Partida Rol por web

Cedric cogió una de las flechas y apuntó con sumo cuidado a uno de los cofres, la flecha se clavo en el, y Cedric empezó a tirar de el con sumo
cuidado, al poco tiempo el cofre ya estaba fuera de la habitación.

No es demasiado arriesgado?? el especialista en encontrar trampas no se encontra con nosotros...

Le digo con un hilo de voz... Después de todo lo que he visto, un cofre no me da muy buena espina...

O quizas sabeis también manejaros con las trampas?

No...ya no - y la mirada del explorador observó con pesadumbre el anillo que aún portaba en su mano derecha, el cual se encontraba agrietado de forma irreparable, perdiendose para siempre las habilidades que otorgaba - pero cuando vuelvan quizá podamos llevarlos hasta otro lugar, donde con más tranquilidad puedan abrirse.

Era cierto que no se había planteado qué hacer con los cofres una vez se encontraran junto a ellos, pero es que necesitaba ocupar su tiempo en algo, pues si simplemente se sentaba a esperar, existía la posibilidad de caer de nuevo en el mismo estado de abatimiento que tras la muerte de sus compañeros - Ya decidiremos después lo que hacer con ellos.

Y se dispuso a sacar uno a uno todos los cofres que se encontraban en el interior de aquella habitación, utilizando el mismo método que con el primero.

Cedric fue sacando uno a uno todos y cada uno de los cofres que habían esa habitación, cada cofre pesaba una barbaridad, en algunos casos se vio obligado a hacer varios intentos, cada uno de esos malditos cofres debía pesar como una persona. Cuando hubo acabado estaba sudando a causa del esfuerzo realizado

La mayor parte de los músculos de su cuerpo temblaban cuando terminó de sacar de allí todos aquellos cofres, pero al menos, durante ese tiempo había conseguido mantener su atención puesta en otra cosa que no fuera lo que había ocurrido poco tiempo antes...sin embargo ahora, necesitaba descansar.

Apoyó la espalda contra la pared y se dejó resbalar hasta quedar sentado en el suelo - Ahora sólo podemos esperar a que vuelvan - indicó con voz entrecortada, intentado recuperar de nuevo la respiración perdida por el esfuerzo - lo cual espero que ocurra pronto, porque ya llevan fuera bastante rato.

Los ojos de Cedric seguían mirando los cofres, y los dedos le cosquilleaban por la tentación de intentar abrilos y así ver lo que había en su interior...pero no lo haría, pues sabía que aquello podría resultar peligroso...sobretodo para unas manos inexpertas como las suyas en aquellos quehaceres.

Cerró los párpados y se centró en los sonidos que le rodeaban, pues allí debía utilizar todos los sentidos posibles....cualquiera de ellos podría alertarle de algún peligro.

Cedric escuchó con atención, pero la tumba mantenía un sepulcral silencio solo roto por el ruido que ellos mismos estaban haciendo. No paraba de preguntarse por que sus compañeros estaban tardando tanto en volver ¿ les habra sucedido algo ?

Parecía mentira que ahora aquel lugar estuviese tan tranquilo...casi parecía reirse de ellos con aquel silencio, como si estuviese a la espera de cualquier movimiento para volver a saltar sobre ellos con toda la fuerza y crueldad de la que era capaz, segando los hilos que ataban a los mortales con aquella realidad.

Cedric casi podría haber cerrado los ojos y dormitado un rato, pero debía mantenerse atento a cualquier cosa que pudiese suceder, aunque sabía que no sería rival para ningún enemigo que se presentara....y mucho menos sin apenas armas.

Simplemente esperarían a que vinieran a buscarlos, ya fuesen amigos o enemigos, pero al final alguien vendría.

He estado observando como Cedric se entretenía sacando los baules de dentro de la estancia, me he sentido incapaz de ofrecerle mi ayuda... Quizás él se sienta mejor ocupando su tiempo, pero en estos momentos me siento tan inútil, siento un dolor muy fuerte en mi pecho, un vacío que nunca nadie podrá volver a llenar...
Vuelvo a sentarme en el suelo, con la mirada perdida, esperando algún milagro, ya que tengo la seguridad de que no van a volver.

No creo ni que lleguen a encontrar la salida, de este horror... Y si la encuentran... Sabran volver hasta aquí? no creo... Estamos perdidos...

Voy a volverme loca aqui dentro, necesito marcharmeEmaish se puso de pié y se paso la mano por el pelo qqq...quiero irme de aqui

Cedric abrió los ojos bruscamente al escuchar las palabras de Emaish, y observó atentamente sus gestos para intentar calibrar hasta qué punto sus nervios podían causar algún tipo de problemas....finalmente se levantó para situarse junto a ella.

Tranquilizate - le dijo con el tono más sereno que pudo crear - ya verás que vendrán a por nosotros.

Lo decía para calmar los nervios de la mujer, pero también para convencerse a sí mismo de sus palabras, pues lo cierto es que estaban tardando demasiado en aparecer, y si la espera se extendía mucho más, tendría que comenzar a moverse, a buscar una salida por sus propios medios, enfrentando todo lo que aquella maldita tumba quisiera poner en su camino.

Miro a mis dos compañeros, y niego con la cabeza... Intento no decir en voz alta mis pensamientos, ya que se que pondría mucho más nerviosa a Emaish...
Me aclaro la garganta y empiezo a entonar una dulce melodía, con la intención de calmar los nervios, incluso los mios...
Cierro los ojos y me dejo llevar por la dulce canción, imaginandome los ríos y prados de los que habla...
Por un momento incluso me da la sensación de sentir el frescor del agua cristalina sobre mi piel...

Es muy bonitadice y sonríe.
De repente su expresion cambia y veis como Emaish empieza a mirara a su alrredor

Cedric escucho un rumor lejano ¿o era solo fruto de mente y de la tensión ?

Un momento – siseó el explorador al notar como la mujer se ponía en tensión, e intentó captar algo en aquel silencio que les envolvía.

Al principio no consiguió detectar nada, por más que se esforzaba en intentarlo, pero el propio latido de su corazón le impedía captar ninguna otra cosa que no fuera el bombeo constante de este.
Intentó aislar ese sonido, y entonces es cuando detectó un lejano murmullo en la distancia, pero nada que pudiera darle alguna idea de a qué podía deberse ese extraño sonido.

¿Alguna de las dos puede reconocer ese sonido? – preguntó sin demasiadas esperanzas.

No oigo nadaEmaish miro a su alrededor como intentando escuchar algo que no lograba llegar a oir

El viaje transcurrió sin ningún contratiempo. Ahí estaban de nuevo hacía solo un instante que se habían marchado pero tenían la sensación de que había pasado una eternidad.

Entonces quizá se lo hubiese imaginado, pues si ninguna de ellas podía oírlo significaba que estaba únicamente en su cabeza.....aquel lugar comenzaba a trastornarle seriamente, afectando incluso a sus sentidos, en los cuales siempre había confiado hasta ese momento....¿comenzaría a ver alucinaciones en breve?

Eso puede que fuese lo que más temía, pues el no saber lo que es realidad o lo que simplemente se estaba inventando su mente, le dejaría aún más desprotegido de lo que se sentía en ese mismo instante, pues ya se veía obligado a luchar contra fantasmas, pero no aquel tipo de criaturas que sabía que existían, sino contra sus propios fantasmas, contra los que poblaban cualquier alma que recorriese el mundo, contra aquellos que por mucho empeño que se pusiese, rara vez se conseguía vencerles.

Aún así, Cedric decidió permanecer sumamente atento a todo sonido que pudiesen captar sus oídos, pues aunque sus sentidos le hubiesen jugado una mala pasada, no debía bajar la guardia en ningún instante.