Partida Rol por web

Keosden declara ataque y esquiva.

Abd Allah y Martín apuñalan por lo menudo al recio y furibundo caballero, y el no menos furibundo Keosden atina a herirle la pierna, pero el maldito tiene bien y no desfallece. Así que Martín, entre mucho aspaviento y amago y preguntándose qué estaba pasando, buscó de nuevo la carne del hombre con la almarada.

Sorry, estaba esperando la declaración de acciones de Santiago para hacer mi tirada de ataque y narrar según los resultados. Si no, ahora en breve vuelvo a postear para hacer esa tirada y describir la acción.

-¡Moro , torna arriba e tira cosas a los que abren a puerta! , e mera se ay ventana!-

Grita furioso keosden en clara referencia a los que están tratando de tirar la puerta, que seguramente estén detrás de ella..

- SANTIAGO, e los demas ¡EL FOGO, EL FOGO!-

-Por cierto, ¿dónde "demonios" están los peregrinos?- ¿y el mercader? Aqui sólo hay dos plantas...

- Señora ¿ e os invitados?, ¿quién está en la bodega?- Grita keosden  tratando de llamar la atención de Bernarda que parece sumida en un ataque de nervios en el castellano más depurado que es capaz de articular.

-¿Alguien aquí sabe dónde están los invitados?., maldita sea....-.
 

- Agarrando el arma con las dos manos,el guerrero-pastor hace otro giro trasversal de izquierda a derecha, cual hoz inclemente sedienta de vida.
 

tirada de daño con éxito.

Viendo frustrada la posibilidad de recuperar mi lanza, ante la escasa atención que recibo de la señora Bernarda a mi petición de ayuda., concluyo que tendré que seguir batiéndome con lo que tenga, hasta que el cuerpo aguante:

-Hideputa, que en una de éstas hete de rajar la gorja. Desperta ferro!-Aullo enrabietado mientras arremeto contra el caballero intentando una nueva cuchillada.

-¡Fuego, fuego! ¡La posada está ardiendo, ayuda! -Grita Santiago intentando alertar a los demás huespedes para que arrimen el hombro. Mientras da sus alaridos, busca por la dependencia algún cubo con agua, manta o tejido grueso con el que sofocar las llamas.

Si no lo encuentra, soltará un sonoro bufido e irá a buscar su manta de viaje, tan gruesa y calurosa como vieja y ajada, e intentara apagar las llamas, aunque dedicando un menor esfuerzo que si el trapo es ajeno, que su manta es una manta de calid... bueno, le hace su papel y sus buenos dineros le costo.

Turno 4

Bertrán falla el ataque y esquiva

Julián ataca a Bernarda, para el ataque de Keosden(con otro crítico yuju) y se come el de Martín(tiene -75 a la parada x espalda)

Keosden ataca (le para Julián) y esquiva

Abd allah cambia de arma y se dirije(mira)por la ventana

Santiago intenta apagar el fuego, no encuentra nada y se dirije al dormitorio común

Martín apuñala en el pecho a Julián 5(-4 armadura)+ tirada habilidad(falta tirada habilidad 1D4

Bernarda hace caso omiso del consejo de Bertrán y se lanza hacia el caballero, este hace un movimiento perfecto y la ensarta por el vientre muriendo esta en el acto. Saca la espada del cuerpo muerto de Bernarda y la levanta lo justo para parar el ataque de Keosden, por la espalda Martín logra meterle otra puñalada.

 Los peregrinos entran en el dormitorio común

¡Fuego! ¡Está ardiendo la paja de la cama!  Recuerda Lope porqué ha entrado,mientras su compañero intenta apagar el fuego, el coge la lanza de Bertrán, corre hasta la sala común y la lanza a las manos de Bertrán.

Cuando Alvar ve a su esposa morir a manos de Julian grita de dolor y carga contra el caballero gritando ¡¡¡¡¡¡BERNAAAAAAAARDAAAA     NOOOOOOOO!!!!!!

Por la puerta de las escaleras asoma el soldado espada en mano intentando saber que pasa. Cogida de su mano y con una daga va la noble dama que le acompañaba. Detrás de ellos asoma en camisón el comerciante y su criado. Y muy al fondo se ve al tipo barbudo y grande ataviado con pieles, el viejo y el criado de Ramiro. A Ramiro y a su sobrina no se les ve por ningún lado.

Cuando te asomas por la ventana ves una escena muy poco alagüeña, ves el establo en llamas, y a una veintena de hombres en la puerta,todos ataviados con gambesones de cuero,casco, escudo y espada. Dos de ellos cargando contra la puerta y ya casi han conseguido su objetivo.

 Cuando te asomas, con la ballesta uno de los soldados te ve y te intenta atizar con la espada, pero esta da contra la ventana y te salvas por poco refugiándote dentro de la taberna.