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The Dragon Gate: El esperado encuentro

El inicio de otra nueva aventura - Escena II

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04/06/2012, 11:50
Kromwill Rojoalbor

El guerrero iba montado en el caballo, avanzando al ritmo del carro tranquilamente, un poco por delante de éste. Sostenía la espada en su mano derecha, mientras con la zurda tenía firmemente sujetas las riendas de la montura. Miraba a los lados del camino, atento a cualquier peligro.

"Aún es pronto, pero no está de más ser precavido"

Entonces escuchó al draconiano, y se rió antes de responder.

-¡Eh, empezó él! Y además, no tengo la culpa de que estén duros y éso fuera lo más resistente que tenía a mano.

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04/06/2012, 14:15
Arbahin

Arbahin no podia mantenerse quieto. Si no estaba junto a la caravana, retrocedia para verificar que nadie los seguia o se adelantaban para ver el camino, posibles emboscadas o simplemente reconocer el lugar. Se preocupaba especialmente por mantener a su grupo informado de cuanto veia o presentia. Incluso los comerciantes que se aparecian en el camino eran victimas de su escrutinio.

A pesar de que era muy "temprano" para que los atacaran, estaba seguro que de alguna forma comenzarian por vigilarlos para luego atacar sus puntos debiles. Al menos eso es lo que él haria. Le habria gustado participar en las charlas y bromas de sus amigos, aunque veia a Kromwill tan alerta como el licantropo.

-Manten esa cosa tranquila- le decia cuando se acercaba un poco, el caballo parecia nervioso, pero Arbahin se acercaba de vez en cuando para que tomara confianza, no fuera que en una batalla se asustara por él-. Por el momento todo esta tranquilo.

Tambien veia que todo estuviera bien en la carreta, sabia que Imhol era el mas agil y rapido de todos alli dentro, por lo que podria contar con él en cualquier frente de batalla que se presente.

-Espero que ese pedazo de hierro te sirva- le gruño con una sonrisa, siempre se metia con él y con Kromwill porque usaban armas. Para Arbahin las mejores armas eran sus manos...

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04/06/2012, 15:49
Imhol

El carromato avanza a una velocidad aceptable. Hasta que el segundo de los soles sale en el horizonte, consigo mantenerme en el interior del carro junto a Elius, pero una vez la luz indica que ya es totalmente de día, no puedo controlarme mientras sin que la caravana se detenga escalo por el techo hasta quedarme en una esquina con las piernas colgando.

El viento y el movimiento provocan que mi pelo ondee.

-Claro que me sirve, mi peludo amigo - respondo a Arbahin - No has visto lo que he mejorado en este tiempo, si no fuese porque me ganarías, te retaría a un combate - añado entre ligeras risas - La verdad es que doy gracias de que nunca tengamos que enfrentarnos más que en entrenamientos y apuestas.

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04/06/2012, 16:28
Arbahin

Imhol era endiabladamente rapido, cuando lucharon uno al lado del otro, Arbahin se sorprendia de que en un segundo estaba a su derecha y al siguiente a su izquierda. Es por eso que sus "luchas" eran tan interesantes, pues el ventante era rapido y listo, mientras que Arbahin era fuerte y bestial.

-Luchar cuando no sabes si vas a ganar da mas sentido a la vida- la ley del mas fuerte, aunque el licantropo la veia de otra forma: Lucha, defiendete, enfrentate a la muerte aunque esta tenga todas las de ganar, hazle dificil el llevarte-. Estoy seguro que pronto vere cuanto has mejorado...

Seria interesante ver como habian mejorado todos, como se las arreglaban para volver a enlazar sus estilos de lucha para funcionar como uno solo.

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06/06/2012, 16:48
Elius Brezon

Veo como Imhol, cansado del interior de la caravana, se sube al techo de la misma. Con cuidado, me acerco hasta donde cuelgan sus piernas y doy un pequeño y suave tirón a una de ellas, con el objetivo de llamar su atención:

- Cuidado, ventante, no vayas a caerte con el traqueteo de la caravana -le digo con una risita.

Me asomo al exterior del vehículo, donde mis compañeros nos rodean atentos a cualquier posible incidencia. Arbahin es el que más se aleja de la caravana, con el objetivo de explorar el terreno e informarnos de la situación.

Aunque desde donde me encuentro poco puedo hacer, yo también me siento alerta, como si esperase el asalto en cualquier momento. Sin embargo, a pesar de la rigidez que se palpa, mis amigos intentan quitarle hierro al asunto haciendo bromas y contando anécdotas, así que les escucho divertido.

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06/06/2012, 17:11
Lom, el conductor

Podeis ver sin demasiada dificultad que vuestro conductor es bastante ducho en su tarea, porque la mitad del tiempo no necesita prestar ninguna atención a los animales de tiro para saber cómo han de comportarse o cómo evitar que haya algún problema. Y la otra mitad del tiempo son más meros vistazos para corroborar sus impresiones que otra cosa, aunque tampoco queda demasiado claro porque los ojos morados no parecen mostrar más que el parpadeo, pero ninguna expresión.

-Aparatos, aparatos. La mayoría son más un incordio que una ayuda, y eso cuando no explotan. Aunque alguno sí que ha resultado tener su interés, como cuando me dejaron conducir una carreta tirada por Mecanismos, que es como llamaban a los caballos mecánicos que habían construido. Reaccionaban muy bien a las órdenes, aunque tendían a dispararse con facilidad. -Desvía la mirada hacia abajo. -Aunque hay que cuidar mucho la presión a la que los sometes. No es una técnica que se pueda usar a la ligera.

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06/06/2012, 17:35
Arbahin

No entendia nada de lo que decia el conductor de la carreta, pero de seguro Gruntah si a juzgar por como asentia y corroboraba datos o daba sus propias impresiones. Por su parte el licantropo dejaba de lado estos temas, no entendia como alguien podia interesarse en cosas muertas, artificiales, como...

-Gruntah- dijo de repente-, quizas él sepa algo sobre lo que nos ataco los otros dias, parecian cosas artificiales- podian ser completamente diferentes, pero eso el licantropo no lo sabia, veia cierta asociacion en ello, Gruntah se encargaria de aunar detalles.

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08/06/2012, 02:33
Gruntah

El draconiano chasqueó la lengua cuando su compañero y amigo mencionó el tema, y se maldijo por no haber caído él en la cuenta. Probablemente estaba tan ensimismado con la narración del extraño ser que no había dado con la unión entre ambos temas.

- Eres bueno, Arbahin - Dijo Gruntah con una extraña expresión de satisfacción en su rostro - Es cierto, Lom. Hace poco nos encontramos con unos extraños seres mecanizados, como marionetas, que estaban imbuídos por una fuerte magia. Eran capaces de hablar y combatir, y todos murieron de la misma forma, estallando en llamas. ¿Se parecen a algo que hayas visto antes?

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13/06/2012, 13:42
Lom, el conductor

En su pescante, Lom se mantiene pensativo unos segundos considerando las palabras del draconiano, pero un momento después niega con la cabeza.

-No suena a nada que haya escuchado o visto, aunque tampoco he estado muchas veces por esas tierras. Sin embargo, tuve el placer de conocer a la asistente principal de uno de los mejores artesanos que hay en Baldoran, Lezain. Si alguna vez visitais la ciudad y teneis una oportunidad, podríais preguntarle a Delia para que os ayudase con ese tema.

Y después de eso, la conversación va cambiando de tema mientras pasa el tiempo, con las carretas en movimiento y la tranquilidad que ronda por los caminos. Quaonar lleva ya tiempo recorriendo el cielo y Enolan empieza ya a oscurecer cuando de la carreta de delante, y probablemente de Oppa, llega la orden de parar ya a descansar. Después de unos pocos minutos para encontrar un lugar decente a un costado de la carretera, tanto el conductor de delante como Lom guían a las criaturas de tiro y detienen el avance. El lugar es un claro que se puede ver ha sido usado reiteradas veces para lo mismo para lo que lo estais usando vosotros, con una zona empedrada en el centro para instalar una fogata y todo. Mientras empezais a arreglar las cosas que necesitais para la noche, los dos conductores empiezan a soltar a las bestias y a cuidarlas del viaje que han sufrido.

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13/06/2012, 15:07
Arbahin

El licantropo no se quedo a escuchar lo que decia el pequeño conductor, sabia que Grutah les informaria luego lo que descubriera. Se alejo del camino siguiendo senderos y buscado rastros. Nadie sabia si eso lo hacia por una necesidad de soledad o por meticulosidad, pero lo cierto era que sus desapariciones eran conocidas por sus amigos. Era normal alejarse unos dias, recorrer lo mas recondito del bosque, desahogar a la bestia que llevaba dentro.

Cuando pararon para hacer le campamento, Arbahin ayudo en lo que pudo, como si el quedarse quieto fuera una perdida de tiempo para él.

-¿Deberiamos poner guardias?- pregunto, aunque por su parte nunca dormia profundamente y su fino oido mas de una vez le prevenia del peligro.

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13/06/2012, 15:18
Kromwill Rojoalbor

-Creo que sería lo más deseable-dijo Kromwill respondiendo a Arbahin, mientras se frotaba el hombro izquierdo. 

"El maldito brazo vuelve a la carga de nuevo... Como le gusta molestar de noche."

-Bueno-prosiguió, intentando esbozar una sonrisa-¿como organizamos las guardias?

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13/06/2012, 20:15
Imhol

Lamentáblemente el recorrido se pausa para dar pie a montar el campamento, el viento deja de combinarse con el movimiento para darme la sensación de estar volando libre...

-Hagámoslo como siempre, por los viejos tiempos - Digo recordando la de veces que habíamos tenido que dormir al raso y montado guardias, siempre lo hacíamos igual y funcionaba bien. ¿Por qué cambiar ahora?

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13/06/2012, 20:35
Gruntah

Aunque su montura se había comportado como una auténtica delicia, Gruntah no estaba hecho para montar a caballo. El pelaje y la silla le molestaban en las escamas, y cuando desmontó al final del día, casi se cae al suelo por las molestias. Inmediatamente después, se tumbó y se untó unos productos que había sacado de su mochila. La sustancia, que olía intensamente, recordaba a la miel, tanto en aspecto como en consistencia.

- No tengo la cabeza despejada todavía como para las guardas protectoras - dijo el draconiano, en referencia al comentario de Imhol - Pero dame unos minutos y me pongo con ello, ¡ouch!

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13/06/2012, 20:41
Oppa

Saliendo de su carromato, Oppa da unas pocas órdenes a los mercenarios y los deja trabajando en montar una cocina improvisada y la base para unas cuantas sacas para dormir, viniendo a visitaros. Y no puede evitar escuchar los últimos retazos de la conversación.

-Bien, bien. Veo que estais planeando las guardias. El otro grupo ya las tiene planeadas, pero seguro que no les disgusta el contar con un par de ojos más vigilando. Tenemos comida suficiente para todos de parte de la jefa, pero si quereis prepara cualquier cosa más adelante. Descansaremos toda la noche y partiremos un poco después del primer alba, como hoy.

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13/06/2012, 23:37
Arbahin

Si hacian las cosas como siempre, a él le tocaria el turno mas de noche, como a Gloria, ambos tenian ciertas facultades para "ver" en las mas obsoluta oscuridad. Cuando Gruntah destapo un frasquito, el licantropo estornudo una vez con fuerza y se alejo de alli ceñudo. Miro a Oppa diciendo:

-Solo comere un pedazo de carne... cruda....- luego se dirigio a sus compañeros-. Si hacemos como siempre ya estamos organizados.

Normalmente se intercalaba, de tal forma que los guerreros estuvieran descanzados al mismo tiempo que los curadores o magos. Era estrategia simple, pero efectiva..

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15/06/2012, 01:49
Elius Brezon

- Si queréis puedo hacer la primera guardia, ahora que empieza a esconderse uno de los soles. A fin de cuentas, he ido todo el viaje metido en la caravana y soy el que más descansado está -digo estirándome para exagerar mi comentario, y con una risa, prosigo.- Pero ahora será mejor que comamos algo, ¡o los ruidos de mi estómago me impedirán oir nada! ¿Preferís que cenemos solos, o nos unimos al resto?

El otro grupo ha empezado a encender una pequeña hoguera en el sitio destinado a ello, para así poder guisar algo para reponer fuerzas. Ahora se encuentran concentrados en preparar lo necesario para pasar la noche, y durante el día no hemos tenido contacto, por lo que no podría decir si los mercenarios están a gusto con nuestra presencia en esta misión o no.

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25/07/2012, 15:05
Gloria

El viaje había sido tranquilo por el momento. Sentada sobre sus propios pies en el suelo del carromato, dejaba su mente vagar, mientras sentía el leve balanceo del carro al pasar por los pequeños desniveles o rodar sobre alguna piedra pequeña. Se mecía levemente al compás del suelo, como si la acunase, y a veces, empezaba a cantar en voz queda para no molestar a los demás.

Estaba feliz. ¿Cómo no iba a estarlo? Estaba de nuevo entre sus amigos. Habían cambiado a lo largo de estos años... un poco como ella. Eran más fuertes. Habían crecido y madurado, y lo podía notar en sus auras. Entre los brillantes destellos de sus formas ahora había vetas, puntos, remolinos. Las marcas de emociones fuertes, de experiencias vividas que habían dejado huella y se entretejían con sus colores primarios para formar un tapiz, una pintura mucho más profunda y rica que antes. Pero seguían estando allí, esas formas y colores de siempre que tan bien conocía y que quería tanto. Sus amigos. Sus caballeros que la protegían como si fuese una princesa, y la trataban como una. Que le habían enseñado tantas cosas. A vencer la soledad. A no preocuparse de lo que pensasen los demás. Acerca de las fuerzas invisibles del mundo... y las de su propio corazón.

Claro que se mecía en el suelo y cantaba, feliz, dándole las gracias a Oxidion por la paz y armonía que reinaba entre ellos cuando estaban juntos.

Y sin embargo...

Pese a todo, a veces la sacerdotisa se abstraía. Se quedaba pensativa, y su cabeza se movía como buscando algo en el aire. Aunque era imposible saber dónde miraban sus ojos ciegos, en esos momentos el ojo de su mente buscaba a Kromwill.

Estaba ahí, su aura fiera, resplandeciente como una estrella, plagada de remolinos y corrientes. Tan llena de pasión y de energía que era como una canción a la vida. Se podría pasar horas mirándola, arrobada y presa de la fascinación. Pero había algo más. Algo... distinto de las vetas, de las pinceladas de color de los demás. Una sombra emergía a veces, irregular, densa, extendiéndose como la tinta, fluctuando entre las corrientes como un pez negro y ominoso nadando entre las tinieblas. Anhelando la luz. Esperando. Lo podía ver, podía sentir que el alma del guerrero ya no estaba tan equilibrada como antes. No era tan armónica. La sentía luchar contra algo, algo profundo que hundía sus raíces en ella. ¿Qué podía ser? ¿Qué podría haberle pasado?

Podría ser... ¿ella?. Sabía que Kromwill sentía algo por ella, algo profundo y muy fuerte. Gloria no creía merecérselo, no creía que fuera bueno, bueno para él. No respondía porque le aterraba hacerle daño. ¿Es posible que, sin embargo, a pesar de ello, o quizás por ello mismo, se lo estuviese haciendo? ¿Que eso fuese lo que notaba?

Entre estos pensamientos, llegó la noche. Los demás empezaron a discutir las guardias. Gloria pensó en ofrecerse, pero ya sabía de sobra que sus amigos querrían que descansase, y que el conductor no querría ni oír hablar de una guardiana ciega. Así que se preparó para dormir. Todavía sentía algo de inquietud por Kromwill, pero decidió esperar. Las cosas tienen su propio ser, y la naturaleza tiene sus caminos para devolverle el equilibrio a todo. Cuando Kromwill quisiera hablarle de ese desequilbirio, vendría a ella. Confiaba totalmente en ello.

¿No volvía siempre a su lado, al fin y al cabo?

Notas de juego

He visto que Gloria no ha hablado mucho de lo que ha visto en el alma de Kromwill, y los otros PJ no lo saben. Yo es así como me imagino lo que habrá visto, pero si tú y el anterior PJ creen que es mejor que no mencione nada sobre ello aún, se puede quitar la parte en cursiva y quedarse con el resto, que es más general.

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26/07/2012, 16:23
Arbahin

Arbahin se alejo un poco de Oppa para dirigirse hasta Elius. No le interesaba compartir la comida con extraños, eso estaba reservado para su manada, su familia. Asi que tomó su propuesta con un bufido.

-Como prefieran, pero me gusta mas estar comiendo con mi gente- lanzo una mirada hacia el otro grupo, no tenia nada contra ellos, simplemente no le agradaba hacer las cosas diferentes a como las conocia-. Cuando sea mas de noche y la oscuridad mas espesa, en ese momento hare la guardia.

No se sentia cansado, de hecho la noche parecia conferirle mas energia, mas ganas de salir y explorar. Cazar. Olisqueo el aire, la brisa le traia muchos aromas. Algunos suculentos y tentadores, que le recordaron el sabor de la sangre caliente y el sonido de las presas al ser abatidas. ¡Con que ganas deseaba salir a cazar! Pero no podia, no ahora y tal vez no en un largo tiempo.

Notas de juego

Yo hago el turno despues de el de Elius, creo que ya seria mas entrada la noche.

Lo de comer con los demas como prefieran, pero jamas vi un lobo compartir su comida con otra manada XD

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29/07/2012, 15:21
Director

Por una razón o por otra, al final acabais decidiendo montaros una cena aparte y preparar también vuestras propias guardias nocturnas. Oppa se pasa un momento antes de irse a dormir para comprobar cómo las habeis montado y, satisfecho, os desea buenas noches mientras asiente con la cabeza complacido. Y, con todos los preparativos hechos, aquellos de vosotros que teneis un turno más tardío o no participais en la guardia en general os tumbais en vuestros lechos para descansar.

El tiempo pasa, mientras Imhol pasa a solas el primer turno. Llegada la hora, despierta a Elius para sustituirle y va a disfrutar de unas cuantas horas de sueño. Entretenido con quehaceres y preparaciones, acaba siendo la hora en que el licántropo ha de salir de vigía. Y éste, no pudiéndose estar quieto como los otros dos, acaba dando vueltas por el campamento y los alrededores, de tal manera que la primera vez al volver consigue asustar hasta al guardia de los mercenarios.

Y es, precisamente, cuando está en una de esas expediciones por los alrededores, cuando capta un olor extraño en el viento, sangre y furia. El olor de un ataque. Corriendo con sus poderosas patas, entra de golpe en el campamento para encontrarse ahí suficientes tropas bien armadas como para haber tenido que oirlas llegar... pero no hacen sonido alguno pese a sus armaduras de placas. Ni tampoco desprenden olor alguno... La entrada de golpe en el campamento despierta de improviso al guardia del otro grupo, sacándolo de su extraña ensoñación y causando que de la voz de alarma capaz de despertar a todos. Al instante, todo el mundo abre los ojos y se da cuenta de la situación de la situación y del combate que hay que librar. Todos, menos Gloria, que a su alrededor no ve a nadie más que a los componentes de ambos grupos. Aunque, si se fija bien, sí que es capaz de ver algunas conexiones de energía, pero en absoluto personas completas. Más bien... ¿magia, quizá?

Notas de juego

Bien, ya estamos de nuevo en la acción. Segunda escena de combates, para que improviseis un poco. Hay un buen puñado de enemigos, tanto para vosotros como para los mercenarios -que se defienden bastante bien, he de añadir- así que entreteneos.

Y dado que ya no lo voy a hacer, puedo deciros que esta hubiese sido la escena en que habría secuestrado a Gloria, si no la hubiésemos buscado un sustituto. Ya sabeis, para chincharos un poco :D

Cargando editor
29/07/2012, 21:10
Kromwill Rojoalbor

El grito de alarma hizo que se incorporara automáticamente, para comprobar que estaban rodeados... 

"¿Cómo han sido tan sigilosos con ésas armaduras? Aquí hay algo que no tiene sentido..."

El guerrero se puso de pie. Ya no había tiempo para colocarse la armadura, sólo tenía la protección de su brazo izquierdo, que nunca retiraba. Desenfundó la espada con la diestra, mientras con la siniestra agarraba un leño de la hoguera. Con las dos armas ya listas, se puso en guardia, de espaldas al fuego, en dirección a los enemigos.