Partida Rol por web

Una sola bala

Historias

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01/12/2010, 02:14
Izzy

Izzy le sostuvo la mirada. No estaba enfadada. No era más que una pobre chica, después de todo.

-Ya. Es lo que ocurre cuando pierdes a alguien. Quieres vengarte. Y todo el mundo tiene a alguien que te vengará a ti. Es un círculo vicioso.

Se separó de la cama y se dirigió a la puerta.

-Ten cuidado, anda.

Y salió de allí. El siguiente paso era llamar a Paul, pero no mientras estuviera en el hospital.

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28/12/2010, 01:44
Director

Natalie se despidió levantando la mano levemente. Después agachó la cabeza y volvió a perderse en sus pensamientos, como si toda la conversación pasada se hundiese de repente en la más densa niebla sin dejar rastro. Pero eso ya no era problema de Izzy.

La nómada salió del edificio donde el clima pluvioso de la ciudad la recibió con una fría ráfaga de viento. Tuvo que refugiarse bien bajo su chaqueta nueva antes de empezar a caminar sacando de nuevo su teléfono para tratar de contactar con Paul. Al quinto pitido la voz del chico sonó al otro lado, ronca y pausada.

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28/12/2010, 13:25
Izzy

-Paul -dijo ella a modo de saludo-. Rhys va a salir de la cárcel muy pronto. Deberías... deberías marcharte. Deberías irte y olvidarte de todo, si puedes. ¿Podrás?

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29/12/2010, 20:33
Paul

-Rhys... ¿El tío de Natalie? -respondió dubitativo-. Supongo que me buscará y eso. Después de que tú dieses con tanta facilidad con Quinn no creo que esté muy seguro en este sitio. Pero no quiero dejar las cosas a medias, no puedo hacerle eso a Laurie.

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29/12/2010, 23:45
Izzy

-No seas idiota, Paul -respondió en tono ácido-. Laurie ya está vengada. Lo he hecho yo, ¿recuerdas? Yo he matado a la cerda que nos delató a todos. Pero ellos... Paul, sólo quedas tú, ¿entiendes? Tienes que vivir. No puedes quedarte aquí para esperar a que alguien te mate. Déjalo estar. Ya hemos matado a mucha gente tú y yo, ahora... Ahora queda vivir, si es que se puede. Y tú puedes. Ve por ahí, búscate una chica, ten un par de críos. Quizás puedas engendrar a una chica tan bonita como ella. Haz lo que se supone que hay que hacer. Pero lárgate de Night City.

Imperceptiblemente, un par de lágrimas rodaron por las mejillas de Izzy. La imagen de una nueva Laurie, su sobrina, con sus mismos ojos o su cabello... O su forma de reír. O su forma de besar. Esa imagen se le clavaba en lo más profundo del alma, pero le daba algo de alegría... o de ese sucedáneo que se llama esperanza.

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13/02/2011, 17:15
Paul

La línea de teléfono seguía activa a pesar de que ninguno hablaba. Paul parecía estar sopesando seriamente la posibilidad de marcharse y hacer algo con su vida, algo que ella también debía plantearse. Seguir respirando no siempre iba a ser suficiente.

Finalmente pareció que la mención de una posible sobrina hizo mella en el chico, casi tanto como lo había hecho en Izzy. Un pequeño brote de algo llamado esperanza.

-Quizás tengas razón, hay algún sitio que me gustaría ver -comentó-. Pero procura hacer tú lo mismo, hazme ese favor. Y… no sé si volveremos a coincidir, pero cuídate.

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13/02/2011, 17:43
Izzy

-Tú también. Sigue vivo, ¿vale?

Después de la despedida, Izzy colgó el teléfono. Sonrió mientras observaba la lluvia caer sobre la calzada. Luego se encaminó hasta su moto, subió a ella y arrancó. El motor resonó agradablemente. Al menos había cosas que no cambiaban.

Aceleró y salió de la ciudad en la dirección opuesta al desierto, donde descansaba el cadáver de Quinn, a estas horas devorado por los buitres. Las gotas de lluvia le daban en el rostro, pero no le importaba. Estaba sonriendo. Dolía, pero estaba sonriendo.

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13/02/2011, 18:00
Director

No había sido muy difícil hilar los cabos. Las ratas siempre acuden al mismo escondrijo hasta que deja de ser seguro, y hasta entonces aquel almacén lo había sido. Las primeras luces del día hacían relucir el metal con destellos anaranjados, y también la pistola que Izzy aferraba con fuerza y rabia. Ni siquiera estaba pensando lo que hacía, pues lo único que tenía en la cabeza era el rostro de Laurie con sus labios manchados de sangre antes de morir, incapaz de emitir una sola palabra.

No tenía dudas de quién había alertado a Militech ni por qué. Era tan sencillo como pensar en la persona más zorra y celosa de su entorno, y sólo se le venía un nombre a la cabeza: Quinn. Había venido a por ella, y la rabia casi la hacía gritar de júbilo con el corazón galopando desenfrenadamente en su pecho. Sólo estaba ella, y tras la puerta, su exnovia y cuatro gatos más que morirían en el vano intento de salvarse. En el fondo era culpa suya por juntarse con quien no debían. Como ya le había pasado a ella. Como le había pasado a Lauire hacía unas horas…

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13/02/2011, 18:38
Izzy

Izzy tenía la mano crispada en torno a su pistola. El dedo bien encajado en el gatillo, dispuesto a disparar. Había entrado a patadas, provocando un ruido considerable. Tampoco es que le importase demasiado el sigilo. Lo único que buscaba era sangre. Todavía no había digerido la muerte de Laurie, y el shock le impedía derrumbarse y llorar, sino que la mantenía en movimiento, como una raya de sintecoca. Y allí estaba, sin preocuparse por su propia seguridad con tal de encontrarse con Quinn.

Entró en la nave principal, un almacén de contenedores portuarios ya oxidados y olvidados, pero que permitían una cobertura perfecta para un tiroteo tanto como para protegerse en una noche fría de invierno. Su propia familia había pasado alguna que otra en un sitio como aquel. Pero... ¿qué le quedaba de ella?

-Quinn -llamó-. ¿Dónde estás? No te escondas.

Por un momento, sólo el eco la contestó.

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13/02/2011, 19:51
Director

La respuesta sólo fue su propia voz, o al menos de momento. Los ojos de Izzy tardaron un poco en acostumbrarse mientras se adentraba en la penumbra, después fue fácil moverse sin darle a las cajas del suelo, siempre con la mano en alto. Y, aunque el sigilo no le importase, parecía que a sus rivales sí.

Entonces escuchó los pasos a la izquierda. La nómada se giró para ver dos figuras moviéndose entre varios barriles, dirigiéndose a lo que parecía la salida de emergencia. O no querían llamar la atención de la policía, o no tenían cojones a enfrentarla. Ninguna de las dos opciones era válida para ella.

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13/02/2011, 22:11
Izzy

Izzy se apresuró y les cortó el paso por el otro lado. Levantó el arma y los apuntó.

-¡Quietos ahí!

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13/02/2011, 22:19
Director

Reconoció sin dificultad el pelo rubio de Quinn entre otras dos figuras que parecían estar escoltándola. Uno de ellos se parapetó al escuchar sus pasos tras unos bidones mientras desenfundaba, seguido de Quinn. El otro, que había sido más rápido, levantó el arma y le plantó cara, quizás con la esperanza de salir con vida.

La bala pasó cerca, demasiado, pero no le dio.

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14/02/2011, 02:34
Izzy

Izzy fue más rápida. Estaba lista para disparar. No sabía quiénes eran, ni le importaba. Bang, bang. Y estaban muertos, con sendos tiros en la cabeza. Sólo quedaba ella.

-¡Quinn! ¡Da la cara, pedazo de zorra!

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14/02/2011, 13:42
Quinn

Los dos cadáveres se desplomaron en el suelo sin apenas emitir quejido alguno. Sólo quedaba Quinn, escondida tras los bidones y, seguramente, muerta de miedo al ver que su "escolta" había durado tanpoco.

-¡Vete al infierno, maldita loca!

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14/02/2011, 14:35
Izzy

-¿Sabes lo que has hecho? -preguntó Izzy mientras caminaba hacia ella. Disparó dos veces hacia los bidones, pero ninguna de sus balas dio en el blanco-. ¿Por qué? ¿Por qué?

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14/02/2011, 14:52
Quinn

Quinn respondió con fuego de cobertura, ganando unos segundos para poder alejarse de Izzy.

-¿En serio lo preguntas? ¡Nunca fuíste muy lista, Izzy!

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14/02/2011, 15:39
Izzy

Izzy se apartó, pero no a tiempo para evitar que una de las balas se incrustase en su chaleco de kevlar. Dolió como un puñetazo, pero la adrenalina la mantuvo en pie y entera.

-Hija de puta... -Volvió a disparar hacia ella, pero tampoco tuvo suerte. Dio tres zancadas para tratar de sorprenderla.

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14/02/2011, 23:21
Quinn

La suerte parecía habérsele acabado con los otros dos, pues no lograba acertarle a pesar de la lentitud con la que se movía. Quinn nunca había sido hábil en el combate, aunque tampoco parecía haberlo necesitado. Sin embargo, Laurie sí. Pero Laurie era todo lo que una zorra como ella nunca sería. Por eso la había amado con locura, llegando a olvidarse hasta de respirar, llegando a olvidarse incluso de lo que era vivir.

Las tres zancadas de Izzy acortaron las distancias de tal manera que Quinn no tuvo lugar al que huir o en el que esconderse. Sus pupilas se dilataron por la sorpresa al encontrarse frente al arma de la nómada. Estaba a un disparo, a una sola bala de pasar a mejor vida.

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15/02/2011, 00:22
Izzy

Izzy disparó. Esperó ver brotar del cañón de su pistola un fogonazo y una bala, un trozo de plomo que se alojaría en la cabeza de Quinn matándola en el acto. Pero no ocurrió. Sólo sonó un clic.

La nómada abrió los ojos de manera desmesurada.

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15/02/2011, 01:11
Director

La bala se encasquilló. Tendría que haber sonado un “bang”, un disparo letal dirigido hacia la frente de Quinn. Pero no. No era su hora, y el destino parecía haberse puesto de su parte para salvarla, quizás esperando que Izzy, más tarde, encontrase la verdad. O, al menos, una verdad en la que encontrar esperanza para vivir.

Quinn tampoco salía de su asombro por la suerte que tenía. No la desaprovechó. Levantó su pistola y disparó contra Izzy, acertándole en el brazo. Esta vez, ni la adrenalina ni las ansias de venganza fueron capaces de bloquear la sinapsis de sus neuronas para seguir. Un dolor que jamás había sentido antes invadió sus sentidos dejándola fuera de combate, oportunidad que Quinn aprovechó para escapar. Quizás tendría que haberla rematado para salvar así su vida, pero en aquel momento no se le ocurrió. Crasso error.