Partida Rol por web

Miguel ayuda a Nora a buscar, pero tampoco encuentra nada que os pueda indicar cuál era el plan de emergencia. Estais como hace media hora, pero con el amanecer más cerca.

Cuando bajais al salón, veis que Henrique ya se ha ido, y que Edgar está a punto de hacerlo.

-Nos vamos. Mañana a primera hora volveré para hablar con el líder que quede. Espero que vuestro día no sea problemático- dice con tono cortés.

Se lleva a Xisela, que lo sigue un par de pasos por detrás. Quedais en el pazo la gangrel, Berit, Nora y Miguel. Nina ha salido a buscar a los otros tres, pero aún no ha regresado.

El tiempo corre.

Nora, tu te quedas al frente defendiendo el fuerte, estate atenta por si llegan los demas y cuida de Alexandre, yo me voy a busca a Uileand.- le digo arrancando rumbo a la puerta, no iba a esparar quieta alli, aunque fueran dos minutos, no podia dormir tranquila sin saber de el. Espere que Nora lo comprendiera pero no me detuve.

Me encojo de hombros y ya no le digo nada a Xisela. Observo como se va y luego vuelvo a mirar a Miguel y Anna.

¿Alguna idea? No se qué podemos hacer..   - digo empezando a darme por vencida. Me siento al lado de Aleixandre colocando su cabeza en mi regazo mientras rodeo su pecho con mi brazo. Le miro pensativa ¿qué harías tú? niego con la cabeza, no se me ocurre nada, tan solo esperar.

Mientras hablais, suena el móvil de Miguel, que lo mira sorprendido.

-Lo que aguantan estas cosas, ya lo daba por muerto- dice sorprendido.

Despiés de una breve conversación llena de monosílabos y un gracias os da las buenas noticias.

-Henrique ha usado sus influencias. No habrá forenses, ni bomberos, ni policía. Esa es la parte buena. La mala es que como a alguien se le ocurra atacarnos durante el día, tenemos el culo al aire- dice tenso -lo siento, pero no se me ocurre qué más hacer-

Anna os mira revolviéndose el pelo pensativa.

-Creo que deberíamos empezar a montar una barricada en el sitio en el que vamos a dormir. Si nos van a atacar, al menos que les sea difícil. Es decir...-

La interrumpe una voz alegre.

-Mirad, mirad, estamos vivos. ¡Tachán!- dice una Becka muy sonriente que entra por la puerta acompañada de John y de Nina.

Becka! - exclamo sorprendida al verla y esbozo una sonrisa, la primera en muchas horas. - Nina, no se cómo lo has hecho pero no dejas de sorprenderme...

Volviendo al tema que nos preocupaba ahora, la sonrisa desapareció para dar paso de nuevo a un rostro de preocupación.

Bien, Anna tiene razón, debemos de asegurar el lugar.

Me pongo en pie apartando con cuidado la cabeza de Aleixandre.

Manos a la obra.

Me alegra ver a Becka pero esperaba que fuera otra persona.... sonrio con tristeza.- Este sitio no es seguro.... Yo tenia un apartamento, aun debe estar vacio, con todo el lio no dije al casero que me marchaba y esta pagado hasta final de mes. Es pequeño y vais a estar apretados. Es un piso alto, con una sola puerta que proteger y una ventana que ya esta bloqueada. Becka sabe donde es.- digo lanzandole las llaves.- Puede ser una alternativa para esta noche... lo dejo en tus manos Nora.

Despues sali corriendo, sin detenerme mas, habia perdido demasiado tiempo.

Miguel coje las llaves.

-Puff, mi casa es más segura. Podeis ir vosotras, yo no voy a abandonar el pazo- dice serio.

Nina se encoge de hombros. -Las sombras son mi casa, pero no voy a putear al hombre que me dió la libertad- dice señalando a Aleixandre.

John le dice algo al oído a Becka, que niega con la cabeza.

-Nosotros tambien nos quedamos. Todo lo que necesito está aquí, y todo lo que necesitais vosotros es nuestra suerte- dice sonriendo.

Becka es tan alegre, tan confiada, que no sabrías decir si es por inconsciencia, o porque es más poderosa de lo que imaginabais. Mientras os instalais en el sótano y empezais a bloquear la puerta con todo lo que teneis en el gimnasio, Becka empieza a hablar de donde estaban.

-Pues resulta que los cretinos de VII estaban reunidos con algunos vampiros del Elíseo haciendóles noseque para que fuesen más fuertes. Pero John y yo les quitamos la suerte, ya todo les salió mal. Lo que pasa es que no podíamos volver porque nos pillaron, y tuvimos que defendernos de ellos- dice mientras arranca unas espalderas de cuajo, y las coloca frente a la puerta.

Sales corriendo del pazo, esperando encontrar a tu sire antes de que sea demasiado tarde. Mientras corres en su busca, encuentras a Husky, que te cierra el paso. Tan cariñoso como siempre, te lame la mano. Pero en seguida empieza a tironearte de la ropa para que lo sigas.

Gracias a él, encuentras a Uileand. Está sentado, apoyado en un árbol. Está desnudo, cubierto de sangre, pero vivo. Tiene los ojos abiertos, pero notas que está ligeramente ido.

Consigues coger una de las espalderas que te pasa Miguel y la colocas sin problema en la puerta, sellándola.

-Creo que me voy a dedicar a crear una zona de sonbras, justo antes de dormirnos. Estaremos protegidos ante la luz del sol, por si se les ocurre excavar o invocarla aquí dentro- dice Nina.

Becka os mira con gesto serio.

-John y yo podemos darnos suerte. Malo será que si nosotros no salvamos, vosotros no entreis en el saco-

Miguel acomoda a Aleixandre en una colchoneta, y reparte las que quedan por el suelo.

-Yo no se vosotros, pero a mi me gusta dormir en blando-

Poco a poco el amanecer se acerca.

Tengo una mezcla de sensaciones, me alegro de verle pero no asi. Corro a su lado apuntando mentalmente que huski va a recibir un buen regalo por esto.

- Uileand.- susurro arrodillandome ante el. Me gustaria besarle pero no se si eso seria correcto dada la situacion. Tomo su mano.- Uileand, pronto sera de dia, tenemos que ir a un lugar seguro, la manada te necesita.

Cojo una colchoneta colocándola junto a Aleixandre y acostándome a su lado.

Será mejor que descansemos, creo que mañana nos espera una noche muy larga...

Me giro en la colchoneta para mirar a Aleixandre - Espero que mañana despiertes, aquí te necesitamos, te necesito.

Uileand empieza a hablar sin mirarte a los ojos, aún ligeramente ido.

-¿Berit?. No, ya no hay Manada, todo está perdido. Todos muertos. Pero conseguiré sacarte de aquí. Pero mañana. Mañana podré hacer. Hoy no. Te mandaré a algún lugar, donde quieras, donde estés segura y lejos de mi. Seguro que así podrás ser feliz- dice con voz apagada.

Apenas hay vida en él. Uileand, con todos sus defectos, siempre ha sido un ser con fe, con ganas de seguir adelante, con esperanza. Pero parece que todo se ha ido esta noche. Parece que se ha quedado vacío, como un simple cascarón del que ya no puedes sacar anda más.

- Esta becka y Nora...- le susurre.- Tambien Alexandre pero a quedado bastante mal y no sabemos como despertarle, hay mas que sobrevivieron pero necesitan ayuda... todos te necesitan. Ahora es tu oportunidad de crear eso que siempre soñaste. De levantar una sociedad que mereciera la pena. Has luchado mucho por eso y ahora puedes conseguirlo... No hace falta que te preocupes mas por mi... no te dare mas problemas.

- No puedo quedarme.- susurre pegando mi frente a la suya tras un incomodo silencio.- Sabes que te amo pero esta relacion es autodestrucctiva para los dos... pasaria una semana, un mes... las peleas volverian rapido....puede que dentro de unos años yo encaje mejor en esto y.... no se Uileand... desearia poder decirte que seremos felices pero no paramos de hacernos desgraciados... Esto no sera un final, es un hasta pronto. Me voy ya, no esperare a mañana pues si me quedo a tu lado puede que pierda la voluntad para irme. Te amo Uileand.

-¿No están muertos? No lo están. Menos mal. Pensaba que... pensaba que ellos... creía que no éramos lo bastante fuertes- admite avergonzado -no como para repeler un ataque así-

Te escucha muy atento mientras hablas. Notas su impaciencia, sus ganas de interrumpirte, pero se contiene es escucha palabra por palabra.

-No puedes irte así, sola. Ya los vampiros son bastante peligrosos siendo tú tan joven, sin contar a los pupinos, los magos... Quédate hasta mañana, y te irás con Edgar a Alemania. Allí estarás lejos de nosotros y podrás ser libre. Sin Elíseos ni guerras ni nada... pero sabrán quien eres y no se atreverán a atacarte. No puedes irte corriendo ahora, no funcionará- te explica en tono pausado.

- Nada en mi vida funciona.- susurro sabiendo que no aceptaria un no.- Ire con Edgar hasta alemania y me perdere alli una temporada. Necesito estar sola tanto como tu descansar de mi... y de todo esto.