Partida Rol por web

HALBERD:

- Te parece que al ritmo actual todavía tenéis unas horas de margen.

- Los niveles actuales de radiación no son saludables, naturalmente, pero un humano, incluso uno no muy recio, podría aguantarlos por un tiempo, días o semanas.

- El problema es que crees que la fuga va lentamente en aumento. Calculas que dentro de ocho horas será un nivel irreversible para humanos, y dentro de doce para enanos.

DAERON:

- Pulsas los cuatro botones verdes que quedan y, tal y como te esperabas, no hay reacción alguna.

Al verse casi obligado Thomas presiona uno de los botones verdes restantes.

THOMAS:

- No basta con eso.

- Hay que especificar cuál.

Pulsa el botón verde que cree que corresponde a Emil.

MOMENTO: DESCONOCIDO.

LUGAR: ÁREA DE RECUPERACIÓN.

THOMAS COVENANT:

- Te sitúas ante el tanque en el que se encuentra Emil y pulsas el botón verde.

- Casi de inmediato comienzan los protocolos automatizados de reanimación, que observas con cierta morbosa fascinación.

MOMENTO: DESCONOCIDO.

LUGAR: ÁREA DE RECUPERACIÓN.

EMIL EL CORSARIO:

- Los protocolos de reanimación se completan.

- Sales del tanque, alzando escudos psíquicos en una instintiva protección.

- Las fuerzas te abandonan y te ves obligado a vomitar oleadas de líquida mucosidad transparente antes de poder volver a respirar.

- ¿Vuelves a respirar o lo haces por vez primera? No estás seguro.

- Nada es seguro.

Recoge la ropa de la mesita y rebusca en la alacena vertical y semicilíndrica.

Daeron, nada más abrirse la cápsula de Emil lo sujeta, deja unos instantes para que el elfo se recupere y en cuanto comience a balbucear y preguntar donde carajos está, tomándole de un brazo y si es ayudado por alguien mejor, le explica que debe tocar un botoncito verde por el bien de todos mientras lo conduce a este.

Se incorpora. Habla. Pregunta.

MOMENTO: DESCONOCIDO.

LUGAR: ÁREA DE RECUPERACIÓN.

THOMAS COVENANT:

- Te pones tu ropa interior.

- La alacena que hay detrás se abre.

- Dentro encuentras una alianza de oro blanco, tu anillo matrimonial. También un libro de conjuros. Piensas que no necesitaste uno antes, aunque son muy comunes en la magia tradicional que tú practicas. Al parecer ahora necesitas esa muleta, y también el anillo. Ambas cosas son indicativos de que estáis en un mundo diferente, uno en el que la magia ambiental es más débil.

MOMENTO: DESCONOCIDO.

LUGAR: ÁREA DE RECUPERACIÓN.

EMIL EL CORSARIO:

- Antes de coger siquiera tus cosas, te diriges al tanque donde está la Ranger Vicky y activas el proceso automático de reanimación pulsando el botón verde.

- Aguardas a que el proceso se complete para ayudar a Vicky cuando salga.

MOMENTO: DESCONOCIDO.

LUGAR: ÁREA DE RECUPERACIÓN.

VICKY MORRISONA:

- Los protocolos de tu reanimación se completan.

- El sinvergüenza de Emil el Corsario, en pelota picada, te aguarda fuera de tu cápsula, igual que un violador pervertido o algo así.

- Vives por primera vez, o vuelves a vivir, no estás segura.

- La muerte era más dulce, menos desquiciante.

Toma el anillo y el libro de conjuros.

MOMENTO: DESCONOCIDO.

LUGAR: ÁREA DE RECUPERACIÓN.

THOMAS COVENANT:

- Coges tu anillo de boda y te lo pones. Presientes que ya en algún universo alternativo te dio poder, en aquella ocasión porque el oro blanco era excepcionalmente raro y poderoso en ese mundo. En esta ocasión por los recuerdos y el vínculo emocional. En cualquier caso, notas que es esencial para ti.

- El libro de conjuros contiene los conjuros que conoces y puedes utilizar. Cada mañana hay que memorizar las fórmulas mágicas que quieras poder utilizar ese día. Intuyes que su complejidad es tal que supone un esfuerzo consciente el simple hecho de que estén en tu cerebro, listas para ser liberadas por medio de gesticulaciones, palabras arcanas, y en algunos casos componentes materiales.

Vicky sale del tanque, se recupera lo que puede, abronca a Emil e intenta buscar algo que ponerse.

MOMENTO: DESCONOCIDO.

LUGAR: ÁREA DE RECUPERACIÓN.

VICKY MORRISONA:

- Justo en la pared opuesta a donde está el tanque del que has salido, localizas una mesita metálica, limpia y pulcra. Sobre ella hay una ropa interior blanca de tejido sintético. Te das cuenta de inmediato de que tiene que ser para ti.

- Detrás hay una alacena que seguramente sea la tuya.

Tras responder a Vicky (y aprovechar para reprocharle tanto a ella como a otros olvidos y pensamientos provocados por los dioses perversos que solo desean perjudicar al pobre Emil) el elfo albino va hasta el lugar donde deben estar sus pertenencias y se las pone.

MOMENTO: DESCONOCIDO.

LUGAR: ÁREA DE RECUPERACIÓN.

EMIL EL CORSARIO:

- Te pones tu ropa interior que hay en la mesita metálica frente a tu tanque.

- Al acercarte a la alacena vertical semicilíndrica metálica que hay detrás de la mesita, esta se abre, y un extraño moco verde tentaculado sale saltando-levitando hasta posarse viscosamente en tu brazo mientras te emite una retahíla de emociones en las que se entremezcla alegría, gozo, indignación y cierto resentimiento por haberle dejado solo.