Partida Rol por web

-Paco, don tuch... -Demasiao tarde... El Paco Pepe abre aquello y el moco verde se pone to loco a romper cosas. Pos casi mejor, asin no tenemos que romper na nusotros...-Oh, mai god... Están esperimentando con pobres bichos en piligro destinsión -Dice el guiri señalando al bicho ese que se paresía al hijo del Caramierda. -Yo pa mi questo e un bisfut... Po na, amos a liberarlo pa que vuelva a su casa. Esto no se pué pirmití. -Y ni corto ni perezoso se lía a darle cacharrazos al tanque de líquido verde ese con un estintor que había por ahí tirao.

Ahora el guiri se pone a darle golpes al cacharro aquel pa liberal al bicho feo.

- ¿!Pero que haces desgraciao!? !Las manos quietas! - le grito más cabreada que una mona al guiri. Me estaban tocando el choto a dos manos y no sabían de que manera, tanto toquetear y tanta tontería- !Que bisfú ni que mierda! !Suelta eso ahora mismo o teslomo a hostias!

El guiri se queda parao después d'aberle pegao dos cacharrazos wenos al tanque aquel con el pringue verde y se queda mirando a la Pitones con cara bobo. Porque la verdá es que la Pitones daba las hostias como panes, to sea dicho. Que una vé que andaba persiguiendo un gamusino se le metió entre las sábanas tendías y se las manchó de barro, y la somanta palos que le metió l'estuvo doliendo una semana... aunque iguás la Pitones se pasó un poco, porque lo de arrearle con la vara fresno q'usaba pa tener a los pollos controlaos lo mesmo fue de más...

-Yu don andestán, Cipriana -le ice asin como con cara de gatico degollao, como pa darle penica- Endeseguro queste pobre animalico está paeciendo. Don yu si? Tinemos que soltarlo pa que vaya con su mamá.

- !Shh! !Chitón! !Testás quieto tedicho! - y le amenacé con un dedo, el siguiente paso era hostiar como si no hubiera un mañana. Pues vaya con el guiri...- Questo es mu raro y mejor no tocar na sin saber...

A lo que se ve, la fábrica estaba siendo usada pa fabricar cosas que no eran las que habían decalarao en su día que iban a fabricar. Y eso estaba mal y, a la vez, estaba bien. Estaba mal porque habían mentío y eso, además de estar mal es mu feo. Y estaba bien porque sinificaba que les iba a poner una multa cojonuda por mentirosos y por hacer cosas que no se podían hacer en el pueblo, que seguro que too aquello era radioaditivo como lo de las centrales nuquelares.

Estaba todo alegre pensando en los cuartos que iba a ganar el ayuntamiento que no le hice caso a la Pitones cuando me dijo lo de la casa en Cuenca por enésima vez. Pero si que me enteré cuando el guiri intento abrir uno de aquellos chismes con la ayuda de un extintor. 

- ¡Tate quieto desgraciao! ¿Quesque quies que volemos toos por los aires o algo asín?- Le dije sujetándolo por los hombros pa que no diera más hostias con el extintor. - ¿Ahora ya podemos mandar venir al Laureano, o hace falta algo más pa que la benemérita se haga cargo del sitio este?¿Eh? – Le casqué a la Cipriana que ahora parecía que le había venío el juicio al ver que su Paco iba tocar aquella cosa verde.

Al Paco Pepe le entró la risa floja con el mocarro aquel, no hacía más que jugar con aquello y meneálo pa un lao y pa otro con su risa de borracho. El caso que con una bocaná de la boca del Paco Pepe, a aquella cosa pareció darle un apechusque. Es normal, si no'stabas acostumbrao que por los vapores del aliento del Paco Pepe te diera un chungo. Como aquella vez que minieron unos forasteros y le pidieron indicaciones pa ir a Mojuéllamos porque s'habían perdío. Y s'encontraron al Paco Pepe durmiendo la mona en el banco de la plaza al sol. Y antes s'había cascao una botella d'Anís del mono to él solo. Y al abocicáse a la ventanilla del coche pa dicíles por ande era, la pareja de forasteros se quedó asín vaída. Y el coche se les caló. Y tuvieron que llamar al'ambulatorio y to. 

El caso... Que dicía... ¡Ah! ¡Los vapores de disitilería del Paco Pepe! Pos eso, que al mocarro aquel le dió un apechusque. Que se quedó to tieso en la mano del Paco Pepe y no se meneaba más. Amos, que l'había roto. 

El guiri mientras, en su mundo, quiría soltar al doble del Caramierda. Se lió a golpes con el tanque aquel y lo agrietó, le faltaba un ná pa rompése del to. Pero la Pitones le amenazó con una hostia a cuello vuelto y eso hace que uno si piense si es lo mejor tentar a la suerte, que lo mismo no trae cuenta.

El Paco Pepe se puse asín como tristón con su mocarro, pero no tardó en subíle la mala leche cuando el alcarde dijo de llamar a la benemérita. 

-¿A quién vas a llamar tú?- dijo encarándose al alcalde. -Ira que ya hemos entrao y esto es amoramiento de allanada d'esa... Lo c'hay c'hacer es jodéles to el chiringuito. ¡Sigue con los golpes Yosua!- animaba al guiri, mientras él tiraba un montón de cacharricos de cristal con potingues contra el suelo. Al mezclarse tos aquellos líquidos, salió una humareda verde y algo pareció espesáse dentro.

-Güat de fak??? -El guiri se queda a cuadros cuando la cosa esa pone a moversen d'aquí p'alla mojándolo tó de mocos verdes. Entre los mocos de abajo y los mocos de arriba paecía aquello la tomatisna esa del buñuel o como se iga, pero to en verde. Y el Yosua to tenso, por una parte con ganas d'acerle caso al Paco Pepe, porque tol mundo sabe que de los locos y los niños e la verdá de dios... ¿o era de los borrachos? Pos eso, que una miajica de razón si que tinia, y por otra parte la mano abierta de la Pitones, que dama más miedo quel bicho verde ese. -Oquei, les du it... I min... Quisir... Vamo a hacerlo sivisiladamente... No rompemos mas ná. Sólo lo desenchufamos tó pa pará las maquinas y que dejen de tirá más porquería al río. Soquei?

Evaristo esta flipando ma que  su primo "er lumbreras" cuando le dio por coge una seta, sin mira si era veninosa ni na y comersela, despué de eso se hizo cura porque jura que le hablo la virgen del camino seco, aunque el resto de vecino lo que vieron era como "er lumbrera" se ponía a rezarle a una de sus cabras.

-¿Pero esto que e lo que e?, si pareje una de esa cosa con las que juegan los niños- Dice cuando ve al moco verde moviendose- ¿Y esta mierda e lo que esta echando al rio?, como los pille los muelo a palo que no los van a reconoce ni sus madre. Yo estoy con el Paco Pepe, de llama al Laureano nada, que ese con lo tonto que esta con lo de se guardia civi, lo mismo nos hecha la culpa de esto a nosotros y to.

- Ah, pues mira. Por fin una idea razonable. Contesto al guiri. 

- Tu y yo ya hablaremos después. - Le amenazo al Paco Pepe asin con el dedo.

Me doy la vuelta y empiezo a desenchufar to lo que voy encontrando que tenga un enchufe, con cuidao de no tocar  lo que no debo que aluego vienen los disgustos. Como el Ramiro, que un día agarró un cable desos de alta tinsión y le dió una descarga que pecía que estaba echando un baile desos que hacen ahora los zagales en los guateques, que no se tocan pa bailar ni na. Vaya mierda bailes... donde esté un buen pasodoble ahí agarrando a la moza por la cintura bien apretá. ¡Ay! los zagales modernos.

Entre el guiri que agrieta el tanque ese y mi Paco Pepe tirando botecicos, me acaban de tocal tol choto y le suelto una colleja  mi mario. Asín a mano abierta en toa la nuca, vamos una colleja de toa la vida.

- ¿!Casecho desgraciao!? !Mira casecho! !Menuda boria! !Ahora tol humo! !Esto será tosico! - y me tapo la nariz pa no respirar aquel humo tan feo que habia salio del mezclar to - Vamonos de aquín ya. !A tomá por culo! Lo hablamos en la puerta y yasta.

El Paco Pepe se llevo una tollina a mano abierta qu'hizo que se comiera la mesa y tirara más botecicos, ahora la boria verde en la sala. El bicho c'había salío de la boria anterior que había hecho el Paco Pepe pegó un chillío y se fue, atravesando la pared. Dejó unos mocarros verdes como regalo, ende luego se veía que la nueva nube era mala. Aquello dibía ser mu tusico, pero el guiri y el alcalde tinían un cometío c'hacher antes de íse, los dos cerraron tos los grifos y apagaron tos los enchufes c'había. Allí s'apagaron toas las lucecicas c'había dentro, tos los aparatejos y to eso.

Como'l sitio no tinía ni un ventanuco se quedaron tos a escuras, estaba más escuro qu'el bigote de la tía Benita la Bocaespuerta. Y si no se llamaba la Benita la Barbas era por un hecho mu sencillo, cuando aquello mujer se ponía a hablar, t'olvidabas de su barba y t'empezabas a acordar de su puta madre y del dios benditao. Indios que tía más cansína, asín acentuáo, mu cansinisma y ende qu'el Mariano s'había disaparecío, no había quien le rivalizase. Que dormía hasta a las piedras la jodía. Que una vez pilló al alcarde en plena plaza ahora con las obras y sin una sombrica ni na y casi le da una insiolación. ¡Ay madre que mujer!

Por ande iba... Ah, sí, que veían menos c'un negro en una noche sin luna. Lo único que se veía era alrededor del tanque qu'el guiri casi se carga, c'había como un halo verde flur... fluro... ¡fosforito! El bicho cabezón que se parecía al hijo del caramierda brillaba, to mu raro. 

Y de la boria aquello salió un bicho verde y veo que se fue cagando leches y hasta atravesó la pared. Eso normal lo era. A mi mabia dao miedo y to. Mu feo.

- !La virgen! !Esto mu católico no es! !Vamunós de aqui!

Eso eran cosas de pinicula como las que hacian en la antena 3 por las tardes los fines de semana. Entre el pasmo, viene el apagón.

- !La madre c`osparió! - nos habían dejao más a oscuras que el sobaco de un grillo- !Enchufar algo pa que bajemos por lo menos, copón! Porque hay que bajá ya, aquin pasan cosas mu raras, cago en todo.

En estos momento no me preocupaba mi Paco Pepe, porque ya le había dao tollinas más fuertes y siempre había salio bien. Vamos, que se levantaba como si no hubiera pasao na.

- ¿Naide tiene un mechero? Pa ir haciendo camino o algo...O el tanque ese to raro pué valer.

-Ay la virgen... Pos mi no saber, no tener un chusquero ni ná -lo del "chusquero" se lo había oío al cansaliebres, y como que no fumaba, ni tampoco se juntaba mucho con fumadores (ni con la gente, to sea dicho), pues que se pensaba que tos los mecheros se llamaban asín- Amo a vé si el tanqueste se pué mover. Y si no, pos al menos por aquí vemos q'acemos. A lo mejor poemos sacar al bicho pa que nos enseñe el camino pa salir. -Y dicho esto se quea mirando a la Cipriana, porque cansino, cuando quería, podía ser un rato cansino. A ver si a base de repetirlo, pues al final a la Cipriana se l'ablandaba el corazón y le dejaba sacar al bicho del bote, porque no se quedaba mu contento dejándolo ahí... ¿Y si s'estaba ahogando? Mira tú, pobrecico... como los gatetes que tiró el Mariano (quenpazdescanse... si es que está muerto) una vez al río porque naide los quería, y los sacó el Yosua y endeluego al Mariano lo puso tol pueblo de vuelta y media y se pegaban de tortas por los gatetes.

Estabamos oscuras, pero puse cara de mala hostia.

- ¿Es que no habís visto lo ca salio del humo? ¡Estais atontaos tos! - ladro - !Como sueltes al bicho del bote te meto una tollina que tesmorro contra el suelo desgraciao! !A salir de aqui despacico, me cago en la mula coja!

Si andar, miro un poco alrededor para ver si los ojos se me acostumbran a la luz y se puede hacer algo sin luz fosforita. Me estaban tocando el choto a dos manos con tanta tontería. !Aquí habia bichos y estaban pensando en plan greenpis!

Con sus convecino apagando to lo que encuentran, Evaristo se queda mirando a ver que pasa, por si acaso prefiere no toca na, no vaya a se que se vaya a queda pegao en argun lao que el sitio tiene pinta de no esta muy bien cuidao. De pronto er bicho verde se da a la fuga ma rapido que un politico cuando le dan un sobre.

-La ostia puta, pero ¿Vosotro habei visto al bicho ese que ha roto la pare sin tene hueso ni na?, pero eso de que esta hecho.

Acto seguido la luz se va, aunque norma despue de habe estao tocando to lo electrico tocable que san encontrao por el camino. Aquello estaba mas oscuro que la boca un lobo.

-Mare mia la que estaís liando. Tu Yosua deja ar bicho onde esta que como sea tozico lo mismo no sale una cosa mala como una oreja en el sobaco, si quiere harle boquetito a la tapa si quiere que er bicho tengo aire, pero amo creo que a esa cosa no le hace falta ni respirar. Yo mientra voy a ver si golisqueo alguna forma de encende aunque sea una lu.

El guiri, que va mu dentendío con eso de que vié duna capitas etranjera con mucha tinología, ni corto ni perezoso al grito de "Ai nou, dis is el enchufe" coge dos cables pelaos c'abía por el suelo y los junta con otros dos c'abía por ahí al lao, sin darsen cuenta de questaba to pringao de moco verde dese. Totas, que al juntar los cables aquello pegó un petardazo que ni la mascletá de Valencia. Quel Urelio "el Elefante" se fue a verla un día destos y del ruido qu'acía aquello se quedó to sordo, y claro, no veas tu luego la risa con la trompetilla y ese peazo orejas que dios le dio...

Ná, pos eso, que con el trueno vino una esplosión de luz d'un segundo. Y al irsen la luz el guiri estaba ahí to negro d'ollín y con el pelo tieso que paecía un nomo de la suerte desos de colores que tenían los pelos to parriba que le gustaban a las niñas del pueblo.

-Dis... is... not... el... cable... Au... pupa...

Mientras Evaristo intenta averiguar que demonios hay que enchufa, le lega un olo a pelo quemao que tira pa tras y al volverse efectivamente el guiri estaba haciendo de la suya, claro norma con esos enchufe tan raro que tienen por alli de tres puntas, despue vienen aqui y no saben como funciona los normale

-Yosua ten cuidao que ta va a mata y como tengamo que espera a que venga er medico, nos da tiempo a monta una iglesia nueva

Acto seguido sigue a lo suyo de intentar determinar que hay que enchufa