Partida Rol por web

 Me voy a la puerta mas cercana y la examino con cuidado, escucho, la toco ligeramente para ver su temperatura y busco  trampas.

Al ver que el joven silencioso sigue con lo suyo bajo el hacha aunque nunca la guardia.

- Por todos los dioses - digo dirigiéndome al grupo completo - Acaso vamos a ir abriendo puerta por puerta? No ven que fuera no hay nada? Necesitamos comprender qué es lo que está pasando. Acaso no hay un puto mago que pueda averiguar algo? Algo raro está pasando y seguro la elfa tenía razón, tiene que haber magia en todo esto. No hay alguien que estudie estos temas y tenga una puta idea de qué está sucediendo?

- Estimados compañeros- susurra dulcemente Dalanna.- Estamos envueltos en loque seguro es una especie de  venganza por el acto que acontecio aqui hace 10 años.- señalando al paladin.- Si bien es cierto, que  no es seguro dividirnos, debemos organizarnos para cooperar y descubrir que ocurre aqui.-

volviendose hacia la audiencia que le rodea intenta explicar su plan:

- Sugiero que nos dividamos en grupos para  registrar esta habitacion sin  abrir mas puertas, para  estar seguros de que no habra mas sorpresas en esta sala. Por ahora  creo´que los conjuros no funcionan correctamente en este lugar, asi que piensenlo dos veces si necesitan usar alguno.-

Girandose hacia el joven elfo que esta rebuscando en la puerta, continua:

- ¿ Habeis encontrado algo?.-

Esta limpia y fría y probablemente no se haya abierto en años.

- Como quieran - digo a la elfa - Revisamos la sala pero dudo que encontremos algo. Acaso nadie tiene una idea de dónde puede ser que estemos?

Me acerco al hobgoblin para tenerlo vigilado, lo mismo me gustaría el paladín pero era mejor que estuvieran separados.

- Venga, vamos. A ver si encontramos algo - le digo y me vuelvo hacia el hombre de la galera - Usted también, venga con nosotros.

Si aceptan nos dirigimos a la zona donde estaba el reloj intentando hallar algo allí

- Entonces, lo unico que nos queda es abir las puertas de una hoja y comenzara buscar una salida por ellas.- comenta Dalanna algo perturbada por la falta de informacion.- Aunque  actuaremos con cautela, que sera lo mas recomendable..¿ que opinais?.-  Dalanna observa a su audiencia aguardando  la respuesta de estos.

 -¿Y a ti quién te ha nombrado líder, rubita? -el hobgoblin mira a la elfa de abajo a arriba, arqueando una ceja. Después la mira a los ojos y le sonríe de medio lado- Tu lo que deberías hacer, guapa, es dejarle eso a un buen macho.

-Acércate a ella y es lo último que harás.-el paladín vuelve a tener bien agarrado el mango de su espada.

 -Caballeros, por favor. Creo que la señorita tiene razón. Nuestra prioridad en este momento es salir de aquí.

 -Venga, ¿qué puerta abrimos? Vamos a movernos. -el enano, que ya se había puesto de pie, estaba frotándose las manos, como si fuera a empezar con algún trabajo manual y necesitase calentamiento.

Resignado a no poder averiguar qué es lo que está sucediendo asiento con la cabeza.

- Bien, vamos. Cualquier puerta es lo mismo - digo yendo hacia la puerta más cercana a mi posición - Esta estará bien

 Unk se acerca a la puerta de doble hoja que hay justo enfrente de la habitación en la que despertasteis... y abre la puerta al estilo Unk: patada en el centro, hacha en mano.

Parece una habitación de juicios, igual que aquella en la que despertasteis, pero en mucho peor estado. Casi todos los muebles están destruidos. No hay ni una sola silla en pié. Esta sala tiene las ventanas tapiadas y, ademas de la puerta de doble hoja por la que acabáis de entrar, tiene una puerta al norte.

Todos los asistentes al juicio entran en la habitación tras Unk.

Con un agil movimiento, Dalanna se situa en primera fila a la par del semiorco. Miradas inquisitivas escudriñan el lugar , su olfato investiga si los olores que  rezuma la habitacion son los tipicos de una estancia en esta situacion de deterioro.

En silencio, Dalanna gesticula  con su mano , para hacerle saber al semiorco que desenfunde su enorme hacha. Sin esperar respuesta, desenvaina su  cimitarra y acerca su escudo a  su brazo diestro....

Paso tras la elfa y me pongo a examinar con cuidado la habitación. En silencio

Ante el gesto de la elfa la miro enseñando mi hacha que siempre está en mis manos. Ni por un momento soñaría con dejarla.

- Nadie... - digo al pasar a la otra sala - Tan solo otra puerta.

Voy hacia la zona de los jueces para sentarme en el asiento principal.

- Cuántos destinos habrán sido sellados aquí? - me pregunto observando el sitio

-Ve-veo que seguimos algo tensos por aqui. Creo que lo mejor sería no separarnos, de este modo podremos enfrentar lo que quiera que pueda ocurrir.- tartamudea el joven mago, mientras en su cabeza aún persistían las breves pesadillas que había sufrido momentos antes.

El joven de hecho, no se separaba de Dalanna, convencido de que aquella mujar sabía lo que había que hacer.

Algo extrañada por no encontrar nada fuera de lo comun , Dhalanna relaja su defensa y avanza  hasta la altura del semiorco,sin dejar de  echar furtivas miradas a las cuatro esquinas de la nueva sala. Finalmente, pregunta:

 - ¿ Alguno de vuesas mercedes reconoce esta sala? ¿ les resulta familiar? es decir, saben de buena tinta que es un lugar relacionado con aquel fatidico  juicio?-

Llevando sus brazos a la cintura a modo de asas de jarra, continua. Su tono de voz sigue igual de dulce y pausado  como si quisiera calmar al publico que esta sufriendo esta pesadilla.

-  Como salta a primera vista,estimados compañeros; en esta sala no hay nada extraño. Sin embargo,..- medita un segundo,percatandose de la pequeña puerta al norte de la sala. - ¿ Alguno ha revisado ya esa puerta?-