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Tales

El secreto del marqués

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16/03/2014, 21:40
Director

Oyeron una campanilla de fondo a la que no prestaron atención, Rosalin atenta y su madre algo perpleja, como si no pudiera creer que su hija no supiera algo así.

- ¿No lo sabes, Rosalin? Pensé que tu padre te lo habría contado, o en todo caso el señor Grunner debió haberlo hecho. Sí que se casaron...

Junto a la puerta que su madre había dejado abierta al entrar apareció el mayordomo con aspecto compungido junto a nada más ni nada menos que Albert Grunner, que las observaba con una expresión que mostraba sin lugar a dudas que había escuchado su pregunta. 

- El señor Albert Grunner ha venido a visitarla, milady, pero insistió en que no necesitaba ser anunciado - carraspeó el criado con incomodidad. Aunque en realidad no le escucharon, porque Albert había penetrado en la estancia adueñándose de ella con su presencia, erguido en el centro de la misma y mirando a Rosalin con aquellos ojos grises que habían quedado grabados a fuego en la memoria de la chica.

- Lo que ocurrió es que falleció hace dos años, el 19 de Abril de 1810.

Las cortesías sociales quedaron olvidadas. No hubo reverencias ni frases estudiadas diseñadas para halagar. Antes de que se hubiera dado cuenta, su madre se había escabullido de la salita y sólo quedaron Albert y ella, que la miraba a los ojos con aquel aire grave que le caracterizaba y cierta desolación que por más que intentara mantener oculta se filtraba por cada poro de su ser.

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16/03/2014, 22:07
Rosalin Mirror

Los colores se subieron a las mejillas de Rosalin después de que la piel de ésta palideciese ante la presencia de sir Albert en su salón. ¡¿Cómo que no hacía falta ser presentado?! Evitó por todos los medios sostenerle la mirada, incómoda como estaba ante el hecho de que las hubiera pillado hablando de tal frágil tema.

- Lo lamento.

Fue lo único que se atrevió a decir y ni siquiera con el mismo tono seguro que solía acompañar sus comentarios. Se sentía avergonzada y realmente aquella disculpa estaba destinada a dos cosas: por haber preguntado a su madre sobre tal tema y por lo sucedido con su esposa.

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17/03/2014, 00:07
Albert Grunner

El hombre permaneció en pie puesto que, al fin y al cabo, no había sido invitado a sentarse.

- No tiene por qué, señorita Mirror - terminó por decir, dejando escapar el aire lentamente como si lo hubiera estado conteniendo -. Su curiosidad es normal, aunque preferiría que me preguntara a mí directamente; cualquiera que sea su duda y su pregunta yo le responderé, es totalmente normal dadas las circunstancias de nuestro compromiso que esté repleta de cuestiones que necesitan ser resueltas. En todo caso, soy yo el que lamenta la intrusión - la verdad es que volvía a parecer tenso. Se veía a todas luces que aquel era un asunto complicado para él pero que estaba haciendo grandes esfuerzos por mantener su fachada de férreo control. ¿Qué se ocultaría bajo ella? ¿Ira, dolor, tristeza? -. No creí necesario ser anunciado porque no pensaba prolongar mi visita, sólo deseaba saber si se encontraba usted bien y si desearía venir esta noche al teatro con un grupo de amigos.

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17/03/2014, 18:04
Rosalin Mirror

Le sorprendió que sir Grunner no pareciera especialmente ofendido y que continuase allí, de pie frente a ella sin intención de marcharse hasta terminar el asunto que le había traído hasta allí.

Para no parecer descortés y ya que ella estaba sentada, Rosalin estiró un brazo y señaló con la mano extendida hacia el sillón más cercano, atreviéndose a mirar nuevamente a los grisáceos ojos de su prometido.

- Por favor, sentaos. ¿Os apetece un té? ¿O quizás una copa de brandy?- el protocolo indicaba que primero se acomodase al invitado y, una vez hecho, se procediese a hablar sobre el asunto en cuestión.- La próxima vez que quiera saber algo, no dudéis en que solo acudiré a vos; si bien en esta ocasión la conversación salió por causas de las circunstancias de la temática que mi madre y yo estábamos tratando momentos antes de que llegáseis. Puedo aseguraros que no fue mi intención indagar sobre vuestra vida personal a vuestra expensas.- aclarado dicho punto, la joven procedió a responder ante la invitación del caballero.- Me encuentro en perfecta forma ya. Lamento haberos preocupado. Ciertamente fue un mal de un día. Nada importante. Y por tanto me encantaría acompañaros al teatro esta noche si así os place. Prometo no volver a utilizar un vestido que me impida respirar.- bromeó finalmente con el fin de distender la conversación.

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17/03/2014, 19:05
Albert Grunner

El hombre acabó por tomar asiento y asentir ante su oferta del té, cruzando las piernas ante sí y sujetándose las manos mientras Rosalin pedía el té.

- Es natural que sintáis curiosidad - repitió más calmado y con voz amable -. No tenéis por qué disculparos, de verdad, la culpa es mía por no tratar dicho asunto abiertamente a sabiendas de que sería de su interés. Y me alegro de que os encontréis mejor. ¿Os parece bien que os pase a buscar a las ocho?

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18/03/2014, 17:33
Rosalin Mirror

Esbozó una sonrisa amable ante tales palabras, mirando con cierto cariño al hombre que estaba sentado junto a ella, preguntándose si alguna vez le llegaría a parecer familiar el encontrarse en una sala a solas con él, tomando el té o bien leyendo un libro.

- Es una excelente hora. Además hace mucho que no voy al teatro. Estoy segura de que será una velada agradable. ¿Cuál es la obra, por cierto?

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18/03/2014, 17:52
Albert Grunner

Rosalin no pudo dejar de darse cuenta del aspecto varonil* de Albert, sentado en la butaca. Se daba cuenta de que era alguien acostumbrado a sentirse cómodo consigo mismo, seguro, domando las circunstancias antes que permitir que estas le incomodaran. Nadie diría que después de haber abierto un poco su corazón al revelar la muerte de su esposa sería capaz de seguir en esa estancia sin perder ni la calma ni la compostura y hablando de ir al teatro, a pesar de que Rosalin había visto el dolor oculto en sus ojos grises.

- No lo sé con certeza, la escogió la señorita Stevens, aunque por lo que me dijo John bien podría ser un drama como un romance como una mezcla de ambas. El nombre es algo así como "Hojas de otoño", ¿le suena?

Rosalin sabía de qué obra hablaba, aunque su nombre era "Cuando la última hoja caiga". No porque la hubiera ido a ver sino porque la crítica la había alabado como una desgarradora historia de amor que haría vibrar el corazón del hombre más templado. Incluso se habían permitido recomendar a las señoras tener el pañuelo a mano.

Notas de juego

*Después de lo de ayer tenía que ponerlo xDDDDDDDDDD

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18/03/2014, 18:52
Rosalin Mirror

Ante la ignorancia que sir Albert acusaba sobre la obra de teatro, Rosalin, divertida, no pudo evitar reír ligeramente mostrando una sonrisa bonita - o al menos eso le habían comentado con anterioridad- y mirando al hombre mientras un brillo de diversión se mostraba en sus pupilas.

- "Cuando la última hoja caiga". Se llama "Cuando la última hoja caiga". Y según la crítica se podría decir que a las damas las lanzarán a abrazar el amor y los caballeros sufrirán durante las sucesivas horas después de la obra los excelsos ademanes de las damas por parecerse a los protagonistas.

Debí haber imaginado que Ana y John irían. Espero estar a la altura y saber comportarme en esta ocasión. He tenido suerte de que sir Albert no haya preguntado aún...

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18/03/2014, 19:10
Albert Grunner

El semblante de Albert le traicionó al esbozar una mueca de disgusto con el acertado análisis de Rosalin sobre la obra. Era difícil decir si era un hombre sensible o no pero si algo había demostrado era que no era una persona dada a los sentimentalismos. ¿Cómo debía ser aquel hombre antes de quedar marcado por aquel trágico destino? La chica intentó imaginarlo como alguien risueño pero resultaba una labor imposible.

- Tenga la deferencia de despertarme con un suave codazo si me quedo dormido en mitad de la actuación, me temo que roncar en semejante situación sería en extremo bochornoso y mi hermano me lo recriminaría de por vida.

Sus cejas se alzaron levemente mientras una tenue sonrisa aparecía en su rostro. 

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18/03/2014, 19:33
Rosalin Mirror

Sin duda divertida por el rumbo que había tomado la visita del señor Grunner, Rosalin no dudó en responder afirmativamente a su petición:

- Tenga la seguridad de que así lo haré, sir...- entonces recordó que la noche anterior él le había indicado que lo llamase por su nombre de pila-...Albert.

Aquella situación destensada indicaba una gran señal en cuestión de compatibilidad entre ambos, lo cual relajaba en grado sumo a la joven. Al menos podían mantener una charla amigable de cualquier tema. Al menos de momento.

- También podéis llamarme Rosalin. O incluso Rose. La mayoría de mis allegados me llaman así.

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18/03/2014, 23:28
Albert Grunner

Cabeceó en señal de afirmación ante la petición de ella de llamarla por su nombre, de nuevo recobrando su seriedad, aunque su fachada se había resquebrajado un tanto a ojos de Rosalin, que empezaba a pensar que aquella impenetrable calma era la máscara bajo la que había ocultado su dolor, así como otras muchas cualidades que quedaban usualmente oculta. Pero ella había descubierto la del sentido del humor en aquel hombre que no parecía hecho para las sonrisas.

- Rosalin - dijo con lentitud -. No dudéis que lo haré - miró el té que ni siquiera había tocado y le dio un rápido sorbo antes de ponerse en pie -. Me temo que ya me he demorado en esta visita más de lo necesario; tengo otros compromisos que tengo que atender antes de ir al teatro.

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19/03/2014, 17:01
Rosalin Mirror

- Por supuesto.- comentó mientras se levantaba para acompañar a sir Albert a la salida- No era mi intención demoraros más de lo necesario. Imagino que estaréis muy ocupado.

Caminó junto a él hasta que llegaron al punto límite en que el caballero debería irse y ella retornar al salón ahora con la clara intención de pensar en qué ponerse.

- A las ocho en punto estaré preparada. Espero que os sea amena la tarde que queda.

Le dedicó una sonrisa amable y esperó a que él tomase su mano y se la besara en señal de despedida.

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19/03/2014, 20:39
Director

Cumplió con sus expectativas al tomar su mano al despedirle y besarla como acostumbraba de forma cortés prometiendo encontrarse dentro de cuatro horas. Por desgracia para Rosalin, el tiempo era valioso y tenía mucho que hacer. Lo primero de la lista era enviarle una nota a Noah puesto que no sería correcto que se presentara sola. Sabía que Ana acudiría con su madre como acostumbraba, aunque la mujer nunca había vigilado con demasiado celo a su hija, que sin la observación directa de su madre se había ido convirtiendo en una casquivana a la que nadie ponía límites más que los que ella misma se imponía como bien recibidos por los hombres o no.

Lo siguiente a hacer era aguantar la sonrisita de satisfacción que apareció en la faz de su propia madre al escuchar que aquella noche iría al teatro con Albert. Por suerte para ella aquello sólo duró media hora de alegría seguida de amonestaciones por las posibles muestras de desinterés de las que su madre le prevenía de hacer sino quería quedar en evidencia y perder la gracia a ojos del hombre.

Y ya por último estaba arreglarse. Asearse primero para parecer tan fresca como por la mañana, elegir vestido, complementos, vestirse, peinarse... Parecía mucho más sencillo y rápido de lo que era cuando en realidad agotó casi todo el tiempo del que disponía, por no mencionar la nota de su hermana que mencionaba que como tenía compromisos previos se reuniría con ella en el teatro así que estaría sola con John, Albert, Ana y la madre de esta. Un cuadro sumamente encantador.

- El señor Grunner la espera, milady - comentó la doncella risueña, transmitiendo el mensaje del mayordomo e interrumpiendo sus pensamientos.

 

Notas de juego

Y no le devolviste la chaqueta a Albert, aiss.....xD

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20/03/2014, 16:15
Rosalin Mirror

Ya estaba lista, y realmente no podía engañarse a sí misma. Se encontraba nerviosa por la situación que estaba a punto de afrontar. Encontrarse en el teatro al lado de John Grunner. Sería la primera vez que le vería después de aquella extraña despedida y nuevamente acompañado de la odiosa de Ana Stevens. Y para colmo, tener que soportar a su madre... seguro que se pasaría la velada dándose aires de grandeza.

En cuanto la doncella anunció la llegada de su acompañante, Rosalin tomó aire por la boca, recogió su pequeño bolsito y se encaminó para encontrarse directamente con sir Albert Grunner que había llegado tan puntual como acostumbraba y probablemente vestido con el mejor traje de etiqueta de su armario.

Sonrió a sir Albert justo cuando apareció ante su visión y no dudó en saludarle:

- Buenas tardes, sir Albert. Me alegra comprobar que tenemos algo más en común: la puntualidad.

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23/03/2014, 15:33
Albert Grunner

La esperaba al pie de su carruaje, vestido elegantemente con un chaqué gris oscuro que le daba un aspecto atractivo. La saludó con aquel gesto que empezaba a convertirse en algo típico y la ayudó a subir al carruaje que estaba, para sorpresa de Rosalin, vacío.

- Mi hermano y la señorita Stevens se han adelantado - parecía que le hubiera leído el pensamiento, aunque quizás la mirada extrañada que dirigió a los asientos desocupados había hablado por sí sola. Albert tomó asiento frente a ella y clavó como de costumbre sus ojos grises en ella, que brillaban a la luz de la lámpara de aceite dándole un matiz más cálido -. ¿Puedo preguntarle sobre su relación con Ana Stevens? Si no lo considera una indiscreción, por supuesto, en cuyo caso retiro la pregunta.

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24/03/2014, 17:51
Rosalin Mirror

Se dejó llevar hasta el carruaje y tomó asiento de forma elegante, procurando no tropezar con el vestido primero y más tarde con el alto escalón que daba hasta la zona de asientos. Una vez que sir Albert se sentó frente a ella y le hizo aquella pregunta, la sonrisa que Rosalin había estado manteniendo se quebró en una mueca de molestia. No era por la pregunta, si no más bien por el recordatorio de Ana Stevens.

¿Qué debía hacer? ¿Hablar con franqueza? ¿O disimular lo máximo que pudiera? Al fin y al cabo Ana iba a ser la cuñada de Albert. Quizás hablar de más podría colocarla en una situación de lo más incómoda.

- Nos conocemos de que ambas somos invitadas para tomar el té. Normalmente en casa de mi hermana mayor. Nuestra relación es meramente cordial. No somos cercanas y... lamento predecir que será difícil que lo seamos algún día, a pesar de las relaciones que ahora mismo nos conectan. - contestó de forma elegante. No diría que le caía mal porque estaba constantemente compitiendo y disfrutando de sus derrotas. Pero tampoco iba a decir una mentira tan grande como comentar que eran buenas amigas.- Tenemos... ¿cómo lo describiría? Carácter opuesto.

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25/03/2014, 11:52
Albert Grunner

Parecía pensativo, inmerso en las palabras que Rosalin había pronunciado, como si las estuviera diseccionando para comprender qué era lo que ella no había dicho y lo que él realmente quería saber. Finalmente asintió con un cabeceo, sin dar a entender si sus palabras le habían satisfecho o tal vez decepcionado.

- Entiendo - terminó por decir a la par que desviaba la vista hacia las iluminadas calles de Londres, concurridas de gente que iba a fiestas privadas, a la opera o, como ellos, al teatro -. Rosalin - parecía que iba a decir algo más pero se calló con el susurro de su nombre antes de devolver la mirada a sus facciones y añadir -: En dos semanas mi hermano y yo volveremos a nuestra casa y vendrán con nosotros algunos amigos. Me agradaría que vinierais con vuestra hermana, por supuesto, y que conocierais a mi padre.

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26/03/2014, 17:42
Rosalin Mirror

A pesar de que era una proposición de lo más común partiendo de la base de que estaban prometidos, Rosalin no pudo evitar sentir cierta ilusión ante la propuesta de sir Albert, pues ello quería decir que el caballero se encontraba más que dispuesto a continuar con el compromiso a una velocidad, quizás, más rápida de lo que en otras ocasiones era normal; y por ello mismo la joven Rosalin lo interpretó como una buena señal.

Sonrió de forma sincera, claramente agradecida:

- Será un placer acompañaros y conocer a vuestro padre. Sin duda será un hombre distinguido y un padre ejemplar. Además mi hermana, que adora viajar, estará encantada de acompañarnos.

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28/03/2014, 13:29
Director

Albert esbozó una sonrisa agradable, dando así el asunto por zanjado y variando la conversación hacia las obras de teatro que acostumbraban a motivar a la sociedad inglesa, teniendo lo mismo de buen guión que de comedia. Por algún motivo parecía que toda dama y caballero del momento se afanaba en demostrar lo sensible y piadoso que podía llegar a ser compadeciéndose de los actores de un drama lacrimógeno antes que de la pobreza patente en las buenas gentes de los barrios marginales de Londres.

Pronto llegaron al Teatro Nacional*, un edificio imponente que recordaba más a un templo griego que a un teatro, con una hilera de columnas jónicas con una función más ornamental que arquitectóncia rodeando todo el edificio y un grabado de mujeres y hombres cubiertos por finas y diminutas toallas franqueando la entrada. Era divertido pensar que todos los que acostumbraban a admirar dichos grabados los mirarían escandalizados si la pieza de ropa que apenas cubría las vergüenzas de las figuras desapareciera para mostrar la naturaleza humana en pleno esplendor.

Albert la guió del brazo hasta el palco que había reservado, ya ocupado por John, Ana Stevens, su madre, Noah, John Wingam y un par de parejas más en las que Rosalin apenas reparó más que al ser presentada.

- ¿Se encuentra usted mejor, señorita Mirror? - preguntó John con cortesía nada más saludarla.

Notas de juego

*Que no sé si existe o existió pero poco me importa, para algo me invento la descripción :P

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28/03/2014, 17:32
Rosalin Mirror

Maravillada por la belleza de todo cuanto la rodeaba, Rosalin se dejó llevar caminando con la máxima elegancia posible por un Albert Grunner siempre seguro de sí mismo. Una vez en el palco saludó a los presentes según la iban presentando, apenas reparando en Ana Stevens y sí centrándose con una sonrisa imposible de borrar en John Grunner.

Estaba tan apuesto como la noche anterior y su interés hacia su salud no hizo más que reconfortar su ánimo.

- Estoy perfectamente. Gracias por vuestro interés, sir Grunner.- comentó con educación y cordialidad. Si bien la imposibilidad de pestañear siquiera podría denotar que se encontraba emocionada por tal simple pregunta.- Espero que no estropease mucho vuestra noche.- al darse cuenta entonces de que quizás estaba acaparando demasiado del tiempo del joven caballero, decidió añadir a más gente en la conversación.- ¿Pasaron buena velada vos y lady Ana? No me habría gustado nada escuchar que les estropeé la noche.- al nombrar a la joven, se obligó a posar la mirada en ella con el fin de ahuyentar posibles impresiones formadas ante el brillo de la mirada de Rosalin.