Partida Rol por web

Scripta Barchinone I: Rumbo a Amposta

02. Al caer la noche

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20/12/2011, 16:08
Director

Aquel día nada más de interés había tenido lugar, salvo una ligera falta de apetito a la hora del almuerzo, de lo cual había tenido culpa, sin duda, el desafortunado encuentro con el leproso mendicante.

Algún coche de caballos os había hecho tener que saltar hacia los matorrales que rodeaban el camino en más de una ocasión. Claro estaba que muchos otros vecinos vuestros, todos de clase alta, habían decidido partir lejos de aquellas tierras de podredumbre y enfermedad que habíais dejado atrás.

Al caer la tarde, justo antes de oscurecer, había comenzado a caer una leve llovizna. El claro día se había ido nublando hasta desembocar en aquella molesta llovizna que no tenía visos de acabar en breve.

Dormir a la intemperie era desagradable, pero hacerlo sobre suelo embarrado y lloviendo, lo era mucho peor.

El sitio más seguro para pasar la noche parecía una pequeña arboleda que divisasteis próxima al camino. Aquellos frondosos árboles ofrecían algo de cobijo contra la lluvia. Además, había algunos matorrales relativamente altos, lo suficiente como para impedir que fueseis divisados desde el camino cuando estuvieseis tumbados reposando.

 

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21/12/2011, 09:47
Mara "la barata"

Caminé cabizbaja el resto del día. Los acontecimientos sucedidos me habían dejado exhausta, avergonzada y dudosa de mi capacidad para continuar el viaje y empezar una nueva vida. Visto lo sucedido con el mendigo, ¿estaba preparada para emprender una vida en solitario si a la primera señal de duda o amenaza perdía el dominio de mí misma? Tal vez debiera seguir como hasta ahora y ofrecer mis servicios en el primer burdel que encontrase en la ciudad; al menos así no dependería únicamente de mis capacidades para salir adelante. Fuera como fuese, ya era tarde para echarse atras. Tenía que continuar el viaje y aprender la lección para que, si un peligro volvía a amenazarme, no tuviese que necesitar que nadie corriese en mi ayuda.

La fina lluvia empezaba a ser muy molesta. Estaba calada hasta los huesos y tenía mucho frío. Desgraciadamente los vestidos de una fulana no están pensados para "tapar" el cuerpo. Caminaba entre los muchachos, cargando mi fardo sobre mi hombro con una mano y cno la otra intentaba proteger un poco mi pecho del frío. Decidí que debía una disculpa a mis compañeros, así que rompí el silencio en que nos habíamos sumido.

Os debo una disculpa, caballeros. No he sabido reaccionar ante ese hombre y me he dejado llevar por el pánico. Os he puesto en peligro y por mi culpa ese hombre ha perdido la vida. Si no le hubiese atacado, y para colmo sin éxito, tal vez hubiésemos podido continuar nuestro camino sin incidentes. Me siento avergonzada por mi comportamiento y os pido que me perdonéis. Os prometo que, de ahora en adelante, no me entrometeré en nada y dejaré que vosotros toméis las decisiones. No quiero volver a perjudicaros.

 

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21/12/2011, 21:27
Agustí Blanch

Sigo caminando pensativo, con la cabeza baja y algo ensimismado con mis pensamientos. El viejo enfermo estaba loco sin ninguna duda y representaba un peligro para cualquier caminante; de hecho, si no llego a tener tanta suerte manejando mi espada podríamos haber salido heridos o algo peor. La lluvia comienza a caer y ni siquiera la noto hasta que las palabras de Mara me sacan de mi ensoñación.

-No hay nada que perdonar, mujer. Ese viejo, al igual que nuestras vidas ya es parte del camino que hemos dejado atrás. Ahora hay que mirar hacia lo que tenemos delante y esta lluvia no presagia nada bueno. Creo que deberíamos descansar allí, al cobijo de esos árboles. Dormid algo si podeis, yo vigilaré durante un rato, no tengo sueño.

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24/12/2011, 17:34
Gonzalo "el rata"

Habían estado todo el día caminando bajo un silencio más pesado que la lluvia que entumecía sus cuerpos. Aquel encuentro con el apestoso hombre, había dejado una huella en el grupo (en especial en Mara) que parecía ser más profunda de lo que parecía.

Era evidente que acabar con la vida de un hombre enfermo no era una situación agradable, pero era lo que en aquellos días estabas obligado a hacer: o tu o los otros. Y en aquel caso, había sido la voluntad de sobrevivir, la que había "motivado" a Agustí, a Mara y a Gonzalo a actuar de aquella manera. Algo brusca? Puede que sí, pero es difícil controlarte cuando tu vida está en juego.

Con voz tranquilizadora, Gonzalo se dirigió a la mujer.

-No debes disculparte de nada, Mara. Aquel hombre estaba loco de atar y no nos quería bien. Todos actuamos en consecuéncia y decidimos luchar por nuestras vidas. Agustí tiene razón: lo pasado, pasado está. Ahora tenemos que preocuparnos de lo que nos depara el futuro... que esperemos sea mejor que esta lluvia de mierda.

Una vez decidieron cobijarse bajo los cuatro árboles que frenaban las gotas de lluvia que caía durante la noche, Gonzalo se dió cuenta de que Mara temblaba de frío. Había sido un día duro para todos, pero puede que para ella algo más. Había salido de un infierno para encontrarse en peor situación...

Gonzalo se sentó a su lado y la cubrió con su manta. Entre su calor corporal y el abrigo de la manta, la sensación de frío iría minvando.

Acto seguido, comenzó a explicar una de sus aventurillas de niño, cuando lo único que le preocupaba era hacer gamberradas y conseguir un chusco de pan. Siempre consiguiendo el mismo premio: una bofetada de alguien. Su intención era la de "alegrar" un poco el ambiente del grupo y conseguir una sonrisa que eliminara la pesadez de la noche que les esperaba.

 

Notas de juego

No creo necesario hacer mi tirada en la escena anterior, ok?

Perdón por el retraso pero entre final de trimestre y estos días de estrés navideño, vamos de culo. Pero ahí mi post!

 

Saludos

Nanuk

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27/12/2011, 11:44
Mara "la barata"

Me senté bajo los árboles con mis compañeros. Estaba muerta de frío y temblaba. Aunque intentaba que no se me notase, Gonzalo se percató de ello y me echó su manta por encima. Me sorprendió mucho su gesto.

Gracias. Dije con voz casi imperceptible debido a mi sorpresa. Desde luego no estaba acostumbrada a este tipo de trato por parte de un hombre. Bueno, ni de un hombre ni de nadie, la verdad. Agustí no hablaba desde hacía rato, y Gonzalo comenzó a relatarnos divertidas historias de su niñez, supongo que para tratar de aliviarnos tras tan terrible encuentro. No sabía si era el susto, el frío, su gesto o qué, pero lo cierto era que empezaba a ver al joven muchacho como todo un hombre, fuerte y valiente. Guapo no era, eso saltaba a la vista, pero a pesar de su aspecto y su vida basada en la delincuencia, para mí se estaba convirtiendo en algo más que un compañero de viaje. ¿Me estaba enamorando? No, bueno, no lo sabía porque nunca lo había estado. Probablemente lo que empezaba a sentir era una sincera amistad por el muchacho, lo cual en una mujer de mi calaña era fácil confundirlo con amor, o incluso deseo... Sin duda había tenido suerte: Agustí era un hombre de pocas palabras, pero bueno y amable; y Gonzalo, un joven que, quizás bajo esa despreocupada apariencia, era un chico dulce y cariñoso. Me sentía en la gloria, pues era la primera vez en mucho tiempo que hallaba personas que viesen en mí algo más que una vulgar ramera.

Me encogí bajo la manta, con la espalda pegada al tronco del árbol. Por primera vez en mucho tiempo, esbocé una sonrisa.

Parece que habeis tenido una vida muy alocada, Gonzalo. Desde luego no habeis perdido el tiempo y se nota que, en ocasiones, os habeis divertido mucho. ¿Qué hay de vos, Agustí? También fuisteis un joven pillastre como nuestro amigo?

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28/12/2011, 18:50
Director

Notas de juego

Mientras seguís parloteando entre vosotros, hacedme una tirada de Otear. En el caso de no tener la habilidad, la puntuación base es lo que tengáis en Percepción :)

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30/12/2011, 16:21
Mara "la barata"
- Tiradas (1)

Motivo: Otear

Tirada: 1d100

Dificultad: -28-

Resultado: 89

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30/12/2011, 22:23
Gonzalo "el rata"
- Tiradas (1)

Motivo: Otear

Tirada: 1d100

Dificultad: 15-

Resultado: 55 (Fracaso)

Notas de juego

Strepitoso... es que estoy liado en otros asuntos... ehem... jejeje

 

saludos y buena entrada de año a todos!

Un fuerte abrazo

Nanuk

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31/12/2011, 13:41
Agustí Blanch

Miro a Mara y sonrío sin demasiadas ganas.

-No, yo no he tenido ocasión de moverme tan libremente como vosotros por estos mundos. Yo nací en el seno de una família campesina y llevo trabajando desde que tengo uso de razón. Trabajo duro y ningún beneficio más allá de mi supervivencia y la de mi familia. Nunca... nunca tuve tiempo de visitar la ciudad, conocer mujer alguna o tener algo a lo que llamar "mio". Hace poco falleció mi padre y la situación en mi casa empeoró. Yo solo no era capaz de alimentar a los mios y me vi obligado a hacerme con esta espada y asaltar los caminos. Tuve suerte. En poco tiempo conseguí suficiente dinero como para que los mios pudieran recuperarse y seguir adelante... pero ahora debo marcharme. La peste no es lo único que quiere mi cabeza.

De pronto dejo de hablar. Algo llama mi atención.

- Tiradas (1)

Motivo: Otear

Tirada: 1d100

Dificultad: 56-

Resultado: 36 (Exito)

Notas de juego

Como era el último post del año me he explayado un poco, lo siento.

Feliz año y todo eso.

PD: Sé que no e slo habitual, pero esta noche voy a una fiesta de disfraces y me disfrazaré de Agustí. A ver como quedo.

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01/01/2012, 18:35
Director

No muy lejos de donde os encontráis puedes ver, tras unos árboles, luz. Tiene toda la pinta de haber una choza o similar próxima a donde os encontráis.

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03/01/2012, 13:27
Agustí Blanch

-¿Veis lo mismo que yo?- Digo señalando algo a través de las ramas de un arbusto. -Allí hay una luz que parece provenir de alguna casa o cobertizo. Deberíamos ir en busca de refugio o la lluvia acabará calandonos hasta los huesos.

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03/01/2012, 19:59
Mara "la barata"

Miro hacia donde señala Agustí, pero no veo nada. Quizás estaba demasiado cansada y mi vista me fallaba.

No puedo ver ninguna luz, pero si estais seguro de que hay algo, tal vez sí deberíamos ir.

Haciendo de tripas corazón me pongo en pie. Con lo a gusto que estaba ahí sentada y otra vez a caminar, ¡y para encima lloviendo otra vez! Vaya día...

Doblo la manta con cuidado y me dispongo a devolvérsela a Gonzalo. Gracias por la manta. Vendréis con nosotros, ¿no, Gonzalo?

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06/01/2012, 18:52
Director

Efectivamente, en dirección a donde os señala Agustí se puede ver una ligera luz. Posiblemente haya una choza o cabaña no muy lejos de donde os encontráis.

Notas de juego

Espero por la contestación de Gonzalo antes de avanzar con la historia :)

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07/01/2012, 00:16
Gonzalo "el rata"

Tras las gotas de la intensa lluvia y la espesa vegetación del bosque entre sombras, Gonzalo pudo adivinar la luz que señalaba Agustí. Era cierto que necesitaban estara cubierto si no querían coger una pulmonía e ir a peor. Pero Gonzalo, o sin duda su instinto de supervivencia, le alertó de lo que podían encontrar en aquella luz.

Era muy posible que se tratara de una casa de campesinos, un refugio de pastores o algo parecido... pero también cabía la posibilidad que la fortuna les girara el rostro nuevamente como había hecho horas antes con el viejo enfermo. Y si solo se tratara de él, podia salir airoso de un encuentro desafortunado con la ayuda de su daga o, simplemente, corriendo como alma lleva el diablo. Pero no viajaba solo... estaba Mara...

Agustí era de gran ayuda, pero el hecho de tener una mujer en el grupo le provocaba una extraña sensación de... protección era la palabra?

Gonzalo sentía que no podían jugársela de nuevo.

-Parece la luz de una casa. Que os parece si me acerco para averiguar de qué se trata y si es un lugar seguro? No creo que tengamos ganas de salir nuevamente a la carrera bajo esta lluvia y con el suelo enfangado.

Miraba a sus compañeros con seguridad. Era el más rápido y ágil. Podía acercarse y tener más información.

-Volveré en unos minutos y os explicaré qué he descubierto. Os parece bien?

Notas de juego

Espero la respuesta de Mara y Agustí para lanzarme a la aventura, escondiendome de quién pueda verme...

 

Saludos y volvemos al ritmo normal de posteo... la navidad es una locuraaaaa!!!

NAnuk

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07/01/2012, 12:59
Mara "la barata"

Dudé un instante. Gonzalo parecía veloz y ágil, pero ¿y si lo descubrían? No obstante, lo que proponía tenía mucho sentido. ¿Por qué arriesgarnos los tres acudiendo sin saber hacia qué o quién vamos? Así que me decidí:

Lo que decís tiene sentido, Gonzalo. Estoy de acuerdo en esperar aquí. Pero tened cuidado y volved pronto.

Mi preocupación no era fingida. Sinceramente había cogido cariño a mis compañeros de viaje. Incluso al misterioso Agustí, tan callado y tan serio.

Estaba muerta de frío, pero ahora ya no tenía sueño. La perspectiva de ponernos en marcha otra vez para ir a un lugar resguardado a pasar la noche me había despejado y alegrado un poco el día.

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07/01/2012, 19:15
Agustí Blanch

Gonzalo parece más listo que temerario y deduzco que sabe lo que hace. Le doy una palmadita en la espalda en señal de aprobación y espero a que regrese con noticias.

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08/01/2012, 22:59
Gonzalo "el rata"

En la boca del estómago de Gonzalo nació un pequeño hormigueo mezcla del nerviosismo y de la posibilidad de demostrar al grupo su valía. Puede que el muchacho quisiera hacer presente sus habilidades para impresionar a Agustí y a Mara. O puede que solo a la mujer?

Fuera cual fuera el motivo, Gonzalo volvió a ofrecer su manta a la temblorosa mujer.

-A ti te hará más falta que a mi.- dijo con una media sonrisa que buscaba tranquilizar a Mara.

Dejó el resto del equipo al pie del árbol donde habían descansado. Solo cogió su cuchillo, que se colocó en la espalda, sujeto al cinto. Se acercó a Agustí, quién le había regalado un gesto de ánimo para su "pequeña" aventura de investigación. Miró a los ojos de su compañero espadachín y, sin mediar palabra, creyó hacerle entender que agradecía su gesto. Pocas veces habían confiado en él... de hecho nunca. Y sentía la presión del momento.

Estuvo a punto de decir algo, pero no salieron sus palabras... Con una ligera inclinación de cabeza a modo de saludo, comenzó su camino a escondidas para averiguar qué era aquella luz entre los matorrales.

Sabía como avanzar en total sigilo. Lo había hecho muchas veces, antes de algun trabajito de los suyos. Metro tras metro, se acercaba al lugar donde aquella luz hacía presencia. Solo deseaba averiguar qué era y volver con sus compañeros para explicarles lo que había visto.

- Tiradas (1)

Motivo: Esconderse

Tirada: 1d100

Dificultad: 42-

Resultado: 21 (Exito)

Notas de juego

Creo que debería hacer tirada por esconderse. La hago y si no fuera necesario... pos nada!

 

Saludos

Nanuk

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09/01/2012, 21:32
Director

Llegas a la fuente de la luz que habíais visto. Era una casucha de madera, algo podrida, pero que aún se tenía bien en pie. Había luz en su interior, alguien parecía haber encendido una lámpara de aceite. La puerta parecía cerrada, o por lo menos entornada, pero por una de las ventanas, abierta de par en par, se veía luz.

Al mirar por el hueco de la ventana abierta hacia el interior de la vivienda, te percataste de que no había nadie en ella.

Se veía una mesa de madera algo desportillada, un baúl grande, y al fondo un camastro de paja con alguna manta. No había muchas más cosas, además de una pequeña mesilla con frascos, medio tapada por un trapo mugriento.

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09/01/2012, 21:35
Director

Veis a Gonzalo alejarse sin aparentar mucho miedo, eso sí, sigiloso cual gato.

Se aleja y lo perdéis de vista.

Notas de juego

Hasta que regrese, no lo marquéis en vuestras conversaciones.

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10/01/2012, 23:23
Mara "la barata"

Cogí de nuevo la manta y volví a sentarme en el mismo sitio de antes, agazapada bajo el escaso calor que la húmeda tela me ofrecía. Vi alejarse al muchacho con cierto nerviosismo y recé para que fuese hábil, silencioso y veloz. No le conocía mucho, pero tampoco querría que le sucediese nada malo. Con suerte, volvería en unos minutos portando buenas noticias.

A pesar de la buena compañía, el día se me estaba haciendo eterno, y sabía que si pasaba la noche a la intemperie, con aquel frío y tanta humedad, no iba a poder pegar ojo. Ciertamente me sorprendió que Agustí no se ofreciese para ir en lugar de Gonzalo. Sé que juzgar por las apariencias no está bien, pero Agustí me daba impresión de ser más fuerte y capaz que el joven muchacho, y de estar más ducho en labores de esta clase; por no mencionar que, en caso de tener que hacer frente a algún asaltante en el camino, sin duda Agustí estaba más familiarizado con la espada que Gonzalo (y también imponía más, que eso es fundamental) En fin, tal vez me equivocase, o simplemente el misterioso y silencioso caballero no tenía ganas de hacer el trabajo de un rastreador y le parecía bien la idea de dormir al aire libre. Quién sabe, hay gente a la que lo de dormir bajo las estrellas le encanta. En mi caso, donde esté una cama y un buen techo, que se quite lo demás.

Espero que no tarde mucho y que vuelva con buenas noticias. Dije a Agustí. La verdad que el silencio era algo que me incomodaba en presencia de un hombre. A menudo es habitual que el cliente espere una fluida (y tonta) conversación con su... "amiga" después del "trabajo", pero Agustí no era una persona que facilitase mucho el trato. Era buena gente, sin duda, pero muy distante.

Había pensado aprovechar la intimidad que nos brindaba Gonzalo para intentar seducir a Agustí y ganarme unas monedas, pero la verdad que, estando calada hasta los huesos, trabajar era lo que menos me apetecía. No obstante, si se diese la ocasión, lo haría. Las cosas no estaban como para rechazar el dinero... pero sinceramente esperaba que, si se fuese a dar la situación, fuese cuando ya estuviesemos cómodos y calentitos bajo un techo.