Partida Rol por web

PENDRAGÓN

La Cacería

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22/11/2012, 12:35
Director

Gracias al buen hacer de Galorian, los tres escuderos encontraron el rastro de sus compañeros. Rastro que tuvieron que seguir durante poco más de media hora, atravesando maleza y bosque hasta que se toparon casi de frente al enfilar un camino descendente con cambio de rasante, con el resto del grupo.

Darby yacía despatarrado en mitad del camino con agujero en el abdomen que dejaba ver el interior del hombre, ¡ Podía verse incluso cuál había sido su última comida ! y era su última porque estaba completamente rígido, como si estuviera muerto. Lo peor de todo es que tenía desgarrada la parte izquierda de la cara y en la otra parte tenía la marca de un zarpazo que le ocupaba toda la cara, había perdido el ojo derecho y las zarpas del animal había dejado unos surcos anchísimos.

A pocos metros vísteis a Kelton, apoyado junto a un árbol en la linde izquierda del camino. Tenía un muñón por brazo izquierdo - había sido cortado a la altura del hombro - y en la mano derecha tenía tan sólo la empuñadura y un trozo de hoja de su espada. Tenía los ojos cerrados y también parecía estar muerto. Había un río de su sangre rodeando el árbol.

Bastantes metros más allá, vísteis un enorme oso pardo tumbado, véiais cómo el cuerpo de la enorme mole subía y bajaba, indicando que aún vivía.

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22/11/2012, 12:44
Ascot

Corre hasta el cuerpo de Darby y se agacha a examinarlo. En seguida se le escucha gritar como un poseso -¡ NOOOOOOOOOOOOOOOOOO! -parece que aquel escudero tan afable y simpático había pasado a mejor vida.

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22/11/2012, 12:45
Leocegrande

Se apeó de su montura y corrió hasta el linde del bosque para examinar a Kelton, miraba el charco de sangre que pisaba y tocaba el cuello del hombre. A los pocos segundos negó con la cabeza, también había muerto.

Todo había sido culpa suya, no merecía haber comandado al grupo, lo había dividido y había entregado a sus dos compañeros a aquel oso. Leocegrande empezó a llorar desconsoladamente.

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23/11/2012, 20:20
Galorian

¡Oh Santo Dios! -dije tras bajarme del caballo y dándole un espaldarazo con la mano abierta a Leocegrande que hizo resonar en su armadura...-, ¡Ascot! ¡Levanta!, mirad lo que ha hecho esa bestia -señalaba con el dedo al oso casi yaciente un poco más adelante-, ¡A por él! ¡Iré a hacer lo justo! ¡Iré a darle muerte rápida también por el honor de ambos...!

Rápidamente, pese al dolor de dejar allí momentáneamente los cadáveres, eché a correr mientras por el camino iba desenvainando la espada, a la cual a la carrera se iba quedando más atrás que mi cuerpo, dispuestas toda ella para acabar con el bárbaro animal. En cuanto llegase a su posición le daría el golpe de gracia.

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29/11/2012, 19:51
Director

Galorian dio el golpe de gracia al oso en la parte trasera de la cabeza, la bestia estaba tan malherida que ni siquiera gruñó o intentó moverse cuando el caballero se acercó a ella. Tan sólo movió las patas unos segundos tras ser casi decapitada. Finalmente dejó de moverse y Galorian volvió con el resto.

Ascot y Leocegrande lloraban sin pudor alguno, estuvieron así unos instantes mientras Galorian permanecía en silencio por respeto. Finalmente Ascot rompió el silencio.

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29/11/2012, 19:54
Ascot

- No perdamos el tiempo buscando sus caballos. Montemos los dos cuerpos en los nuestros y volvamos al pueblo, el oso está muerto y hemos acabado nuestra misión. Volvamos a casa con Sir Jaradan e informémosle de la triste noticia, han muerto como héroes y en cierto sentido, nos han salvado la vida. Habrían sido excelentes caballeros -dijo entre sollozos.

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29/11/2012, 19:55
Leocegrande

- Estás en lo cierto Ascot, pero hay que llevar una prueba de que hemos acabado con el oso, sino ya sabemos cómo se pondrá Sir Jaradan -esbozó una sonrisa al acordarse del gruñón.

- Voy a cortar la cabeza al oso  - y se acercó y comenzó la desagradable tarea.

 

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29/11/2012, 22:14
Galorian

Cierto, Leocegrande... quizá sea mejor que también llevemos las pezuñas de aquella bestia, que bien herido nos ha a todo nuestro grupo y querrán hacérselo pagar a todo su ya cadáver... Mira cómo... -decía dubitativo mientras iba ya Leocegrande a por la prueba-, mira como ha dejado a...

Entonces me percaté de algo inusual, algo imposible, justo en el momento en que volví a ver el cuerpo de Kelton.

Mi querido Ascot -le dije con palabras amables- ¿no se torna todo esto raro en tu pensamiento? Porque en el mio si... fíjate nuestro amigo, Kelton yaciente que hemos mucho de llorar y ennoblecer, pero mírale bien... -me acerqué hasta su cuerpo, y señalé el muñón... ¡a la altura del hombro!-: ningún oso es capaz de hacer algo así; esta bestia sería incapaz de arrancarle el brazo a nadie, tan a la ligera y en cuestión de proporción dos contra uno, y siendo esos dos casi caballeros..., y tan siquiera uno sólo podría... ¡podría quebarle la espada! -hacía como que buscaba los trozos de la hoja de Kelton-... ¿no crees que es posible...quién sabe... que les tendieran una emboscada?

Entonces,mientras cargaba el cuero de uno de ellos sobre mi caballo, seguí cavilando, y hablándole a Ascot.

Es posible que alguien los acechara, hombres sin duda, y después los mataran con tan despiado infortunio para los nos nuestros; y entonces quizá el oso llegó y tan sólo comió de los restos... ¿No podría ser posible, querido Ascot?

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30/11/2012, 12:02
Ascot

- ¿Tú crees? me parece improbable. Nunca hemos tenido noticias de bandidos en estas tierras, este es un pueblo tranquilo y el sacerdote tampoco nos dijo nada al respecto. Que yo sepa todo el condado es ahora mismo seguro, claro que nadie está nunca seguro de la voluntad de los hombres que es siempre cambiante y en cualquier momento alguien puede cometer una locura.

Se mantuvo pensativo

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30/11/2012, 12:03
Leocegrande

Volvía con la cabeza del Oso y mientras la metía en una de las alforjas decía

- Vamos Galorian, no veas conspiraciones donde no las hay. El oso le dio un mordisco en el brazo y eso es todo... creo que estás demasiado obsesionado con esas historias de Diablos y bandidos* que oyes de los bardos terminemos aquí y volvamos.

Notas de juego

* Demasiado Aquelarre xDDDD

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05/12/2012, 22:06
Galorian

Dirás lo que quieras, Leocegrande -dije algo mosqueado-, pero cualquier "muchachuelo" te diría que una garra, una dentada o un zarpazo no quebraría la hoja de una espada si con ella se enzarzara. Harto improbable -permanecía "en mis trece", pues consideraba poco limpio este entuerto-. Venga, vayámonos, que digno entierro en lugares lejanos de ésta, su muerte, hemos de darle. Yo llevaré a uno de ellos, y volveremos tras los pasos que aún están sobre mi vista*.

Dicho lo cual, puse a uno de aquellos escuderos, casi caballeros, sobre los lomos de mis caballos, aprete bien las guarniciones, y esperé a que el resto tomara al segundo para irnos de aquella tierra muy lejos.

Notas de juego

Tenía un post  y se me ha ido al garete! :(((

*Me refiero al rastro que antes vi.

Pues sí, aquelárricamente influido xD

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10/12/2012, 19:45
Director

La hipótesis de Galorian si bien era factible, ni Leocegrande ni Asctot estaban por la labor de complicar más aquella cacería que había acabado en desastre. Conociendo a Leocegrande y sobre todo a Darby, en otras circunstancias, habrían paseado la cabeza del oso por toda la aldea, sólo por el placer de escuchar cómo eran vitoreados.

Pero no estaba la cosa para homenajes, así que el grupo dio una rapidísima batida por varias zonas del bosque en las que nada hallaron y después dieron un rodeo a la aldea hasta que localizaron la pequeña iglesia sobre un promontorio, Leocegrande mandó a Ascot para que contara al sacerdote lo ocurrido y que fuese éste el que transmitiese a los aldeanos que el oso había dejado de existir.

De vuelta al Castillo de Varon:

El segundo día de viaje se toparon con un grupo de campesinos armados que parecían bandidos, los vieron a cierta distancia y en lugar de combatir, que habría sido lo lógico en otras circunstancias, continuaron la marcha con tan buena fortuna que el grupo de malnacidos no se molestó ni en perseguir a los tres hombres. El deber de todo caballero era impartir justicia allí donde fuera necesaria y deberían haber apresado a esos malhechores, pero eran sólo tres, llevaban dos cuerpos y una cabeza y al fin y al cabo, aún no eran caballeros.

Galorian y Ascot protestaron enérgicamente, sobre todo Galorian, pero Leocegrande les dijo que un caballero debe cuidar de los suyos ante todo y él estaba cuidando de ellos en esos momentos. Y no sólo de los vivos... si luchaban podían morir y sus cadáveres podían ser profanados....NO. Derby y Kelton debían ser honrados por la hazaña que habían llevado a cabo y lo serían.

 

Notas de juego

Escena cerrada, en cuanto pueda abro otra y le damos caña a la partida que quiero probar la parte de administración del feudo.