Partida Rol por web

Paul se alegró de que le eligieran para ingresar en el grupo, o por lo menos para las pruebas de acceso. Le gustaba la idea de poder usar sus poderes para algo útil. No le gustaría que fuese para una guerra, si no para ayudar a los demás. Pero eso sólo el tiempo lo diría.
Busco a los demás candidatos, para echarles un vistazo y evaluarlos. Cuando vio a Bethany, esta parecía un poco preocupada, por lo que se acercó a ella por si podía ayudarla.

Hey. No te preocupes. Será como una sesión de entrenamiento. Ya lo verás. 
No nos estamos preparando para la guerra, por más que algunos quieran. Yo prefiero verlo como una oportunidad para poder demostrar a la gente que nos preocupamos por ellos y que podemos vivir juntos.
En algún momento la realidad se tendrá que imponer por más tozudos que sean algunas personas.

Tras la vision, Andrew habia bastante la postura de alborotador: Respiraba con dificultad, sudaba copiosamente y tenia los ojos abiertos como platos. No era solo la vision del director muriendo, sino de como: Abrazado por el fuego, consumido hasta que no quedara nada mas que humo tras el. Casi hasta podia sentir el calor.

-Mierda... solo alcanzo a murmurar mientras se pasaba el dorso de la mano por la frente para enjuagarse la transpiracion.

Escucho la lista de nombres en silencio, y cuando fue escogido para el equipo de avanzada se sintio extrañamente reconfortado, aliviado de que al menos estaria preparado en caso de que llegara lo peor. Recorrio con la mirada a los demas estudiantes seleccionados, al menos a los que tenia conocidos de vista. Parecia un buen grupo en general, aunque no estaba seguro de que todos estuvieran hechos de lo que hacia falta...

Ahora ya no tenía a todo el mundo mirándome por lo que podría responderle sin que me quedara muda de repente, aunque eso sí, no demasiado alto no fuera a convertirme de nuevo en el centro de atención, que me abochornaba muchísimo esa situación.

- No sé qué decirte. - Respondí a Paul. - Después de alguna de las lindezas que han soltado por aquí...

Ya no estaba segura de quienes tenían más ganas de guerra, si nuestros compañeros o aquellos que nos estaban cazando y la iban pidiendo a gritos.

- De toda manera, supongo que alguien tendrá que vigilar al resto.

Siempre había alguien que tenía que hacer de mamá o de papá de un grupo, aunque había alguno que otro que no sabía muy bien si iba a ser capaz de hacer nada en grupo si eso significaba hacer algo que no le gustara.

Adam se quedó congelado por un instante, quedándose a medio levantar y sin poder moverse de la impresión de escuchar su nombre entre los del resto de elegidos para formar parte de ese nuevo grupo, o mejor dicho, participar en las pruebas que seleccionarían a los que lo formarían.

¿Yo?- se preguntó, entre incrédulo y asustado, ya que aunque bien era cierto que había tenido curiosidad por saber cómo sería la selección y entrar en él, verse entre los seleccionados para las pruebas era algo muy distinto, y hacía mucho más real de lo que le gustaría la posibilidad de formar parte de un grupo… algo con lo que no estaba especialmente cómodo. Por un momento pensó en escabullirse y mezclarse entre los demás, como había hecho siempre que se encontraba en una situación que no le gustaba… pero al final decidió no hacerlo. Al fin y al cabo, esconderse ahora no iba a evitar que siguiese siendo un objetivo de los que odiaban a los mutantes, mientras que en ese grupo seguramente le enseñarían a defenderse y sobrevivir en caso de ataque -Además, seguro que nos enseñan cosas interesantes- se dijo, dejando que su infantil curiosidad surgiera una vez hubo acallado, en parte al menos, su temor y reticencia por formar parte de un grupo.

¿Cuándo empezamos?- preguntó con cierta ansiedad cuando terminó de levantarse.

-¡Aaahh! -de pronto, exhaló un aullido cuando las imágenes de la señorita Frost congelaron su cuerpo mientras su cerebro ardía con los recuerdos de aquel fatídico suceso. 

Se quedó quieta en el sitio, con los puños sobre las sienes, apretando fuertemente contra ellas. Se había quedado completamente el shock...

"Fuego..." pensaba, sin poder dejar de repetírselo mecánicamente, balanceándose de delante hacia atrás "fuego... murió en el fuego... en el fuego...". 

Respiró hondo varias veces, tratando de convencerse a sí misma de que aquel fuego no era real, de que sólo estaba en su mente, pero no funcionaba. No estaba funcionando en absoluto. Veía a Justin en el suelo a su lado, quería ayudarlo pero no podía hacer nada para evitarlo. Su corazón estaba cada vez más acelerado, le estaba entrando una taquicardia... y lo peor era que lo sabía y no era capaz de hacer nada para evitarlo... Su cuerpo no respondía, su mente no respondía. Estaba en shock. Las imágenes de la señorita Frost no se le iban de la cabeza, cada vez las veía más vívidas, más reales. Cada vez aumentaba su severidad y se distorsionaba más su visión en la mente de Virginia. El corazón cada vez bombeaba sangre más rápido y ella comenzó a hiperventilar. No pudo evitarlo, de pronto, su mirada se nubló, la sangre dejó de regarle el cerebro y la visión se le volvió negra... Se desmayó. 

En un momento, el grupo se encontró en dos... por un lado, los que estaban intercambiando opiniones sobre la gente.

Por el otro lado, Justin y Virginia, los dos benjamines del lugar.

Para cuando el primero pudo recuperar la conciencia dentro de lo que cabía y mirar a su alrededor, intentó ayudarla a levantarse cuando... no se empezó a levantar. El chico Petruski se quedó blanco como la pez viendo aquello; la mayoría se hubieran quedado clavados en el sitio, pero él no lo hizo. Fuera por el entrenamiento en la Academia, por estar hecho de una pasta diferente a otros o por un efecto de su mutación de adaptación psicológica, su reacción tras el segundo fue empezar a tumbarla, abrir la boca tras un esfuerzo considerable (los brazos de un chico no están hechos para abrir la boca de alguien en tensión) para despejar el paso del oxígeno y la tumbó en la mejor posición posible, sudando.

-¡Ayuda! -les dijo a los otros- ¡Necesitamos ayuda! ¡Llamad a alguien! ¡Profesores! ¡PROFESORES!

Aquella iba a ser la otra cara de la guerra: poderes o no, talentos o no talentos, eran un par de chiquillos perdidos en algo que era mucho más grande que ninguno de ellos, sin ningún punto de referencia al que aferrarse.

Que le ha pasado? Se acerco agitadamente, al ver como otros estudiantes se sentian alertados al ver a Justin aplicar primeros auxilios a Virginia.

Parece grave el asunto, esta Emma se pasa con sus ilusiones. Decía sin saber reaccionar como muchos de los presentes.

Esto se pasa de castaño oscuro. Responde Velocidad ante el murmullo que se iba formando alrededor de Virginia. Estos profesores se estan pasando. Nos quieren utilizar como les convenimos y ahora nos asustan con visiones terrorificas. Seguro que todo es mentira. Lobezno es inmortal

Tenemos que reclamar mas informacion!!! Nos estan tomando el pelo!!! Velocidad tiene razon, tan solo somos sus herrramientas. Las palabras de Velocidad asi como las de Bling empezaron a agitar animos de algunos alumnos, mientras otros quedaban mas callados. Sin duda la incitacion estaba presente, y muchos molestos por la imagen recibida de la muerte de Lobezno.

Abriendose paso entre la gente, se acerca hasta Justin. No somos medicos y creo que en la enfermería estará mucho mejor. Parece que se recupera, pero aun está en estado de shock. Si me puedes ayudar la llevaremos allí.

Agachandose, intenta ponerse en posicion para levantarla de los pies.

Había aplicado los primeros auxilios, y nada se pondría peor. Pero sin llevarla a la enfermería, nada podría ponerse mucho mejor, claro...

Que le ha pasado?

-N-no -se centró- ¡Un ataque de pánico! ¡Está inconsciente!

Escuchaba a todo el mundo alrededor quejarse, las reacciones, los gritos, pero nadie más que un par de personas se acercaron. Dio gracias por la presencia de Nature Girl y Shark Girl. Los ganadores en aquel grupo empezaban por "girl". Le gritó a Velocidad, que estaba delante, dando un discurso en vez de ayudarla. Le tenía una mano tomada y otra a ratos en el cuello y en los labios.

-¡CIERRA LA BOCA Y AYÚDANOS A LLEVARLA!

No lo estaba llevando del todo bien. Estaba activo, que era mucho más de lo que podía pedirse normalmente a alguien de su franja, pero estaba empezando a perder los nervios con todo aquello.

-El peque tiene razon, ya lanzaremos acusaciones cuando Stark este en la enfermeria señalo Andrew, que se habia acercado tras oir los gritos de Justin

-Permiteme, Li pidio en voz baja a Nature Girl mientras alzaba el solo a Virginia con un cuidado impropio del abrasivo chico Petruski, ven conmigo.

Sin esperar una respuesta y con la chica en brazos, Andrew comenzo a trotar hasta el interior de la mansion. Lo que la vice-rectora tenia de buenota parecia faltarle en sentido comun. Mira que mostrarle eso a un grupo de adolescentes inestables y con terribles poderes... Que podria salir mal?

Paul iba a contestar a Bethany cuando Justin gritó pidiendo ayuda. A lo que se sumaron los gritos de otros alumnos quejandose.
La verdad es que él también lo había pasado mal con la visión de Lobezno muriendo. Pero ir echando las culpas no iban a solucionar nada. Y la violencia tampoco. Rara vez lo hacia.

Será mejor que echemos un vistazo a la chica, parece que le ha sentado peor que al resto. Y veamos si la gente se calma un poco. Que ya sólo falta empezar un motin contra los profesores.

Pero cuando el joven se acercaba vio como Andrew cogía a la joven en brazos y se la llevaba a la enfermeria según decia. Por lo que ya no necesitaban su ayuda, allí la atenderían. En su lugar tomó nota mental de quien estaba tratando de crear bulla y quien trataba de hacer algo productivo.

Que raro que ningún profesor haya hecho nada. Ni que trate de calmar los ánimos. Es como si quisieran ver nuestras reacciones.

Antes de que nadie pudiese responder a su pregunta varios gritos provenientes de uno de los alumnos y el consecuente alboroto que se formó a su alrededor llamó la atención de muchos de los que allí estaban, incluyendo al propio Adam.

¿Qué está pasando ahí?- se preguntó mientras se acercaba, curioso por averiguar lo que sucedía… lo cual resultó ser que Virginia no había soportado aquella visión que les habían mostrado y se había desmallado mientras su lado, Justin había gritado para buscar ayuda.

Serán imbeciles- murmuró Adam al ver la reacción de Velocidad y Bling, sin percatarse de que tal vez estaba lo bastante cerca como para que lo escuchasen… aunque tampoco es que le importase. No es que Adam hubiese ido a ayudar a la chica o que estuviese especialmente preocupado por ella, pero al menos tampoco molestaba… y además, según su experiencia la gente que a la primera oportunidad empezaban a armar jaleo y buscar culpables a cualquier cosa siempre acababa siendo un problema.

Oirse llamar "Petruski" como su padre era un dolor... o lo hubiera sido en cualquier otra ocasión en la que no estuviera tan ocupado; los ataques contra mutantes, directores muertos, asaltos mentales y amigas en peligro hacían esa clase de cosas.

Apretó los labios y siguió a Andrew mientras mantenía la vigilancia sobre el estado de Ginia, atento a cualquier otro cambio: no debería haber más peligro, pero no iba a arriesgarse. Además... cuanto antes pudieran salir de todo aquello, mejor. Tenía ganas de gritar a la gente, y de llorar, y de que se acabase todo.

-Ponle... los pies un poco en más alto.

Había quitado todas las cosas que pudieran obstruir, había despejado las vías respiratorias y se había ocupado de comprobar que recibía aire en un intervalo 4-2-3. Era... evidente, simplemente.

Los estudiantes abrieron paso y Justin junto con Andrew llevan a Virginia hacia el interior de la mansion hacia la infermería situada en el primer sótano. Al trote se cruzan con Toad que estaba fregando el suelo y os grita: Cuidado!!! No veis que estoy fregando!!!

Caso o no caso al esgrimido conserje continuaron paso pasillo adelante, hasta llegar al ascensor y bajar. En otro lado, en el patio algunos empezaban a tomar posiciones y una voz llamo la atencion de muchos con sus palabras

La enfermería quedaba en el centro y entrais con Virginia en brazos. En aquellos momentos solo estaba Cecilia limpiando algunos instrumentos medicos, mientras delante suyo observaba unos papeles. Al veros os pregunta:

Que ha sucedido para que Virginia venga así? 

La sala medica contenia tres camillas, junto con aparatos de ultima tecnología, todo a la altura de lo que los X Men necesitan para rehabilitarse de sus batallas.

La cosa no tardó en irse de madre. Era normal que así fuera. La visión que nos había proporcionado Emma era tan real que a mí incluso se me habían saltado las lágrimas, pero vamos, era consciente de que una mujer con sus habilidades podría haberme hecho creer que lo mejor que podía hacer con mi vida era tirarme de lo alto desde un rascacielos.

- Por mucho que protestéis... - Pensé mirando a los que estaban elevando la voz. - Nunca vais a poder saber si es cierto al cien por cien lo que os cuentan. Ahora es tan simple como fiaros o no fiaros de los profesores.

No iba a decir mis pensamientos en alto. No cuando sabía que en cuanto abriera la boca, muchos de los allí reunidos se volverían a mirarme.

- Ni de coña! Que piensen lo que les dé la gana!

Me volví hacia aquellos que pedían ayuda con la desmayada, pero no tardé en ver cómo se alejaban con ella hacia el edificio, imaginaba que hasta la enfermería. No necesitaban que les acompañara nadie para eso, ya iban más que suficientes.

Me alejé un poco de todo el mundo, aunque sin irme del patio y tomé asiento observando lo que pasaba a mi alrededor y escuchando lo que decían unos y otros, sacando de todo aquello mis propias conclusiones.

- Si me hubieran avisado me hubiera traído unas palomitas.

Está en el rincón. En el rincón más apartado de la casa, al fondo del todo, a oscuras. Se acurruca, se hace una bola sobre sí misma.

No quiere salir. A través de las rendijas de la puerta ve luz, rojiza y anaranjada. No, definitivamente, no quiere salir. 

Ve a Logan ardiendo. 

Se asusta, grita, se lleva las manos a la cabeza, cierra los ojos con fuerza...

Entonces oye una voz a su lado, alguien pide ayuda, una voz bien conocida. Pero no hay nadie; allí, en el rincón más apartado, al fondo del escondite más oscuro de la casa, no hay nadie más con ella. 

Otra vez el flash de Lobezno ardiendo cruza por su cabeza. Se encoge todavía más, hasta un punto que jamás habría creído posible. 

Y continúan las voces. Éstas no las reconoce, pero además dicen cosas que no entiende. Entonces interrumpe otra que sí conoce bien también...

Y de pronto ya no está en el rincón. De pronto se siente ligera, vuela. Ya no está en la casa. La sobrevuela. Mira desde arriba la luz anaranjada. Se deslumbra, se asusta y deja de mirar. 

Las dos voces conocidas siguen con ella, mientras vuela, no sabe a dónde. Pero siguen ahí. Eso, de alguna forma, la tranquiliza. Se desenrosca un poco, ya no está hecha un ovillo, mira, pero sólo hay oscuridad. Oscuridad en calma. 

Ya no se siente tan ligera, ya no vuela. Ahora descansa sobre algo mullido, blando. Mira debajo, está tumbada en una nube. 

Una voz diferente, esta vez sí la entiende, pregunta por ella, al parecer. 

Virginia quiere contestar, quiere decir que está bien, pero aún no puede... la nube es tan cómoda...