Partida Rol por web

Efectivamente no hacia falta que Pavel le indicara, Malta ya estaba preparado para actuar ante cualquier tontería de Barnels. Esperó a que Darko se llevara a la teniente y una vez a solas con Barnels de nuevo se aseguró de quedarse entre él y Pavel. Esperó a que el suero le hiciera efecto, Pavel hiciera sus preguntas y el otro fuera contestando, mientras no le quitaba ojo de encima por si se le ocurría alguna estupidez idiota.

Barnels se encontraba obviamente nervioso. Trataba de mantener una apariencia de calma, pero lo estaba; Malta lo notaba, pero Pavel tenía la completa seguridad, no solo por lo que le decían sus monitores, sino por los muchos años pasados haciendo este tipo de interrogatorios.

Cuando pasó el tiempo requerido, Barnels se quedó mirando al frente, con la mirada un poco perdida. Era un efecto secundario del suero de la verdad: aunque el sujeto experimentaba internamente una especie de "claridad mental", sus interlocutores lo veían como algo "grogui". Los había que se meaban encima, y Pavel esperó que este no fuera el caso. 

Pronto, comenzaron las preguntas, que Barnels fue respondiendo de forma mecánica.

-Señor Barnels. ¿Cual era su función en la nave Ikardagur.?

- Marine. Asalto a naves piratas, seguridad interna y protección de la oficialidad

-¿Que familia tiene?

- Mi madre vive en Ergo. Allí también viven mi hermana y su marido. Tengo un par de sobrinos.

-¿Pertenece a las fuerzas de seguridad del planeta?

- Tengo un contrato de cinco años con la Armada de Pourne. Ya había cumplido cuatro.

-¿Tiene algún protocolo en caso de caer prisionero?

- No revelar secretos de la Armada y esperar el rescate.

- ¿Tiene la intención real de unirse a esta tripulación y compartir su destino?

- No lo sé. No especialmente.

-¿Planea traicionar a los miembros de esta nave de alguna manera?

- No. No especialmente.

-¿Sabe si la teniente Kamawaga tiene alguna intención hostil para la gente de esta nave?

- No lo sé.

-En el caso que lo dejemos libre, ¿tiene la intención de volver a su planeta denunciando a los miembros de esta tripulación contando cuanto sepa?

- Tengo una novia en Pourne, Dacia Marthens. Quiero volver volver a verla.

-¿Tiene algun tipo de adicción o tara psicologica?

- No. Me gusta beber. A veces me paso con la bebida.

-¿Le persigue alguna organización legal o no?

- No. La Armada lo hará si averiguan que me he unido a vosotros.

-¿Pertenece a alguna organización o esta en nomina de alguien mas. aparte de su destino en la Ikardagur?

- No.

- ¿Qué hará si le dejamos en un planeta remoto con algo de dinero?

- ¿Qué información puede dar de nosotros a la Armada de Pourne?

Aprovechó para añadir al interrogatorio viendo el estado mecánico en que se hayaba Barnels.

- ¿Qué hará si le dejamos en un planeta remoto con algo de dinero?

- Esperaría a que las cosas se calmaran y trataría de volver a Pourne en unos meses, a ver a Dacia. Quizá en algo más de unos meses... pero no quiero esperar un año.

- ¿Qué información puede dar de nosotros a la Armada de Pourne?

- Que son unos piratas muy profesionales y que su nave es de diseño desconocido y posee un sistema de camuflaje muy sofisticado.

Asiento ante las preguntas de Mark y apunto las respuestas de Barnels.

Cuando termina el interrogatorio. le sonrío y le digo.

-Muchas gracias marine, puede salir y que entre la teniente.

Cuando ha salido miro hacia a la cámara.

-Hagan entrar a la teniente, por favor.

Antes de entrar la teniente, repaso las constantes y las respuestas que he obtenido, con el ceño fruncido, sin palabras y aire pensativo.

Y repito las mismas preguntas  a la teniente, incluyendo las que Mark le dirigió a Barnels.

EN EL INTERROGATORIO

Acompañe a Barnels para hacer la entrega a Darko y recibir a la teniente. Al igual que con el marine deje que Pavel hiciera lo suyo y llevara la voz cantante, pero de nuevo me mantuve entre él y la teniente por las ideas que pudiera tener la señora.

EN EL CAMAROTE DE ADRIANA

- Ejem, señoras. ¿Desean que regresemos más tarde? – preguntó Malta con su mejor cara de poker.

Darko enarcó brevemente las cejas al ver la escena, luego carraspeó incómodo y miró al suelo. ¿Tal vez el marine se había hecho ilusiones con alguna de las dos, o era simple mojigatería? 

Barnels salió de la improvisada sala de interrogatorios un poco grogui. Los efectos del suero de la verdad no tardarían mucho en disiparse. En algunos casos, la persona concreta recordaba claramente todo lo que había dicho y en otros casos, nada en absoluto. Kamawaga entró después, se sentó con aire marcial en la silla y se dejó preguntar por Pavel. De algún modo, al exagente de GeDeCo le dio la impresión de que la Teniente no iba a olvidar absolutamente nada de lo que dijera.

-Señorita Kamawaga. ¿Cual era su función en la nave Ikardagur?

- Era la segunda al mando. 

-¿Que familia tiene?

- Mi familia es de Iilgan. Mis padres siguen viviendo allí, así como mis hermanas. 

-¿Pertenece a las fuerzas de seguridad del planeta?

- Pertenezco a la marina de Pourne, soy Teniente de carrera de su armada. 

-¿Tiene algún protocolo en caso de caer prisionero?

- No revelar secretos de la Armada y esperar el rescate. 

- ¿Tiene la intención real de unirse a esta tripulación y compartir su destino?

- Sí. Si se descubre que me amotiné contra el Capitán, me someterán a una corte marcial. Lo mínimo que me puede suceder es que me metan en prisión, pero podrían incluso condenarme a muerte. Estoy dispuesto a probar suerte como corsaria.

-¿Planea traicionar a los miembros de esta nave de alguna manera?

- No. Si el Capitán actúa con lógica, seré leal.

-¿Sabe si el marine Barnels tiene alguna intención hostil para la gente de esta nave?

- No lo creo. Barnels no es muy brillante. Confía en mi. Lo peor que puede pasar es que quiera volver a Pourne a buscar a su novia y le capturen.

-En el caso que lo dejemos libre, ¿tiene la intención de volver a su planeta denunciando a los miembros de esta tripulación contando cuanto sepa?

- No tengo la más mínima intención de volver a Pourne. Probablemente busque trabajo en el Tercer Imperio.

-¿Tiene algún tipo de adicción o tara psicológica?

- No. 

-¿Le persigue alguna organización legal o no?

- No. 

-¿Pertenece a alguna organización o esta en nomina de alguien mas. aparte de su destino en la Ikardagur?

- No.

- ¿Qué hará si le dejamos en un planeta remoto con algo de dinero?

- Buscaría pasaje hacia el Tercer Imperio. En una ruta que no pase por Pourne.

- ¿Qué información puede dar de nosotros a la Armada de Pourne?

- Son corsarios profesionales, no piratas. Su nave dispone de una sorprendente potencia de fuego: un cañón pesado de partículas y un cañón láser. Disponen también de un sistema de camuflaje extremadamente sofisticado y contramedidas electrónicas potentes. Sospecho que tienen el patrocinio de alguna potencia regional y que su objetivo es dañar el comercio local, no simplemente hacer actos lucrativos de piratería. Tienen marines entrenados y, obviamente, entrenamiento militar.

Se puso en pie de un salto, mientras se cerraba el mono de servicio de a bordo de la Armada: - ¿ESTA ES FORMA DE ABORDAR UN DORMITORIO QUE NO ES EL SUYO? ¿ESTA ES FORMA DE ACCEDER A UN CAMAROTE DE UN JEFE? ¿NO LES ENSEÑARON EN SUS PERIODOS DE SERVICIOS QUE HAY QUE CUMPLIR UN PROTOCOLO EN EL ACCESO DEL ALOJAMIENTO FEMENINO SIENDO HOMBRES? ¿O es que mientras cobraban del estado ustedes se dedicaron a "chupar puertas" y a beber cervezas en la cantina? Levantó un dedo a modo de maestro, y su tono, totalmente enfadado demostraba que sus sentimientos habían sido "desmontados".

Adriana tocó su pierna, mientras permanecía aún sentada en la cama inferior de la litera de ese habitáculo. Esta aún permanecía con el mono de vuelo entreabierto y mientras se colocaba la ropa, se podía ver especialmente el encaje de su ropa interior.

La piloto, con las botas y el mono medio puesto, se colocaba la ropa con la irrupción ocurrida. La "Segunda de Abordo" se puso a chillar como una loca ofendida. Es realmente como se sentía la Comandante Shutterland, pero, a pesar de lo inadecuado de su caracter en estos momentos, la entendía y compartía lo que decía. En un momento dado, mientras se recolocaba el mono de vuelo, tocó la pierna de esta y le comentó por lo bajo:

- Ino, déjalo. Ya están aquí y han cortado el "rollo". La verdad, es que en una situación así la líbido de cualquiera acabaría por los suelos, así que, ya estaba "roto el momento". - Veamos que tienen que decir... Su tono suave solía ser distinto. Incluso lo contrario. Adriana no hablaba casi nunca con tono suave; o era irónico o era tenso, pero esta era la primera vez que la escuchaban hablar así.

Sonó muy raro que el "Cortado el rollo" no incluía un "nos". Es como si no fuera con ella ... o es que se sentía distante, o es que estaba algo avergonzada, y era una forma de "proteger su intimidad" de estos invasores. Aún así, mientras se ponía en pie, miró a Malta y dijo: - Que estoy segura que han aprendido en alguna parte a tocar la puerta y traen algo que tiene mucha prisa por su importancia. ...

Se hacía raro ver a la ex-exploradora hablar así. Era ... como si fuera una danza de una serpiente antes de saltar a moder a su presa e inocularle el icor más venenoso que pudiera destilar.

Termino la entrevista con Kamawaga mucho mas satisfecho que con Barnels, aunque la sonrisa fue exactamente igual.

-Muchas gracias teniente, espero sinceramente que el capitán acepte sus servicios.

Después me dirijo al puente para dar mis conclusiones al capitán, sin los interrogados presentes.

-Señor, después de interrogar a los dos candidatos, como ha podido ver, mi opinión es que la teniente Kamawaga podría ser una valiosa, y parece que leal incorporación a la tripulación. Barnels es harina de otro costal, me parece una persona que no es muy de fiar, no exactamente un peligro, pero si una brecha en la seguridad de la nave y de la misión. Demasiadas dudas y demasiados vínculos sentimentales con su anterior vida que le harían desertar antes o después. La información que puede dar de la nave es bastante irrelevante pero daría detalles que no me gustan. El que se capturado por las fuerzas de seguridad de Pourne es cuestión de tiempo, no parece muy listo. Si bien el que sea capturado podría redundar en que se corra la voz que no somos innecesariamente sangrientos, es un mensaje que ya dejamos claro con el herido que dejaremos libre, lo que puede ser bueno para que las tripulaciones se rindan sin historias raras. Aunque también lo pueden usar como ejemplo de lo que pasa si una nave se rinde sin ordenes de su comandante. Es decir un riesgo innecesario en la nave y fuera de ella. Mi recomendación es su eliminación  y en cualquier caso no admitirle dentro de la tripulación de la nave. Le paso los datos del interrogatorio para que tome su decisión.

EN EL CAMAROTE DE ADRIANA

Malta aguantó los gritos sin inmutarse. Quizás incluso con una leve mueca de comienzo de sonrisa.

- Adrina no es mi superiora, señora – contestó aclarando la cuestión del rango y el camarote en el que se hallaban – y llamé a la puerta. Personalmente no hago distinciones entre compañeros y compañeras. Si desea un trato especial por mi parte por cuestión de su género, puede esperar sentada para no cansarse. – añadió sin humor – Lo que si me enseñaron es que donde tengas la olla no metas la polla, señora. También cuando compartíamos dormitorios aprendimos a cerrar las puertas con pestillo cuando queríamos intimidad, además de dejar una corbata en el pomo para avisar a los compañeros de que necesitaría algo extra de intimidad. – continuó con el mismo tono de charla.

- Lo que también aprendí es a no darme el lote 5 minutos después de acordar una reunión inminente. – hizo una breve pausa - Salvo que quisiera que me cogieran en el acto. – añadió ampliando levemente la sonrisa.

- Así que si hemos terminado con la escenificación, tenemos asuntos que tratar. Podemos continuar aquí o en la cocina, como hasta ahora, donde tendremos más espacio probablemente. ¿Le ha puesto ya Adriana al día sobre el asunto a tratar? – concluyó Malta sin perder la compostura.

EN EL PUENTE DE MANDO

Malta carraspeó al finalizar Pavel.

- Concuerdo con el señor De Bligh en que Barnels sería un riesgo, aunque quizás pudiera haber una tercera vía si utilizamos a su novia como elemento de presión. Podríamos sacarla de Bourne para que Barnels no tenga que regresar a por ella, aunque eso sería igualmente un riesgo innecesario. – informó por su parte.

Renzio escuchó con atención las palabras de Pavel y de Malta. Luego meditó durante unos segundos, claramente incómodo ante la situación.

-Gracias por sus servicios y su opinión, caballeros. Hablaré con Kamawaga para confirmarle que pasará a formar parte de forma inmediata de nuestra tripulación. En cuanto a Barnels, como saben les di a los dos mi palabra de que su vida no correría peligro, y aunque la propuesta alternativa de Malta me parece... interesante, creo que desviaría demasiado nuestra atención y ya estamos en suficientes fuegos. Cuando lleguemos a Drinax, yo personalmente me encargaré de comprarle un pasaje al lugar más lejano que encuentre. Habrá que dar por sentado que tarde o temprano volverá a Pourne, pero creo que no conoce tantas cosas de esta nave como para ser una brecha de seguridad importante. De ahora en adelante, que no salga en ningún momento de su camarote y que no tenga acceso absolutamente a ningún tipo de información, privilegiada o no. 

Inovaz fue a saltar otra vez, y puesto a ella, la piloto intervino, antes de que la ingeniera hicier algo fuera de lugar. 

- Pero el camarote es compartido por ambas.... no solo mio. Sonó sensual, como si invitase al marine a una orgía, cosa que irritó más aún a la Naval Shutterland. Aún asi, Adriana estaba dando una explicación de la razón del enfado de su "vecina". 

Se terminaba de arreglar el mono mientras se ponía en pie y hablaba. - De todas maneras ... el motivo de la visita es ..... alargó las palabras, para que alguien terminase los comentarios, y de paso ahorrarse hacer una pregunta. 

- Mis disculpas a ambas, en ese caso. - se disculpo con protocolo militar ante ambas sin darle mas importancia al tema - Lo tendre presente en el futuro. - empezaba a tener la sospecha de que todo habia sido orquestado por Adriana por a saber que oscuro y lujurioso motivo.
- Como hablamos el motivo es organizar la fiesta. Podemos continuar aqui, en otro lugar o darles algo de tiempo para arreglarse, según sus deseos. - continuo con el mismo tono protocolario de disciplina militar.

La ingeniero miraba con odio a la piloto. Era como si se sintiera traicionada, pero tras las palabras del marine, esta giró la silla del escritorio y la ofreció al interlocutor. Adriana se sentó en el filo de la cama dond estaban hacía un momento ... entretenidas ambas. Por otro lado, la ingeniero ofreció que Pavel se sentara en el filo de la cama, junto a la piloto, y ella misma tomó asiento en el propio escritorio, colgándole lo pies como una niña pequeña.

Era raro. Estaba tomando la ingeniero las costumbres y formas dela piloto, y esta, se estaba transformado en alguien menos "acelerada". Igual se le estaba apagando "la velocidad".

- Continuemos aquí, que el capitán está con la visita y ya que estamos ... Abrió el cajón de su "silla" y sacó unas barritas eneergéticas de varios tipos. Había de fresa, de chocolate y una de cereales, totalizando una docena ... o así; ofreciendo a sus visitantes y lanzándole una de chocolate a la piloto. Se la estampó en el pecho, y a Adriana le costó evitar que rebotase y llegara al suelo. Manoteó intentando cazarla, haciendola saltar y saltar, hasta en 4 ocasiones, hasta que se hizo con el control del "vuelo". La abrió con timidez y le dio un codazo amistoso a Pavel, cuando se sentara, como preguntándole cual quería.

Kamawaga y Gormanidi

Decidido al fin el destino de los dos tripulantes amotinados de la Ikurdagur, el Capitán se entrevistó con la Teniente Kamawaga, informándole de que la ofrecían un puesto en la tripulación.

La Teniente tenía una propuesta para Renzio. - Le agradezco el ofrecimiento y la confianza, Capitán Gormanidi. Pido permiso para hablar con toda franqueza. - La Teniente esperó a que el Capitán se lo otorgara antes de hablar (*). - Capitán, he sido la segunda oficial al mando de la Ikurdagur, y no tengo deseos de ocupar un puesto inferior. Entiendo que tiene su cadena de mando bien establecida y que no quiere prescindir de su Oficial Ejecutivo. No sé qué puesto piensa que debo ocupar en su nave pero, si puedo hacer mi propia solicitud... le sugiero que me dé el mando de la Ikurdagur. - La propuesta de Kamawaga era audaz, y la oficial la presentó con seriedad marcial. Era evidente que había pensado en ello, probablemente no mucho después de su amotinamiento. - Puedo establecer un pago a su nave de parte del botín de las presas que realicemos, coordinar operaciones o ponerme a su servicio en lo que desee. Si dispone de una patente de corso, como sospecho, estoy dispuesta a firmarla. 

La Teniente se quedó esperando la contestación de Renzio, sin perder la postura marcial.

Pavel contemplo la tragicomedia sin mover un musculo, lo que había visto no le interesaba gran cosa ni tampoco se sentía nada incomodo por la irrupción.

-Cosas de los largos periodos navales juntos-pensó sin mucho interés.

Así que ni pidió perdón ni creía que tuviera que hacerlo en modo alguno. Se sentó, recibió el amistoso codazo de manera natural con una leve sonrisa y cogió una de las barritas al azar, que acerco pero no abrió.

.Gracias. Y ahora vayamos al tema que nos ocupa, así podremos tener las cosas claras para cuando lleguemos a Drinax. La idea es darnos toda la prisa que podamos para partir hacia nuestra misión principal. Seria bueno recapitular para ver con que recursos económicos que contamos. Después esbozamos de nuevo el plan y repartimos trabajo. Después cada uno podrá volver a lo suyo...