprenden. Shekaroth apyoó a Barnoth, a punto para actuar si intentara tirar algun hechizo saltar para pararlo o darle un buen recuerdo con la maza.

-Espero que lo que tengas que decir valga más que tu vida, nigromante. No nos mostraremos indulgentes.