Partida Rol por web

"TIburón Ashely", el principal agente del Cártel en Heimburg ha informado a el Cártel de Luna que "Gris Sidney" ha sido eliminado antes de poder establecer contacto con él. Sidney ha sido presuntamente eliminado por un tal Will Coleman. Extraños sucesos están ocurriendo en Heimburg y es posible que Coleman pueda aportar interesantes datos al respecto.

El móvil de Bell Mellor suena, y siempre que suena esa melodía es que hay trabajo. Y eso no siempre era buena noticia. Aún recuerda la última vez que tubo que salir de Luna para un trabajo sobre una quema de camiones, los cuales estaban causando una paralisis de la economía de la ciudad.

Un trabajo que sin duda fue bastante concluyente e importante y el cual le hiso ganar puntos en esta dificil carrera de la investigación. Y desde esa vez, su telefono no paraba de sonar, y no solo las llamadas provenían de la revista a la cual le trabajaba, sino de otras personas y empresas que pretendían sus servicios como investigador secreto.

Pero aún así, aún sabiendo que el próximo trabajo la pudiera llebar fuera de Luna, su trabajo lo mantenía para seguir viviendo, le daba de comer y para pagar un apartamento, y no había más remedio que ir a donde fuera para conseguir esas Coronas tan deseadas.

Al escuchar sonar el teléfono, dejo que suene un par de tonos, por tal de mostrarme ocupado; esperado ese momento, lo cojo.
¿Diga?

¿El Señor Dick Any? Me gustaría entrevistarme con usted para un trabajo que tengo. Me gustaría reunirme, si no le viene mal, en la Agencia de modelos "Glamour", un lugar discreto, en la sece que tienen en Ilbar Street 226, 8º H. Como usted supongo que sabrá, el 226 de la calle Ilbar es un inmenso edificio de oficinas. ¿Como le viene para quedar dentro de... un par de horas?

Miro por un instante el reloj.
Está bien...
Yo que tenía hoy previsto un día tranquilo, viendo una película de culto con un gran bol de palomitas...
Respondiendo con tal brevedad, cierro el teléfono móvil, y en busca de mi coche, tomo la dirección indicada para llegar allí a la hora establecida.

El tráfico en Luna está hoy un poco atareado, quizás sea por las tempranas horas que son, donde casi todo el mundo se desplaza para el trabajo y han salido ya de él, aún así, no hay ningún atasco de mención, y Bill Mellor llega sin problemas a la hora establecido al edificio de la cita.

La voz del hombre que se había puesto en comunicación con él, aún le sonaba en la cabeza, una voz de un hombre, que según él, podría alcanzar los 40 años sin problemas, y casi nunca se equivaba en esas predicciones, había oido hablar a tanta gente por su movil que ya diferenciaba incluso la edad del interlocutor.

Los aparcamientos andan escasos por esa zona y al final tiene que aparcar unas manzanas más hacia el norte de Luna. Una vez aparcado, camina en dirección al edificio, un bloque de oficinas amplio, con una entrada de lujo, y unos ventanales que serían la envida de cualquier Hotel de lujo.

La entrada tiene una puerta giratoria y el recibir está rebestido de madera clara, dando una sensación de riqueza y comodidad. Justo enfrente salen dos escaleras de mármol, y en medio de estas se encuentra el ascensor, totalmente de cristal.

A la derecha se encuentra el lugar donde está el portero, sentado sobre una silla, detrás del cristal que cubre la mitad de su cuerpo, y leyendo el peridico, en el cual había participado en un par de articulos de poca monta pero necesarios para subsustir e impuestos por un contrato que le exigía hacerlos.

Al ver el reloj, me encuentro con que aun falta media hora; todo y eso, decido subir a la 8a planta, a la puerta H; donde me esperarían muy pronto.
Una vez plantado en la puerta, pico en ella.

El edificio se ve con todo tipo de lujos, incluso se ve en cada planta pequeñas estatuas decorativas bastante impresionantes. El apartamenteo H de la planta octava se halla ras una inmensa plancha de cristal opaco en el que resalta una imagen holográfica de unos inmensos y apetitosos labios de mujer, y una mano que con un lapiz de labios escribe y borra continuamente la palabra "Glamour". Para acceder a la oficina, según observa Bill Mellor, se ha de introducir en la cerradura magnética una tarjeta, típicas cerraduras de Cybertronic que comercializan cada vez con más éxito y que la Hermandad no ve con buenos ojos.

Tras los leves golpes de Bill Mellor, la lámina de cristal se abre con un ruido de expulsión de aire y dará lugar a una pequeña oficina con sala de espera. La oficina se encuentra decorada en tonos cremas y con muebles de diseño. A lo largo de las paredes, fotografías de mujeres y hombres de facciones distintas y que de una ojeada B. Mellor podría garantizar que hay de todas las megacorporaciones.

Justo enfrente de la puerta se encuentra una mesa recibidor con un ordenador. Tras la mesa una belleza que bien podría ser de Capitol. Un cartelito en la mesa indica que la joven se apellida Rinkle.

Buenas tardes señora...Tenía cita para de aquí...
En ese instante vuelvo a mirar la hora del reloj en un momento, como inseguro de la hora que podía ser... A Bell no le gustaba quedar mal, y es por eso que siempre trataba de asegurarse de que todo lo que dijera fuera cierto.
Veinticinco minutos aproximadamente...

La señorita sonrie de esa manera que sólo una mujer hermosa sabe hacerlo, jugando con su belleza y sabiendo que con un pequeño gesto puede enamorar a cualquier hombre sobre la tierra.

El Señor Harper le está esprando.

Inmediatamente se levanta del sillon donde estaba sentada y le da la vuelta al mostrador para acercarse a Bill Mellor. Tiene un bestido largo que señala sus cinuosas curvas, y realza su belleza, aún siendo de un tejido simple y de un color gris cielo, sin nada de adornos ni glamuroso, pero sencillamente le quedaba genial a aquella mujer.

Veo que es usted muy puntual.

Y vuelve a sonreir.

Acompañeme.

Tonya Rinkle toma la iniciativa, seguida de Bell, atravesando un corto pasillo que se encuentra justo en frente del mostrador, al otro lado de la pared. Al final de éste pasillo se encuentran con una puerta. Tonya la abre despacio, inclinando un poco su cuerpo y deja ver la oscuridad de una reducida sala de proyecciones donde no está la luz encendida.

En silencio y con un gesto universal sobre sus labios, Tonya indica a Bell que pase y se siente en una de las sillas que hay en la sala.

Asiento con la cabeza.
Muchas gracias. Digo en voz baja.
Aquella puerta medio abierta, con la luz apagada, y la proyección encendida me hizo actuar como si en un cine estuviera, motivo por el cual entré sin alzar la voz, y me senté en el primer sitio, en medio, que encontré.

La proyección comienza.

Buenos días señor. Ha sido reunido aquí para ponerle al corriente de su próximo trabajo. Se escucha un zumbido y la proyección aparece Luna vista desde el espacio. Ésto es Luna. Aquí se encuentra las fábricas que producen el 80% del ozono que se distribuye por los demás planetas. La proyección aparece ahora una extracción de ozono por medio de unos grandes tubos que se adentran en el corazón del planeta. Tras las Segundas Guerras Corporativas y la creación de éstas fábricas, temiendo el desencadenamiento de otra conflagración, se llegó a una alianza entre las cinco corporaciones más poderosas. Este pacto cedía la concesión de una de las fábricas de este satélite a cada corporación.

La conceción es temporal y rotativa. Cada cinco años las potencias desalojaban la fábrica que ocupaban y pasaban a tomar el control de otra fábrica. Esto es debido a las diferencias de producción existentes entre las cinco fábricas. Fundamentalmente Gassat Dam, que genera él sólo la mitad de la producción de las fábricas de Luna. Esta fábrica se halla ahora bajo la concesión Bauhaus, pero en menos de un mes ha de pasar a control Mishimes. Ultimamente la concentración en las cercanías de Luna de naves de guerra de ambos ejércitos ha aumentado en un 1.000%. Nos tememos que algo grave se está fraguando en Luna.

Ahí es donde entra usted. Se escucha un nuevo zumbido en el reprocutor del sonido, y la imagen cambia apareciendo un hombre de unos 30 años de rasgos bulgares.

Éste era uno de los hijos de un jefe de las Triadas más importante en Luna: "Gris Sidney", ha sido recientemente asesinado. Se vuelve a escuchar un zumbido y la imagen cambia y aparece un hombre de unos 35 años de edad, rasgos huraños y espesas cejas negras y pelo negro risado.

Éste es Will Coleman, su asesino. Parece ser que pertenece a una de las más importantes máfias de Bauhaus que controlan los numerosos garitos en los que los mineros dejan toda su paga.

Es el hijo del padrino de la mafia. Es un individuo sumamente peligroso, especialista en artes marciales y armas de fuego.

El señor Coleman salió de Luna apresuradamente, huyendo de algo o alguien. Ayer se registró su entrada en Venus en el espaciopuerto de Heimburg.

Según nuestro agente de más rango en Heimburg, el señor Coleman podría saber algo de importancia con relación a los sucesos que estan ocurriendo en Luna.

Su misión será localizar al señor Coleman y obtener de él la máxima información posible. Para conseguirla, usted deberá de convertirse en su hombre de confianza, y entrar en la organización mafiosa de Bauhaus e informarnos a nosotros de todos sus movimientos.

Coleman entró en Venus con un pasaporte falsificado a nombre de Reginald Kleine. Sinte debilidad por los coches caros y veloces, así como por las mujeres bellas, preferentemente de Capitol. Coleman es natural de Heimburg, y conoce a la perfeccción lso barrios bajos. De todas formas hace cinco años que marchó a Luna, y la mayoría de sus amistades se hallan muertas, en la cárcel o en Luna. Su única relación conocida allí es Kenny Lewis. Habitualmente participa en carreras de automóviles bajo apuesta, aunque nunca ha puesto reparos al dinero fácil y ha estado encarcelado varias veces por robo y agresión. Reside presuntamente en el 414 de Transpouse Boulevard.

¿Alguna pregunta?

Sí,...
Digo mientras me levanto del sitio y me mantengo de pie, sin moverme.
¿Existe algún conocido suyo, por los alrededores de Luna, con quien pueda ponerme en contacto antes de marchar a Venus?

La imagen del Señor Harper se mueve, parece que rebusca como unos papeles sobre una mesa, después de oir un nuevo zumbido, el Señor Harper se incorpora para contestar a Bell.

Lo desconocemos, ese es su trabajo. Hacerse amigo, volver a Luna y desenmascarar a toda la Mafia Bauhaus de Luna.

Necesitaría un adelanto... Tendré que hospedarme en algún apartamento, viajes,...
Quieto en mi posición, muevo la cabeza, mirando con los ojos aquella sala, como si acabara de aparecer en ella sin saber como.
Creo que sería buena idea hablar de recompensas.

Por supuesto, señor Dick. La señorita Tonya le facilitará el dinero que vea conveniente, eso si, me gustaría que justificara todos los gastos, pues todo correrá a nuestro cargo, a parte, tendrá usted su recompensa. ¿Cuanto es su tarifa para este trabajo?