Partida Rol por web

Kendra les había dado algunas indicaciones, era pequeños retazos de algo que estaba sucediendo en Ravengro, algo que sí que parecía poner en peligro a las gentes del lugar. Sigyn tuvo que revisar varias veces las notas, habían muchas cosas en las que pensar.

- Yo he entendido las siguientes cosas, hay una cábala de nigromantes llamada la Vía Susurrante que busca a alguien que hay en Piedra Atormentada o Piedra Susurrante, que es un pueblo en ruinas. El profesor tenía un ayudante llamado Conrad. Quería saber quiénes murieron en la noche del fuego. ¿Reconoce alguno de esos nombres, Kendra?

Era lo primero que había pensado, que quizás la hija por vivir en el pueblo tuviera algo de información sobre esas referencias para ella difíciles de seguir. Sigyn no se estaba interesando por los libros sobre la mesa aunque podían ser que en ellos se hablara justamente de esos temas, de la Vía Susurrente, de la Piedra...

"Es una investigación de diez años, Lorrimor lleva todo ese tiempo pendiente de esos nigromantes."

Se podía imaginar que esa cábala iba a levantar muertos vivientes creando una tragedia en el pueblo, por lo que la inquisidora lo veía un asunto importante.

Kendra asiente levemente a la pregunta de Sigyn mientras afirma:

"No conozco a ese tal Conrad... Si era el ayudante de mi padre, yo nunca le conocí. Pero sí que reconozco el nombre de Piedra Atormentada. Es la antigua cárcel de Ravengro, justo en las afueras, pero fue destruida en un incendio hace años. Imagino que ese es el fuego al que se refiere mi padre. Nadie ha ido por ahí desde hace mucho tiempo, los locales rumorean que está encantada."

Penton va mirando a todos los presentes, confundido. Lo único que entiende son "fantasmas" y "muertos". De esas cosas de historias de miedo que la gente se cree y luego nadie comprueba. Quizás sería hora de tomar las riendas y comprobarlo. 

"Perdonad si me meto donde no me llaman, pero a mi me suenan a historias para acostar a los niños. ¿Cárceles encantadas? No creo que sea así... podríamos ir y echamos un vistazo, ¿no?". 
 

A Joseph le daba un poco de miedo todo esto. Si una cosa le habían enseñado en Galt, es que cualquier cosa era posible en este mundo, con lo que no descartaba la existencia de esos fantasmas. Por otro lado, el exceso de confianza -o quizá insensatez- de Penton le tranquilizaba un poco e incluso hacía que le picara un poco la curiosidad.

"Si vamos todos..." Dijo, buscando a Penton para ganar seguridad. "Quizá no estaría de más. Quién sabe qué encontraremos allí." Joseph estaba ya pensando dónde había dejado un pequeño talismán que, según su familia, le protegía de los malos espíritus y de otros embrujos cotidianos como el mal de ojo. Sería buena idea llevarlo siempre encima en este lugar.

Audrey asiente con suavidad. Aparta un poco la mirada cuando Siegyn pregunta a Kendra sobre esos nombres pero se mantiene en silencio, dubitativa.

Tras que Penton y Joseph sugieran ir todos juntos, la chica se ajusta un poco la capucha y asiente: "Podríamos ir al cementerio pronto, antes de que... Oscurezca. ¿Ahora?" sugiere ella un tono un poco bajo pero aún audible; quizás no se le escucharía en un sitio ruidoso, pero no es el caso.

El profesor conocía suficiente sobre el entorno y contexto de su tierra natal como para que la "revelación" sobre fantasmas y otras entidades le resultara poco sorprendente. No obstante, eso no lo tranquilizaba en absoluto.
La reacción de algunos de sus acompañantes tampoco era demasiado tranquilizadora, ya fuera exceso de superstición o de ímpetu. Aquella situación era demasiado inquietante, como para ademas, añadir a la Vía Susurrante en la ecuación, algo que deberia haber supuesto que podría ocurrir desde que supo del interés que el profesor Lorrimor tenia en ella.
Con estos datos en mente se dirijió a todos los presentes en la sala:

"Todo parece indicar, que un punto de partida favorable, seria la investigación y exploración de la prisión local. Sin embargo parece bastante obvio para mi persona que una actuación a ciegas resultaria absolutamente contraproducente".-hace una pausa y recoje las notas como si fueran propias- "Considerando que la ultima anotación es de hace poco mas de dos semanas, es probable que en esta villa todavía podamos hallar ciertas pistas que pueden resultar en una inestimable ayuda. La mención del templo de Pharasma no puede ser pasada por alto, asi como todo aquello que lugareños, sobretodo las personalidades relevantes puedan aportar."- Hace una pausa para dar dos caladas casi seguidas a su pipa y prosigue-"Por lo tanto, y apoyandome en la sugerencia de la señorita Audrey, estoy tajantemente convencido, que que nuestro camino debe pasar por las tierras del reposo, antes siquiera de plantear una incursión a la antigua prisión, para obtener información y recursos que seran, sin duda de extrema utilidad."- Dice con un tono que no parece admitir objeción. Acto seguido vuelve a dejar las notas encima de la mesa y sigue fumando.

Kendra les aclaró unos aspectos importantes relacionados con la antigua cárcel y el incendio que la destruyó, eso significaba que el profesor quiso saber quiénes habían encarcelados aquella noche en la que fue destruida. Sería interesante hacer esas averiguaciones incluso visitar el cementerio pero la joven veía algo prioritario para ella que no tardó en comentar.

- Piensen lo siguiente, si asesinaron al profesor quiere decir que su ayudante Conrad puede estar en peligro y él puede aportarnos lo que sabe. También puede haber muerto, los dioses no lo quieran, pero en ese caso merece la pena ver si también guardó algo de interés.

La inquisidora miró a la hija del profesor, que ella no conociera a esa persona tenía que significar que su padre guardaba aquella colaboración en secreto. Sigyn veía al grupo bastante dispuesto a colaborar y a moverse, tenían energía que querían emplear ya mismo. La joven acarició uno de los largos mechones de pelo que caían hacia delante, estaba un poco cansada pero no iba a permitirse descansar, ya llegaría la noche y para entonces podría dormir, esperaba que en una de las habitaciones de la mansión, mucho más acogedora por dentro de lo que parecía vista desde fuera.

Se había desmarcado un poco de la opinión general así que esperó a ver cómo respondían a su idea. Prestó de nuevo atención a los libros, le llamaban la curiosidad pero parecía que podían esperar.

"Entonces, estamos todos de acuerdo en que hay que ir a la prisión esa ya, ¿no?" - preguntó Penton con seguridad. "Yo no se mucho sobre estas magias necro... nigro.. o como se llamen. Pero según he entendido, si hay un ayudante en peligro es nuestro deber ir. Y aprovechando la hora del día... no se, no conozco ninguna historia de fantasmas que pase durante la hora de la merienda".

Penton estaba bastante intranquilo. Pensar que había un tal Conrad en peligro mientras el se comía todas las pastas que pudo ofrecer Sebastian, le disgustaba.

La simpleza y franqueza de las palabras de Penton habían caído sobre la mesa como si de la luna de Groetus se tratara, destrozando cualquier posible argumento en contra que pudiera surgir de una manera cuasi apocalíptica. Joseph no pudo evitar sonreír por ello, aunque no sabía si era de los nervios o porque de verdad le resultó ingenioso. Probablemente lo segundo. ¿Quién iba a decirle que semejante personaje iba a ser capaz de convertir algo peligroso en algo divertido?

Joseph cogió a Gervasio y se puso de pie: "Está decidido entonces. No tenemos mucho tiempo hasta que anochezca, y yo no quiero de ninguna manera ir allí de noche. Voy a prepararme." Marchó hacia su habitación a recoger su mochila y otras cosas que pudiera necesitar. Y una chaqueta de paso, que parecía que iba a refrescar.

El profesor Tadeus se quedó mirando perplejo a las dos personas que acababan de hablar. Parpadeó 3 veces seguidas ante lo que considero como palabras carentes de absoluta logica y se dirigió a Perton y Joseph en concreto:

" ¿Es que acaso hablo tian? ¿ Han escuchado ustedes dos lo mas minimo siquiera de lo que he dicho, o se han limitado únicamente a la primera parte? ¿ En que momento el concepto "NO estar preparados para una incursión" se ha convertido en el equivalente a "vayamos de cabeza a ello"? Quizás es que he hablado demasiado rápido, siendo profesor deberia haber supuesto que la logica y la coherencia no son algo tan común como seria deseable... asi que lo dire mas despacio: NOOO......DEBEMOOOOOOOS...IIIR AAAA LAAA PRISIOOON....Me he explicado? Primero debemos tener mas información y preparación, o esta misión se convertirá en un suicidio, y creanme, aunque no me importa demasiado lo que hagan con sus vidas, ni deseo fallar en este cometido ni que hagan perder el tiempo a la dama gris. Por lo tanto actuemos como seres razonables, dirijamonos a las tierras del reposo ( lo que ustedes conocerán comunmente como "cementerio") donde podremos obtener los materiales necesarios para nuestro cometido y, despues, si se torciera preguntar en la villa sobre personajes como el tal Conrad entre otros conceptos que nos faltan por conocer incluso podriamos intentar obtener los planos de Piedra Atormentada, para no ir a ciegas cual topos. ¿Me he explicado esta vez con suficiente claridad?"-Esta vez, sus palabras estaban obviamente cargadas de rudeza y sequedad. Se paró un momento, esperando la reacción de los mencionados.

Joseph, a medio camino, se gira preocupado -y por qué no, asustado-. No esperaba la explosión del profesor. "¿No es a las Tierras del Reposo adonde vamos? Ese era el primer paso. Ruego que se tranquilice usted, profesor. Creo que... ¿Todos? Compartimos la urgencia." Intentó utilizar un tono conciliador, pero sonó más a autodefensa. No deseaba entablar confrontación con nadie.

Audrey se puso algo nerviosa ante el exabrupto del profesor: Misma reacción que la de Joseph pero con algo más de intensidad. Cuando ya no hubo voces en alto, tragó salida.

"C-creo que fue simplemente un malentendido con... Los nombres de los sitios..." murmura por lo bajo. Ella siente algunas dudas con respecto a todo lo que está sucediendo y el plan pero no tarda mucho en alistarse. Tras unos momentos, tiene la capa bien ajustada y a su cuervo en el hombro. Espera al margen de la puerta al resto.

La joven miró al resto de investigadores, el grupo quería visitar de inmediato las tierras del reposo, el cementerio. Ella no iba a quedarse atrás, en las notas venía el cruce exacto en el que estaba la falsa cripta "la intersección entre el Sueño Eterno y el Camino Negro". Se levantó para coger sus lanzas, dado que iban a una cripta se echó incluso la mochila a la espalda pues podía necesitar cosas como antorchas.

- Vayamos pues, avancemos en el misterio.

Muchas cosas quedaban por descubrir, para empezar los libros quedaban pendientes de lectura hasta que pudieran volver.

- Qué os parece si rodeamos el pueblo para no levantar suspicacias, si nos ven camino al cementerio se darán a las habladurías, la gente es así.

Finalmente parecía que el grupo había llegado a un acuerdo con las severas palabras del profesor, casi como si fueran un alumnado al que estaba instruyendo: Ir a investigar las Tierras del Reposo, el antiguo cementerio de Ravengro donde habían estado meras horas antes.

Kendra se mantuvo silenciosa al respecto, casi como si estuviera guardando una opinión que no quería manifestar, pero a medida que los intrépidos aventureros recogían sus pertenencias con intención de partir, fue retirando los platos y tazas vacías hacia la cocina, así como guardando los libros en el baúl ajado en el cual los habían encontrado y cerrándolo con la llave de hierro, ambos objetos guardados bajo la mesa del comedor.

Con un silencio casi sepulcral, partisteis de la mansión Lorrimor en dirección al cementerio.

Audrey, de forma tímida, sugirió de tanto en tanto algún que otro camino que tomar. El que no sea de alzar mucho la voz no ayudó demasiado a que sea escuchada, y para colmo si en algún momento se malinterpretó algún consejo o indicación suya... Le habría dado demasiada vergüenza corregirlo.