Partida Rol por web

abre tu lobito y te sigo, no se que edad tienes libre tu para coincidir sin que cambie tu argumento

Caminaba por el templo, acababa de regresar de ver a mi madre y por una vez, los maestros no se habían enterado hasta que veo a Ben-ju, un padawan que me sacaba un año, enfrente de mí, era humano, la raza que mas odiaba en toda la galaxia, asi que lo saludo con un gesto de la cabeza.

Siria Kenpbrum, siempre serio, siempre mirando mal, siempre tentado a preguntarle por que me mira asi, en el templo parecia buena persona, pero cuando me miraba, tenia esos ojos especiales, que me hacian pensar que tenia algun problema con migo, pero como podia ser eso posible, yo nunca habia hablado con el, pero esa vez estabamos fuera del templo y eso me hacia envalentonarme, estaba cansado de la incertidumbre era hora de preguntarle.

-Siria, espera por fabor- digo situandome a su lado

Continuo andando lleno de odio...hasta que al final recuerdo que eso no era bueno y me quedo quieto -¿Qué quieres Ben-ju?-Pregunto con una voz peligrosamente modulada.

- Saber la razon por la que siempre me miras con Odio, no se si e hecho algo que pueda molestarte si es asi me disculpo de antemano, pero no comprendo por que siempres me miras de esa forma-

-¿Te has mirado al espejo? Eres un humano, la raza mas despreciable de toda la galaxia, por eso te miro con odio, porque eres lo que eres-Contesto sin girarme, mientras sigo dándole la espalda.

- Si es cierto soy un humano y no negare eso que has dicho de mi especie- la verdad es que no compartia su opinion para nada pero no pensaba contrariarle para nada- Pero hasta donde yo se uno no elije en que raza nace, sencillamente nacemos y punto y deverias darme la ocasion de hacer algo despreciable para ganarme tu desprecio-

Ben-ju Sipel, hay muchos padawans en este templo ¿Por qué vienes a darme a mí la paliza? No me caes bién, y el por qué no es de tu incumbencia-Hago una pausa-Y no te preocupes, acabarás por hacer algo despreciable-

- Por que tu eres el unico que tiene una mirada de desprecio y dada mi situacion actual eso no puede ser por ningun motivo bueno, si te preocupa que como humano pueda hacer cosas despreciables supongo que tu tambien deverias estar preocupado- al fin y al cabo el tenia toda la pinta de ser humano

-No no soy un despreciable humano como tú, no se te ocurra pensar eso Ben-ju, ni por un segundo, ya bastante es contener esta pinta como para que me digas que pertenezco a tu despreciable raza-Contesto de malas maneras.

- LO primero que tendriamos que aclarar es que no es mi raza, es la raza humana, yo solo pertenezco a ella por que no me queda mas remedio y lo segundo es que siento haberte llamado humano, pero comprenderas que no es facil saber que no lo eres-

Relajé mis músculos a mi madre no le hubiera gustado que le tratara así, al fin y al cabo, se había enamorado de un humano -Hablemos Ben-Digo mientras le hago una señal para que me siga a mi habitación en el templo.

Cuando llegáis a la habitación encontráis al compañero de habitación de Siria, Pnorr, que se está despertando.

- Hola- saludo al compañero de Siria en cuanto lo veo en la habitación, es otro aprendiz del que no se apenas anda, realmente mi vida empieza a parecer muy extraña nunca hablo con casi nadie.

-Buenos días Pnorr-Pnorr no me preucupaba ya estaba al tanto de lo que era, aparte de Daesha era en quien mas confiaba, me siento en mi cama y le digo a Ben -Mi madre, es una twi'lek, por eso no soy humano, pero ¿Acaso quieres saber por qué odio a tu raza? eso sería una gran muestra de confianza por mi parte y no me gustaría que nadie supiera de esto mas que mi círculo cercano, al cual, no perteneces-

Se incorpora cuando entran en la habitación.

-Buenos días a ambos - Dice.