Partida Rol por web

¿El General Ross contento de verles? La situación debe ser más chunga de lo que pensamos.

Aun así Clint no dijo nada. Sabian quién era el enemigo, bueno uno de ellos, pero no estaba seguro de que informarle fuese buena idea. Al menos de momento. Afortunadamente no tenía que tomar esa decisión, se la dejaría al Capitán. Él tan sólo se mantuvo estatico a la distancia de seguridad tratando de no pensar mucho en el grupo que estaba infiltrándose. Esperaba que les fuera bien.
Para distraerse empezó a marcar objetivos de las esferas con los sistemas de punteria de la nave. Estaban muy lejos para poder disparar, pero al menos hacia algo.

Capitán, imagino que habrá oido el mensaje de Ross. ¿Qué hacemos? ¿Contestamos?

Wanda descendió de la nave junto al equipo, dispuesta a hacer frente a la amenaza que se cernía sobre el pentágono. Sus ojos buscaban cualquier tipo de enemigo al que tuviera que neutralizar mientras sus camaradas se encargaban de hallar alguna clase de entrada que estuviera desprotegida –o al menos poco vigilada- para poder acceder.

Escuchó el mensaje a través del comunicador pero no dijo nada puesto que esa no era precisamente su labor.  Cambió su trayectoria cuando la viuda giró para dirigirse hacia la entrada que tanto ella como Ant-Man habían logrado encontrar.  Ese hueco podía ser peligroso, así que avanzó mientras se concentraba en sus habilidades: se encargaría de cualquier enemigo que se pusiera a tiro.

Seguía avanzando junto a sus compañeros. Escuchó las palabras de Scott Lang y asintió con rapidez, era una buena opción entrar por esa zona. Se encaminó para ser él, el primero que entraría, con el escudo por delante para cubrir a sus compañeros de cualquier posible ataque. Su escudo podía ocuparse de casi cualquier golpe, hasta el momento no había visto nada que pudiera atravesarlo.

En ese preciso momento, escuchó el mensaje del General Ross por el intercomunicador, el Capitán América sin interrumpir sus acciones le respondió. - Al habla el Capitán América, General Ross establezcan un perímetro pero no intervengáis. Es cosa nuestra. -

Tras eso suspiró y se preparó para ver que iba a encontrar en el Pentágono.

En ese preciso momento, escuchó el mensaje del General Ross por el intercomunicador, el Capitán América sin interrumpir sus acciones le respondió. - Al habla el Capitán América, General Ross establezcan un perímetro pero no intervengáis. Es cosa nuestra. -

El general masculló algo y luego habló.

- Sí, les dejaremos ir primero... hagan el favor de avanzar, nosotros entraremos tras de ustedes. Pienso que será lo más efectivo.

En ese momento la inteligencia artificial habló a través de vuestros comunicadores.

- Estoy recibiendo una petición de ayuda proviniente del pentágono. Alguien marca una posición en el edificio norte. Concretamente de una planta inferior, la -5, que se accede por el ascensor dos.

Guiados por la Viuda Negra y por Ant-Man, aprovechásteis el terreno para avanzar, hasta que llegó un momento en el que había que cruzar el espacio vacío de unos cincuenta metros hasta la pared dañada. Habían dos de esas esferas anaranjadas a la vista, sobre los edificios y estaba claro que iban a detectar vuestro avance, a menos que se os ocurriera algo que hacer para evitarlo.

Mientras el equipo del capitán se infiltra será mejor distraer a los agentes de la Presencia, salgo flotando en el aire del Quinjet y me comunico con los terroristas

-No nos acercaremos, pero digannos que pretenden, ¿tienen alguna petición?¿que es lo que quieren?-

Hasta ahora los actos de los terroristas no parecen tener ningún objetivo claro aparte de causar terror y confusión

Ojo de Halcón mantenia el Quinjet en posición en el aire, con ganas de lanzarse contra las esferas. Pero entendía que no podía hacer nada en ese momento salvo esperar.

La Visión también parecia nerviosa, si es que un androide podía ponerse de alguna manera, porque salió a hablar con los terroristas.

Bueno. Daño no creo que nos haga.

El aviso de Jarvis le puso de nuevo en alerta.

Mmmm. ¿Creeis que será nuestro "amigo"? También es posible que sea una trampa, pero lo mismo es un buen sitio para empezar.

Después se volvió a Stark.

Tony. ¿Cuando decías que ibas a instalar el modo camuflaje en el nuevo Quinjet? Nos habría venido bien ahora.

Chicos si os parece bien, me adelanto hacia dentro del pentágono. Este espacio no es problema para mi, dado que puedo volar. Siendo pequeño me será facil evitar enemigos.

Digo por el comunicador mientras revoloteo entre el grupo para que me oigan. Aunque fuera arriesgado ir solo, podría inspeccionar el camino para ver los posibles peligros.

- Perfecto General Ross. Nosotros haremos el resto. - No se esperaba una respuesta tan amable del general, pero tampoco tenía tiempo para pararse a analizarla. No le había dado problemas, con eso le bastaba en un principio.

Las trasmisiones no paraban, ahora era J.A.R.V.I.S. el que les avisaba de un problema en el otro edificio. El Capitán dijo para todos sus compañeros. - Barton, intenta rodear la zona e ir al edificio al que piden ayuda. Quizás puedas ver algo. -

Avanzaban con velocidad, pues el tiempo como casi siempre era una cosa crítica. Necesitaba confiar en las capacidades de sus compañeros, para llamar la atención y darles a ellos tiempo, para infiltrarse. Todo parecía ir saliendo según lo previsto, hasta que de golpe dos esferas naranjas se interpusieron en su camino. Steve indicó con velocidad a sus compañeros, que se refugiaran hasta nueva orden. Rápidamente habló por el comunicador, para que todos sus compañeros estuvieran al tanto.

- Lang, si puedes evitar a las esferas adelante, si no, espera. Si te detectan estamos fuera. - era pequeño, pero si aquellas esferas tenían unos sensores de última tecnología, quizás ni eso fuera suficiente.

- Stark, Visión. Tenemos dos esferas delante de nuestra posición que nos impiden el paso ¿alguna idea de como desactivarlas sin romperlas a golpes? - Confiaba en que ellos tuvieran mayor conocimiento tecnológico que él, lo cuál no era complicado teniendo en cuenta su período de congelación.

A mí también me parecía más efectivo que ellos entraran después, total, nosotros estábamos más acostumbrados a encontrarnos mierdas y cosas raras varias y ya teníamos más idea de cómo mantener el culo a salvo, o al menos, todo lo a salvo que lo podíamos tener, claro.

Eso sí, yo me limité a ir detrás del hombre hormiga, que parecía haber encontrado su sitio en eso de las infiltraciones.

- Sí, hombre sí. No te cortes. - Le dije cuando dijo aquello de adelantarse.

Me quedé con el grupo, a la espera de hacer algo, aunque en realidad, hubiera sido más útil que me quedara en otra parte en la que pudiera hacer algo. Llevaba más de la mayoría de aquella misión mirando a las musarañas y empezaba a sentirme un poco inútil, la verdad.

Te lanzaste, volando sobre tu hormiga, buscando la localización de aquella señal. Cruzaste con velocidad, viendo a tu paso muchas personas inconscientes en el suelo. Más adelante, había un grupo de terroristas similares a los que habían atacado el centro comercial. Iban uniformados igual y tenían aspecto árabe. Eran diez de esos hombres y se encontraban patrullando. Comprobando que las personas siguieran inconscientes e inyectando algún tipo de sustancia en algunos de ellos. Portaban para ello un maletín y tenían jeringas.

Conseguísteis introduciros en el edificio, gracias a un "empujoncito" de la bruja escarlata. Ya dentro, se podían ver los cuerpos de varias personas tumbadas en el suelo, inconscientes. Parecían trabajadores del gobierno de todo tipo, desde soldados hasta personal de oficina. Daba la impresión de que estaban huyendo cuando algo les dejó K.O. y cayeron.

En ese momento, llegó un aviso de JARVIS, dirigido a vosotros tres.

- Alguien ha lanzado un aviso encriptado, en un canal de difícil acceso. El mensaje se transmite en ruso y pregunta si son ustedes los vengadores y si Natasha Romanov va con ustedes.

Allí dentro del pentágono todo seguía en silencio y no encontrábais de momento ninguna oposición.
 

Cuando Visión trató de acercarse, las esferas anaranjadas se colocaron en formación lineal, preparándose para recibirle y posiblemente con violencia. Ya habían detectado la forma de enfrentarse al sintozoide y éste pudo ver cómo recopilaban energía a su alrededor, compartiendo estre ellas y esperando el momento adecuado.

El sintozoide no había recibido ninguna respuesta a sus palabras. Inesperadamente, una figura se materializó dentro del Quinjet. Clint escuchó el sonido de unos pasos tocar el suelo a la vez. La figura, realmente extraña, pues era un hombre de rostro azul con armadura violeta y ropajes verdes, demasiado llamativa, miraba el interior de la nave, pero no parecía muy impresionado. Al final, pareció decepcionarse y miró en dirección a Ojo de Halcón.

JARVIS inmediatamente mostró la imagen a Iron Man y Visión. El hombre entonces habló.

- Me encuentro en una terrible tesitura.

Dijo con una entonación más propia de una burla.

- Lo que ha hecho vuestro aliado ha sido inesperado y antinatural. Entiendo que a estas alturas no deberíais estar aquí. Sino viajando hacia lo que llamáis Siria, perdiendo un tiempo valioso mientras La Presencia trabajaba en su proyecto.

Avanzó algunos pasos.

- Falta parte de vuestro equipo, pero han de estar cerca. Vuestro líder es el Capitán América, ¿me equivoco? Quizá deberíamos de tener todos una pequeña charla, tengo un ofrecimiento lleno de gloria para vosotros.

Ladeó un poco la cabeza.

- Tengo un mensaje para vuestro mundo.

Concluyó. JARVIS seguía transmitiendo.

Me dirigi hacia el interior del edificio y pude ver de nuevo al mismo enemigo que nos encontramos en el centro comercial. Era algo que sospechabamos, pero acabo siendo cierto. Sin duda serían demasiados para enfrentarme solo, pero la curiosidad me mataba. Que demonios estaban haciendo a los respectivos ciudadanos, que eran esas jeringas que les inyectaban?

Haciendo diferentes preguntas, me digno a acercarme a su posicion para ver si podia obtener algunos datos mas. Di la orden a Herby para que se acercara hacia aquellos que inyectaban, manteniendome a distancia prudencial.

Las palabras de JARVIS tardaron en llegarme al cerebro, pues estaba observando lo que había ahí dentro queriendo memorizar cómo estaba colocado todo, cuando escuché mi nombre y me di cuenta de lo que acababa de decir.

- Vale ¿Puedo escuchar ese mensaje o necesitas que encuentre algún ordenador para ello?

Con lo de mensaje, podía haberme llegado hasta una carta o señales de humo, así que iba a necesitar que me especificaran un poco más.

De todas maneras, no sabía por qué narices alguien se iba a querer poner en contacto conmigo estando ahí metida, pero bueno, saber lo que querían decir era gratis. Además, no me podían dar una mala sorpresa en plan "hemos secuestrado a tu marido, a tu madre...".

Clint casi salta del asiento del piloto cuando ve al tipo de verde y morado con la cara azul. Pero el cinturón le consiguió mantener en su sitio.

Pero que cojones...

Conectó el piloto automatico para que mantuviera estático el Quinjet y se desabrochó para poder encararse al "invitado".

Vaaaale. Eramos pocos y... ¿Chicos? ¿Me recibis? Creo que tenemos un pequeño problema en la nave. Espero que no necesiteis mi ayuda para nada, porque algo me dice que voy a estar ocupado.

Vaaaale. Eramos pocos y... ¿Chicos? ¿Me recibis? Creo que tenemos un pequeño problema en la nave. Espero que no necesiteis mi ayuda para nada, porque algo me dice que voy a estar ocupado.