Partida Rol por web

-Kuyō Shibari- vacilo un momento tratando de recordar el canto...y por eso fallo.*

Tsk...

Pienso unos momentos.

Y otra vez esa risa molesta.
- la capitana no sabe hacer kidos
Dice burlándose

-Tsk...

Me lanzo a por él, sencillamente un golpe controlado en el estómago, para dejarlo ko sin matarlo. Es un golpe muy fuerte, pero no peligroso.

¿Le dolerá a ella?

Kenin sale volando tras el fuerte golpe en el estómago hasta chocar contra la pared mas cercana jaciendo un gran agujero. Ha quedado inconsciente y miles de trozos de hielo salen por todas partes para, en menoa de cinco segundos, recomponer a la zampakuto materializada ahora tan transparente como siempre. Ríe.
- muy astuta taicho. Dejar ko al que no obedece. Me pregunto si cuando se levanten todos a los que ha atravesado la zampakuto de kenin también podras dejarlea simplemente inconscientes. Que mala pata, no crees? No llevas ni un mes como capitana y ya te has quedado sin escuadrón...- ríe nuevamente- bueno. Creo que va siendo hora de irnos de aqui. La misión en el escuadron 9 ha sido completada.
Toca a kenin y ambos se convierten en agua que cae por la alcantarilla.

-Reza por que no te encuentre.

Ojalá no tuviera que quedarme....si no la sigo ahora perderé el rastro. Tsk.

-¡Hisagi, todo el mundo, muertos y heridos incluidos, al gimnasio ya! Y mantén los ojos abiertos.

-¡Tenteiküra! Hachi san ¿Puedes venir al noveno escuadrón, necesito pedirte que hagas un par de cosas.

Recupero mi haorí y me lo pongo.

Hisagi se levanta con dificultad. Tiene una herida en el coatado pero no se queja. Asiente con la cabeza y se marcha. Harán falta bastantes shinigamis para que carguen a loa heridoa y muertos.

Hachi llega hasta ti raudo y veloz, con la cara banada en sudor, agotado.
- que necesitas? Te aviso que me estais llamando de todos sitios...

-Me lo imaginaba...lo siento pero no soy ni de lejos tan buena como tú con el kidoh. Usa mi reiatsu si puedes. Necesito que levantes dos barreras alrrededor de dos grupos...los muertos y los heridos. Están yendo todos al gimnasio. Por lo quem e han dicho...podrían levantarse y atacar, preferiría que eso no pasase.

Hachi asiente con la cabeza y se pone en camino hacia el gimnasio.
- creo que neceaitaras tu reiatsu querida shihoin taicho. Lo que me pides no requiere mucho esfuerzo.
Llegáis al gimnasio y ya están separados por " categorías" . Hachi te mira y te asiente antes de chasquear los dedos y hacer dferentes movimientos con las manos y a recitar el canto para que aea mas efectivo. Las barreras aparecen y se incrustan en el suelo. Ya no tienen escapatoria.
- hecho taicho. Y ahora que? Hiyori y lisa estan deacontroladas.

-Si me necesitáis, iré, no dudes en llamarme. Pero esto ha pasado por que no estaba aquí. Tengo que ver que hacer. Gracias Hachi-san.

Me giro a los demás.

-Escuchad, es posible que los que han sido heridos o muertos por la zanpakutoh de Kenin, se levanten y ataquen. Por eso las barreras. Que todo el mundo esté atento, no tengo duda de que las barreras aguantarán...pero si no lo hacen, vencedlos sin matarlos. Si podéis. Y si no...ya sabéis cual es vuestro deber.

Todos los que pueden asienten enérgicamente con un " hai!! Taicho!!!". Hisagi esta apoyado en la pared dentro de la barrera de los heridos. Suspira y tiene la mano ensangrentada.
Evita mirarte quizás avergonzado por no haberse podido ocupar de la division en tu única ausencia.

Cual sera el siguiente paso? El seireitei es un caos.

-Hisagi. Te dije que te curaras eso. Te necesito al cien por cien. No creo que una simple herida baste pero...quizá sí. Por eso hemos dejado fuera vuestras zanpakutoh. Aunque estés encerrado ahí eres el segundo al mando. Tienen que verte fuerte y confiado. Y si comienza a pasar algo y no estoy...usa el tenteiküra.

-Por ahora haz lo que puedas primero por tí, y después por los demás, sé que no es lo que mejor se te da, pero conoces el kidoh curativo.

Busco con la mirada a mis oficiales 3º, 4º y 5º.

El tercer y la cuarta oficial estan en la zona de los heridos pero no estan muy malheridos y andan curando a los demas con rapidez y eficacia. Mizu no está.

Llega justo en ese momento. No está herida pero si cansada.
- taicho! - te saluda con admiracion- menos mal que llegó.nos atacaron y me vi obligada a defenderme. Sobreviví de kenin y luego vinieron dos mujeres extranas hechas de hielo. Las venci como 100 veces pero volvian a aparecer. Acabo de notar tu reiatsu hace un rato. Cuáles son las ordenes, Taicho?

-Mizu, es posible que todos los muertos y heridos comienzen a atacar, por eso hay barreras. Sí eso ocurre...tomarás el mando. Aún así, si no estoy aquí tu serás la encargada de llevar a cabo las órdenes de Hisagi, ya que él no puede salir de ahí. ¿Lo comprendes?

-¿Esas mujeres te dejaron irte sin más?

La miro extrañada.

-¿Qué ocurrió y donde estaban?

Mizu:- ¡Claro que no me dejaron irme sin más! Con un ataque en área de mi zampakûto las destrocé una vez más. Tardan unos segundos en volver a recomponerse, así que aproveché esos segundos para largarme de allí. Estaba agotada y necesitaba salir de allí. Viendo cómo han dejado a los demás creí que sería más útil si no me tocaban. Estaban cerca del decimotercer escuadrón. Pero hay más problemas... Hiyori-san y Lisa-san están como hipnotizadas y no somos capaces de reducirlas. No queremos matarlas... ¡Debe de haber alguna manera de solucionar todo esto, taicho!

Parece nerviosa y desesperada. Después de destrozar al enemigo como 100 veces y ver que no les afectan sus ataques, piensa que hay poco que hacer.

-Tsk....¿Podrás encargarte de la situación aquí? Haz caso a Hisagi. Iré a ver que puedo hacer.

Tsk...no quiero irme pero....

Marcho.

De camino por las calles llenas de sangre y destrucción, te encuentras con Hitsugaya aguantando los embistes de Hiyori.

Hitsugaya:- Oi... ¿quiere estarte quieta?

Pero Hiyori no se atiene a razones y no para de atacar con máscara y todo al capitán de la décima. Justo del tejado aparece Lisa que le ataca por el aire aunque el capitán es rápido y logra frenar su ataque.

Hiyori y Lisa están frente a él y cuando menos lo esperais, a las dos las rodea todo el grupo de misiones especiales del segundo escuadrón. Aunque ni Omaeda ni Soi Fong están con ellos.

Ellas dos, como hipnotizadas y sin variar esa expresión que recuerdas en Kenin los miran, zampakûto en mano. Solo significa peligro.

-Hitsugaya, no seas blando. Pegales hasta que se desmayen. ¿Han aparecido las tipas esas? Si las destruyes se rehacen...aunque creo que se me ha ocurrido como lidiar con eso.

Observo la zona.

- No es tan fácil. Son muy fuertes y no quiero tener que luchar hasta matarlas. ¡Son de los nuestros! ¿Y qué se te ha ocurrido? Las he estado buscando pero no las encuentro. 

-Yo he visto a una...pero se deshizo en agua, junto con Kenin, y se metió en las alcantarillas.

Me pongo a su lado para que no escuche más gente.

-Cuando se las rompa, inmediatamente encerrarlas en dos barreras, la mitad de su esencia en cada barrera, tal vez así no se pueda reformar. No sé si funcionará...como detalle, tampoco les gusta tocarme, se empiezan a evaporar así que quizá sea una ventaja subir la temperatura.

- Mi plan era diferente.-comenta sin apartar la mirada de las dos chicas que continúan paradas.- Pero puede que el tuyo funcione. Más rápido puede que sea.