Partida Rol por web

Por poco no me dió el sable de Daesha. Pero con su ataque había dejado uno de sus costados al decubierto. Sin pensar, ataqué en ese costado.

La espada de Siria golpea en el costado de Daesha provocando una quemadura en ese lugar.

1-0.

Daesha observó que esquivaba su golpe, lo que no esperó fue como el sable de Siria golpeó su costado haciendo que emitiera un gemido de dolor desviándose unos pasos para alejarse y volver a concentrarse en el combate y no en el dolor.

- Un golpe... ya me lleva un golpe... - Pensaba. Preguntándose el motivo por el que había continuado en el Templo, preguntándose porqué quería ser entrenado por un Maestro Jedi, supongo que lo vería como su mejor escapatoria... haría lo posible por no ponerselo facil.

Daesha corrió hacia él intentando golpear con su sable en el pecho, pero estaba visto que la Twi'lek no estaba nada concentrada.

Vamos Daesha. Puedes hacerlo mejor, eres mucho mejor jedi que yo.

Me eché hacia atrás con un salto que parecía ser un baile y después me lancé  de nuevo al ataque, Daesha había vuelto a dejar sus defensas bajas cuando había atacado, y yo no era de los que desaprovechaban esas oportinidades. Así que sin pensarlo dos veces di un golpe con mi sable en la boca de su estómago. Si no hubieran sido sables de entrenamiento...No quería pensar en eso.

El sable láser impactó en el vientre de Daesha que emitió un quejido de dolor. El combate había terminado.

-El combate ha terminado. - Declaro cuando de nuevo Daesha sufre el golpe. Soy consciente de por qué ha fallado, no es lo normal que le pase algo así. - Que comience el siguiente combate.

Daesha dejó caer al suelo el sable por el ultimo golpe propinado por su rival, era el segundo golpe y por tanto había finalizado el combate, no se sentía mal del todo, es lo que había esperado. Con una mano en la quemadura del estomago atrapó nuevamente y se retiró no sin antes hacer una leve reverencia a Siria sin mirarle, era tan solo el protocolo lo que hacía que se inclinase.

Me quedo durante unos instantes mirando a Siria Kenpbrum.

Es nuestro turno, por lo que me dirijo rápdiamente a la posición y enciendo mi sable de luz.

El otro contendiente también se dirige a su posición y conecta su arma listo para el combate.

Observa que Zakarías tarda más en reaccionar, por lo que se lanza sobre él. Lamentáblemente, el humano consigue desviar el golpe.

Noto como el maestro me mira, pero no me atervo a decir nada. Sa bía que a pesar de haber ganado era el que menos posibilidades de salir elegido tenía...

Pnorr se me hecha encima antes de que pueda darme cuenta, pero logro esquivarlo y conraatacar sin demasiados resultados.

Consigue evitar el golpe por un momento y contrataca al humano, este de nuevo bloquea el golpe y le mira confiado como si esperase un fallo para penetrar su defensa.

De un golpe alejo el arma de Pnorr y me coloco en una posición defensiva a la espera de que este realice un movimiento en falso.

De forma demasiado precipitada se lanza hacia la posición de Zakarías y este esquiva con facilidad el golpe.