Partida Rol por web

- Bueno... tenemos dos opciones. O buscamos a las hadas y les contamos lo que sabemos, que ya es algo, o volvemos al pueblo a buscar a esa Laurel para protegerla. Dado la forma de pensr de los pueblerinos no creo que nos quiera ayudar a transmitirles la cura a las fatas... pero si impedimos que la maten quizás nos informe a nosotros... que ya sabremos que hacer luego con la información -

- Casi casi como que creo que volver al pueblo es lo mejor...aunque no me guste nada la gete que vive por allí -

Estoy completamente palido. La posibilidad de acabar como el jardinero, devorado por esas moscas, parece que me ha traumatizado, y busco con la mirada la confianza que espero me de mi otro compañero enfermo. Khyron.

- Hay una tercera opcion ya que estamos aqui. - comento balbuceando, como si ni yo mismo escuchase mis palabras- Pasarnos por el campamento maderero a ver que pueden decirnos. En teoria tiene que estar batante cerca. Lauren, por si alguien no lo recuerda, es la Herbolista del pueblo. Si quieren acabar con ella es porque posiblemente pueda conseguir una solucion para la plaga.

Pongo cara de asco, y no soy consciente de que aguanto la respiración hasta que me alejo del jardinero tras atarlo a un árbol. No sé si los demás se habrán dad cuenta...

Bueno, al menos para algo me sirvió la competición aquella que gané de cuánto tiempo aguantaba con la cabeza metida en un barril de cerveza... la que no gané fue sin bebérmela, pero bueno... jeje

Aunque sonrío por dnetro recordando viejos tiempos, de cuando era más joven, por fuera estoy serio, pues la situación lo requiere. Necesitamos información del prisionero. Antes de lograr hallar una manera "suave" de hacerlo, llega Khyron y me soluciona la tesitura.

¡Éste sí que sabe montárselo, cojones!

Enarco una ceja cuando el otro suelta todo, como quién expulsa un demonio de su interior, o como un asesino buscando redención por sus pecados (en caso de haber tal asesino, claro). Tras escupir todo lo que llevaba dentro y escuchar a mis compñaeros, entro a valorar las opciones.

Bueno compañeros, está claro que tenemos varios frentes abiertos, y hay que darles prioridad... pero antes de nada, hablemos de la enfermedad.

Por lo que dice éste, la enfermedad la propagan las flores. Y por lo que parece, no se contagia de unos a otros... aunque no tengo claro cómo se ha contagiado el duque. Si vamos al pueblo, no contagiaremos a nadie, y debemos evitar que alguien más lo haga... Y la tal Laurel puede ser lo que necesitamos para dar con pistas más sólidas para lograr hallar una solución. Y cerca del pueblo está el claro donde se encuentra la tal Vondrella, por lo que podremos intentar seguir a uno de los cultistas para que nos guíe hacia ella.

Así que yo creo que todo apunta al pueblo. ¿No?

Miro a los demás, expectante a sus palabras.

Nunca había hablado tanto tiempo seguido en mi vida, yo creo. Seguramente será porque siempre había una pinta de cerveza en mi mano para remediar el mal de la garganta seca... jeje

Al momento, el jardinero comienza a morir de una forma muy asquerosa, saliendo bichos de su interior...

AGGGGGG qué asco, por las barbas de Torag!!!!!

- La herbalista? Bien, tiene sentido... incluso si le acercamos estas flores modificadas puede ser que la ayudemos a encontrar la cura - añadió el pequeño bárbaro - Creo que el pueblo es la mejor opción... aunque no me guste ese lugar - completó en voz baja - Sobre todo pensando que, quizás, ella pueda ayudar a nuestros compañeros a curarse -

Si quieren eliminarla es por que es lo que se opone a sus planes, asi que debemos evitar que muera, no creo que estos sean los unicos que estan detras de esto

Respondo levantandome de junto a las provisiones

Si vamos antes a por esa Vondrella corremos el riesgo de que desaparezca la cura y aunque acabemos con ella consiga salirse con la suya

Khyron sigue golpeando y amenazando al jardinero, sospechando siempre que les está ocultando algo.
Ademas, el fiel de Pharasma, no puede contener su odio ante un ser tan vil como para ser capaz de abandonar el camino de la naturaleza, y llegar incluso a crear muertos vivientes.
La traición del druida es imperdonable para Khyron, quien se apresta a sesgar la vida del impío jardinero.

Sin embargo, alguien se adelanta a su condena y el pobre hombre comienza a ser devorado por la peste pero a una velocidad estremecedora.

¡QUE!?? Que es ésto! Oh no! por Pharasma! Que horror!!!

El explorador retrocede, haciendo un rezo a su diosa, y espantado por la idea de morir de ésta manera.

Al recuperarse del trauma, escucha las diversas posturas de sus compañeros, y mientras alza del suelo la bolsa con el botín y su larga azada, comienza a caminar directo hacia el poblado, a gran velocidad.

Rápido! Vamos! Debemos encontrar a esa mujer antes que ellocoff cofff cofff!
Evidentemente Khyron necesita descansar, pero en éste momento no hay tiempo...

Estáis cansados y a punto de quedar fatigados, supongo que descansáis en algún lugar cercano y tranquilo del bosque.

Descansemos y mañana temprano vayamos a buscar a la herbolaria. Yo haré la primera guardia.

Seltyel busca un lugar desde el que poder vigilar.

- Si, el dia fue largo... volver ahora, creo, solo servirá para que estemos agotados. Yo haré la segunda guardia, pero antes quizás pueda ayudar a Mirelle - el rostro del bárbaro se encendió ante la osadez de su comentario por lo que permanecio en silencio mientras buscaba su odre y se lo ofrecía, permanenciendo a la espera de sus instrucciones

Ok, os abro ahora una escena.

Mientras Seltiyel se dispone a hacer su primera guardia, Mirella trata de poner en práctica sus dudosos conocimientos de medicina, sin embargo, entre el caldo que os prepara y que os dice que os bebáis algo y el resto os lo esparzáis por la piel, entre el cómodo lecho de hojas y cataplamas que os prepara Zak y el remedio enanil que consiste en respirar un pañuelo empapado en orina para "eliminar la mierda de los pulmones", a la mañana siguiente os encontráis mucho más recuperados, ambos (Khyron y Duque) sabéis que seguís enfermos, pero de momento el dolor os da un respiro.