Partida Rol por web

Jhonn se encogió de hombros al escucharte hablar. De buenas a primeras no se quejó, y la verdad tampoco podia. Tu idea era una buena, y hasta el loco de tu compañero podia saber que tener una mejor visual del lugar en el que iban a hacer negocios era una buena idea, sobretodo cuando estaban hablando de que ese lugar le pertenecia a una mafia. Despues de levantarse de la silla en que estaba comodamente sentado, Jhonn volteó a mirar a Antonio.

- ¿Tu te encargas de Scout? -Le pregunto Jhonn al miembro mas joven del grupo.

- ¡Sin problema! -Dijo el chico emocionado- De aquí a que llegen ya les tengo todo lo que nesesitan.

Con sus habilidades Antonio podria facilmente hacer eso. Meterse en las redes de camaras de la ciudad era algo que cualquier Hacker competente podria hacer, siempre y cuando estas no estuviesen protegidas por el gobierno o alguna empresa que tome su seguridad de forma copetente, así que un chico como Antonio tenia acceso a mas de la mitad de las camaras de esta ciudad, así que una tarea como esta no seria problema.

Inmeditamente, el joven Hacker se puso a trabajar en la tarea que se le fue enconmendada e inmediatamente agarró de su mesa un cable grueso con punta aparatosa que se conectó en la nuca. Sus ojos artificiales comenzaron a brillar indicando que estaba comenzando a conectarse con la red de la ciudad.

- ¡Que les valla bien! -Te despidió a ti y a Jhonn mientras tomaba una barra dulce de su escritorio- En 10 minutos los llamo.

Con sus bolsos al hombro, tu y Jhonn salieron de la guarida. Desde un poco antes de salir ya le habias indicado a tu auto que llegase hasta la puerta, así que para cuando salieron a la calle, pudieron ver como tu maquina cruzaza una ultima esquina antes de llegar frente a ustedes. El auto era un Lexus Griffon, de seguda mano y un tanto viejo, pero era lo suficientemente bueno como para confiar en el en cualquier situación.

Una vez en el auto, Jhonn te envió por IMS* una direción que aparentemente era la del cafe al que iban a ir.

- Entonces jefe. -Te dijo una vez acomodado en su aciento- ¿Listo para transitar el camino del exito?

 Mientras me acomodaba en el asiento y introducía la dirección del café en el GPS, le respondí, con tono neutro, ya que todavía tenía mis dudas con este trabajo:

 - Ya lo veremos...

 A continuación arranqué el coche y me puse a transitar a una velocidad respetable. Mi objetivo era no solo no llamar la atención, conduciendo como un loco, si no dar tiempo a los demás a que hicieran su parte.

 Mientras conducía le pregunté a mi pasajero, esperando que recordara algo:

 - Cuando hablasteis del trabajo. ¿No hubo nada que te llamara la atención de quien te contacto?. Cualquier cosa que te pareciese raro o curioso.

Jhonn iba sonriendo mientras miraba por la ventana y disfrutaba del paisaje de la ciudad a su alrededor. Era raro ver a alguien que de verdad disfrutaba de la vista que ofrecía tan horrendo lugar como lo es el nivel 3, prácticamente todas las personas que conocías odiaban este lugar sin importar cual fuese su posición en el. A nadie le gustaba nada, ni como se veía, ni como sonaba, ni como olía. Muchos llamaban a este lugar el infierno en la tierra, pero por alguna razón, tu compañero no. A el le gustaba esta lugar. Eso no se podía interpretar de otra forma mas que decir que le faltaban unos cuantos tornillos, pero a pesar de eso, Jhonn era una de las mejores personas con las que estabas dispuesto a hacer equipo en este “Infierno en la tierra”

- Oye pues, -Dijo el respondiendo a tu comentario- dejame ver… La verdad no sabría decirte si vi algo muy fuera de lo común en ese tipo o algo por el estilo, y mi me pareció bien normal a decir verdad… Bueno, yo tampoco se mucho sobre como son la gente de las Triadas o del 14k, así que tampoco te puedo decir que estoy cien porciento seguro de que ese tipo era normal. Aunque a mi me lo pareció.

Ustedes estaban entrando a terreno desconocido. Nunca antes han recibido un encargo por gente como el 14k, así que la verdad estaba yendo prácticamente a ciegas en esto. De todas formas, Jhonn era un chico con buenos instintos. Tu confiabas en que si algo raro estuviese pasando con el hombre que lo contacto, el se hubiese dado cuenta. Así que si que hablara así de relajado te calmaba un poco. Por lo menos el confiá en que están haciendo un buen negocio.

 Suspiré antes de responder, mientras seguía conduciendo hacía nuestro destino:

 - Está bien, pero en el futuro te agradecería que tengas cuidado el aceptar un trabajo sin consultar al resto. Alguien del grupo podría tener un conflicto personal para no querer aceptarlo y podrías crear una brecha, sin pretenderlo, en la familia. Eso sin contar con que no me gusta trabajar con gente que no he investigado previamente, para evitar sorpresas inevitables, ya lo sabes muy bien. ¿Cuántas personas en nuestro negocio han acabado mal por no hacer sus deberes y confiar en las personas equivocadas?.

 En este mundo nunca se era lo bastante paranoico si se quería llegar a la jubilación. Y yo pretendía llegar a viejo y irme a vivir a una isla lujosa, lejos de esta mierda, cuando tuviera bastante ahorrado.

Jhonn simplemente dejo salir una pequeña risilla amistosa al escuchar la forma en que terminaste tu ultima frase. Con solo verlo podías notar lo seguro que estaba de si mismo y de este negocio.

- Muchos... -Contestó el- Incluso podría decir que la mayoría de los nuestros han terminado muertas por eso. Pero no te preocupes jefe, nosotros no seremos de esos.

La confianza que exudaba este chico era envidiable. Su expresión dejaba ver que definitivamente ni siquiera estaba considerando la idea de que esto saliese mal, por lo convencido que estaba de que esto iba a salir bien. Eran tanta confianza que podría resultar contagiosa si te dejabas llegar. De seguro eso fue lo que le paso a Antonio y a los demas del grupo.

Después de hablar con Jhonn, tu seguiste manejando hacia el objetivo. A mitad de camino, recibiste un repentino mensaje seguido casi al instante por una llamada. Era Antonio, de seguro ya habia conseguido la información que le pediste.

- ¡Jefe! -Sonó la voz del chico por la llamada- Allí le envié la información que me pidió. ¿Como van ustedes por su lado?

Podías poner el auto en piloto automático para poder concentrarte en revisar los documentos con mas calma. Aunque ya no faltaba mucho para llegar al café, así que tampoco tenias tiempo suficiente para revisar todo lo que Antonio encontró.

 Mientras puse el piloto automático, indicando que aparcara en un lugar seguro, cerca de nuestro destino par que me diera tiempo a leer toda la información que nos habían pasado, respondí:

 - Aquí sin novedad en el frente. ¿Hay algo de lo que nos habéis pasado y que os haya llamado la atención que queríais señalar en concreto, colegas?.

 Nunca está de más preguntar, si hay algo importante seguro que les había llamado la atención y seguro que podrían señalar inmediatamente sin ningún problema.

- Pues la verdad no encontré nada fuera de lo común. -Escuchaste la voz de Antonio por la llamada- El lugar tiene todos los registros en orden y al día, su seguridad digital era estándar, los empleados son gente normal. Nada del otro mundo.

Mientras Antonio hablaba, varios archivos iban pasando frente a tus ojos a forma de presentación mostrándote los descubrimientos de tu compañero. Así como decía el joven Hacker, todo lo que viste era normal, todos los registros estaban dentro de los limites de la ley y al día, ninguno de los empleados tenia alguna mancha grande en su historial, pagaban sus impuestos con regularidad, lo tenían todo en orden.

Los descubrimientos de Antonio podían significar dos cosas. Primero, que todo ese orden no sea mas que una fachada para ocultar algo en ese lugar, o que simplemente ese café de verdad sea un lugar normal. Al fin y al cabo, tampoco era como que si los archivos tuviesen un orden excesivo o algún elemento particular, la verdad, a lo largo de tu carrera has visto una infinidad de locales y negocios que tienen una estructura de archivos parecida, así que, justamente como decía Antonio, no hay absolutamente nada fuera de lo común.

- ¿Que opina jefe? -Preguntó el chico.

  Respondí, mientras seguía leyendo los datos:

 - Está bien, nos la jugaremos en cuento termine de leer todo. Pero si me asesinan al final por tu culpa, John, te mato. - No se sabía si bromeaba o hablaba en serio. Luego me dirigí al resto del equipo. - Antonio, quiero que os preparéis para monitorizar todo para cuando lleguemos y podáis advertirnos que cualquier cosa rara. Incluido entradas o salidas extrañas en la red.

Jhonn dejo salir una risilla para si mismo cuando escucho tu comentario sobre que lo ibas a matar si tu terminabas muerto. Esta vez decidió quedarse callado para no interrumpir tu llamada telefónica.

- De acuerdo. -Dijo Antonio- Le diré a Mari que entre en la red, luego yo me encargaré de las cámaras. No te preocupes jefe, nada va a pasar allí sin que no nos demos cuenta.

Inmediatamente al decir eso, Antonio cortó la comunicación. De seguro no quería perder tiempo que podría invertir en trabajo.

Ya con las labores de cada quien definidas, y la información que tus compañeros pudieron sacar del lugar al que estabas encaminado, no habia nada mas que hacer aparte de ir al lugar en cuestión, para lo cual no faltaban mas de un par de minutos en auto, tiempo que paso bastante rápido.

Al llegar a nada mas una cuadra de el café al que se dirigían Jhonn alzo la voz para indicarte cual era el lugar.

- Es allí. -Hablo señalando un local en especifico por la ventana- Quieres tomar alguna otra precaución para evitar que nos maten o vamos de una vez -Dijo sarcásticamente.

 Miré fijamente a Jhonn, indicándole que el tono de su última frase no me había gustado y lo encontraba fuera de lugar. Sin embargo solo dije, al resto del equipo, para que estuvieran al tanto:

 - Vamos a entrar, estad atentos.

 Luego me dispuse a salir del coche y dirigirme al establecimiento, confiando en que mi molesto compañero me seguiría. Me tocaba los huevos que, encima que cogía este trabajo sin consultarnos, encima se quejara por las precauciones que estábamos tomando para no acabar muertos.

Por lo menos, Jhonn entendió que su actitud te estaba molestando, así que en vez de dejar salir algún otro comentario sarcástico para joderte un poco mas, simplemente se quedó en silencio a la vez que abría la puerta para salir del auto junto a ti y acompañarte hacia el lugar en cuestión.

No te sorprendiste mucho al ver que el lugar al que se dirigían era un restaurant de comida china tradicional. No parecía ser muy ostentoso ni nada por el estilo, si no mas bien algo con un estilo mas minimalista y rural, como que si quisiese capturar la esencia de los antiguos tiempos de la china antes de la guerra nuclear que devastó el mundo entero. Sobre la puerta del local habia un aviso que ponía “Restaurant Wu-Tang” en letras grandes de neon que simplemente no pasaban desapercibidas.

Una vez adentro, fueron recibidos por un ambiente bastante bien concebido. El suelo era de madera, habían plantas, e incluso ventanas con hologramas que emulaban la vista del Shanghai antiguo, en otro tiempo cuando aun habia sol, incluso toda la iluminación hacia parecer como que si hubiese sol y estuviesen a mitad del un día caluroso. Tus ojos simplemente no estaban acostumbrados a esto, así que te costó adaptarte un poco.

Dentro habían varios comensales aunque no eran muchos. La mayoría parecían personas normales, desayunando antes de ir a trabajar, al fin y al cabo, aun es bastante temprano por la mañana. Algunos de estos comensales voltearon a verte a ti y a Jhonn con cierta curiosidad. Ustedes dos de verdad resaltaban aquí. De todas formas, al cabo de un rato mirándolos, decidieron ignorarlos y dejarlos tranquilos.

Jhonn fue inmediatamente a buscar una mesa en la que sentarse, al fin y al cabo, si estaban en un restaurant, tenían que aprovechar ¿no?

- Bueno jefe, -Dijo el ya estando ambos sentados- ¿Que va a ordenar?

 Después de pensar unos segundos, antes de responder, con expresión seria

 - De primer plato quiero sopa de wonton. De segundo plato me apetece, zongzi, relleno de carne y de postre Pastel de luna. Para beber quiero una botella de Baijiu.

 Confiaba en que no hubiera problemas. Algunos de esos platos eran de temporada, pero esperaba que se pudieran encontrar en un restaurante, fuera de china, a disposición de los occidentales curiosos o los chinos llenos de morriña de su tierra natal y su gastronomía.

Mientras tu decías lo que querías, Jhonn iba buscando en el menú holográfico que flotaba sobre la mesa por todas las comidas que pediste. Al parecer era bastante extenso el catalogó de comida, pues a tu compañero le costó un poco encontrar los platos por los que pediste, pero el hecho de que los encontró significaba que este era un restaurant serio y variado como mínimo.

- ¿Sabes de comida china? -Preguntó el mientras interactuaba con el menú- Yo la verdad ni se que es ni la mitad de esto que esta en el menú... Hummm, parece que no tienen ese Baijiu... Pero tienen cerveza normal.

Hasta ahora el restaurant parecía ser de lo mas normal. Clientes normales, empleados normales, todo bien y ordenado. Aun así, sabias que eso era solo por encima. Este lugar debía ser uno de los nidos de los chinos del 14K. Tal vez si abrías los ojos lo suficiente podrías ver algo que este escrito entre lineas.

 Mientras hacía el pedido, buscaba a mi alrededor, buscando cualquier cosa fuera de lugar...

Mirando a tu alrededor de verdad no te pudiste percatar de ningún detalle que valiese la pena resaltar. Los clientes eran normales, los empleados también, y todo el lugar en general seguía la formula de lo común. Es mas, si algo resaltaba ene se lugar, eran ustedes dos, quienes claramente no eran el tipo de clientes que este lugar veía con regularidad. Todos a tu alrededor parecían ser gente a la que la sociedad llamaría “Decente”. Bien vestidos y arreglados y con una imagen que gritaba a leguas “Gente sin dinero que se quieren hacer pasar por millonarios” Oficinistas y gente con trabajos de escritorio que creen que sus vidas tienen sentido y que si siguen trabajando donde lo hacen llegaran a algún lado. Idiotas, para decirlo de otra forma.

Parecía que en el lugar no habia nada sospechoso, pero justo cuando estabas terminando de inspeccionar los alrededores, tu mirada se cruzo con la de una de las mujeres que trabajaba en la barra. La señora te estaba mirando fijamente y, a diferencia de lo que te esperabas, no apartó su mirada cuando se cruzo con la tuya. En vez de eso, parecía como que si te hubiese comenzado a mirar aun mas intensamente cuando se percató de que tu la estabas mirado a ella también hasta que un cliente la llamo para pedirle algo que desde donde tu estabas no podías escuchar.

Definitivamente fue bastante curiosa la reacción de la mujer esta. No fue normal. Te quedaste un poco absorto en tus pensamientos tratando de descifrar que podía significar eso, pero a mitad de tu reflexión interna, la voz de Jhonn te llamó la atención.

- ¿Entonces jefe? -Dijo el de repente- ¿Que opina del lugar?

 El comportamiento de la mujer no hacía más que ponerme nervioso y poner en alerta mi paranoia. Me pareció que su comportamiento no era el típico de alguien que trabajaba en un restaurante. A la pregunta de mi compañero, respondí directamente:

 - Aquí hay más de lo que parece a simple vista. Nos están vigilando, así que cuidado con lo que comes cuando lo traigan, en caso de que le pongan a la comida algún condimento especial.

 Definitivamente este sitio no era el típico restaurante, por bien que se hubieran esforzado en aparentar lo contrario. Si esa mujer era un indicio, parecía que alguien demasiado perspicaz lo estaba llevando, alguien que seguramente, por lo que sabíamos, podría estar llevando el local como tapadera para algo turbio.

En un principio, Jhonn parecía seguir escéptico sobre tu advertencia, y se le notaba claramente en la forma en que te estaba mirando. Tu tenias un historial de paranoia dentro del grupo, así que no era sorpresa que de vez en cuando alguno de tus compañeros decidiese no tomarte muy enserio cuando te ponías así de intenso, pero tal vez fue la forma en que dijiste que los estaban vigilando, mas el contexto de esta situación que hizo que tu amigo se tomase en serio tus palabras esta vez y se pusiera serio.

Mientras hablabas, Jhonn se puso a mirar disimuladamente hacia los alrededores para ver si encontraba indicios de la vigilancia de la que estabas hablando. Esto lo estaba haciendo seriamente. Podías notar en sus ojos la tensión con la que se estaba tomando esto, hasta que dijiste lo de que la comida podía estar alterada. Entonces, inmediatamente Jhonn volvió a mirarte, toda la tensión se fue de sus ojos.

- Oye, no te lo tomes a mal pero, -Dijo el cuidando su tono para no sonar ofensivo- ¿Estas... teniendo otro episodio?

 Miré fijamente a mi compañero, con cara de pocos amigos, antes de responder, con tono serio:

 - Una de las mujeres que trabajaba en la barra parecía demasiado interesada en nosotros y no me gustó la manera en que me miró a los ojos. Puedes creerme o no, pero si esto resulta ser una mala señal, luego no digas que no te avisé.

 A continuación hice como si estuviera mirando los adornos de la pared del restaurante, pero en realidad me preguntaba si alguien nos estaba observando ahora mismo por un circuito cerrado.

Te pareció un completo descaro por parte de tu compañero la forma en que simplemente ignoró todo lo que dijiste con respecto a la forma en que te vio la empleada del establecimiento. Jhonn simplemente dejo salir un suspiro después de escuchar tu advertencia.

- Pues la verdad no me sorprende. -Dijo el- Somos un par de inadaptados en un restaurante decente. Me imagino que no le estamos haciendo mucha gracia al personal. Adema-

Mientras Jhonn estaba comenzando a desarrollar su punto, la repentina presencia de un mesonero parado junto a su mesa hizo que se detuviese. El hombre parado junto a su mesa traía un par de platos en las manos aun humeantes por el calor de la comida recién hecha que estaba trayéndoles.

- Que lo disfruten -Dijo el mesonero mientras ponía los dos platos sobre la mesa- Las bebidas se las traigo en breve.

Después de dejar la comida sobre la mesa, el hombre se dio la vuelta y se alejo de ustedes, pasando a atender a otra mesa cercana. Jhonn simplemente se encogió de hombros mientras te veía una vez el mesero se fue.

- Por lo menos vamos a comer bien… Esto se ve bien bueno. -Dijo el mientras agarraba los cubiertos y comenzaba a comer sin preocupación alguna.

 Ignorando la tontería de mi compañero, miré a mi alrededor, y examiné tanto el contenido de la mesa como del plato, buscando cualquier cosa que me pareciese sospechosa o fuera de lugar. Podía decir lo que quisiera, pero yo no me fiaba ni un pelo de este sitio...