Partida Rol por web

- Naturalmente, señor superordenador, como usted ordene. -Mou suspiró aliviado al conocer la sentencia sobre el color de su uniforme- No se preocupe, ni un lavado más, no señor. Mou estaba dispuesto a sacrificar la elegancia de su rojo bermellón por la seguridad de un rojo más clásico, así que decidió que en cuanto pudiese volvería a su casa a por un traje de la temporada pasada.

Ahora se centró en observar cómo sus compañeros se afanaban en cumplir las órdenes. Bueno, de hecho, a uno de ellos le había dado por filosofar en lugar de hacer lo que le habían mandado, así que Mou se acercó al cuerpo del Paqui, le sacudió un par de bofetones tratando de reanimarlo y comenzó a medirle, así a ojo, las constantes vitales.

Al ver actuar a Danit-R casi se le salta el ojo de la pantalla al ordenador - ¡A ti mismo no, pedazo de alcornoque! - pero luego se tranquilizó al ver como Mou-R hacía lo correcto - menos mal que aún tengo a hay gente fiel y digna

Espera unos segundos - ¿Y bien? ¿Cómo están de constantes?

Pero en esto ocurre unos echos asombrosos, de pronto Brani-R despierta, toma las manos de Garga-R y hay una especie de forcejeo y ahora es visible a todos que este, Garga-R tiene el pistolaser de Brani-R en su mano

- ¡Traición! ¡Mil veces traición! ¡Pero que sucede aquí! ¡Que acudan inmediatamente dos RoboGuardias! - Aunque parecía ser que el ordenador no se había enterado exactamente que había sucedido.

- ¡Brani-R! ¡Graga-R! Van a ser escoltados por dos roboguardias a confesionarios separados para ser interrogados ¡Si hay algún traidor entre vosotros será ejecutado! - Y antes de que se le olvidara - Garga-R devuélvale el arma a su propietario, un MediRobot está de camino también para atender a Paqui-R

- De inmediato, queridísimo Ordenador, pero... ¿Cómo quieres que te haga llegar el pistoláser, oh dueño y señor del Complejo Alfa? ¿Quizá sería conveniente que se lo entregue a un roboguardia?

Por cierto, una vez analizadas sus constantes vitales, puedo afirmar con toda rotundidad que Brani-R está en un excelente estado de salud ¡Grandiosa la nutritiva alimentación del Complejo Alfa que nos mantiene a todos sanos, obedientes y en forma!

Brani-R se pone de pie, se limpia las particulas de suciedad que sin duda le han caido desde el esclarecedor Garga-R, y espera con las manos cruzadas en la espalda a que llegue el roboguardia para ir con él al confesionario.

-Lo siento oh gran ordenador, me he equivocado de acción, ya me autocastigo yo, no es necesario que pierda su grandioso tiempo.

Me doy unos azotes en el culo.

Espero a que vengan los roboguardias con gran interés y admiración, igual si le pido al gran pc que pueda examinarlos, me deja.

Por cierto, aun no han traido comida, eso es que el gran ordenador quiere que estemos a dieta y seamos lo mas esbeltos posibles para el.

- Y aquí el compañero también tiene las constantes en orden, pulso normal y respiración regular. Pero no reacciona ante el estímulo -Mou le arreó un par de bofetones más para demostrarlo.- Tiene razón, señor superordenador, será mejor que le vea un mediRobot por si las moscas.

Mou se quedó junto al cuerpo inerte de Paqui-R, esperando la llegada del sanitario y delos roboguardas encargados de escoltar a los dos supuestos traidores.

- Si, déle el pistolaser al roboguardia… - la voz del ordenador parecía tranquilizarse

El ordenador no hace referencia a Danit-R parece mostrarse más bien impaciente por la llegada de los RoboGuardias que no tardan en llegar, se abren las puertas  y un pequeño robot médico pasa primero y casi sin frenar saca una aguja y se la clava en el cuello a Caqui-R como si se tratara de una estocada, eso debía de doler…

- Roboguardias, escolten a Brani-R y Garga-R a sendos confesionarios, allí van a ser interrogados, que uno tome el PistoLaser que tiene en la mano Garga-R y se lo devuelva a Brani-R después del interrogatorio si no es un traidor.

Los roboguardias esperan a que los “acusados” les sigan sin causar problemas, hasta un confesionaro por pasillos distintos, Paqui-R se comienza a mover...

Garga-R entrega el pistoláser al guardia más cercano y se dirige al confesionario radiante de felicidad.

- ¡Qué bien! ¡Una nueva oportunidad para demostrar que no soy un traidor!
¡Yupiiiiii!

Comienzas a sentir algo, lo primero un agudo dolor en el cuello, tienes una jeringa clavada en el cuello de un MediRobot que te está atendiendo.

Aun estas aturdido pero puedes comenzar a hablar, estas en la misma sala, el ordenador en la pantalla gigante, están aqui tus otros compañeros y dos Roboguardias, parece ser que Brani-R y Garga-R van a ser escoltados hasta algún sitio fuera de aquí.