Partida Rol por web

Dios mio... ¿Que les estará pasando?-Kammy toma su mochila y se larga inmediatamente- Lo siento mamá... esto es un trabajo para mi.

Gible vamonos!-decía Kammy.

Mientras corrían hacia el lugar la niña le explicaba a su gible.

No sé que estará pasando... pero... cuando lleguemos pequeña, ambas, recordaremos nuestros dias de escenario... - Kammy corría hacia el lugar

Sales corriendo junto con Gible. Tu mama no dice nada, pero se queda muy preocupada por las noticias. Te dirijes a Ruta 30 camino a Ciudad Malva. La pequeña dragon va al ritmo que tu, a veces haciendo pequeñas humareadas de tierra, esta muy contenta, y hasta pareciera que va danzando por el camino.

Vamos Gible apresurate... esto se esta poniendo interesante, es nuestra primera aventura... quiero hacerlo bien... Cantar para esos pokemon y ponerlos dominados. -Decía Kammy algo entusiasmada mientras corría...

Se te ve en buena forma... eso es bueno, pues tendrás que reservarlas.
 

Mientras continuas corriendo por el camino alegremente junto a Gible en una hermoasa mañana calida, con apenas algunas nubes, sorprendentemente comienzas a sentir una brisa fria que sopla sin direccion alguna. Disminuyes la marcha, y Gible que seguia contenta, sigue de largo, hasta frenar sin entender porque te detienes. La brisa cada vez se hace mas helada. Inconcientemente te llevas la manos a los antebrazos y comienzas a refregarte para producir calor. Miras a todos lados para saber de donde proviene tal gelido aire, y notas, con horror, que ni los arboles ni las flores se mueven, a pesar de que tu cabello cada vez toma mayor velocidad por causa de este extraño fenomeno polar. El frio ya resulta insoportable. Tus dientes comienzan a titiritear. Gible te procupada. Se acerca, con miedo, hacia ti. Ya no puedes controlarte. Tu cuerpo tiembla de arriba a abajo, como si te hubiese hechado un balde de agua fria en un dia de heladas. Sientes que tus piernas te fallan y caes de rodillas. El pequeño Pokemon Dragon, te coje de las manos, mirando a todos lados, sin poder decir nada, como implorando ayuda. Antes que puedas hacer algo, tus ojos, contra tu voluntad se cierran y pierdes la conciencia.

Kammy va cayendo lentamente en un sueño pesado...

Gi... Gi... ble.- Decía en voz muy baja.

La niña había caido en el suelo, levantando una polvareda de tierra haciendo que Gible se preocupara por ella.

Kammy estaba sumida en un sueño muy profundo. Dentro de él... ella comenzaba a soñar...
 

Kammy despierta en un campo lleno de flores

La niña se vé feliz entre tanta vegetacion silvestre... rosas, rosas y mas rosas... sus petalos volaban al ritmo de la brisa que les daba color, forma y el aroma las hacía bailar alrededor de ella. Esto es perfecto, creo que es la oportunidad perfecta...

Kammy comenzó a correr, mientras de la nada aparecían pokemon hierba... Glooms, bellosoms, chikoritas, vileplumes, y tantos otros... Me siento feliz... - Su sonrisa se dibujó en su cara mientras comenzó a alzar la voz - Que el show comience

Kammy comenzó a cantar uno de los temas de su disco...

Mientras lo hacía los pokemon bailaban alrededor de ella, parecía que su canción trasmitia a los pkm una sensacion de felicidad. Hasta ella se sentía bien.

Los bellosoms saltaban al ritmo que usaban sus danza de petalos, los vileplumes y los victrebells usaban sus tormentas de hojas para iluminar el cielo de verde...

Kammy estaba feliz en aquel sueño... en aquel lugar... un sueño que no se sabía si era oscuro, producido por sus deseos de libertad o una libertad que sus sueños reflejaban... nadie lo sabía... nadie...

Me despierto en un lugar desconocido aún con frío, lo último que recuerdo es que estaba en el helicóptero con Sean y el de las gafas y que me desmaye, no se que hago en este lugar, me incorporo y miro a mi alrededor pensando que Sean debería de andar cerca, pero en vez de a él, veo a una preciosa joven cantando y bailando con pokemons tipo planta, pero de repente todo empieza a cambiar en el ambiente, dándose una serie de situaciones rarísimas, me voy a acercar a la joven, pero una música  y un canto comienzan a sonar, también comienza a soplar un fuerte viento, todo es muy raro, el viento parece llevarme, pero mi pelo casi ni se mueve, el miedo se apodera de mi, y lo único que se me ocurre es que esto lo este provocando un pokemon de la joven de alguna forma, así que le grito con todas mis fuerzas a la vez que intento acercarme a ella, -señorita, ¿usted sabe que está pasando? Mientras me intento acercar a ella miro a mi alrededor a ver si veo algo que no haya sido capaz de percibir antes.

Poco a poco el viento se fue llevando las alegrias de Kammy. Todo aquel lugar de sueño perfecto se fue convirtiendo en cenizas; su mundo de canto se frenó con una desafinación.

Sus ojos se sorprendieron, se atenuaron a girar y ver aquel desolador lugar.

Esta sensación... Ya... la he tenido... Este aire desolador, sombrio... calido, amable... abrazador y reconfortante.

Kammy se sentía pesada, le costaba moverse... pero no era a causa de aquel sonido... era porque tenía esa extraña sensación de dejabu. Tan solo un ruido no muy lejos la despertó.

Cita:

Alejate... tu cantar ha destrozado mi melodia y ha hecho desaparecer mis pokemon. Presentate ahora, sino vete... Vete... VETEEEE

Kammy estaba poniendose en guardia, atenta a él, atenta al lugar... el aire que la rodeaba le parecía familiar. ¡Pero! ¿De donde?

Asustada como nunca, aun con frio y molesta e irritada por esa horrible musica que suena, te escandalizas aun mas con el muchacho que te llama del otro lado del risco. Que se vaya! Que todo pare! Quieres volver a ese paraiso de flores. Quieres volver con Gible. Mientras le gritas al muchacho, antes tus palabra el fuerte viente que azota de cerca, aunque a ti no te hace nada, parece vibrar junto con tus gritos. Por un instante jurarias haber visto unas enormes y blancas alas que aleteaban junto a ti. Aunque no se parecian en lo absolupto a alas... eran mas bien como nubes blancas, o tal vez celestes.

La señorita me deja un poco perplejo con su contestación y no me queda otra que contestarle, -Hola, soy Mike y yo no tengo nada que ver con lo que está ocurriendo. Le grito para que pueda oírme.

No sé que ocurre... Dimelo tú...

Kammy habia podido ver alguna especie de extraño resplandor... pero creyó en sus teorias. Buen truco de magia, pero no logra sorprenderme. Ahora dejate de payasadas y devuelveme a mi realidad. Decía Kammy muy enfadada.

Sin que él responda Kammy comenzó a caminar en contrario a él sin decir una palabra, alejandose con una cara muy larga, enojada, gruñona. Kammy siguió caminando entre la densa oscuridad y el tenbroso lugar... ¿Hacia donde? Nadie sabía... siquiera ella.

Que contestaciones más raras da esta chica, está medio loca, de que realidad me habla. Pienso ante su extraña contestación.

Al ver que se aleja en dirección contraria a mi me decido a intentar saltar al otro lado, con tal de no quedarme solo en ese tenebroso lugar cualquier cosa.

Consigo llegar al otro lado y le digo con el corazón a 100 por hora. -Perdona, ¿sabes dónde estamos? Por que lo que ocurre ya veo que no lo sabes, pero yo tampoco tengo nada que ver, no se de que realidad me hablas. Por cierto, yo te dije mi nombre, por lo menos podías decirme el tuyo. Creo que es mejor que vayamos juntos, porque esto me aterroriza un poco.

Es un idiota, no reconoce a una estrella cuando la vé.- Iba pensando mientras caminaba alejandome de èl. Kammy. Ese es mi nombre. Ahora si me estas siguiendo, mantente callado. Intento pensar.

Kammy se veía confundida, dirigiendose hacia algun lugar vaya a saber donde.

Kammy esta enfadada. Enfadada y confundida. Solo queria salir de ese sitio. O seguir soñando pero un sueño agradable, donde ella pudiera cantar y bailar como una estrella. Se despidio del muchacho y dando la vuelta, se encamino a lo que a distancia parecia una especie de bosque seco. En ese momento, siente que detras suyo hay algo o alguien. Era Mike. De alguna manera, debio haber saltado el risco.

Todo me parece cada vez más tenebroso, y encima no oigo bien, no entiendo nada, todo es muy raro.

Kammy va un poco delante de mi, no parece que le importe lo más mínimo mi presencia, ni para bien ni para mal. Según nos acercamos al bosque, de repente veo un resplandor luminoso, que viene acompañado de una extraña voz.

Me paro en seco, no doy ni un paso más, hago caso a la voz, pero no me voy a ir sin saber quien habla y de que habla, así que grito esperando que quien ha hablado me oiga. ¿Quién eres? ¿De qué mundo estas hablando? Tras gritar miro a Kammy para ver como está y como reacciona ante esto.

- y..... y ustedes quienes son? donde esta Luz?! - Pregunte alzando la voz, el miedo parecia recorrer mi cuerpo como una dosis de adrenalina pura.....