Partida Rol por web

Señalo donde antes habia estado el gigante, en su lugar solo habia nieve y metal arrancado. Alli no habia nadie. ¿En verdad habia visto a Samuel? La ultima pregunta hizo que mirara a William extrañada.

-No se, no se que paso- miraba a su alrededor, deseando que todo eso fuera un sueño-. Siempre hay tormentas... Y las cosas...las cosas estaban en la parte de atras...mmm hay muchas toallas alli.

Señalo un compartimiento que estaba a pocos metros de ellos, no parecia estar en mal estado y parecia lleno. Tambien ven aparecer a Bob, quien llega del lado de la cabina, presiona un boton en la pared y la caja fuerte se hace presente...

La caja fuerte tiene dos ranuras, una que parece ser la de una tarjeta y la otra es la de una llave. Dos luces rojas titilan alegremente. Es la unica muestra de electricidad de todo el avion.

- Bien tendremos que conseguir algo para taparnos y bien Bob has descubierto la caja fuerte podremos hacernos con nuestras cosas, espero que no se haya estropeado nada. Es de suma importancia que sepan que tendremos a un gran amigo Samuel que nos querra solo matarnos despacio, asi que tenemos que tener cuidado.

Miro a Jessica recordando que en mi maleta había metido bastante ropa de abrigo y otra chaqueta parecida a la que llevaba puesta.

-Jessica, ¿dónde iban las maletas?, tengo ropa de abrigo dentro de la mía- digo dirigiéndome a la azafata.

Unos ruidos llaman su atencion, de repente un asiento caido de costado se voltea y debajo de el sale una figura pequeña y delgada, desgarbada. Los mira con un solo ojo, pues el otro esta entrecerrado y con sangre. Jarper no entiende que es lo que ha pasado, de hecho parece que ni siquiera sabe quienes son.

Taylor, muchacho, ven aquí, tengo una golosina para tí, y por tu...conversación con el chuloputas del sombrero deduzco que tienes lo que él le quitó al calvo, ergo puedes abrir la caja de pandora. Quería mi arma. No por nada en especial, sino porque la he traido para algo, y es muy probable que acabe cumpliendo su cometido. No iba a usar una vulgar navaja de sabe Dios quién, ni la pistola de un hippie arrogante. Las armas de los demás, que se las quedase Taylor. 

Me sobresalté al ver el asiento moverse, al ver salir de ese entresijo al viejo Jarper ,fui corriendo a ayudarle -¿Se encuentra bien señor?- le digo mientras le ayudo a incorporarse, -¿Puede caminar?-.

Ese hombre me había ayudado desenmascarando a Vladimir y no parecía mala persona, de hecho me alegraba saber que el abogado que iba a leer el testamento de Nallop siguiera con vida.

- Señor espero que se encuentre bien... Digo este suceso ha hecho que se diera vuelta todo lo que queriamos hacer, llegar a un velatorio tranquilos , ver al viejo y luego de unos momentos saber su testamento... Pero ahora tendremos que pasar esta nieve..

Jarper rio histericamente unos segundos, era una patetica mezcla de risa con solloso, pero no podia controlarse, se apoyo un segundo en Liz hasta poder ponerse de pie por su propia voluntad.

-No- dijo con una sonrisa triste-. No estoy para nada bien- dio un par de pasos vacilantes y sus ojos fueron hacia afuera. Olia a orines, pero fingio no darse cuenta que era el quien olia asi-. ¿Donde estamos?

El viejo olía a rayos, pero fingí no darme cuenta escondiendo la mueca que me estaba viniendo a la cara. -Ni idea- , al pronunciar esas palabras recuerdo que tenía mi teléfono en el bolso.

A continuación dejo al viejo apoyado a un hierro que había por ahí y me dirijo corriendo hacia mi asiento, buscando mi bolso de manos.

Acepto el trago del hombre con una sonrisa. -Es lo que busco.- Le digo con una media sonrisa tras calentar mi organismo con el lingotazo de alcohol, cosa que me viene de perlas, pues hace un frio de cojones. -Habrá que ir a por ropa de abrigo tio....-

El tipo toca la pared y sale la caja fuerte, y me dice que la abra. -Tio, como trates de matarme te mato, confiaré en ti, pero no te creas que mucho, vale?- Le digo yendo a la caja que me muestra. -Nuestra prioridad es el maricón del sombrero, y si Sam sigue vivo, ése. Y hay que averiguar una cosita de las pibas....- Le informo.

La caja fuerte tiene dos ranuras, una que parece ser la de una tarjeta y la otra es la de una llave. Dos luces rojas titilan alegremente. Es la unica muestra de electricidad de todo el avion.

Cuando llego al sector dónde estaba sentada empiezo a buscar por los alrededores, rezando para que mi bolso siga por ahí, tras revisar cada centímetro sin suerte, lo veo enganchado bajo el asiento dónde se suponía iba sentado Birdman, al cual no se lo veía por ahí -Realmente extraño-, pienso asustada, quedándome un momento paralizada.

Cojo aire y avanzo hacía allí y recupero mi preciado bolso de un tirón y me dispongo a volver junto a William, Jessica y Jarper antes que nada.

Salgo corriendo hacia allí y al verlos digo -Tengo un teléfono aquí dentro, podría intentar llamar y pedir ayuda-.

Abro mi bolso y rebusco hasta dar con el escurridizo móvil.

El piloto, creo recordar, tiene la otra llave, se la busco en los pantalones....

-Samuel no nos matara...Al menos si tengo mi pistola en las manos. ¿Hay algun sistema de calefaccion en la nave? Podriamos tapar el agujero y utilizar la calefacción para aguantar un rato. De todas maneras, hay que revisar el avión. Puede que la visión de Samsagaz haya sido una alucinación, y simplemente este muerto o malherido.

Buscas entre sus pertenencias y solo encuentras unos cigarrilos arrugados, un encendedor Zipo, su billetera, un preservativo y algo de dinero. Nada mas interesante. No hay llave mas alla de las de su propia casa. Te aseguras de verificar tambien la ropa del copiloto, pero es casi lo mismo solo que sin encendedor.

Liz saca su telefono y la luz del mismo es todo un alivio para ustedes. Pero su rostro desvarata sus esperanzas. Levanta el aparato y lo mueve en diferentes direcciones. No tiene señal..

¿Para qué iba a querer matarte?-le digo-No he matado a nadie en mi vida y no voy a empezar ahora, así que me importa una mierda si confias en mí o no. De todas formas estoy de acuerdo en que hay que vigilar a esos dos. Y sobre las zorras, la zorra paliducha parecía muy interesada en echar mierda al del sombrero y defender a la azafata, casualmente cuando antes estuvo hablando con ella. Esto me interesa. Lo único que me gustaba del trabajo de abogado era la ocasional labor de detective que había que realizar.

Le dejo espacio para que abra la caja -Ábrela, quédate con las armas de los demás si quieres, pero deja que coja la mía ¿vale?- notando el preocupante frío que empieza a envolverme digo Y date prisa, necesito buscar algún tipo de abrigo, yo no he traido equipaje, pero supongo que podré encontrar algo entre el equipaje de los otros.