Partida Rol por web

 Borateo asiente ante las indicaciones del negro a la vez que las va memorizando, cuande este al final se brinda para acompañarle el monteraz duda durante unos instantes.

 - Pues me gustaría, pero Sara cierra la posada a las nueve, y antes de acostarme quisiera reunirme con el resto de los compañeros con los que partiré mañana. Muy a mi pesar creo que tengo que ponerme ya en marcha.- Levantándose y acomodando su equipo a su espalda, tiende la mano a Guzmán y se la estrecha.- Gracias por el tiempo y la información Guzmán, al regresar del custodio con los enanos te convidaré al trago. Cúidate.

 Tras despedirse, el joven avanza a buen ritmo por las calles del pueblo, en dirección a la casa de Orquídea.

El proyectil mágico y el virote son disparados a la vez desde la ventana. Impulsado por su energía mágica, el hechizo de Wilbur es el primero en alcanzar su objetivo. Valthonis se duele y no puede hacer más que cojear, visiblemente incapacitado. Seguidamente le llega el disparo de Roger, que se clava en su espalda.

Valthonis no puede continuar y se desploma en el suelo.

Será mejor que seas tú quién se cuide, Borateo. Eres tú el que se va a jugar el pescuezo ante esos bandidos. ¡Suerte!

Siguiendo las instrucciones de Guzmán, caminas por el pueblo hasta deshacerte del rumbo marcado por las calles. Al frente, una inmensidad azul con forma de lago de la que solo te separa un descampado de briznas de hierba de un color verde intenso. Un paisaje lleno de belleza. Se empieza a levantar algo de viento, una brisa suave que te hace sentir aún más cómodo. Pero no tienes tiempo para estos placeres contemplativos, tienes cosas que hacer.

Caminas por la alfombra de hierba que separa los dos mundos, el pueblo y el lago. Unos minutos después te fijas en los tulipanes blancos. El jardín de la casa está definido por una verja de hierro de cuatro pies de altura, que se interrumpe en su centro (sin puertas ni obstrucciones), a la altura de la puerta trasera. Dos maceteros alargados, llenos de flores, presiden  la entrada desde el exterior del jardín, cada uno a un lado del enrejado. Y en el inerior, dos setos, simétricos a la verja con respecto a los maceteros de fuera.

También te fijas en un par de orejas puntiagudas. El sujeto está en el jardín, agazapado. De cunclillas y de espalda a ti, y sin embargo, de cara a la casa. De la construcción solo le separa uno de los setos, que a la vez le sirve para observar sin ser visto... salvo por ti, que vienes de fuera.

La conversación prosigue en idioma druídico. Valandil parece sensiblemente mas locuaz y devuelve con respeto y educación el saludo que la druida le brindó.

Gracias, hermana Aldira. Me reconforta la bienvenida. ¿te incomodaría si yo también me pego un baño? como ves tengo sangre seca en mi piel debido a un pequeño desencuentro con unos hermanos de raza, y tras varios dias en el camino donde no halé mas que escuálidos charcos para asearme creo que me vendría mejor que nunca dice Valandil dejando a un lado sus armas. NO espera necesitarlas, por supuesto.

- Bien, un indeseable menos.

Voy a acercarme a ver si hay que rematarle.

Mira a ver si puedes hacer algo por Nugruk, pero me temo lo peor.

Wilbur sale de la habitación y se encamina hacia el elfo muerto caminando casi como un autómata.

 No pretendiendo asustar a la anciana, el rudo montaraz carraspea ostensiblement Ejeeem, mientras se mantiene fuera de su propiedad..

 - Hola, buenas tardes, ¿soys la anciana Orquídea? Yo soy Borateo, uno de los aventureros contratados por Cléquetto para protejer el pueblo de esos elfos bandidos que lo acosan.- Tras la presentación y ver como reacciona la anciana, prosigue.- Verá me he estado informando y me han dicho que usted conoce los bosques y la zona en general alrededor del pueblo, y he venido por si me podría dar alguna indicación o aviso para poder encontrar a los elfos, o cuanto menos para estar sobreaviso de lo que puedo encontrar fuera del pueblo. ¿Puede ayudarme?

Por supuesto que puedes disponer del estanque. La Madre Tierra es sabia y provee de agua a sus hijos.

De una pomposidad ceremonial, la druida te ayuda a desproveerte de tu armadura de pieles y hasta de tu propia ropa. Luego se sumerge contigo en el estanque.

Debe ser cosa de la Providencia que hayas venido a mí. Precisamente hoy, que ya no sabía cómo proceder con mi asunto...

Hice el Ritual de Vínculo con la Tierra*. Ahora no puedo dejar el bosque, aunque sin duda eso resolvería mi problema. Uno de los habitantes de la arboleda, el señor lobo, ha dejado la seguridad de mis dominios. Estoy preocupada por él. Si el señor halcón y tú pudieseis traerlo de vuelta, estaría en deuda con vosotros.

¡PAPÁ! ¡MAMÁ! ¿QUÉ PASA?

La niña casi tropieza con Wilbur bajo el dintel de la puerta del cuarto. Consigue evitarlo y se cuela dentro. Los ojos de la pequeña se salen de sus órbitas y la mandíbula se le desencaja.

¡¡¡AAAAAAAAAAAAAAAAAAAH...!!!

Sara deja a su marido, como movida por un resorte y coge a la niña en colo interponiéndose a la visión del cadáver del bárbaro.

Ya pasó, princesita, ya pasó... El elfo malo se ha ido, y ya nunca volverá.

Del cuello de Nugruk deja de brotar la sangre. Poco a poco su cuerpo se enfriará. En un par de horas empezará a oler mal. Las moscas vendrán a depositar sus huevos. Todos los protocolos de la Parca se han activado.

Deja de estar en cunclillas para ponerse en pie y darse la vuelta. Era un semielfo y no Orquídea quién estaba en el jardín.

No, extranjero, me temo que no tiene muy buena vista. Mi madre está dentro.

Se saca dos grandes guantes de jardinero. En el suelo queda una pequeña pala de mano con el que removía la tierra de los setos.

Me cuesta explicarme el porqué considera que mamá es la más propicia para darle esa información. No tiene ningún vínculo con los bandidos, y poco hay que pueda encontrarse fuera de Holmet que no sea naturaleza y más naturaleza.

¿Sigue queriendo verla? Le podría acompañar dentro.

No estarás en deuda conmigo, y creo que el buen Grak está también de acuerdo. No nos supone esfuerzo alguno y será un grandísimo placer ayudarte a recuperar a tu fiel defensor. Hoy me dirigía a esas colinas, pero mañana partiré a las montañas para ayudar a un grupo de humanos que he tomado bajo mi protección. Los finos ojos de mi emplumado amigo encontrarán a tu peludo compañero. Le hablaré y le explicaré que le echas de menos y que sería deseable que volviera a tus dominios. A veces Valandil se siente ridículo teniendo que poner un nombre a Grak. A veces olvida que los humanos necesitan humanizar todo y atribuyen apelativos a un animal que no lo necesita. Finalmente decidió llamarlo Grak cuando había mas humanos presentes. Grak es la transcripción fonética en idioma humano de la respuesta que el halcón emitía cada vez que se le preguntaba su nombre. Claro, que la misma respuesta se recibía si era consultado por si tenía el estómago lleno o si había encontrado algo interesante al otro lado de la montaña.

Amigo Halcón, nuestra hermana necesita tu ayuda. dice valandil a su emplumado amigo. Aún no ha anochecido y quizás puedas usar tus avispados ojos para localizar al hermano lobo. ¿Podrías por favor hacer una batida por la zona y localizarlo? Si nuestro cánido amigo está muy cerca posiblemente podamos ir en su búsqueda ya mismo y no sería necesario esperar a mañana (*)

Y algo mas quería consultarte, hermana. Tuve un desagradable encuentro con un gigantesco avestruz. Dicho animal había tenido,presumiblemente, un origen humano y había sido transmutado en bestia por unas crueles artes mágicas que alteran la naturaleza de los que nos rodean revirtiendo el orden natural de la naturaleza. ¿Algún oscuro nigromante se esconde en estas tierras para perjudicar o esclavizar a sus semejantes?

 El rudo monteraz es incapaz de borrar el gesto de sorpresa que se instala en su rostro al ver el semielfo.

 Vaya vigilante estoy hecho, ¿será la fatiga del día de hoy? Mejor que regrese pronto a la posada.

 Recuperando la compostura asiente.

 - Pues me digeron que Orquídea conocía la naturaleza de la zona circundante al pueblo, como bien has dicho, y esto es lo que busco. A alguien capaz de hacerme una descripción del entorno que rodea la comunidad. Conocer sus rasgos, peculiaridades, fauna local y accidentes geográficos destacables.- tras una pausa añade.- Sí, por favor, quiero verla.

La doncella del bosque pone su mano en tu hombro y te detiene.

Gracias por acceder, pero podemos saltarnos la parte de buscar al señor lobo*. Yo ya hice mis investigaciones. Pedí al señor jilguero que dejara el bosque y a la vuelta me explicó como buenamente pudo dónde estaba el señor lobo. Lo halló encadenado, como si fuera un exclavo, a una roca cerca del camino de poniente**. Allí la roca ganó terreno al bosque, y me es imposible acudir en su ayuda. Tu tarea solo consistiría en romper esas cadenas y escoltarlo hasta el bosque. Aún he de hablar con el señor lobo para que me indique quién le ha podido cercenar su libertad de ese modo.

En cuanto a las "avestruces", como las llamas... Es cierto que esas bestias han aparecido hace poco en el bosque, y he tenido la precaución de evitarlas, pero desconocía que tuvieran un origen tan terrible. Tampoco tengo constancia de ningún titiritero de los muertos, aunque las montañas de los alrededores son muchas y están fuera de mis dominios.

Duda un momento, y aprovecha para ordenar sus ideas.

Tal vez vuestro nigromante sea también el responsable del rapto del señor lobo. Si es así, una vez que lo recuperemos, podremos poner rostro al que está moviendo los hilos. Me intriga qué intenciones le pudieron llevar a aprisionar un animal. ¿Fue solo crueldad? ¿La maldad por la maldad? Es perturbador que haya gente así en este mundo, aún sabiendo que es una realidad ineludible.

Como desee, entonces sígame. Le llevaré a su lado.

El semielfo te acompaña hasta el interior de la casa. Una anciana calceta en una mecedora, aunque al ver que tiene visita, se pone en pie por cortesía. El resto de la decoración es sencilla. Una mesa redonda y cuatro sillas, poco más allá de la mecedora, y un aparador con loza.

Mamá, este es Borateo. Dice que ha sido contratado por el alcalde para luchar contra los bandidos. Quiere hablar contigo.

¿Conmigo? No entiendo qué puede querer de mí. Buenas tardes, señor Borateo. Mi nombre es Orquídea. Supongo que cree que alguno de los bandidos puede ser el padre de mi hijo Sueni. Le diré que ninguno de ellos ha tratado de ponerse en contacto con nosotros ni de venir a vernos, así que desheche esa idea.

Tengo la sospecha de que la cosa no iba por ahí, mamá. Verá, señor Borateo, en Holmet no hay elfos. Yo fui el fruto de un romance pasajero entre mi madre y un elfo errante. Ahora mi madre sospecha que después de tantos años cualquier vecino pueda llegar a la conclusión de que entre los bandidos se encuentre mi padre, que vuelve por mí. Teme por la fama de nuestro buen nombre. Yo, personalmente, estoy seguro de que mi padre jamás se uniría a un grupo de ladrones, pero reconozco que la idea de que mi padre haya regresado para verme me atrae. Es algo que he esperado desde niño.

 Borateo hace un gesto en señal de saludo a la anciana.

 - Por favor, síentase. No he venido para acosar a nadie del pueblo, más bien he venido a pedir ayuda. Dentro de sus posibilidades, claro está.

 Entonces el pelirrojo escucha lo que le dice la anciana Orquídea y su hijo.

 - Que extraño, por que debería unirse tu padre a los bandidos su quisiera verte, no sería más acertado venir y presentarse, como cualquier persona honrada. Mejor eso que asaltar a las gentes que vagan por los caminos.- Entonces el monteraz adopta un rictus serio y duro.- En cualquier caso, chaval, espero que tu padre no esté del lado de esos forajidos, yo y los demás hemos venido para ayudar y expulsar a esos tipejos, y por lo visto esta mañana no se irán sin luchar. Hoy mismo dos de esos han caído.

 El hombre mira a uno y a la otra tras esa declaración. Pero pronto su expresión se suaviza un poco.

 - En cualquier caso he venido por que me han dicho que vos, señora Orquídea, soys una gran conocedora de los alrededores de Holmet, del entorno y las criaturas que en él residen. Tenía la esperanza de me ayudara hacer un poco de mapa, y que me contara un poco lo que debería esperar encontrar en él. Por favor.

Cita:

En ese instante, Sueni se estremece. Existía la posibilidad de que alguno de ellos fuera su padre, y en su mundo ingenuo se había infiltrado entre los bandidos para desbaratar los planes. Con esta noticia, sus ensoñaciones se vuelven contra él.

Su madre nota el malestar de su hijo, como solo una madre sabe notar esas cosas. La anciana pone la mano en la espalda de su niño para que note el consuelo de tenerla cerca.

Vete a buscar la tinta y un papel, cariño. Bien, señor Borateo. Tiene mi total colaboración.

Tanto el pulso de la humana como su memoria tiemblan varias veces durante el proceso. Al cabo de una hora y varios "borradores" fallidos, el mapa de la anciana está hecho.

Bueno... esto podrá valer. Preste atención, señor Borateo. Porque son muchas cosas que recordar.

Hay tres rutas que salen de Holmet: puntos uno, dos y cuatro. El uno es el camino que lleva hacia la llanura, nuestro único punto de contacto con la civilización. El dos es el camino que lleva a las minas. Cuando era niña estas minas aún no estaban prospectadas. Por aquel entonces había otra mina... Recuerdo ver partir a los mineros en esta dirección: la número cuatro. Es un camino que lleva mucho tiempo sin usarse, no sé si seguirá transitable.

Además, se puede transitar por toda la orilla del lago, atravesando los bosques de cerezo. A su vez, el bosque está circunscrito dentro de un círculo de montañas escarpadas, salvo por el punto tres. Desde el bosque tengo visto a lo lejos esta zona... la del punto tres, me refiero... El bosque termina y empieza una enorme cuesta pedregosa. Es una formación natural del terreno, no un camino trazado por el paso de los viajeros. Tampoco hay garantías de que más allá de la cuesta haya algo que no sea montaña y más montaña.

Enclaves relevantes... el número cinco: la capilla de Elhona. La mayoría de humanos se han convertido a la fé de Moradin, pero otros rendimos culto a la diosa de los bosques. Está bastante bien escondida, así que seguramente los bandidos no habrán dado con ella todavía. No es importante para su misión. Está en lo profundo del pinar que bordea el camino a la llanura. El sendero que lleva a la capilla es poco visible y está oculto del camino principal por unos arbustos.

Después tenemos el número siete... En la cara oriental de las montañas hay una entrada a una caverna. La tengo visto desde lejos, y nunca he entrado. Tampoco tiene relación con los bandidos, ya que si se apostan en el camino a la llanura, para llegar a la cueva tendrían que pasar forzosamente cerca de Holmet, y seguramente alguien ya les habría visto.

El número seis... el Estanque de la Gestación. Dentro del bosque de cerezos hay un estanque que, según me contaba mi abuela, ayuda a las mujeres que están embarazadas a tener un parto indoloro y parir un bebé sano... o las hace más fértiles para que se puedan quedar embarazadas pronto. Creo que este lugar no es de su interés, ¿verdad, señor Borateo? ¿O nos oculta algo que no sabemos? Jojojojo... cof, cof...

Sueni acerca un vaso de agua a su madre, que bebe y recupera la respiración.

 El monteraz se mantiene en silencio mientras escucha las explicaciones y descripciones que la da la anciana. Su gesto es de concentración, pero cuando ella termina, por que ya ha tratado todos los puntos grafiados y por el comentario final, una ancha sonrisa de blanzos dientes emerge de debajo del poblado mostacho pelirrojo.

 - Jejeje no, no es algo que merezca mi atención. No son hijos lo que busco ahora y cuando llegue el momento, prefiero divertirme buscándolos a la vieja. En mi casa siempre decían a modo de bendición " que los dioses te bendigan con muchos intentos y pocos críos" jajajaja.

 Tras unas carcajadas más el joven mira de nuevo el mapa repasando lo que la anciana ha dicho de los puntos, entonces señala el punto 5, la capilla de Elhona.

 - Una capilla a Elhona... me gustaría pasar por ella a rendir un pequeño tributo a la Dama de los Bosques. Por certo, ¿hay alguien que se ocupe de la capilla, algún druida o sacerdote? Y esos caminos... - dice señalando el punto dos y cuatro.- Las minas en las que se trabaja actualmente son estas, las del número dos, y ese otro camino va hacia unas antiguas minas dice... hace mucho que están en desuso? ¿Qué metales se extraían en esas, y ensta en la que se trabaja ahora?

Cita:

Sueni ríe contigo. Su madre no. Los solteros tienen distinta concepción que las madres.

La capilla de Elhona no tiene ministro eclesiástico. Es solo un altar bajo cubierto donde ofrecer tributos de flores y frutas. Las minas abandonadas... llevan así unos cuarenta años, pero ni idea de los metales que el pueblo extrae de las minas.

En la mina vieja no lo sé, pero en la nueva trabajo yo. Allí hay hierro y cobre.

Cuando Wilbur llega al camino, el cuerpo de Valthonis no está.

Tampoco hay rastros de sangre, pero eso es lógico. Los proyectiles mágicos no causan cortes, y el virote de Roger solo hizo una pequeña herida perforante en la espalda.