Partida Rol por web

 Todo fue acorde a lo que dijo crystal, que fue corriendo y a golpe de puño y patadas apartó a los zombies del coche, abrió la puerta y gritó para que Raxoi saliera y le acompañara. Raxoi que estaba totalmente impresionada salió sin más y comenzó a correr detrás de crystal, esquivando todo los zombies que intentaban tirarse encima suya y pasando incluso entre las piernas de otro que se agachó para cojerla. Finalmente perdieron a esa plaga de zombies a base de correr calle arriba, pero se escuchaban gritos de zombies provenientes de todos lados. Se dispusieron a seguir la señal que las conduciria al aeropuerto. Entonces vieron como una masa de zombies en esa dirección les impedía pasar. Eran más de 500!! 

Pero entonces crystal vio un camión que parecía transportar bombonas de gas (un camión de la bombona). Estaba repleto, así que podían idear un plan para hacer que todos esos zombies murieran. Tenían escaso tiempo pero recursos suficientes, solo tenían que saber utilizarlos. Estaba claro que ese camino era el que debían tomar y finalmente acabar con todo!!

-¡Son un ejército! -despotricó, atónita- se frotó la cara, intentando pensar en que hacer con aquel camión. Podrían meterse en él e intentar avanzar, pero una maza de 500 cadaveres sería dificil de atravesar. Podían encerrarse en él, para morir de hambre o aguantar hasta que se fueran, y para eso podía pasar mucho...pero todo ese gas...

¿Una explosión? Sería mas que peligroso, pero no tenía muchas mas opciones.

-Vigila -le dijo casi en un susurro a la niña sin darle mucho tiempo a pensarselo, porque la verdad que faltaba.

Trepó al camión, rezando mentalmente porque estuviesen las llaves, y de paso revisó la guantera y aledaños. Alguna herramienta, algun pisapapeles pesado. Cualquier cosa que pudiera aplastar el acelerador para poner en marcha los engranajes del descabellado plan.

Salgo del coche con un ágil saltito cuando Crystal lo manda. Por suerte soy pequeña y ágil y puedo colarme entre las piernas de los zombies sin que consigan atraparme.

Y entonces los veo. Ella tiene razón es un pequeño ejército de vamiro cosas que avanzan para comernos. Pero estoy con Crystal, que es inmortal.

Ya no tengo miedo.

—Claro Crystal, ya vigilo yo—

Tragó saliva, parecía cosa de locos, pero aquella desesperada maniobra era su única posibilidad de salir con vida de allí. Tomó algo de aire, y giró la llave algunas veces para conseguir arrancar el transporte.

Por suerte (y por desgracia) la única cosa que les separaba de aquel conjunto de cadaveres era una valla que fácilmente el camión podría atropellar. Fue trabajoso pero no imposible hacer girar la cabeza del coche para que mirase a la masa sanguinolienta que se agitaba cerca.

Escuchó el suave rugido del motor, listo para cargar, y tras bajarse trabajosamente por el hombro lastimado, tomó la pesada herramienta (una llave inglesa) con el brazo sano y lo dejó caer sobre el acelerador, tras comprobar que no estaba puesta la reversa. El transporte debería empezar a avanzar temerariamente hacia el corazón de la muchedumbre.

Haciendo de tripas corazón, ignoró lo mejor que pudo el dolor que le producía apuntar correctamente, pero la escopeta era una ventaja al menos en aquella situación: No necesitaba apuntar mucho, porque su radio de impacto era bastante grande.

Hizo señas a Natalia rápidamente para resguardarse tras la esquina de un edificio, que lo único que podía brindarles mas o menos protección de la explosión que seguramente resultaría debido a tantas bombonas...

Y finalmente cuando todo estuvo dispuesto y revisó que la niña estuviera a buen resguardo, disparó hacia esos contenedores de gas y como acto reflejo se cubrió.

Tengo un poquito de miedo. No es que piense que Crystal ha predido sus poderes de inmortal. Lo que pasa es que ahora son muchos. Y ella no puede ser comida, pero yo si. Empiezo a respirar muy fuerte y muy seguido.

Cada vez están más cerca. Huelen mal y el único ruido que escucho es de sus pies arrastrándose. Entonces veo a uno de los zombies. Está en primera línea y destaca porque es un niño. Es pequeño, como yo. Y le falta la mano, como si se la hubiesen arrancado.

Me doy cuenta de que, o bien empiezo a estar más atenta a ellos, o me comerán. Pero Crystal es tan buena como siempre y me avisa de que me ponga en la esquina.

Corro y me agacho tras ella, porque estaba apuntando. Cuando la gente apunta es porque va a disparar. Me tapo los oídos muy fuerte con las manos y espero.

Crystal falla su disparo con la escopeta, por lo que el camión comienza a correr hacia la multitud y atropella a unos cuantos, hasta que se detiene debido al número de zombies que hay. La masa zombie pronto se traga el camión, desaparece de vuestra vista, y tan solo veis Zombies por todos lados, ninguna escapatoria y zombies por todos lados, en cada rincón, os acechan...

Pero entonces...

Un grupo militar comienza a aparecer encima de cada edificio, francotiradores... de todo, una fuerte explosión hace que salgais volando unos metros hacia atrás para caer en el suelo, y numerosos cadáveres van volando hacia vosotras... Entonces desde el suelo veis a unos militares y a un tanque que avanza poco a poco. El grupo militar terrestre comienza a aniquilar a todo zombie que queda en pie, y posteriormente con la pistola lo remata.

Estais en el suelo tumbadas un poco aturdidas por la explosión. Los militares están a 50 metros de vosotras, matando a los restos que quedan vivos.  ¿Qué haceis?

Caer sobre el brazo le había sentado literalmente para el culo. Pero apretó fuertemente los dientes en vez de gritar.

-No te muevas -susurró.

Levantó apenas la cabeza para no alertar de su vida a aquellos hombres, porque tenía un muy mal presentimiento. ¿Estarían buscando supervivientes? No parecía, porque al camión le dieron poca importancia aunque se puso en marcha indicando que podía haber alguien manejandolo.

Procuró ver si aquellos hombres se estaban alejando, o si por el contrario se acercaban a su pocisión. Y con mas cuidado aún, si algún resto de cosa estaba en condiciones de intentar algo cerca de si.

 Los hombres se acercaban a toda velocidad!! los que iban a pie corrían hacia vuestra posición, que era donde habían caido la mayor parte de los restos zombies, para asegurarlos metiéndoles una bala en la cabeza. Mientras, arriba, había unos francotiradores y si comenzabais a correr lo más seguro sería que os disparasen. Un hombre vestido de militar, (era uno de ellos, o al menos lo parecía) se acerca corriendo a vosotras antes que el pelotón y os dice mientras asegura otro cadáver bajito:

- A la de tres seguidme, y haced zigzags, no vayais recto

-1...

-2...

-3...

Vamos vamos.- Y comenzó a moverse en zig zag sin parar. 

Vosotras seguís tumbadas en el suelo y si no os levantáis rápido no podréis alcanzarle...

-Nada, ya vienen hacia aqui, demuestrales que estas viva y salvate -susurró.

Prucuró vociferar para hacerles ver que no era de esas cosas, pero ya fuera por la herida en el hombro que se confundió con un mordisco o algo mas...

Tras el ruido, saco los dedos de mis orejitas y miro a mi alrededor. Abro mucho la boca cuando veo llegar a los señores lechuga, que van de verde. Entonces recuerdo que ese es el color de los militares. Dan un poco de miedo pero están matando vampirocosas. Las personas que matan vampirocosas son buenas, porque las vampirocosas son malas y nos quieren comer.

—Nos salvamos las dos. Seguro que tienen un sitio con sopa calentita, y papá y todo. Es un sitio super guay, por eso tú vas a estar también— digo.

Entonces ellos empiezan a dispararnos, y yo a correr.

—¡Yo estoy viva!— grito mientras intento que no me den.