Escena previa a la partida. Para empezar rolear los personajes y conocernos.
En todas mis partidas siempre me gusta crear la escena de "Días de rutina". Esta escena siempre tiene lugar en los días/semanas anteriores al inicio de la propia partida. Ha sido hecha con la clara intención de rolear con los personajes mientras se ultiman los preparativos. Así, cuando todo empieza de verdad, ya conozco mejor vuestros personajes, incluso vosotros mismos empezáis a conocerlos mejor y a definir con mayor claridad y calidad su personalidad.
En esta escena y de forma excepcional, los jugadores tienen roles de Co-directores. Aquí tenéis libertad casi absoluta para dar rienda suelta a vuestra imaginación. Podéis introducir situaciones, PNJs o cualquier cosa que penséis que puede resultar interesante para definir al personaje o su relación con los demás.
Que conste que lo que aquí se haga o se diga, puede ser usado mas adelante en la partida. Si alguien se enrolla con una panadera y le roba 3 barras de pan, no descarto la posibilidad de que dicha panadera aparezca mas adelante.
El equipo y esta formado.
Todo equipo que pretenda participar en los juegos de Colville necesitan un patrocinador. Alguien dispuesto a derrochar y gastar las ingentes cantidades de dinero que se necesitan para no hacer el ridículo. En este caso, este es el Sr West. Abraham West para los amigos, pero de momento no creo que sea el caso para la mayoría de vosotros. Para vosotros el es esa figura bien vestida que se pasea a menudo por el hangar de trabajo, controlando los procesos de fabricación y va dando ordenes a los capataces. Cosa que en el fondo no deja de ser algo muy inusual. La mayoría de patrocinadores se limitan a poner el dinero y después se sientan en sus jardines para alardear y apostar con sus amigos ricos a ver quien ganará. El Sr West parece que tiene dinero y talento.
Los únicos que habláis con cierta frecuencia con el Sr West, son el Sr Alfred Pengrowth y a veces también "el enfermero". El primero, lo hace porque es uno de los capataces de equipo. Bajo sus ordenes, media docena de mecánicos hacen realidad los planes, ideas y esquemas del Sr West. "El enfermero" solo habla con el Sr West cuando es necesario acordar detalles médicos, comprar equipo nuevo o recargar el viejo. Algo que afortunadamente para todos no es muy a menudo.
"El mecánico" también puede haber intercambiado en alguna ocasión algunas palabras con el Sr West. Pero estas se limitaron a algún breve comentario o una corta charla de cortesía. En realidad "el mecánico" esta proximamente relacionado con Alfred Pengrowth, que es su capataz. Juntos, y con el resto de su pequeño grupo, pasan muchas horas y noches trabajando. La mas evidente particularidad de "el mecánico" es que carece de un brazo. En su lugar, lleva una asombrosa prótesis mecánica(para muchos es posible que sea la primera o segunda vez en vuestra vida que veis algo así). Aunque es un poco tosco y jamas podrá tocar el piano, es capaz de articular CASI todos los movimientos de un brazo y manos normales.
El resto, Maya y "el bruto irlandés", son el eslabón mas bajo en la jerarquía de el grupo. La primera es una muchacha demasiado joven para estar allí. Muchos son los bromean en que ni siquiera debe usar sujetador. Su trabajo es duro y curiosamente parece disfrutar con ello. Es la ayudante de cocina. Se pasa el día entero con las manos en el agua. Ya sea fregando platos, limpiando ollas, removiendo caldos o sirviendo a la jauría de hambrientos trabajadores.
Curiosamente esa chica parece tener una curiosa amistad con uno de las mulas de carga, "el bruto irlandés". Es un hombre alto y muy coruplento, que a menudo es capaz de manejarse solo con pesos que necesitarian 2 o 3 personas para tan solo levantarlos del suelo. El irlandés parece ser un tipo peculiar y alguien que rezarías para no encontrartelo nunca en un callejón oscuro. No es raro velo llegar a veces en el trabajo con los nudillos tillidos, algun moratón y con evidentes síntomas de resaca. Sin embargo cumple con su trabajo de peón y eso ya es suficiente.
Nota: Esta es una breve presentación de los personajes. Si alguno quiere matizar algo o corregirlo, podéis hacerlo.
La Londres de medianos delo siglo XIX es una gran metrópolis en expansión. Reuniendo a casi mas de 3.000.000 de habitantes en sus atestadas calles es posiblemente una de las mayores, si no la mayor, ciudad del planeta. En ella se encuentran representadas todas las clases sociales. Algunas atraídas por la distinción, otras por ser la ciudad de moda, los hay que vienen a hacer negocios, tanto legales como no tanto, y otros simplemente nacieron aquí. Sea cual sea el motivo, se dice que; Si algo existe, seguro puedes encontrarlo en algún rincón de Londres.
La vida en la ciudad no es fácil para aquellos que aprecien el aire limpio, el silencio o la intimidad. Algo que con los inminentes juegos de Colville aun se ha acentuado mas.
El hangar en el que trabajáis el equipo del Sr West, es una enorme nave industrial de casi 10.000 pies cuadrados de superficie por 40 pies de altura. En su interior se esta engendrando "Saint Michael", o conocido como "la bestia de tres panzas". De momento solo son un montón de hierros, tubos y cuerdas colgando por todas partes, pero para quien sepa interpretar los esquemas puede imaginar perfectamente el enorme zepelin como si lo estuviera viendo. Es una ingeniosa maquina formada por 3 grandes cilindros en posición horizontal. Dos de ellos van a ser los grandes depósitos de gas que permitirán a la bestia de hierro burlar la gravedad. El gran cilindro central es el cuerpo del animal, donde alberga la maquinaria, motores, personal y tripulantes. Cuenta también con una bodega capaz de cargar con mas de 80 toneladas de material u otras posibles maquinas.
El gran punto a favor de esta maquina, es que los cilindros no están fijos. Estos se pueden desplazar en arco para que el cuerpo central del zepelin quede en la parte inferior o la superior, según se desee. Con eso se puede conseguir que la bestia de tres panzas, no solo puede volar, si no también navegar o posarse sobre superficies delicadas.
Algunos dicen que el Sr West esta loco. Que ese cacharro nunca se podrá levantar del suelo. Otros que es un genio y un visionario. Sea lo que sea, es una pregunta que seguramente hallará la respuesta en los próximos meses.
De momento y por si alguno lo desea, se considera abierta la escena. Os recuerdo que esta escena es para hacer tiempo mientras se crean las fichas y para dar mayor profundidad a los personajes. Tenéis cierta libertad para inventar el entorno u otros personajes no-jugadores. Todo lo que penséis que puede servir para dar matices o personalidad a vuestros personajes y relaciones entre ellos, sera bienvenido.
No temáis. Si alguno dice algo que no encaja en el concepto de la partida, lo corregiré sin problemas y seguiremos inventando.
Supongo que has visto que el nombre del zepelin es el nombre de tu hijo. Posiblemente cansado de quedar siempre por detrás de el primero, esta vez te has lanzado echando toda la carne en el asador. Tu mayordomo y contable esta que se arranca los pelos que le quedan. A pesar de que no estas en la ruina (aun te queda una suma considerable de dinero) tus cuentas bancarias han quedado echas trizas.
*. El "SESV-QP" o "Motor a vapor de válvula simultanea de presión cuádruple" (steam engine of simultaneous valve of quadruple pressure) es un motor de gran potencia ideado por Alfred, modificado y mejorado a lo largo de los años.
¿¿ De cuanto ?? ... ¿ Esa ?. - Protesta mientras te muestra una llave pequeñita, la que necesitas. - Jo'e dilo por su nombre, coño. Que no es tan dificil.
Paul esta un poco asqueado. Junto vosotros han puesto una pequeña caldera móvil en la que calientan los clavos hasta llevarlos al rojo vivo, después son estampados y amartillados en las vigas a modo de remaches. La condenada es pequeñita, pero a menos de 20 pies de ella hace un calor que a la larga acaba siendo asfixiante.
Mientras se trota la frente con la manga sucia de la camisa, se toma una pequeña pausa para acercarse a un cubo que cuelga de una de las vigas cercanas. En el cubo hay un pequeño vaso metálico colgando, atado a una cuerda. Paul se acerca, coge el vaso y mira dentro del cubo - Mierda ... ¡¡¡¡ MAYA !!!! - Grita alto para que su voz consiga atravesar todo el ruido ambiente y llegar hasta donde sea que esta la ñiña. Mirando a su alrededor busca intentando reconocer su melena peliroja - ¡¡ QUE S'ACABA'O EL AGUA !!
Los prefijos de Sr. no son muy usados entre las clases bajas. Paul es Paul .. si le llamas Sr Keedev igual se piensa que estas de cahondeo. Ademas de que el 90% de la gente que trabaja en el equipo es de clase baja. Su argot y formas pueden ser un tanto bruscas, sin ser mal intencionadas.
El ruido constante de golpes, demás gritos y algunas maquinas, no ayudan a hacer del taller un lugar que invite a "charlar tranquila y diplomaticámente".
...
También os recuerdo que en Gran Bretaña se usa el sistema de medición imperial.
1 pulgada = 2,54 cm
1 pie = 30,48 cm
1 milla = 1.609 m
Y no usan comas, usan fracciones. Son así de "listos".
No es necesario que memoricéis esta chorrada ^_^.
-Así fregaba así, así. Así fregaba que yo ME vi...- canturreo por lo bajo entre algún que otro resoplido mientras froto con insistencia una de las muchas cazuelas de tamaño industrial que ha contenido sopa de ajo demasiadas veces.
De vez en cuando me veo obligada a apartar la cara, que desde luego ya muestra un tono rojizo tan encendido como mi cabello. Es un poco odioso pero a pesar de todo puedo con ello e impresiono al resto de ayudantes. Evidentemente el jefe de cocina o los cocineros no nos prestan la menor atención, para ellos es como si fuéramos simples "herramientas" para mantener sus preciadas "obras" limpias. Es evidente que no saben que de vez en cuando les escupimos en la comida.
Repentinamente entre el habitual y casi rítmico escándalo del hangar oigo otra voz alzándose. Normalmente sería difícil apreciarlo pero dado que ya tenemos asimilados por completo el resto de ruidos cuando algo desentona acostumbro a darme cuenta de ello. O quizá es que simplemente soy una curiosa empedernida, quién sabe.
Me asomo entonces al ventanal que da al taller 3B y veo a uno de esos obreros mostrarme el cubo que supuestamente debería estar lleno de agua. Si no fuera porque sé que él también se parte la espalda trabajando me mosquearía pero no puedo culparle por querer evitarse unos metros de recorrido.
-¡¡YA VOY!!- grito a viva voz y sin cortarme un pelo, volviendo al interior de la oscura cocina para llenar otro cubo igual de agua y salir de ahí tambaleándome entre pasillos y escaleras. Me veo obligada a parar alguna que otra vez y parte del preciado líquido acaba por el suelo pero aún así no me rindo y al final consigo llegar hasta mi destino.
-Me cago en tó, a este paso tendré que bebérmelo yo entero- admito entre resoplidos cuando lo dejo en su sitio recogiendo el que está vacío. Aunque haya sido un suplicio adoro estos momentos en los que puedo salir de mi habitual lugar de trabajo y ver otras zonas y gente.
-¿Qué es eso?- acabo por preguntar sin avergonzarme de mi total ignorancia mientras señalo "la cosa" bajo la cual Alfred bastante bien vestido no para de apretar tuercas. Al menos eso creo que hace, qué sé yo.
Hombre lo de "Sr" es parte de la interpretación y ademas es intencionado. Se trata de una de las razones por la cual los demás pueden llegar a considerar que Alfred es un poco pedante, aunque se trate en realidad de un "exceso" de educación. XD
Tras tomarse un buen trajo de agua, vuelve a dejar la tacita metálica dentro el cubo y el cubo colgando de la viga. Añade algo mas a la respuesta de Alfred - Po' en otra' palabras, niña. Q'esto e una maquina chula pa'a mover los travesaños, el costillar y toda' las mandangas que pesan chorromil que ni e' bruto de tu amigote puede move'. - Al mismo tiempo que da algunos golpes de orgullo a la maquina.
* = Aunque el acento puede sonar andaluz. En realidad seria un tanto barrio bajero y no muy culto. Pero bueno, a Paul le pagan por que es un manitas, no por ser un poeta ni un gran orador.
Me recuerdas un personaje que también he llevado. Altiva y educada. Siempre tratando a todos por Sr, Sra y su apellido. Era tan concenadamente fría y correcta en su forma de hablar que hasta daba repelús ^_^.
Charles estaba cerca de la conversación y miró la maquina que estaban construyendo y su fugaz forma a brazo humanoide. No pudo evitar extender su propio brazo mecánico con centenares de ruedas y piezas metálicas que daban vueltas y repiqueteaban cada vez que se movía un poco.
Miró su mano ortopédica con un semblante de tristeza al recordar el suceso que le arrancó su brazo ... aunque aparto esos pensamientos de su mente y se volvió a centrar en el presente. Con una ancha sonrisa y sabiendo que lo que estaba a punto de decir pondría nervioso a Alfred, comentó: - Continuo pensando que al invento del Sr. West le falta una buena arma.
Estoy seguro que la competencia no cometerá este error. - Terminó añadiendo mientras levantaba su brazo mecánico y doblaba su mano hacia adelante haciendo que un pequeño chorro de vapor saliera disparado.
Al evaporarse rápidamente el vapor, dejaba a la vista el cañón de arma de rifle que tenia acoplado a su brazo ... Charles cerró un ojo como si apuntara al cubo de agua mientras sus labios musitaban. - Beng - como si el cubo tuviera que saltar por los aires.
El uso de armas en los juegos y especialmente en la carrera de Colville esta terminantemente prohibido so pena de inmediata descalificación. Son unos juegos en los que se premia la deportividad y el juego limpio entre todos sus parcicipantes. Es una carrera, no una batalla.
Al menos eso dice la teoría, porque la practica puede ser distinta. En otras palabras, que hay jugarretas, trampas encubiertas y de haber armas, podéis apostaros la otra mano de Charles a que estarán muy bien disimuladas ;).
Que conste que el brazo mecánico de Charles es una obra de ingeniería. Puede que no sea el primer miembro mecánico que veis, pero seguro que en vuestra vida no habéis visto mas de 4. Se trata aun de una tecnología muy primitiva, tosca y engorrosa. En realidad de le nota cuando mueve ese brazo que carece de la agilidad y destreza de un brazo normal.
Cuida'o niña - Sin previo aviso pone la mano sobre la cabeza de Maya y la aparta hasta medio ocultarla tras la maquina que os esta dando de que hablar. - E' gordo 'sta alli buscandote. De buen humor, como siempre.
A la distancia, por donde antes llegó Maya se ve a un hombre de unos casi 40 años rondando. Con un cuerpo coruplento y una barriga ganada tras generosas comidas y bastante bebida, va paseando su rostro de permanente enfado o restreñimiento crónico. Mirando de un lado a otro mientras se friega las manos en un delantal que hace mucho tiempo que dejo de ser blanco. Es el encargado de la cocina y el "mejor amigo" de Maya. Es quien se encarga de que no se pueda aburrir ni medio minuto, de asignarle las tareas que los demás no quieren hacer, de motivarla repetidamente echándole la bronca con sonoras collejas y de pagarle y recanearle cada penique que se gana.
Seguramente ha mirado a la cocina y al no ver a la pequeña mocosa haciendo sus labores, se ha mosqueado. Aunque es difícil mosquearse cuando, en su caso, ya te levantas siempre cabreado. Con una evidente rabia contenida y farfullando se pasea por el taller buscando de un lado para otro la melena peliroja. No sería la primera vez que la usa para arrastrar a la mocosa hacia "su puesto".
Abandonado todo lo previsto que tuviese para aquella mañana, sintiendo que no podía permanecer más tiempo encerrado en su despacho escuchando los motivos de Walter por los cuales debía olvidarse de participar en los Juegos de Colmville, Abraham West abandonó su mansión, casi podria decirse en secreto, para dar una vuelta por el hangar dónde estaban poniendo a punto el Saint Michael. Solo había dejado una nota para su mayodormo: "Dígale al señor Mendel que utilice guisantes"
Tenía un par de horas antes de que Walter fuese a buscarlo al hangar para recordarle sus deberes como miembro honorífico de la Universidad e ilustre profesor de Biología, pero a sus 42 años, West seguía comportándose como un niño en ese aspecto: hacía lo que quería cuando quería. Después de todo, ya no tenía responsabilidades más allá de la Universidad.
Vestido con un impecable pantalón estrecho de color gris sin la chaqueta, con el chaleco dorado encima de la camisa y un reloj en el bolsillo del mismo, rematando su indumentaria una corbata a juego con los pantalones, West se paseó un momento por la entrada para observar los trabajos, sintiéndose emocionado por lo que veía. Sacó el reloj y abrió la tapa, no para mirar la hora, sino la fotografía que había en la otra parte: Michael y Michaella. El nombre de aquella nave era en honor a los dos. Tras este momento de debilidad, volvió a guardar el reloj y se acercó para mirar un poco más de cerca los preparativos. Permaneció pensativo, un gesto habitual en él que infundía mucho respeto, observando los ajustes de los mecánicos, y finalmente, decidió ir a buscar al señor Pengrowth.
- Buenos días, Alfred - saludó de forma cordial el señor West. Siempre era así, le gustaba tratar con respeto a sus trabajadores, después de todo, estaban haciendo realidad su sueño. Sonreía de forma amable, esa sonrisa le daba un aspecto infantil pero sin perder la compostura. - ¿Qué tal avanzan los trabajos?
¿ Que si he perdido algo ? - Protesta con energía - Pues claro, esa mocosa de dedos largos y manos perzosas !. hace ya mas de una hora que ha saldio dejando todas las ollas a medio hacer. Y supongo que tanto tu como los demás queréis comer algo dentro de poco. Pero no puedo preparar los buñuelos de hígado sin la maldita olla plana !.
Si le quitasen las piernas, seguro que seria mas obediente. - apuntilla para si mismo. Mientras su mirada con los ojos entrecerrados, vuelve a dar un nuevo repaso a los alrededores.
Hummm ... - Sonríe al pensar en los buñuelos de higado.
Nota: Hay que admitir que si no te fijas mucho en el aspecto de lo que cocina el Sr Anderson, están bastante ricos
La llegada del Sr West al hangar siempre tiene el mismo efecto. Instantes antes de que haga su aparición los rumores de su presencia se expanden como la pólvora. Algunos aprovechan para dejar de baguear y ponerse a currar al 200%. Otros ya corren a buscarlo para intentar resolver las dudas, problemas o conflictos que han surgido desde su ultima aparición.
¡ Sr west !. Perdone Sr. - Se oye el incondunfible acento italiano del joven Alváro. Un especialista en un creciente campo que hasta hace a penas una década era casi desconocido. El poder de los rayos, la electricidad. Normalmente habría esperado a su turno, pero parece algo alarmado y sabe que si se despista, puedes irte en cualquier momento y quedarse en ascuas.
Tenemos un problema. - Estas son las tres palabras mágicas que el Sr West tiene que escuchar mas a menudo cada vez que pone los pies aquí. Despliega un gran esquema lleno de lineas y cotas por todas partes. Lo apoya sobre la maquina del Sr Pengrowth y trata de extenderlo para que no se arrugue demasiado - ¿ Ves ? Estas son las compuerta de popa C y D. Por aquí es donde van los cierres herméticos - Con el dedo aseñala en medio del caótico esquema. - Por eso necesito que aquí, aqui y.... haya unos agujeros de 3 pulgadas para el cableado. Pero el Sr Morrison se niega en redondo !!
¡ Claro que me niego ! - La voz del Sr Morrison aparece de detrás del Sr Gienetti con su peculiar olor a tabaco. Le huele el aliento incluso cuando no esta fumando, que suele ser casi nunca. - No me jodas chaval. ¿ Quieres que meta 3 agujeros en una viga de 7/9 para tus cablecitos ?. Esas costillas deben aguantar una presión de hasta 45.000 libras. Si las dejo como un puto queso, no van a aguantar ni su propio peso.
Si si, ya lo has dicho, la presión y tal. Pero si no paso los cables, no hay cierre. Sin cierre, las compuertas podrían tener grietas y olvídate de posarse sobre el mar. Tendremos al Sanit Miachael convertido en un precioso submarino en menos delo que canta un gallo.