Partida Rol por web

La sala de ordenadores es facilmente detectable, aunque no tan fácil llegar. Se encuentra tras el primer patio y a través del pasillo que lo conecta con el segundo patio y donde se encuentra la piscina de verano. En el pasillo se encuentra a la derecha. Según el mapa, es una sala enorme donde según indica, hay una centena de ordenadores conectados a la Red.

Dejando todas las maletas, y material en el suelo y en la cama de la habitación, cojo la tarjeta, y salgo en dirección a la habitación de ordenadores.

Los pasillos son realmente lujosos, las lamparas son como peces abiertos en canal, con espinas donde la luz se filtra a atráves de ellos, dando una especie de luz-penunbra bastante imponente. Las paredes están llenas de sillones que de vez en cuando aparecen, tiene una forma muy irregular y supuestamente de moda. Cuadros sin nada pintado es lo único que adornan las paredes.

Al llegar a la sala se puede ver perfectamente que hay mesas con sillones donde hay ordenadores para poder hacer cualquier tipo de trabajo, a parte de libros en una estantería y sobre la mesa, con lámparas individuales para cada mesa, para alumbrar mejor, ya que la habitación está en semioscuridad, para dar ese ambiente de tranquilidad e independencia que quieren algunos clientes cuando se sientan en un ordenador o se ponen a ojear un periodico o libro.

Hay bastantes ordenadores vacíos, de hecho, solo está cogido un 25 % aproximadamente de ellos.

Me coloco en un ordenador libre, procurando estar alejado del resto, y trato de buscar cualquier información sobre Gris Sidney.
Genial... Es increíble que no haya que registrarse para entrar aquí...¡Cualquiera podría venir aquí y hacer lo que quiera!Puedo arriesgar en la búsqueda de la información que necesito, ya que nunca sabrán que soy yo quien ha estado aquí.

GUERRA INTERNA DE LA CAMORRA EN LUNA

La batalla entre las triadas y la mafia de Bahuaus, suma ya 24 muertos desde enero. Seis asesinatos mafiosos en veinticuatro horas son demasiados incluso para Luna, una ciudad curtida por dos guerras de la Marifa, que sembraban cadáveres por las aceras casi a diario. Pero lo alarmante del asesinato del domingo pasado es que no era una guerra de familias sino el asesinato del hijo de un jefe de las triadas (Gris Sidney) por un hijo de la mafia Bahuaus (Will Coleman).

En un frío ejercicio de «realpolitik», el Estado golpeó el jueves a los mafiosos de Bahuaus -arrestando a dos líderes de clanes y cuatro de sus asesinos profesionales-, lo cual puede facilitar, paradójicamente, el regreso de la calma a una ciudad con 20 clanes mafiosos luchando por los negocios.

Utilizando un lenguaje quizá mafioso pero claro, el ministro del Interior, Ppesui Nasi, prometió «devolver golpe por golpe», y lo cumplió arrestando ayer al asesino de Nimosla Dre, una joven prostituta de 22 años, torturada, asesinada y quemada dentro de su coche el pasado domingo por no confesar a los pistoleros de Di Lauro (mafioso de Bauhaus) el paradero de su novio, Znecni, de 27 años, afiliado a las triadas.

Esto no me ayudará en mucho... Pero nunca está de más tener algo de información... ¡Ahora a lo que iba!
Viendo algo de información sobre el muerto, ahora me tocaba buscar sobre Will Coleman, el hijo del mafioso... Realmente no termino de comprender mucho de que va todo esto... Pero será pan comido para alguien como yo.
Cojo el buscador y busco sobre Will Coleman.

LA MAFIA QUE ACTUABA EN LUNA TENÍA A SUELDO A IMPORTANTES POLÍTICOS BAHUESES

El Gobierno de bahuaus pidió a los servicios de inteligencia capitolinos que aceleraran la detención de Will Coleman, el mafioso afincado en Luna desde hacía más de diez años, según han confirmado fuentes próximas a la investigación. Coleman dirigía desde su chalé de lujo un entramado mafioso con conexiones en Luna, donde el pasado viernes fueron detenidas cuatro personas (una en Luna y tres en Heimburg).

Su nivel de poder dentro del entramado político-social de Bahuaus era tan elevado que el gobierno no estaba dispuesto a permitirlo. No es la primera vez que el presidente bahues, antiguo miembro de los servicios secretos, ordena la detención de los grandes capos mafiosos de su corporacion.

Coleman solía viajar de tres a cuatro veces cada año a Heimburg. A diferencia de Luna, alli su presencia pasaba siempre desapercibida. Es un hombre amenazado de muerte por las triadas y sus movimientos en Luna iban siempre acompañados por un complejo sistema de seguridad. La actividad de esta persona era investigada por los servicios secretos de varias corporaciones. Se sabe que tenía a sueldo a policías, jueces e incluso a altos mandatarios del gobierno de bauhaus.

En esta corporacion no es una novedad que la mafia controle algunos departamentos claves del gobierno. Se sabe, por ejemplo, que el negocio de la prostitución la controlan los máximos responsables del ministerio del Interior. La corrupción está extendida por toda la administración.

Coleman había acumulado un patrimonio económico que en estos momentos es difícil de calcular. En las más de cien cuentas bancarias intervenidas en los bancos de Luna se han encontrado algo más de 12 millones de coronas, tanto en dinero en metálico como en otros activos bancarios. Pero se sabe que esta cifra es mínima si se tiene en cuenta el volumen económico que mueve en otros bancos de su corporacion. Un ejemplo de la fortuna que maneja es que en su casa de Luna se encontraron joyas y obras artística cuyo valor supera con creces el dinero que se pagó por el espectacular chalet, cuyo precio alcanza los 12 millones.

El hijo del líder mafioso era la persona de la organización que se encargaba de blanquear el dinero que procedía del crimen en su corporacion.

Supongo que habrá aquí gente que le conozca... Después de todo, pasa bastante tiempo por Heimburg... Pero esto no me ayudará a encontrarlo.
Esto será más difícil, pero por intentarlo...
Escribo en el buscador Reginald Kleine para poder encontrar referencias sobre locales que pueda frecuentar, hoteles, propiedades...

Lo único que se encuentra con ese nombre es que ese hombre es parte de los viajeros de la nave que hiso su trayecto desde Luna a Heimburg, hace tres días.

Trato de entrar en la base de datos del aeropuerto... Pero al ver que no lo consigo, pienso en volver al aeropuerto en búsqueda de información...
A ver si me puedo ligar aquella chica del mostrador... Era guapa...
Borro todas las entradas a las referencias de búsquedas que he realizado durante la sesión, apago el ordenador, me levanto y me vuelvo al hall, donde me despido cortesmente de Sofía, y tomo el coche en dirección al aeropuerto.

Tardas aproximadamente lo mismo que tardastes en llegar desde el aeropuerto al hotel, aunque esta vez, siguiendo las instrucciones del GPS, para escapar de los atascos haya tomado otra dirección, que en principio parecía más larga, pero que al final se tardó lo mismo.

Una vez aparcado el coche en el mismo aparcamiento, aunque no en el mismo sitio que lo tenías cuando lo recogistes, Bell se dispone a entrar en las instalaciones, allí puede ver como un taxi se dispone a recoger a una familia, un matrimonio con dos niños de unos 9 y 7 años respectivamente. Con maletas y bolsos, parecen que van a pasar unos días de vacaciones en Heimburg, como la mayoría de los que rondan el aeropuerto a estas horas.

El mostrador de información de este se encuentra, según recuerda Bell, en la parte izquierda, justo la lado de la puerta de entrada.

Me acerco al mostrador, y espero la cola que se aguarda hasta llegar a la recepcionista.
Disculpe. Llamando a la recepcionista.

Tardas poco en llegar a donde está esperandote la señorita María Liz, que puedes adivinar el nombre por los típicas etiquetas que tienen con su nombre y el nombre de la compañía que pertenecen.

La señorita, no muy agraciada, pero bastante atractiva y simpatica, atiende a Bell.

Digame.

Me acerco a la recepcionista.
Soy detective. Le enseño la placa disimuladamente.
Estoy buscando a Reginald Kleine... Es una misión altamente secreta... Hace unos días tomó un vuelo hasta aquí.

Inmediatamente la señorita Maria Liz se da cuenta del interés de la pregunta y que seguramente el hombre por el que pregunta sea alguien peligroso. Se pone nerviosa, pues nunca le había sucedido algo así, incluso, no ha mirado bien la acreditación de investigador privado que le ha eseñado aquel hombre, pero con esos gestos y esa autoridad, no puede otra cosa que asentir y creerselo.

Inmediatamente consulta su ordenador y comienza a teclerar, seguidamente suspira, intranquila y comienza a hablar.

Kleine tiene el registro de su llegada a las 15,30 del día de ayer en el crucero con procedencia de Luna, de la compañía Brad Labian, de Capitol.

Se avanica con su mano derecha y sin levantar la mirada, haciendo como quien sigue buscando concluye.

Es lo único que puedo informarle. Salvo que su equipaje era poco más que un par de maletas. Nada de vehículos.

¿No sabe si alquiló algún coche, lo que llevaban esas maletas, a dónde se dirigía?

María Liz levanta la mirada para mirar a aquel misterioso detective con uan pistas que ahora que lo miraba detenidamente, le hacían recordar a un cantante de Rock.

No lo se, si alquiló un coche o cogio un taxi, o si lo vinieron a recoger. Podría preguntar a los taxistas o la compañías de alquiler de coches que hay cerca del aeropuerto. Ellos pueden ayudarlo mejor que yo.

Muchas gracias... Le digo sonriendo.
Quizá algún día de estos me pase a invitarle a tomar algo. Guiñándole un ojo.
Entonces me alejo unos metros de ella, para coger el móvil, y llamar a la compañía de alquiler de coches.