Partida Rol por web

 Me cago en... La jodida puerta es una alarma que grita donde está el grupo. - Joder, ¡Joder! Daniela, acerca la furgoneta a la puerta para salir cuanto antes. - Se queja en voz baja mientras pasa por la puerta, nerviosa. - Vamos, ¡Hay que darse prisa! -

Tras aparcar en la principal, os despedís de Daniela quien se queda al cuidado del vehículo con un "no tardéis"

Una vez dentro el edificio os recuerda a otros en los que habéis entrado, todo parece tranquilo y en orden, como si los trabajadores hubieran salido un momento de la sala. Sin embargo es una calma tensa, interrumpida por el sonido del ordenador de recepción, que se ha quedado encendido y emite algún zumbido de procesos. Todas La puertas están abiertas.

El lugar es un gran salón con sofás para esperar y atender visitas, hay una máquina de café, refrescos y chocolatinas.

Arthur recuerda que Elizabeth estaba alojada en la habitación 14 de la tercera planta, zona G (la 3/14 G). El acceso desde la recepción, recuerda, es sencillo. 

Solo tienen que atravesar las puertas dobles de la zona de pacientes, tomar la escalera y subir los tres pisos. Los tres se detienen unos segundos en recepción y respiran hondo.

Arthur se dirigió ansioso hacia las puertas que conducían a la zona de pacientes. Elizabeth, si todavía estaba viva, podía encontrarse muy cerca de él.

¡Mierda!¡Joder! Las puertas de las habitaciones están cerradas. Quizás estén bloqueadas por dentro lo cual sería una mala señal - dijo sin dirigirse a nadie en particular-.

Miro alrededor y el zumbido del ordenador de recepción le dio una idea. A lo mejor desde ese terminal pudieran tener acceso a la red de cámaras de seguridad del centro y al menos podrían hacerse una idea. Se acercó al mostrador, tomó el ratón y empezó a intentar abrir el programa que controlaba esas cámaras.

A mi esto no se me da muy bien chicos. ¿Alguien sabe manejar estos cacharros?

En el ordenador no, pero hay un obsoleto sistema de seguridad por pantalla, sin audio, vas pulsando las diferentes cámaras y ofrecen pasillos desiertos, desgraciadamente no,sabes si silenciosos o no. No hay cámaras en en interior de las habitaciones.

El reflejo de la pantalla de vigilancia iluminaba el rostro de Arthur de un color verde cetrino en la oscuridad reinante en el Hall. Todo parecía tranquilo. Demasiado tranquilo.

Vaya mierda de sistema de vigilancia - dijo mientras cambiaba la vista entre cámaras -, ¡si ni siquiera es digital joder!. Aquí no se ve ni un puto alzado por los pasillos. 

Poniéndose el bate sobre el hombro y mirando a Colin y Beatrice dijo:

Voy cagando ostias a por mi hermana ¿venís?

Colin intenta abrir las puertas sin hacer demasiado ruido. No debería representar una gran dificultad para él.

- Alumbradme aquí con la linterna chicos.

Arthur lo recuerda perfectamente.Tras un breve trasteo de Colin la puerta se abre con un clac.

No os cuesta mucho llegar a la zona G, hay carteles que lo indican. Al otro lado todo parece normal, y subís las escaleras hasta el tercer piso.

Tras un mostrador hay una reja color crema que separa las habitaciones. Se abre mediante un pulsador que está en el interior y es accesible.

Al otro lado de la reja están las habitaciones, ahí sí que se oyen algunos ruidos. Elizabeth debería estar en una de ellas. La 14.

- Bueno Arthur, pues tu dírás... me temo que aquí empiezan los problemas. Estaría bien que uno se quedase aquí vigilando para asegurarnos de que la salida no se bloquea. O bien colocar algo para que el ruido nos avise de si vienen alzados.

Colin mira si hay mesas y lo que pueda haber sobre ellas. Intenta ver si las ventanas tienen rejas o si son una posible vía de escape.

La impaciencia dominaba a Arthur. Elizabeth estaba al alcance de su mano. Deseaba verla inmediatamente ya fuera muerta, viva o resucitada antes de que la incertidumbre hiciera mella en su cordura. 

Colocaremos el escritorio para que la puerta no se cierre y para dentro. Necesito saber qué ha sido de mi hermana y lo necesito ya.

Acto seguido ayudó a Colin a mover el escritorio para después, sin mirar atrás, adentrarse en el pasillo ne busca de Elizabeth.

  - Si las puertas están bloqueadas puede ser bueno de hecho, Arthur, eso puede haberla mantenido en un lugar seguro. El resto del personal y los pacientes que estuvieran fuera de sus habitaciones me preocupan más. Es mejor que vayamos juntos. - Ah, pero ella no piensa ir delante. Acompaña a los chicos, pero va la última. 

Arthur medito sobre las palabras de Beatrice. Era una chica sensata.

¿Seguro que no prefieres tener la salida despejada? Si hubiera que salir pitando de aquí molaría tener la vía libre...

Dejo a a elección de Beatrice y de Colin dejar la puerta abierta o cerrada. Estaba demasiado impaciente por saber qué había sido de su hermana así que haciendo un gesto invito a ambos a seguirle a lo largo del pasillo hasta la habitación que recordaba ocupaba Elizabeth. Lo hizo andando sigilosamente para no alertar a ninguno de los posibles alzados que pudiera haber al acecho y con el bate preparado para descargar un golpe mortal sobre la cabeza de cualquiera que le saliera al paso.

- Podríamos colocar una simple silla que podríamos tirar de un manotazo... os parece? Venga, te sigo Arthur.  coloca una silla en el medio del paso (no créia que un alzado se molestase en esquivarla si pasaba por allí, con lo que el ruido les alertaría pero al mismo tiempo no sería un problema para salir corriendo...). Levanta la palanca y comprueba que la pistola está enganchada en el cinturón. - Beatrice, no te separes.

La reja emite el típico zumbido eléctrico al abrirse, escucháis algún gemido lejano mientras comenzáis a entrar en el pasillo. Las puertas son sólidas salvo,por un ventanuco a la altura de la cabeza. No entra luz natural en el pasillo y uno de los fluorescentes esta parpadeando, emitiendo un desagradable y constante cliqueo.

La habitación 7 y 8 tienen  las puertas abiertas y están vacías. La habitación 9 tiene la puerta cerrada y parece que se escucha alguna voz, pero tendríais que acercaros más, la 10 tiene la puerta abierta y se escuchan unos extraños gruñidos.

¡Joder, que puto mal rollo me da este pasillo! - susurró con un hilo de voz Arthur.

Los gruñidos de la habitación 10 le ponían los pelos de punta. Tenía demasiado reciente el recuerdo de los alzados persiguiéndole. Pero tenía que llegar hasta Elizabeth. Hizo de tripas corazón y caminando por el centro del pasillo echó una ojeada a las habitaciones...

Colin va comprobando las habitaciones, no quiere dejar tras de ellos nada que pueda suponer un peligro.

Procura ir bastante pegado a Arthur y que Beatrice también vaya muy próxima. Mantiene la barra en alto preparado para descargarla sobre la primera cabeza medio podrida que pueda aparecer. Nota la tensión en sus músculos y el nerviosismo que ha activado la adrenalina de su cuerpo.

Avanza despacio.

A través del,ventanuco de la habitación 9 se puede ver una anciana sentada en una mecedora que repite.-¿Ha llegado ya Daisy? ....Dijo que vendría hoy. Después para unos segundos y vuelve a preguntar por Daisy. ¿Ha llegado Daisy? Daisy, ¿eres tú? 

Al pasar por el quicio de la puerta  de la habitación 10 escucháis los gruñidos más claramente y observáis al fondo de la habitación a un guardia de seguridad alimentándose del cadaver de un interno, que aunque está irreconocible lleva la bata característica de los huéspedes de la institución.

Grunt...grr, grunt.