Partida Rol por web

No sabíais si iba a poder destrozarlo en mil pedazos...pero la voz de Alex hacía Armand hizo que el "profesor" parase su ataque hacía el chico pelirrojo que estaba entre llantos y sollozos intentando huir.

Giró la cabeza, viendose medio rostro carcomido por una especie de brea tan pastosa que parecía no caerse nunca, como una máscara deformada. Uno de sus ojos, en este caso rojo como un rubí que parecían estar mirando a todos lados con un movimiento incontrolado se centró en vosotros...

Era hora de tomar decisiones.

Dios mío, dios mío... Noté como se me helaba la sangre en las venas y un escalofrío recorría todo mi cuerpo.
-¡Tenemos que salir de aquí! ¡YA! - en ese momento solo una idea cruzaba mi mente - ¡Corred!
Y diciendo esto apresuré el paso.

Al ver como semejante cosa se centraba en nosotros, lo primero que hice es salir corriendo de allí. Corrí lo más rápido que pude para que aquella cosa no me atrapara.

Huir de aquí vamos!!! Dije cuando salí corriendo.

Tiempo...

Necesitamos tiempo...

Y un jodido héroe, claro...

- A ver, salid de aquí y seguid la puta luz de la mierda esa. Abrid bien los ojos, esa era la clave para encontrar la salida de este sitio. - Dijo Michal mientras apretaba el cuchillo con fuerza.

Miró al engendro.

Era feo.

Por dios que era feo.

Pero eso no le importó. Si en algún momento iba a hacer algo, tenía que ser ahora.

Negó con la cabeza, y con todas las fuerzas que le quedaban, se lanzó hacia el bicho dispuesto a sacarle el ojo rojo ese por la nuca.

Alex sintió nauseas y estuvo apunto de vomitar. Comenzó a respirar profundamente para tratar de recuperarse pero aquello no daba resultado, estaba apunto de morir y aquella cosa sería la causante "¿Que más da ya todo? Roberto está muerto"

Deseaba haber sido más valiente y enfrentarse a aquella cosa, morir allí mismo y acabar con todo, pero el miedo se apodero de él y retrocedió. Primero dio un paso atrás, luego otro... - Armand... el cilindro... Siguió retrocediendo. - ¡venga joder! .- grito Alex desesperado sin tener claro que poder hacer en aquella situación, nunca hubiera creído que aquello fuera posible.

Continuó retrocediendo poco a poco como quien retrocede de una fiera que esta apunto de atacar. Alex giró el rostro hacia Michal - ¿Pero de que coño hablas? ¿Que luz?.

Alex no aguantó más ahí parado, comenzó a correr hacia el coche, ya estaban un poco más cerca.

Melissa no dirigió su mirada hacia aquel ser salido de las pesadillas, pero si miró con sorpresa y una infinita tristeza a Michal cuando este dijo lo que iba a hacer y se alejó. Podría haber intentado hacer algo, impedírselo, o decirle algo para que se arrepintiera.

-Suerte... y no te dejes matar... -dijo al final con un tono triste, y a la vez reprochándole que no intentase salir con vida de aquello, para luego seguir a Alex a la carrera, queriendo no volver la mirada atrás.

La gran mayoría no sabíais que hacer. Michal se tiró hacía el profesor tras una breves palabras en un puro acto heroico que a muchos os parecería muy estúpido en ese momento pero que para el tenía todo el sentido del mundo. Armand se quedó en el sitio sin saber muy bien que hacer mientras Monique salió corriendo hacía donde ese pequeño laser apuntaba; el aparcamiento contrario hacía donde todos iban. 

Alex, Melissa y Miller corrieron desviándose ligeramente del trazado de Michal pues el coche de Alex estaba quizás demasiado cerca de semejante bicho que parecía haberse centrado en ellos. Tendrían que pasar muy cerca de el y salir sin rasguño alguno. 

Tras salir corriendo hacia donde apuntaba el láser, en mi cabeza solo había uno ligeros pensamientos.

Corre y no vayas hacia el coche, tendréis que salir de allí con otro vehículo...no mires hacia atrás, corre!!!

Podía notar mis latidos desbocados, como si el corazón quisiera salirseme del pecho. Todo a mi alrededor iba demasiado deprisa y sentía como mis manos empezaban a temblar levemente. Intenté aclarar mis ideas a la vez que corría. No podíamos ir a por el coche de Alex, era demasiado peligroso así que tendríamos que buscar otra opción, entonces vi como Monique se desviaba hacia donde apuntaba el láser.
-¡Seguir a Monique! ¡No podemos coger el coche de Alex es un suicidio, VAMOS! - y gritando esto dejé de pensar para solo concentrarme en mi respiración y en mis pies que ya se movían mecánicamente.

Mientras los demás seguíais al punto rojo que atravesaba una de las esquinas del edificio la pelea de Michal con el ser comenzó. El chico le atacó y logró clavar el cuchillo hasta la mitad en el "torso" o lo que sería su torso haciendo que un chillido gutural saliese del monstruo. 

Pero no todo eran buenas noticias...un golpe en el estómago le envió al menos a 10 metros más allá pegando un espaldazo contra el duro asfalto, justo en el grupo que corría hacía el otro lado, dejándolo a un metro escaso de Melissa que iba una de las primeras.

Ahora si que os había visto, a todos.

Michal se dolió del golpe, y sacudió su cabeza antes de ponerse en pie y ver que tenía todos los huesos en su sitio. Le dolía el estómago, y eso podía significar que podía tener algunas magulladuras internas, pero eso no hizo más que enfurecerlo aún más y más.

Apretó con fuerza el cuchillo mientras miraba a sus compañeros.

- ¿Es que no sabéis correr un poco más fuerte? Venga, ahora resulta que a golpes yo corro más que vosotros. - Dijo con una sonrisa, pero apretando los dientes. - Creo que es hora de que os apresuréis, por que la cosa esa viene a por vosotros y no sé cuanto tiempo más podré resistir y cuanto tiempo más podré daros. Así que, ¡corred coño! -

No dijo nada, solo continuó corriendo sintiendo como la adrenalina le hacia bombear el corazón más rápido. Escuchó como todos decían que la luz roja parecía segura pero Alex no estaba tan seguro. Aquello más bien parecía señalar la zona donde caerían misiles antes que un lugar donde refugiarse.

Vamos! .- cambió de rumbo y empezó a correr hacia el lugar donde señalaba la luz, en dirección a Monique. Dio un vistazo a Melissa pero fue todo lo que pudo hacer, en aquel momento solo quería escapar de aquel monstruo.

Continué corriendo y puede ver como Alex me seguía. Pero al escuchar a Michal el decir que no parásemos de correr, hacia que me plantease el parar e ir hacia él. No podía olvidar tan rápido aquellos sentimientos que tenía hacia él, pero también sabía que si iba hasta allí no le iba a gustar. Ya que él siempre ha querido que de aquí saliera con vida y no lastimada.

Agité mi cabeza y mirándole desde lejos, no hice caso a mi cabeza y mis sentimientos y seguí corriendo lo más rápido que podía.

Melissa siguió corriendo a toda pastilla hacia donde señalaba el punto, tenía un plan, y si funcionaba... bueno, todo dependía de lo que aguantara Michal antes de que acabara adornando su sangre el asfalto. Deseaba decirle algo, gritarle que se volviera con ellos o darle ánimos, pero eso podría distraerle de una manera fatal, por lo que se limitó a correr en silencio, con los ojos anegados en lágrimas de miedo y tristeza...

Por fin cruzasteis la esquina, siendo un escarabajo (coche) de un color verde oscuro y con apariencia destartalada lo que señalaba la dichosa lucecita.

Michal observó como el revienta estómagos parecía observar de reojo al chico pelirrojo que estaba tendido en el suelo a pocos metros pero en dirección contraria.

Una presa inconsciente o una que corría, esa era la cuestión. Fuese como fuera eso os daba un par de segundos más preciados que el diamante mas grande de ese mundo; una oportunidad.

- ¡Vamos, al coche! - Dijo Michal. - Yo os cubro en la retaguardia. Si el bicho se gira hacia aquí, yo me encargo de él, vosotros rápido, subid a ese escarabajo... -

Michal no sabía que hacer, pero no iba a arriesgar su vida por salvar a una sola persona, si puede hacer que la mayoría salgan de allí con vida. Al final, la frase el fin justifica los medios cobró algo de sentido para él.

Retrocedió junto con el grupo, en dirección al coche mientras no le quitaba el ojo de encima al bicho que tenía justo a pocos metros de dónde él estaba.

Le dolía el abdomen.

Seguro que necesitaría un médico pronto, pero ahora, no era cuestión de pensar en eso.

Tenían que salir de allí.

Y rápido.

Apretó el último sprint para llegar al coche. "¿Quien tiene las llaves de ese coche?" .-recordó que Armand tenía unas llaves que no sabía a que vehículo pertenecía, sería mucha casualidad que fuesen del coche que señalaba la luz. Demasiada. - ¡Las llaves! ¡Dadmelas! .- gritó al acercase al viejo escarabajo. "que arranque..." - venga... .- susurró. 

- ¡Armand las llaves! .- miró a este esperando que se las lanzase.

Poco ya le importaban Michal o el chico pelirrojo, no se iba a enfrentar a un jodido monstruo devorador de hombres por nadie.

Corrí todo lo que podía sin mirar hacia atrás, pero escuchando las palabras de aviso para montar en el coche que había aquí. Puede ver como Alex se adelantó para llegar el primero y acarrar aquel coche.

Pero por mucho que llegáramos no podríamos hacer nada si no teníamos las llaves. Llegué al coche después de Alex y algo nerviosa decía.

Vamos, vamos, quién tiene las llaves.