Partida Rol por web

Busco a los acompañantes del consejero del coro de jubilo y lo cuento y categorizo su nivel de amenza, y valoro algun objetivo potencial, algun hombre que me mire de ese grupo...

     Lyra decidió hacerse la interesante con el recién llegado. Contenta por que su plan seguía su curso, tuvo que reprimir el impulso de balancearse como solía hacer. Ahora interpretaba a alguien de la nobleza y ellos no hacían esas cosas... al menos en general. -# Soy Lady Lyra Strophes, encantada...# le dijo al clérigo, mostrando su mejor sonrisa. -# Acabo de llegar a Sibelus. Tenía negocios que atender en Escintila y he aprovechado para que mi prima me muestre la hospitalidad local. Ya me habían hablado de su organización y la verdad es que tenía cierta curiosidad...# Veamos lo que éste hombrecillo puede contarme... pensó.

Los ojos del consejero parecían brillar por las palabras de Lyra.

-Oh, por supuesto, habéis hecho bien en venir a esta fiesta, tenemos en alta estima a los Strophes, seguro que nuestra anfitriona esta deseosa por conoceros. Lady Borella, acercaos por favor.

El hombre alzo la mano para captar la atención de la anfitriona, a lo cual la mujer hizo un gesto indicando que lo había visto y que enseguida se aproximaría.

El motivo por el que la anfitriona pidió algo de tiempo parecía estar a punto de revelarse. Se encontraba subida en una especie de pódium al cual se accedía mediante 3 escalones, dio unos golpecitos en su copa para llamar la atención de todo el mundo y lo consiguió.

-Quiero agradecer a todos vuestra presencia en esta fiesta, y por ello os presento mis saludos.

Hacia un rato que no se veían a los camareros que atendían a los invitados, en ese momento aparecieron todos de golpe con bandejas que contenían los "saludos de la anfitriona". Eran pequeñas tazas que contenían algún tipo de bebida, los camareros fueron ofreciendo a todos y cada uno, tanto nobles como su séquito y por supuesto a los acólitos.

-Que los disfrutéis, pues el deleite complace al Emperador.

Mientras Lady Tanae se acercaba, podíais observar que los mas jóvenes vaciaban el contenido de las tacitas de un solo trago, mientras que los invitados de edad avanzada aun agradecidos rechazaban la bebida.

Cuando la anfitriona llego, Cort la puso enseguida al tanto de quien era Lyra, o de quien se suponía que era. Y la mujer sonrió.

-Oh, querida, siempre es un placer conocer a nuevos nobles. Sobretodos si son devotos del Emperador y de nuestro Coro del Jubilo.

Raven siguió a "Lady Borella", hasta el principio de la escalinata, ppensó que no sería bien visto subir hasta allí arriba con un arma, aunque estuviera enfundada. Se estaba tomando muy en serio eso de proteger a la "noble", quizás se estuviera divirtiendo por dentro, o quizás solo buscaba una excusa. 

Ohh, no gracias. No puedo beber estando de servicio. - Contestó al camarero que le adelantaba una copa con la bebida. A saber que es lo que contenía aquel líquido. No podía fiarse...

En silencio, Keira comprobaba como Lady Tanae se esforzaba por ser la mejor de las anfitrionas. Cabía saber si esto era un gesto desinteresado o si pretendía hacer conversos a la nueva fe con el buen trato y sin importar la posición social, a fin de cuentas todas las almas eran iguales, podían terminar deformadas sin ningún tipo de discriminación a manos del Caos.

Por precaución, y para no entrar en el juego, Keira rechazó la bebida con cortesía. Si Raven, quien de seguro era capaz de tragarse litros de Mataratas, no bebía, debía ser por una razón de peso.

     ¿Que sería aquel brebaje? Lyra vio con desconcierto que solo los jóvenes lo tomaban, además la forma en que fue repartido y el "honor" que se les prestaba a los invitados que lo recibían le daba un cierto tinte de "ritual" a sus ojos. Los rituales no le gustan a la Inquisición... pensó. Lo mas probable es que sea algún tipo de droga, ya que los ancianos lo rechazan y los jóvenes no. Aun a riesgo de parecer descortés, no iba a echarse eso por la garganta. Una cosa era una copa que ella misma había escogido y otra muy distinta algo que la secta a la que investigaban le estaba ofreciendo. Sus propios compañeros también recelaban y se fijó que dos ya lo habían rechazado. Sin darle mayor importancia rechazó aquello con un ligero gesto de la mano y un melodioso -# Muy agradecida pero creo que hoy he bebido demasiado ya...#

     -# El Emperador siempre ha guiado los pasos de la Casa Strophes, y parece que no nos ha ido nada mal.# Soltó una risita discreta. -# Aunque a usted por lo que veo también la ha favorecido con sus dones.# Añade abarcando el lugar y a la gente de la fiesta con un gesto de cabeza. -# Parece que todo Sibellus está deseando "bañarse en su brillo"# dice con una sonrisa a modo de cumplido en alusión al vestido de la anfitriona.

El joven adepto observo como el camarero se acercaba con las pequeñas tazas que contenian quien sabe que extraño brebaje pero a pesar de sus sospechas acepto el recipiente - ¿Mi señora da su permiso?. Hace bastante calor en esta sala y parece que necesito beber algo para refrescarme - y mientras esperaba la respuesta de Lyra empezo a pensar en que lugar podria conservar una muestra de la bebida.

     Lyra miró a su compañero con suspicacia contenida. -# Adelante.# Dijo de forma condescendiente, al estilo de los nobles. Quien sabe lo que contendría aquel brebaje, pero quizas Sengwall sabía algo mas que ella sobre el asunto.

Mentalmente Sengwall hizo un listado de sus pertenencias - Me temo que voy a tener que hacerme el torpe - asi que cuando el camarero se acerco a Muñeca el acolito hizo ademan de acercase a él - Esto...mejor me vendria si tuviese algo de agua....bueno..no importa- Pero cuando parecia que iba a depositar la taza parecio pensarselo mejor y con su mejor cara de palo cruzo una pierna con otra y dio un paso hacia atras con la intencion de tropezar y que todo el liquido cayera por encima de su ropa - ¡AH...CUIDADO! - grito mientras caia al suelo.

La mujer sonrió con fingida modestia ante los comentarios de Lyra.

-Oh querida, no es para tanto, si te gusta este vestido, deberías de ver los que utilizo para las reuniones del Coro del Jubilo en la Corte de Alabastro, reservo los mejores para complacer a nuestro amado Emperador, el esta atento a estos detalles.

A pesar de estar hablando con la psíquica, de vez en cuando dedicaba gestos de saludo a otros nobles o simplemente paseaba la mirada por la zona para comprobar que todo fuera en orden, y por supuesto se percato del incidente de Sengwall, no obstante no pareció importarle.

-Como sea, si sois de fuera deberías probar la bebida, es típica de la colmena. Para la gente como yo es demasiado fuerte, pero para las muchachas jóvenes como vos, sera todo un manjar, insisto.

Sin duda con la edad de esa señora y su posición, ya debía estar acostumbrada a adulaciones y lameculos de todo tipo, impresionarla no seria tarea sencillo, pero sin dudo para llegar a la Corte de Alabastro el camino mas directo era a través de ella.

Con todo el disimulo que puedes observa la muestra, durante tu tiempo de autorización aprendiste a identificar diferentes sustancias y sus efectos, pero normalmente contabas con un minimo de equipamiento que te ayudaba en la tarea. Por suerte algunas características podían deducirse por simple observación. No era gran cosa pero quizás sacases algo en claro.

La bebida es transparente aunque bastante viscosa, pero en cuanto al olor... Carecía totalmente de olor, es como si fuera agua pero mas densa. Las bebidas alcohólicas sin duda tenían un olor característico que esta bebida no poseía, y por esas características tampoco eras capaz de compararla con ninguna droga que conocieses.

Así que todo quedaba en lo que tu instinto te dictase.

Una cosa estaba clara, el menos desde tu punto de vista, los que habían probado esa ultima bebida se habían puesto mas.. "cariñosos", parecían mas dispuestos a hablar entre si y se tocaban mas. No es como si se fuera a montar una orgía allí, pero estaba claro que el ambiente se había relajado mucho.

Sea lo que sea esa bebida, actuaba rápido.

Erick echó una rápida mirada alrededor, como si fuera un portero de discoteca, los brazos extendidos y cruzados delante de su cuerpo. Lo que intuía lo había visto ya hace mucho en mejores tiempos... Un mm.. para sí mismo, como si sus suspicacias hubieran sido acertadas salió de su garganta, pero no de su boca, pues ésta seguía cerrada, observando el entorno de su "protegida". Tenía que cumplir su misión, era en lo último en que podía pensar, era su última oportunidad...

     Lo olió, lo miró al trasluz disimuladamente y lo hizo girar como quien cata un vino añejo. Definitivamente esto no es alcohol... pensó Lyra. La paranoia innata de la psíquica comenzó a atenazarla, y cuanto mas interés tenían en que bebiese aquello, mas claro le quedaba que debía hacerlo... -# Estoy segura de que lo es, pero llevo rato notando que empiezo a sentirme mareada y no creo que beber mas sea buena idea...# dijo con fingida afectación. -# En la próxima fiesta le prometo probarlo. Voy a estar por Sibellus un tiempo y espero que nos volvamos a ver. La velada ha sido exquisita y la compañía aun mejor, pero creo que voy retirarme ya. Después de todo no se espera de una noble que pierda los papeles, ¿verdad? # Concluyó con una risita.

La anfitriona sonrió escuchando los comentarios de Lyra, con condescendencia.

-Por supuesto querida, entiendo que aun no estés acostumbrada a los placer de esta colmena, pero la próxima vez no debes preocuparte, si mis fiestas son famosas por algo son por su discreción no temas desmelenarte un poco. Bien, yo también tengo que atender a otros invitados, seguro que nos encontramos en algún otro lugar.

Tras despedirse la mujer se alejo unos pasos con su luminoso vestido, no parecía molesta por que Lyra no probara la bebida, mas bien parecía que le daba totalmente igual.