Partida Rol por web

El policía comenzó a sentirse incomodo. Aquel tipo no le gustaba, esta bien que era detective, pero no le gustaba ni un pelo, aquella mirada y aquella forma de preguntar tan insistentemente, le estaba haciendo perder la paciencia.

Mire, esas cosas debería de hablar con mi superior y en este momento no está. Yo le he ayudado lo que he podido.

Era evidente que aquella última pregunta había molestado enormemente al Policía, siempre pasaba igual, casi todos eran susceptibles ante cualquier indicio de incapacidad sobre mantener el orden y la ley en la ciudad. Se sentían continuamente ofendidos si se les ponía en tela de juicio.

Está bien... Deme su nombre y póngame en contacto con su superior...
Tratando de intimidar al policía.

Tony, mi nombre es Tony y si quiere pasame su telefono y le concederé una cita con mi superior. En todo caso, hasta mañana no puede ser. Pero mañana lo podrá ponerse en contacto con él.

Le estrecho la mano.
Gracias por colaborar.
Entonces le escribo el número de teléfono.
Es un placer haberle conocido.
Entonces, me despido, y miro de nuevo la hora del reloj del móvil.

El policía estrecha la mano fuertemente sin decir ninguna palabra, y simplemente espera a que desaparezca aquel hombre que le había puesto en evidencia.

Decido salir de allí; mañana sería otro día, y a mí me esperaba aquella chica... No me gustaría darle calabazas. No la conozco muy bien, y es posible, que si lo hiciera, lo fuera hablando por allí, y debo de ser discreto.
Tomo el coche dirección al hotel.

Tras una hora en el coche, alcanzas el hotel sobre las 9 y media de la noche.

Pfff... Aun queda para las 11...
Subo a mi habtación, y me pongo a ver la televisión, hasta que sean las 11.

Después de descansar un largo rato, tumbado en el sofá y viendo la televisión, la hora de la cita con aquella mujer llegó.

Decido vestime de gala, con la mejor ropa que había traído para la ocasión.
Esta chica me dá mala espina...
Cojo todo, y decido bajar al buffet, esperando encontrarme con ella.

Conforme Bell bajaba por el ascensor, su telefono movil sonó ruidasamente. Antes de cogerlo, las puertas del ascensor se abrieron y ante él, junto a la mesa de recepción, estaba la mujer con la que había quedado para cenar.

Miro el teléfono, a ver quien me llama mientras le doy dos besos a la desconocida.
¡Hola! Le digo entusiasmado al verla.

El telefono que te está llamando es el de los dos agentes que tienes contratados y que duermen en el Hotel.

Una vez me despido de ella, me dispongo a entrar al hotel, y subir a mi habitación.
Antes de ponerme cómodo, quitándome la ropa, y cogiendo un pijama. Enciendo la televisión, y llamo por teléfono a uno de mis dos hombres.

Si, ¿digame? Pregunto la voz de uno de sus hombres al otro lado del telefono.

¿Cómo va la investigación?

En cierto modo, no hemos averiguado nada de nada de esa mujer. De todas formas, mi compañero la está siguiendo, y yo le protego. En el momento que sepa algo de lo que hace y porque sigue a ese hombre, le llamará.

Por favor, no la perdáis de vista y mantenedme informado...

Eso está hecho, no se preocupe.

Gracias...
Cuelgo el teléfono, y me extiendo en la cama, con la esperanza de poder descansar.