Partida Rol por web

Conforme te vas acercando a la puerta, los guardias te apuntan con sus rifles de asalto. Cuando estas a pocos pasos uno de ellos te pide que te detengas y te identifiques. Les cuentas tus intenciones y te miran de arriba a abajo. Despues uno de ellos se acerca y te coge por el brazo mientras le dice a su compañero que vigile.

Asi que eres muy valiosa, eh? Bueno, sera mejor que eso lo decida el general. No deberias haberte metido aqui, jovencita.

Caminas junto al guardia por el interior de la base, hasta que llegais a una amplia sala circular con un trono en el centro, donde se encuentra sentado un tipo alto, de unos dos metros.

General, esta intrusa aparecio de repente ante la puerta, no sabemos sus intenciones, pero dice ser muy valiosa.

El general se levanta de su trono, ahora puedes verlo mejor. Debe medir dos metros y pico, parece llevar una armadura que recubre su cuerpo, y una tunica oculta su cara, aunque mas te llama la atencion es la especie de babosa naranja que lleva alrededor del cuello. Supones que sera uno de los animales que llevan de contrabando, parece que lo utiliza de mascota. Se acerca hasta ti y empieza a examinarte detenidamente.

Asi que te crees muy valiosa, eh? Y dime, en que te basas para decir eso? Ten en cuenta que tu vida puede depender de tu respuesta.

Me acerco sonriente en todo momento guiado por el guardia, mientras avanzamos voy memorizando lo que puedo del recorrido y la seguridad del lugar.

General, es un honor y un placer estar por fin ante usted... mi nombre es Anen Sei y estoy buscando trabajo, estoy convencida de que me encontrará muy útil en cualquier función y no se sentirá decepcionado... como quizás haya podido hacerlo alguno de sus guardas.

El general da una vuelta a tu alrededor, con los brazos cruzados a la espalda.

Bien, bien, bien. Asi que Anen Sei busca un trabajo, eh? Dime niña, que te hace pensar que necesito trabajadores? Ademas, no se nada de ti, podrias ser una espia de algun enemigo del Sol Negro. Bueno, haremos una cosa, tu haces un trabajillo para mi, y despues me pienso lo de contratarte.

No se como, pero en la ciudad la gente empieza a hablar mas de la cuenta. Todo el mundo parece tener una idea de lo que hacemos y eso no me complace. Necesitamos dar ejemplo, sabes? Quiero que elimines a un tipo, un ithoriano llamado Wambaw Niunm. Treme una muestra de su muerte y veremos lo que podemos hacer contigo.

Cuando acaba de hablar se da la vuelta y vuelve a su trono. Se sienta y te mira, esperando a ver cual es tu decision, si cumplir el encargo... o morir.

Sólo hay dos guardias en el acceso, uno de ellos ha dejado su puesto para traerme ante su presencia sin siquiera haber comprobado que voy desarmada, los sistemas de seguridad de los pasillos son escasos y si quisiera podría haberme escabullido hasta aquí eliminándole sin que se hubiera percatado de mi presencia General.

Sonrío lanzando una mirada al guarda que seguramente está más desconcertado de lo que cabría esperar.

Podría también haber introducido explosivos suficientes para volar toda esta habitación y a nosotros con ella General, ¿aún se pregunta por qué creo que necesita nuevos hombres... o mujeres a su servicio?

Sonrío pícaramente.

Está desperdiciando mi talento enviándome a eliminar a un chivato que ahora mismo se encuentra camino de un destino peor que la muerte, no tuve que torturarle demasiado para que me indicara dónde encontrarle de hecho ni siquiera tuve que hacerlo. Digamos que hay cierto Rancor que va a cambiar su menú, pero si usted lo prefiere intercepto al contrabandista al que se lo vendí se ve que un Hutt tenía intereses en él.

Recorro ligeramente la habitación.

Ahora si nos dejamos de estúpidas suspicacias, creo que me he tomado suficientes molestias para ponerme al servicio de los Vigo, mi ambición sólo es superada por mi lealtad General. Y si no quiere desperdiciar mi talento póngame a cargo de una nave, no encontrará mejor piloto.

El general se levanta de su asiento de nuevo y esta vez avanza velozmente hacia ti, te coje del cuello y te levanta como si no pesaras nada.

Niña, has sobrepasado con creces mi limite de paciencia! NADIE me habla con esa insolencia! Esta claro?! Por otra parte me gusta tu estilo, tienes agallas.

Te deja en el suelo y empieza a moverse hacia el soldado que hay alli depie. Lo mira de arriba a abajo, y antes de que te puedas dar cuenta, su cabeza esta rodando por los suelos. Segundos despues, el cuerpo del soldado cae tambien, haciendo que un enorme charco de sangre aparezca a los pies del general.

No me gusta que no registren a los intrusos, aunque niña, has de saber que no podrias haberme matado ni aun siendo una maldita jedi. Parece que hay una vacante en el ejercito, bienvenida. Aunque de momento no pienso darte ninguna nave, necesito a alguien para vigilar cierta mercancia... digamos delicada. A la salida te esperara un transporte que te llevara a tu zona de trabajo, alli te explicaran lo que debes hacer.

Me limito a sonreir mientras me coje del cuello, mi plan ha salido a la perfección hasta el momento.

No esperaba menos de usted General, al instante me pongo a sus órdenes.

Me dirijo hacia la puerta de salida y busco el vehículo.

De momento no General, pero pronto un Jedi acabará con su mísera vida...

Cuando llegas a la salida ves un enorme carguero rodeado de soldados con armadura negra. Uno de ellos se acerca a ti y comienza a hablar con un tono firme.

Tu debes ser la nueva recluta. Vamos, te explicare en que consiste el trabajo.

Subis al transporte que se pone en marcha inmediatamente. Por dentro parece mas pequeño que por fuera, y que este hasta los topes de soldados no lo hace mas confortable. El tipo con el que entraste empieza a explicarte de que va tu trabajo.

Hace poco encontraron en un bosque alejado de todo una especie de babosas naranjas, y parece ser que son muy valiosas, asi que tu trabajo sera buscar y capturar de esas babosas e introducirlas en cajas. Como ves no es excesivamente dificil, pero debes tener mucho cuidado con no lastimar a ninguno de esos bichos. Alguna pregunta?

Subo al transporte y me acomodo lo mejor que pueda.

¿Qué tienen de especial esos bichos? ¿Alguna consideración a la hora de capturarlos para no dañarlos?

Qué asco...

¿Dónde he de llevarlos una vez los tenga capturado? No se me ha dado equipo ni instrucciones.

Tranquila, las cajas para dejar a las babosas estaran alli mismo, como cogerlas depende de ti. Hay algunos que las atrapan con las manos, otros utilizan trampas... pero no son demasiado rapidas, que digamos, no hace falta correr demasiado.

El soldado hace una pausa y se acerca un poco mas a ti.

Siendo nueva como eres no deberia decirtelo, pero tengo debilidad por las chicas guapas. Por lo visto, esas babosas son una especie de arma contra los jedis, aunque no se como se utilizan. Supongo que tendran algun tipo de veneno o algo asi. Pero si te preguntan yo no te lo he contado, eh?

Tranquilo soldado, quizás te lleves tu recompensa después de la misión.

Sonrío al soldado y le acaricio ligeramente la cara.

Así que es eso, tendré que conseguir un gusano para mi.

El vehiculo para y se abren las compuertas. Los soldados empiezan a bajar y a dispersarse por el inmenso bosque que se extiende ante ti. Arboles milenarios crecen sin control por todas partes, la vejetacion cubre todo el suelo, excepto unos pocos claros que parecen hechos por el hombre, tal vez por los soldados.

A unos pocos metros a tu izquierda ves un monton de cajas apiladas, algunas con la tapa levantada mientras los soldados van depositando de vez en cuando alguna de las babosas naranjas. Ahora que las ves reconoces que son como la que el general llevaba en el cuello durante vuestro encuentro. Una sensacion extraña empieza a invadirte, no te encuentras demasiado bien, pero si quieres continuar con tu tapadera sera mejor fingir lo contrario.

Te internas en el bosque intentando descubrir algun gusano a traves de la fuerza, pero no sientes nada. No es como cuando no encuentras algo, sino que no hay nada, un vacio completo que se extiende por todas partes. Es como si la fuerza no existiera en aquel lugar, al menos en ciertas zonas. Entonces te das cuenta de algo que no acabas de creerte, los gusanos crean agujeros en la fuerza, no son un arma contra los jedi, sino una defensa, un muro infranqueable y el Sol Negro esta cargando miles de esos bichos.

Me alejo lo suficiente de cualquier otro soldado intentando que no se note el malestar y recojo algún gusano de vez en cuando.

En ese momento conecto el intercomunicador.

Maestra, ya lo tengo... he descubierto qué es lo que están haciendo y me he infiltrado en la organización... los gusanos no son un arma sino un escudo contra la fuerza la sensación que producen es horrible... tengo que mantener la tapadera, luego nos comunicamos.

Cada vez que tocas una de las criaturas, notas como un vacio ocupa tu interior. Una sensacion extraña y molesta, ya que te sientes completamente desprotegida, aun asi sigues cogiendo babosas para mantener tu tapadera. En un momento en que nadie te vigila, sacas tu intercomunicador y contactas con tu maestra. La voz de Kael suena en el pequeño aparato.

Anen Sei, no te arriesgues mas de lo necesario, recuerda que solo vinimos a por informacion y eso es lo que tenemos. Cuando puedas vuelve a la cantina donde nos separamos. Debemos informar al consejo inmediatamente. Y no te acerques demasiado a ese general, tengo un mal presentimiento.

Maestra estoy en una posición inmejorable para detener a ese tipo, no podemos dejarle ir sabiendo lo de los gusanos.

Sigo recogiendo gusanos aunque a un ritmo más lento mientras mantengo la conversación con mi maestra.

Hay un momento de pausa en el intercomunicador hasta que tu maestra vuelve a hablar. El tono serio que tenia antes ha desaparecido y vuelve a hablar con un tono mas suave y alegre.

Eres incorregible, no se si te he enseñado demasiado bien, o demasiado mal. De todas formas no hagas nada contra el general hasta que estemos juntas. Intenta enterarte de donde van esas cajas y que piensan hacer con ellas, espero que no esten planeando un ataque a gran escala contra los jedi. necesitaremos tambien uno de esos gusanos como prueba, asi que si puedes coger alguno estaria bien.

Entonces no tardes demasiado, no sé cuánto podré esperar... el sistema de seguridad es bastante deficiente, no te será muy difícil colarte allí y encontrar su despacho.

Le doy las indicaciones necesarias de lo que observé antes.

Esta bien, cuando acabes de hacer el trabajo imagino que os llevaran de vuelta a la base, entreten al general en la sala hasta que llegue yo, estare vigilando y entrare detras de ti. Nos vemos en un rato!

Terminais la conversacion y vuelves a tu trabajo. Unas horas despues un soldado te detiene y te dice que es hora de volver. Puedes ver como cargan las cajas en varios deslizadores, pero no puedes ver hacia donde se dirigen ya que tienes que entrar al transporte que os llevara de vuelta. El soldado que te acompaño para venir se vuelve a sentar a tu lado y te pregunta como te ha ido el dia.

Estos bichos son realmente repugnantes, pero es una forma más de ganar dinero... no debe ser necesariamente placentera ¿no?

Intento evitar que se me note la cara de asco por llevar una muestra de uno de los bichos en el bolsillo.

El transporte para, abre sus puertas y los soldados empiezan a bajar. Vuelves a encontrarte ante el gran edificio del general Rieek'All. Uno de los soldados se acerca a ti y te pide que le acompañes.

Vamos, el general quiere ver como te has portado hoy.

En la puerta vuelve a haber dos guardias, aunque esta vez tampoco te registran. El pasillo sigue teniendo minima seguridad y no tardais en llegar ante la presencia del general.