Partida Rol por web

Anna y Jeremy siguen a Kai y Serhey hasta una grandes puertas en las que estos entran.

Algo más de dos decenas de cuerpos se encuentran desparramadas por toda la sala, tirados en el suelo, caídos sobre sillas volcadas o derrumbados sobre las grandes mesas que ocupan la gran habitación. Este lugar no puede ser otra cosa que el comedor del navío.

Os percatáis de que sólo hay dos cadáveres en la zona cercana a la puerta y que el cuerpo de la gran mayoría de ellos comparte la dirección en la que se encuentran, tumbados bocaabajo, las piernas mirando hacia vosotros y la cabeza hacia las puertas del fondo de la estancia. Todos ellos, salvo los dos primeros, tienen heridas de balas en el pecho, piernas y rostro. Los más cercanos a vosotros han muerto a manos de un arma blanca.

El sargento Adam McKenzy se encuentra arrodillado frente al cuerpo de un marinero. El tripulante tiene dos heridas en el pecho, armas por heridas de bala.

Western camina con cierto aire frío por toda la estancia. Van en silencio, por lo que los pasos resuenan metálicos bajo sus pies. La sala está llena de cadáveres, él los mira sin emoción ninguna o, al menos, aparentemente. Los dos cadáveres que están junto a la puerta parecen haber muerto de una manera diferente a los demás, por herida de bala.. y ambos cayeron en la misma dirección, por lo que parece que les dispararon desde el interior de la puerta que están a punto de atravesar. Quizás allí, tras aquella puerta, se encuentre el asesino de ambos cadáveres... o una simple víctima más de aquél macabro escenario que era el barco.

El soldado observa con cierto detenimiento los cadáveres, tratando de reconocer uno de ellos. Se fija sobretodo en los hombres... buscando a aquél que conoce de la que era tripulación del barco. Por ahora no ha dado con él, pero nada invita a pensar que su ex-cuñádo continúe con vida.

Que demonios... paso aquí? Era imposible mostrar un mínimo de asombro por la escena de masacre. Al parecer estaban todos dirigiéndose hacia el otro lado de la habitación ya que sus cuerpos nos daban la espalda. Tal vez fueron baleados mientras escapaban de su destino cruel.

Sin duda un grupo bien armado entro por esta puerta y los asesino a todos, pero probablemente primero degollaron a los dos primeros que estaban contra la puerta. 

Camino lentamente hasta el sargento Adam McKenzy y me paro detrás de él. -Señor? 

Adam estaba asimilando aún la información recibida, y en cierto modo lamentándose por no haber podido ayudar al marinero cuando sus sentidos le devolvieron a la realidad al escuchar una voz a su espalda. Con un rápido movimiento se encaró con Hellway y Western, o lo que él creía que eran Hellway y Western. Dándose cuenta de que estaba en desventaja, y de que la situación, si se sacaba de contexto, podía dar lugar a malinterpretaciones, comenzó a hablar.

- Si no recuerdo mal, creo haberles establecido una clave para este tipo de situaciones. - dijo el sargento no sin cierto tono de reproche, deseando creer que las personas que tenía delante eran realmente Hellway y Western. - Dado que no lo han hecho ustedes, tendré que empezar yo: ¿qué me contestarían si yo les dijera la palabra "pistola"? - finalizó el sargento mientras se levantaba, siendo consciente de que se encontraba en una situación complicada, con las armas enfundadas y en inferioridad numérica, si los sujetos no resultaban ser quienes deberían ser.

Wester miró a Annabelle, era la segunda vez que se encontraban con alguien y no usaba la clave, ¿porque cojones no usaba la puta clave? Parecía dispuesta a arriesgar las vidas del novato y la suya ... o simplemente no daba para más.  Siempre le tocaba algún superior que no entendía como podía estar por encima de él... 

- Cargada - dijo algo asqueado el soldado. - ¿Donde está el testigo? - preguntó sin vacilar y con cierto aire. No era muy amante de los superiores, no era su fuerte ser un pelota correcto, le gustaba hablar claro, fuese quién fuese quien tuviese delante.

Parecía que el Sargento no había reparado en que Serghey y yo también habíamos entrado en el comedor, así que di un par de pasos para ponerme a su alcance visual.

-Señor hemos encontrado a estos dos en el pasillo. Mientras hablaba me acercaba a la posición del Sargento.

-No hemos logrado encontrar la fuente de esos ruidos, cesaron sin mas... ¿Como le ha ido a usted?¿Descubrió algo? Mis ojos se clavaron un instante en aquel marinero y en la expresión de dolor que había quedado grabada en su rostro.

Encuentras tu objetivo, al hermano de tu exmujer. Está muerto, con un disparo en el cráneo, tendido en el suelo.

Al acercarte a la pared del fondo para buscarlo te percatas de la gran cantidad de casquillos de bala desperdigados por el suelo, en esa zona. Por lo que parece los asesinos se encontraban en ese lado, en la misma dirección a la que corrían tu cuñado y el resto, en dirección contraria del lugar en el que mataron a los dos hombres a cuchillo.

Sus ojos se cerraban desaprobando la desconfianza que el barco había generado en el pelotón. Ahora eran demasiado débiles y la situación no mejoraría si no conseguían reestablecer la energía. Tras escuchar por la radio que había salas inundadas su mirada se desplomó hacia el sargento. Vamos a tener que bombear agua señor, o… comentó con pesadez en sus palabras para concluir señalando con el pulgar hacia abajo.

Realmente le pareció algo paranoica la actitud de su superior, pero no podía culparlo después de todo lo sucedido. Tal vez Annabelle todavía no tomaba real conciencia de la situación, o simplemente todos a su alrededor estaban enloqueciendo. Sin duda las cosas no pueden terminar bien.

Solo miro a su alrededor chequeando la situación nuevamente, por si algo se le había pasado de largo. Sin duda no podía dejar de pensar en lo que habrá pasado esta antesala del infierno. 

Jeremy se acercó a uno de los cuerpos, de un hombre, el cuál tenía un disparo de bala en la cabeza. Miró a su derredor, intentando comprender que había pasado. A juzgar por los casquillos que se amontonaban en un lugar de la sala, las víctimas habían corrido hacía los disparos... ¿cómo era eso posible? y... ¿de dónde habían sacado tal potencia de fuego en un barco mercante como aquél?. Había otros dos cuerpos, que parecían haber sido acuchillados en la dirección contraria ¿quizás eran los que disparaban y alguien logró matarlo?... demasiadas preguntas y ninguna con respuesta. La cara de Western era de concentración, a la vez que denotaba un claro asqueamiento ante todo aquello.

Se incorporó y miró a los presentes. 

- ¿Alguien tiene idea de qué cojones pasó aquí? ¿Todos estaban ya muertos o tuvisteis que abatir a alguno?- su mirada se desviaba hacía el Sargento, una mirada furtiva que lo escudriñaba. Aquél hombre parecía sobrepasado por la situación... y eso no ayudaba, no lo hacía en absoluto. 

Las malas noticias se amontonaban, al parecer habría que  bombear agua para que el barco no se hundiese. Jeremy tenía una idea mejor... pero no la iba a comentar.. se la guardaba para él

Ver el cuerpo de su ex-cuñado supuso un revés en Jeremy. Aquél era un buen hombre, hacía tiempo que no hablaba con él, pero siempre se mostró amable cuando su ex lo abandonó. Por circunstancias de la vida simplemente habían dejado de tener relación. Pese a que no esperaba encontrarlo para nada con vida, ver su cadáver y su triste final, hizo mella en el soldado. Sin embargo, no hizo ni un gesto ni una mueca, no visiblemente... para los demás, para sus compañeros, trató simplemente de permanecer impertérrito, cómo si de cualquier otro cadáver se tratase.

El barco parecía que estaba en una situación delicada... y tendrían que bombear agua. En aquél momento, Jeremy tomó una decisión que sólo él conocería: Hundir el jodido barco. LLevaba cargas suficientes para ello, era un maldito bloque de hierro maldito lleno de cadáveres... y nadie podía explicar el por qué. Si, lo hundiría con toda su mierda dentro.

Por la información que os ha dado Jeremy os percatáis de que los hombres que disparaban se encontraban al este mientras que las personas asesinadas con cuchillo estaban al oeste. Los hombres que huían se encontraron en medio de ambos.

-Nosotros no hemos tocado nada, así los hemos encontrado. Hice una pausa para examinar la habitación y continué.
 

-Parece claro que entraron primero por la puerta oeste, matando a estos dos y cuando el pánico cundió e intentaron huir por el otro lado los recibieron a balazos. Mientras hablaba me acerco a los cuerpos que no tenían heridas de bala para revisarlos. Quería comprobar si alguna de sus heridas podía haber sido causada por una espada sierra como la que aun guardaba a mi espalda.

-Tal vez tendríamos que investigar en aquella dirección. Nosotros por la puerta izquierda y ustedes por la derecha... 

El sargento respiró aliviado cuando escuchó a Western usar la clave que habían improvisado. Además, Serghey y Rasali estaban allí también, lo cual zanjaba cualquier posible malentendido.

- El herido era este marinero - dijo mientras lo señalaba. - No podemos dilucidar con lógica lo que ha ocurrido, porque lo que ha ocurrido no es nada lógico. El hombre me contó antes de morir que todo el mundo se volvió loco, y que incluso los muertos se alzaron para matarlos. Es de locos, lo sé, pero nosotros mismos hemos visto a un crío al que el capitán del navío anunciaba muerto en su mensaje de emergencia. - Tras escuchar la sugerencia de Hellway, la consideró acertada. - Es mejor que continuemos adelante, a lo mejor descubrimos más cosas.

Escucháis de nuevo disparos, uno, dos y hasta tres tiros que resuenan por esta planta del navío, llegando desde lejos, desde casi la otra punta de la nave.

Me puse en tensión y en guardia al oír el primer disparo, serian nuestros o del enemigo. Rápidamente cogí la radio y apreté el botón.

-¿Quién coño esta disparando? ¿Qué pasa?

Casi a la vez que Rasali, el sargento echa mano a su altavoz

- Aquí McKenzy, ¿quién está abriendo fuego? ¿Es de los nuestros?