Partida Rol por web

The Dragon Gate: El esperado encuentro

El inicio de otra nueva aventura - Escena II

Cargando editor
09/08/2012, 22:05
Imhol

El combate termina cuando Gloria deja ver el intenso poder que le otorgan sus oraciones, y los enemigos huyeron como una banda de ortiniles* ante un cazador.

Instantes después se encontraba corriendo tras ellos hasta que la voz de Oppa ordenó lo contrario, pese a esto, Imhol nos e detuvo en seco sino que frenó paulatínamente. Después se giró hacia el grupo y vio a Gloria de rodillas en el suelo, asumió que debía ser fatiga por la oración, pero le preocupó bastante a si que inició el regreso.

No obstante, no llego hasta ella, la mitad del grupo ya se preocupaban de la sacerdotisa. En vez de ello se acercó a uno de los cuerpos para comprobar qué diantres era.

En su mano, la lanza aún lanzaba unas leves chispas que, si bien el ventante no se había percatado de ellas, pedían acción, clamaban combate, agradecían haber sido empuñadas.

Notas de juego

*pájaro, iba a poner patos, pero era muy cutre XD

Cargando editor
09/08/2012, 22:19
Gloria

Pese a su estado, Gloria no puede evitar sonreír al ver como el enorme licántropo, que tan fiero y aterrador debe parecer ahora, agitado por el combate, acude raudo a ella. Y no es el único.  El corazón le da un bote de alegría en el pecho al reconocer la voz de Kromwill, que también se apresura a venir junto a ella.

Por más años que pasen, nunca dejará de sentirse agradecida a los cielos por el cariño y la preocupación del guerrero. No hay nada en el mundo que la haga sentirse más segura que su voz, que esa preocupación honesta y sin concesiones con la que la vigila. Se siente agradecida a Oxidion por el cariño de todos, pro supuesto... pero por nadie tanto como por él.

A pesar del esfuerzo, tiende las manos y deja que las suyas, blancas como la leche, reposen sobre las de sus amigos. Sus manos pequeñas y delicadas no podrían ser más diferentes que la zarpa gigantesca de Arbahim o la mano nervuda y fuerte de Kromwill, pero al rozarlas con las suyas, el calor que siente emanar de esa conexión especial que todos tienen difumina todo lo que les es diferente, y solo queda lo mucho que los une.

No me ha pasado nada, en serio. Mi última oración consumió demasiada energía. Tomé prestado demasiado poder, y ahora tengo que dar un poco del mio a cambio, para que el equilibrio siga. Así es como funcionan las plegarias. Mi cuerpo se está esforzando para producirlo y estará un poco cansado durante un tiempo, eso es todo. Veis?- dijo, sonriendo mientras daba un leve apretón a las manos que sostenía en las suyas. No hay nada que temer, en un rato estaré como nueva. Id comprobando si hay heridos, en cuanto me encuentre con más fuerzas iré a ayudar a Imhol Elius con ellos.

Notas de juego

NdM: El que cura las heridas es Elius, no Imhol :)

Cargando editor
10/08/2012, 02:53
Elius Brezon

En la lucha, beneficiado por los hechizos de Gruntah, intento dar lo mejor de mí y me centro en mis enemigos, hasta que de pronto tres intensas luces rompen mi concentración y miro sorprendido alrededor, buscando su origen. Todos parecen estar en mi misma situación y el campo de batalla sufre un instante de total y absoluto silencio (más del que ya producían nuestros enemigos), hasta que me doy cuenta de que es Gloria la responsable de esta proeza. No puedo evitar mirarla con orgullo, maravillado ante su potencial.

Nuestros silenciosos enemigos parecen haberse dado por vencidos y efectúan una retirada que Oppa nos ordena no perseguir. Rápidamente, echo un vistazo a mis compañeros y a los mercenarios: A pesar de algunas heridas de feo aspecto, todos están bien, por lo que emito un suspiro de alivio. Por si acaso, me dirijo a los míos:

- Chicos, ¿todos bien?

Ahora empieza mi labor real, pues aunque algunos guerreros hayan caído bajo mi daga, mis destreza luchando queda algo lejos de Arbahin, Kromwill y los demás. Mi trabajo es curar, y me preparo para ello.

Escucho las explicaciones de Gloria, de manera que no la agobio y la dejo reposar. Sin embargo, cuando paso a su lado para empezar las curas, le susurro a la sacerdotisa al oído:

- Tómate tu tiempo, pero si necesitas ayuda, llámame. Estoy cerca.

La joven me sonríe con algo de esfuerzo, mientras yo empiezo a sacar algunas cosas de mi bolsa.

Notas de juego

Me quedo "a punto de curar" por si alguno quiere alguna atención especial antes de que empiece a curar en general. Si no decís nada, después escribo otro post con la acción.

Cargando editor
10/08/2012, 19:18
Arbahin

Satisfecho con la explicacion de Gloria, el lobo la dejo con Kromwill y empezo a recorrer el campamento. Si habia alguien herido lo enviaba inmediatamente con Elius, pero su meta principal era buscar pistas. Olores, huellas, algo que le dijera que acababa de ocurrir. Si bien no podia dar una explicacion a la falta de sonidos y demas, quizas encontrase algo mas. Tambien se aseguraria de que ninguna nueva amenaza los sorprendiera.

Imhol revisaba uno de los muertos, asi que el licantropo se le acerco.

-¿Seguro esta muerto?- si fuera por él le arrancaria la cabeza solo para asegurarse-. No me agrada esto, los muertos no se levantan porque si.

Cargando editor
11/08/2012, 19:08
Elius Brezon

Tras un primer vistazo, me fijo en un mercenario herido en un brazo y que se encuentra rodeado por algunos de los suyos, quienes emiten gestos de preocupación. Al acercarme, veo que acertadamente han usado trozos de tela para taponar la hemorragia, así que cuando los aparto para ver el estado de la herida, la sangre comienza a salir a borbotones de lo que parece el corte de una espada, y el hombre no puede disimular una mueca de dolor.

A pesar de que no es muy profunda, sangra abundantemente, así que le pongo una compresa humedecida con un líquido que evitará que se infecte y poso mis manos sobre su hombro, decidido a utilizar la magia sobre el mercenario. En una situación en la que nos encontramos, creo conveniente contar con todos los hombres que podamos tener preparados para la lucha, y una herida como esa (a pesar de que no es grave) necesitaría varios días para que pudiera volver a luchar cómodamente.

Algunos de los hombres que nos rodean me miran con curiosidad, y el herido en cuestión mantiene una mirada preocupada, pero me deja hacer, así que le sonrío para que se sienta más a gusto. A continuación, cierro los ojos y susurro las palabras adecuadas. Cuando el ya para mí conocido "candor azul" aparece en la palma de mi mano, algún mercenario deja escapar una expresión de sorpresa, pero yo no puedo oirla debido a la concentración y canalización de mi energía.

Cuando termino, me encuentro más cansado y mi frente está perlada de sudor, que me quito rápidamente con una manga. Al retirar la compresa de la herida, ésta se encuentra cerrada y en estado de avanzada cicatrización.

- Intenta no sobrecargar el hombro -le explico al hombre.- Aunque está casi curada, aún puedes sentir alguna ligera molestia.

A continuación, me dirijo hacia otras personas que han venido a mí para enseñarme cortes y arañazos más leves, por lo que los trato "a la manera tradicional".

 

Cargando editor
11/08/2012, 20:04
Kromwill Rojoalbor

Kromwill, tras comprobar que todos parecían estar bien, colocó su mano derecha de manera disimulada en el hombro izquierdo, cubierto (como todo el brazo) por aquella pieza de armadura que no parecía quitarse ni para dormir. Se recolocó un poco la pieza de armadura, quizá en un leve intento de masajear con disimulo la zona. Gruñó un poco al sentir como su brazo le daba guerra, pero la bajada de adrenalina empezaba a notarse, y la siniestra voluntad de la extremidad amputada descendía del mismo modo.

Se sentó en el suelo, esperando que aquello pasara, y que se decidiera como reanudar las guardias, si es que alguno pensaba dormir después de aquello. 

Cargando editor
13/08/2012, 14:09
Director

La batalla ha terminado definitivamente. Los asaltantes han huido y desaparecido ya de la vista, ocultos por la noche. Los mercenarios, quitando el del corte en el brazo, apenas tienen nada y en cuanto se las componen -aunque agradecen la ayuda, tampoco les convence ni hace falta- repasan uno a uno todos los enemigos caidos, comprobando que su condición es definitiva. En cuanto le quitan el casco al primero de ellos, algo extraño ocurre con su armadura porque no solo se puede escuchar ya los estertores del cuerpo, sino que al moverlo un poco el peto suelta el tintineo de la cota moviéndose, además de que Gloria ya puede ver su esencia escapándose del cuerpo con el último suspiro.

Si quereis hacer algo más en cualquier sentido, este es el momento, pues en cuanto los mercenarios acaben escuchais que planean hacer un montón con los cuerpos muertos para que no estorbe y volver a la tranquilidad del sueño. Ahora o nunca, reza el dicho.

Cargando editor
13/08/2012, 16:11
Arbahin

Arbahin olisqueó el cadaver, ahora se lo veia como un cadaver normal y corriente. Habia olor y sonido. Como si nunca hubiera sido un espectro silencioso y letal. Se irguio con lentitud, pensativo, este tipo de cosas eran habituales para Grutah, pues el licantropo creia que la magia estaba metida.

-Eran muchos y nosotros pocos... pero usaron muchos trucos en nuestra contra- dijo arrugando los labios-. Gruntah, ¿Esto era magia?

Si el "hechizo" se habia deshecho, podria seguir el rastro de los que huyeron, pero dejarian la caravana desprotegida y eso no lo permitira Oppa.

Cargando editor
13/08/2012, 19:39
Imhol

Después cde comprobar uno de los cadáveres me levanto y regreso con el resto del grupo.

-Chicos, esos asaltantes ahora sí parecen muertos,p ero hay algo que me escama, ¿cuando tengáis un momento podéis echarles un ojo? - Mi mirada se posa en Gloria y aunque se que no puede ver mi rostro, sonrío, siempre lo he hecho y siempre me ha dado la sensación de que aunque no lo viese, sabía que sonreía.

Cargando editor
14/08/2012, 11:15
Gruntah

Gruntah había sido de los primeros en recuperarse completamente, ya que apenas había gastado energías, así que en cuanto comenzaron a reorganizarse, se dedicó a pasear entre los cadáveres. No tenían nada en especial, pero quería encontrar algún rastro de la manera que habían encontrado para burlar sus guardias y plantarse en mitad del campamento sin ser vistos ni oídos. Entonces fue cuando Arbahin le mandó llamar, y el draconiano entrecerró los ojos.

Olisqueando el aire sobre los cadáveres, buscó rastros de algún tipo de magia que él hubiera visto o sentido antes, que eran muchas. Si bien era un hechicero centrado principalmente en la magia destructiva, sus viajes junto al grupo le habían permitido disfrutar de la compañía o la enemistad de brujos y magos por doquier, con distintas y exóticas prácticas mágicas que recordaba como si las hubiera visto el día anterior.

Mientras el campamento giraba a su alrededor, Gruntah buscó rastros entre las armaduras, armas y cuerpos de los enemigos.

Cargando editor
14/08/2012, 11:27
Kromwill Rojoalbor

Kromwill, sabiendo que no iba a resultar muy útil en las habilidades de rastreo, decidió vigilar mientras sus amigos intentaban encontrar algo. No sería la primera vez que unos enemigos les atacan, son rechazados y poco después les vuelven a atacar... Había gente que nunca se rendía. 

Por ello, continuó vigilando alrededor, con la espada en la mano, ignorando el dolor de su brazo izquierdo. 

Cargando editor
14/08/2012, 13:52
Datos mágicos

En cuanto los mercenarios descubren que lo que sea que cubría a los cadáveres del ruido y el olor, dejan en gran medida los cuerpos mas que para asegurarse de que ninguno se levantará para apuñalarlos por la espalda. Por el contrario, tu interés te lleva a revisar los cuerpos con encantamientos rotos por la pérdida del casco o alguna otra pieza de la armadura.

A primera vista, no hay nada que llame tu atención. Desde luego, parece que han encontrado una manera para no tener que mantener el encantamiento desde cerca, porque nada de magia rezuma por donde debiera hacerlo. Sin embargo, un análisis un poco más exhaustivo de uno de ellos te desvela el método utilizado, al encontrar unos grabados en el borde de una de las piezas. Sabiendo ya qué buscar, te das cuenta de que forman alguna clase de símbolo a trozos repartido por toda la armadura, runas mágicas de alguna clase que desconocen y que debían de ser las causantes de la existencia apagada de los soldados... y quién sabe de qué más.

Cargando editor
16/08/2012, 20:49
Gloria

Gloria suelta una risita ante la mención por parte de Imhol de "echarles un ojo". Al principio, al poco de conocerse, los demás habían mostrado la típica timidez que mucha suele suele demostrar al hablar de ciertos temas en presencia de un ciego, pero pronto había sido la propia Gloria la que empezó a disfrutar haciendo bromas y tirándoles pullas gracias a su peculiar forma de "ver", algo imposible de entender para quien no la tuviese.

Y una cosa había llevado a la otra. Imhol nunca había necesitado excusa alguna para lanzarse alegremente a batallas de chascarrillos, y no era raro que los dos jóvenes se tirasen sin mala intención dardos de palabras que a veces les sacaban carcajadas a los demás. Seguro que ahora mismo el ventante se debía de estar acordando, sin quererlo, de alguna de esas ocasiones.

No os preocupéis, están muertos. La magia, o lo que quiera que fuese que los sostenía, se ha ido. Puedo ver sus almas ahora sí, y se que se están yendo de aquí, una a una. Perdiéndose en el aire. Que Oxidion tenga misericordia de ellos, aunque fueran nuestros enemigos.

Sintiéndose algo mejor, Gloria se levantó lentamente. Tuvo que contener un gruñido, ya que los músculos de su espalda y piernas protestaron al hacerlo, pero no quería preocupar a los demás. Veía a Gruntah moverse entre las almas de sus asaltantes, que seguían desvaneciéndose, y sabía que si iba a servir para algo era ahora, mientras aún podía ver algo en ellas. Después de que su hubiesen ido, ya poco podría ver o sentir.

Arbahin tiene razón. Llegaron a nosotros protegidos por una fuerza extraña, una fuerza que no habíamos encontrado antes. En el mundo hay aún tanto que no hemos visto ni sentido.

Sin embargo, antes de unirse a Gruntah, Gloria pasa al lado de Kromwill y posa una mano, suavemente en su hombro, hablando en un susurro audible solo para él. Aunque desconoce el motivo, Gloria siente la intranquilidad en el alma del guerrero. La violencia de su aura hacer unos instantes, tras la batalla, no hace más que confirmarle que algo le ocurre.

Pero no hay cosa desconocida que el espíritu del ser humano no pueda domar. Especialmente, cuando la amistad le guía. Sobre todo, cuando la amistad le guía. Cualesquiera que sean nuestras dudas o nuestros miedos, siempre habrá un amigo que deseará estar contigo cuando las afrontes.

Con un movimiento lleno de ternura, la mano de Gloria apretó el hombro del guerrero y, a medida que se movía, sus dedos le rozaron la mejilla al pasar. Si quedaba alguna duda de a qué "amigo" se refería, ese gesto las disipó todas.

Siempre- susurró de nuevo, mientras se unía al draconiano y empezaba a palpar, notando el metal de la armadura bajo las palmas y recorriendo los recovecos con los dedos, intentando encontrar algo, alguna imagen, alguna sensación que le diese una idea al menos de qué o quiénes podían ser.

 

Cargando editor
16/08/2012, 23:13
Arbahin

-Sabian que estabamos aqui- se rascó el pelaje distraidamente, mientras miraba hacia la oscuridad, la cual no tenia secretos para él-. Sin olor y sin sonido, tampoco Gloria podia verlos- segun entendio, ella recien ahora veia como sus espiritus al fin abandonaban ese mundo-. Todo muy preparado...

Estaba seguro que todo eso habia sido una trampa, sabian cuales eran sus habilidades, sus fuerzas y sus debilidades. Cuando se caza, se ataca usando las flaquezas de la presa. Hicieron justamente eso.

Cargando editor
16/08/2012, 23:23
Kromwill Rojoalbor

El toque de Gloria consiguió calmar totalmente los sentimientos y dolores que le provocaba aquel maldito brazo. Miró a la sacerdotisa, y escuchó con una sonrisa lo que tenía que decirle. Sin embargo, al alejarse ella, parte de los malos sentimientos y del dolor que sufría volvieron. 

"¿Qué tengo que decirte, Gloria? Es un problema demasiado grande..."

Algo apenado, aunque procurando que no se le notase, siguió vigilando alrededor, a la espera de que se establecieran las guardias o se decidiera que hacer. 

Cargando editor
17/08/2012, 12:36
Gruntah

El draconiano se mantuvo unos segundos repasando las armaduras de los atacantes, y de vez en cuando soltaba un gruñido de fastidio. Como si fuera un perro buscando un rastro, si no se ponía a cuatro patas y olisqueaba el aire, se acuclillaba junto a un casco y lo miraba como si fuera la primera vez que viera un trozo de metal.

Finalmente, tras un rato, sus compañeros se percataron de que empezaba a mostrarse más animado, e incluso metió el hocico dentro de la coraza de uno de los enemigos, comparando lo visto con el brazalete de otro.

- Bien - dijo, con un gruño de satisfacción - Es magia Rúnica... es antigua y casi no se usa, por eso no la pude detectar cuando aparecieron. No las reconozco, porque es un estilo que nunca me llamó la atención... qué maldita casualidad.

Cargando editor
23/08/2012, 13:50
Director

Con esa declaración, la situación se calma un poco al saber que quien los ha atacado no eran ni ilusiones ni monstruos salidos del sueño, sino simples mortales enfundados en una armadura trabajada con runas. Y gracias al trabajo conjunto de los dos grupos, ahora hay un buen puñado de armaduras silenciosas menos en el mundo. Volviendo a preparar las sesiones de guardia, os repartís entre quienes se van a dormir y quien se queda despierto por si vuelve a haber un ataque, pero el primero de los soles hace amanecer el mundo sin que esto suceda, ni tampoco ocurre nada cuando terminais de levantar el campamento y os marchais.*

El viaje continúa durante varios días, hasta hacerse ligeramente monótono. Y llegados a ese punto es cuando haceis un alto a mediodía para comer y Oppa os informa de que ya casi habeis llegado al punto de separación, aunque contais con Lom así que no deberíais tener problemas a la hora de continuar la ruta marcada. Pocas horas después, los caminos se bifurcan y tanto los mercenarios, alguno de los cuales se ha encariñado con Gloria -como suele pasarle a todo el mundo- como Oppa y su conductor se despiden de vosotros, y avanzais en una nueva dirección, buscando el rio y la balsa que os lleve.

Notas de juego

*Si quereis quedaros una armadura o algo por el estilo, avisadlo en el siguiente post.

Cargando editor
23/08/2012, 14:05
Lom, el conductor

-Caballeros y dama -dice vuestro conductor un rato más tarde, cuando los soles ya están cayendo y empezais a pensar que sería buena hora para acampar-, ahí tenemos, el embarcadero más cercano del rio Zandial.

Frente a vosotros, a menos de medio kilómetro, se alza una edificación pegada al rio de dos plantas, aunque la primera de ellas parece más preparada para almacenar la balsa, mientras que a la segunda se puede acceder por una escalera lateral, todo ello de madera. Ya queda poco, apenas un rato más y habreis llegado hasta ahí.

-Nos quedaremos a pasar la noche, la balsa no sale hasta la mañana.

Cargando editor
23/08/2012, 14:14
Arbahin

Arbahin observo las armaduras con cierto recelo, no le agradaban. Ocultaban el olor y el sonido, practicamente te convertia en un ser sin vida, sin rastro, una sombra viviente. Si bien, algo asi seria muy util, el enorme licantropo paso de ellas.

-¿Alguno usara esto?- pregunto, pues pensaba destruirlas en cuanto perdieran interes en ellas*-. Me pregunto si funcionaran solo con una parte de ellas.

Quizas con solo los brazales el hechizo continue, sino, para la proxima, con destruir una parte arrebataria esa ventaja a su enemigo.

Despues de eso y continuando con el viaje sin mas incidentes, el lobo se dedico a lo de siempre: vigilar incansablemente y buscar rastros. Si bien no encontraria olores, siempre habia algo que seguir, una huella, una rama partida. Solo habia que saber buscar.

Los dias pasaron con pereza y aburrimiento, pero eso no evito que las noches se aderezaban con historia, charlas y anecdotas. Mas de una vez, el licantropo se sorprendio al empezar a hablar y descubrir a alguno de los mercenarios escuchar embelezado. No tenia la destreza con las palabras como los demas, pero cuando contaba algo lo hacia de una forma bastante particular, describiendo cosas que a otros le resultan imposibles.

Al separarse, Arbahin dedico una ultima mirada a Oppa y los demas, preguntandose como se las arreglarian. Ya no era su problema, por lo que se encogio de hombros y siguio su camino. No era alguien que se despidiera, pues decir adios era una metira, los caminos siempre volvian a cruzarse.

Notas de juego

*creo que venderlas seria lo mejor (pensado con el vil metal en mente), pero el lobito no XD

 

Cargando editor
23/08/2012, 14:56
Kromwill Rojoalbor

-No, prefiero no llevar éso...-la verdad es que era un instrumento útil, pero no sabía si interferiría con la runas de la armadura de su brazo, y prefería no probar suerte. 

Los días avanzaron tranquilos, sin mucha acción ni nada interesante. Seguían vigilando, pero parecía que aquellos que los habían atacado habían perdido las ganas... O éso, o estaban buscando un punto mejor para emboscarles. Fuera lo que fuera, Kromwill no dudaba de que podrían con cualquier cosa que les lanzaran. 

Cuando llegó el momento de las despedidas, se despidió con la mano de los mercenarios, deseándoles suerte en su viaje. Parecían un grupo competente, así que cabía esperar que aquel cargamento llegara a su destino. Cuando un rato más tarde llegaron a la balsadera, dijo:

-El edificio parece buen lugar para refugiarse, pero debemos permanecer cerca de la carga...