Partida Rol por web

Vientos de invierno

Tyella

Cargando editor
03/08/2015, 22:24
HACEDORA

Notas de juego

Un par de cositas:

- No me quedó claro si Axel entraba o se quedaba paliqueando con el chico.

- Para adelantar un poco, en caso de que mires en el interior de la bolsa, se trata de Dragones de oro. Son cien piezas, pero ese detalle para cuando lo cuentes o preguntes.

- Comentaré con Trus cómo está la economía de tu negocio. Cualquier sugerencia es bienvenida ya que ni idea sobre lo que genera y gasta un burdel.

Cargando editor
02/09/2015, 14:27
Tyella Arena

Tomó la bolsa tendida como quien recoge un puñado de dátiles y le dedicó igual atención. El mejor pago era el que recibiría no con oro sino con información. Sin mirar siquiera su contenido, tendió la bolsa a su compañera, asintiendo levemente a las palabras vertidas por la desconocida joven. Salir a poseía el potencial para convertirse en una cortesana. Su físico no era un obstáculo y contaba con la base adecuada para poder ser una exótica beldad. No obstante, su propio físico hablaba, más allá de los escuetos comentarios hechos con voz cansada, un cansancio no corporal, ni siquiera anímico. No, era dejadez, como si los trámites la molestaran, como si aquello era algo por lo que debía pasar en pro de aquel fin al que estaba ligada y que marcaba su presencia allí. 

-Nos acompañarás ahora mismo y te instalarás en nuestra casa. Intuyo que viajas ligera y que estás dispuesta a... aprender -una suave sonrisa se dibujó levemente en la boca de Tyella-. Contrariamente a lo que puedas llegar a creer, si es que crees algo, no será un camino sencillo. Y deberemos hablar, con calma y tranquilidad entre paredes sin oídos, para proceder del mejor modo. A nuestros intereses. Mutuos -se volvió hacia el comerciante y le dirigió una sonrisa arrebatadora-. Bien, ¿alguna tela más? Necesito algo que haga brillar como estrellas a mis niñas. Y algo que deslumbre cuando Samira haga su aparición. Que se funda con sus curvas, que acompañe a sus hermosos ojos y conjugue con sus cabellos. Que muestre y oculte su piel según convenga. Indudablemente, plata. Ella será la luna en una noche donde las demás ejerceremos de estrellas. 

Notas de juego

Axel se quedaría fuera tratando de obtener información de la mujer que estaba o cualquier otro aspecto que pudiera obtener en su conversación con el empleado. A vuestra discreción. 

Cargando editor
04/09/2015, 00:10
Roes

Samira no responde, ni asiente, pero te percatas de su actitud. Hay cosas que se perciben sin palabras, sin ni siquiera tener que mover la cabeza para saber que está de acuerdo, o lo más probable es que no tenga opción alguna. Tu presencia allí así lo demuestra, tu favor será correspondido. De momento, Orysa recoge con presteza la bolsa de dinero y con un grácil movimiento la hace desaparecer entre los pliegues de su ropa.

- Por supuesto, por supuesto -Roes se frota las manos como si fuera un mezquino comerciante que mataría por su mercancía, pero no eres tonta y casi puedes apreciar un verdadero entusiasmo en sus ojos que nadie tiene que ver con la avaricia. Sin duda ese hombre disfruta de su trabajo, sea cuál sea exactamente-. Plata, sí. Excelente elección, como siempre. Y ahora, hablemos de negocios...

Dejando a tu nueva pupila donde está, como si fuera una hermosa estatua que os sigue con la mirada, con permiso de Tongue, el comerciante repasa contigo la mercancía. Eliges lo mejor para tus beldades, algo que no está exento de pago aunque te ofrece la vestimenta de Samira y el servicio gratis de las costureras. Difícilmente encontrarías a alguna decente en Desembarco sin su ayuda, el estilo dorniense es exquisito como para dejarlo en burdas manos, y en tu casa lo máximo son remiendos. La compra se lleva un buen porcentaje del dinero presupuestado, pero para ganar hay que arriesgar, e invertir.

En el interior del establecimiento, de cara al público, te parece notar que a la imperceptible conversación que mantiene Axel y el ayudante se integra una voz joven de mujer. Al poco el sonido de una campanilla llega suave a tus oídos como un murmullo de alegre cadencia, tan suave como el movimiento de alerta de Tongue.

- Si me disculpa...

Roes se mueve hasta la entrada del almacén para comprobar de quién se trata. Sonríe, le complace lo que ve.

- Jessar, encárgate de las compras de la señorita, hazme el favor -Vuelve a sonreír, pero esta vez es un gesto mucho más sincero y relajado hacia su empleado-. Pase, pase. Esperaba su visita.

Tongue te mira.

- Calma -Roes vuelve la cabeza y gesticula con los labios.

Cargando editor
07/09/2015, 13:50
Tyella Arena

Conocía su negocio, como conocía otras cosas. Tyella repasó telas y confió en el juicio del mercader. Al margen de sus otros quehaceres era un profesional en su terreno y su mente parecía tan afilada como debía serlo la aguja de sus modistas. La vista quedó interrumpida por la llegada de una cliente a juzgar por la voz que alcanzó a escuchar. No la preocupaba particularmente, pero como todo aquel que se sumerge en juegos de poderes, experimentó la descarga de adrenalina derivada de una interrupción, como la presa que alcanza a escuchar el crujido de la rama rota por el depredador. Asintió mudamente a la orden de Roes y dedicó un suave cabeceo a Tongue, un mensaje igualmente mudo que pedía una inmovilidad que ocultara el sutil estado de alerta necesaria hasta saber algo más. Pero el silencio era una baza a eliminar. No cabía que tres mujeres se hallaran allí en silencio y expectantes. En un tono de voz normal, que no pretendía ser distinguible pero sí audible siquiera como un murmullo, habló.

-Orysa, Samira, estoy deseando vestir estas telas. Puedo ver ya la admiración en el rostro de nuestros clientes, la lujuria en sus ojos, sus manos buscando tesoros bajo la seda que convenientemente negaremos -rió despreocupadamente, guiñando un ojo a Orysa para que le siguiera el juego y Samira se sumara a él. Aquella podía ser su primera lección de cara a parecer absolutamente mundana. 

Cargando editor
07/09/2015, 18:01
Orysa

Las dos chicas se acercaron con entusiasmo a mirar las telas, no hacía falta que Tyella las mandara disimular o que le siguieran el juego, ellas lo hacían encantadas pues lo estaba deseando. Orysa cogió delicadamente una de las telas y la abrió para ver mejor su dibujo, la miró con atención como si buscara algo y después la colocó sobre los hombros de Samira dejando caer parte de la tela sobre su cuerpo.

-Creo que esta te quedará ideal, hace juego con tus ojos Samira. ¿No te parece, Tyella?

Cargando editor
07/09/2015, 18:09
Samira

Samira se quedó rígida y seria durante un instante, no estaba acostumbrada a aquellos juegos y no conocía a ninguna de las mujeres ni al hombre que las acompañaba.

Hombre... por así decirlo.

Sí sabía mucho de su oficio y podía reconocer a un Inmaculado. Eran guerreros entrenados, fuertes, rápidos, mucho mejores que la media, pero no invencibles. Sobre todo cuando se trataba de peleas individuales. Aún así prefería no vérselas con ninguno si podía evitarlo, había objetivos más fáciles. Un instante después parecía relajada y su cara mostraba una sonrisa mientras sus manos ayudaban a las de Orysa a sostener la tela, entre otras cosas era una mujer y no le eran indiferentes los vestidos bonitos y las telas caras.

-¿Qué te parece ésta? Cogió una tela turquesa que hacía juego con los ojos de Orysa. Te quedaría bien. Al menos estaba intentando meterse en su papel.

 

Queda aún pendiente la otra escena hasta que respondan, pero Faus se ha entusiasmado ahora XD. 

Cargando editor
12/10/2015, 22:10
HACEDORA

1. Pasa a la escena de Desembarco del Rey (página 1).

2. Termina la reunión donde Roes presenta a Alyssa (página 2).

Cargando editor
12/10/2015, 22:17
Viktor Evans

Mediodía.
 

El camino de regreso os conduce por otra parte de la ciudad pensado para terminar los recados que sin duda os llevarán poco tiempo, y así es. Tu estómago protesta casi puntualmente, pero por suerte apenas te queda un corto tramo para llegar al remanso de paz que has hecho de tu hogar aquí, en Desembarco.

En general el bullicio es el habitual en una gran ciudad, y aparentemente nadie os sigue desde que abandonaste la tienda. Sin embargo, Samira parece rivalizar con Tongue en cuanto a mantenerse alerta. Es tanta la tensión en la joven que por poco no aparta de un empujón a una muchacha que tropieza con ella casi llegando a la Ninfa de la Seda; pero tal vez la cara de tristeza y el bebé que lleva en brazos la detiene, o simplemente cree conveniente no llamar la atención.

En la entrada del local se encuentra Viktor, quien parece extrañado con la presencia de Samira.

-Sin duda soy el hombre más afortunado de todo Desembarco -declara con una suave sonrisa al igual que su mirada parece aprobar la beldad de tu "pupila", la cual estrecha sus ojos con cierta inquietud. Samira puede entender la presencia de Tongue, un Inmaculado, pero Viktor...

Con gesto divertido mantiene la mirada, casi retándola a que hable, cosa que no hace. Haciéndose a un lado entráis y las puertas se cierran envolviéndote en un manto de tranquilidad. La Calle de la Seda no es especialmente ajetreada a estas horas, así que tienes tiempo suficiente para disfrutar de un cómodo descanso.

-Por cierto, una muchacha vino a pedir trabajo -Con el pulgar señala el exterior, como si se tratara de algo muy reciente-. Harwyn habló con ella -Está claro que Samira atrae su atención porque no te da más explicaciones, aunque pasa de una leve atracción a la cautela. Al menos compruebas que el dinero que pagas por sus servicios es merecido, aunque él no sepa lo que sucede.

>>Buscaba un trabajo de limpieza -Resopló contrariado-. Sola y con un crío. Mala situación en Desembarco -Con un encogimiento de hombros se olvida rápido del asunto y hace ademán de retirarse hacia la cocina, pero se contiene-. ¿Todo bien?

Apenas un susurro te muestra que no está dispuesto a retirarse sin desechar su recelo.

Cargando editor
20/10/2015, 21:17
Tyella Arena

Todo había concluído y la prueba parecía haber sido superada. Tyella era consciente de que toda su aventura desde que saliera de Dorne estaría sujeta a examen y que este podría llegar del lugar más insospechado. En esta ocasión había sido Roes. La próxima podría proceder de cuaqluier otro, incluso del mendigo que acostumbraba a esperar a la salida de su casa y que imploraba por un mendrugo reseco de pan.

Ahora, con un nuevo trabajo y un nuevo propósito encerrado bajo la piel de su nueva pupila, Tyella cruzaba las calles de Desembarco con el aplomo de quien parece no temer nada, de quien es tan inocente como para no despertar sospecha alguna. Pero en aquella ciudad, y bien lo sabía, nada era lo que parecía.

-Estoy deseando llegar a casa -dijo en un suspiro, un suspiro quebrado por la reacción de Samira. Sí, había que educarla lo cual pasaría por todo un proceso de hacerla olvidar en parte su anterior preparación.

Su deseo se convirtió en realidad y pronto la cara de Viktor destacó entre cualquier otra cosa.

-Sin duda, Viktor, sin duda. ¿Una muchacha? Envíame luego a Harwyn. Muchachas, dejad las cosas por ahí y descansad antes de que abramos. Viktor, tenemos que hablar.

 

Cargando editor
26/10/2015, 16:23
HACEDORA

Tal y como pides Orysa se encarga de organizar las compras, ayudado por Axel y seguido por una indecisa Samira. Sin embargo, tu fiel amiga se dispone a tenderle una mano amistosa para calmar a la mujer que se siente visiblemente incómoda. Finalmente os dejan solos y dispuestos a mantener una conversación más que necesaria.

- La muchacha vino con un bebé a pedir trabajo. No hablé con ella más que lo necesario para que viera a Harwyn, y no me pareció un peligro. Asustadiza, desesperada... Lo normal si no quieres acabar durmiendo en la calle con un recién nacido. 

Viktor nunca era cruel, tal vez un poco despreocupado en apariencia con las situaciones sociales. Era más del tipo pragmático sin ser rígido, en absoluto rígido.

.

Notas de juego

Disculpa, no estoy muy acá últimamente.

Cuando quieras puedes seguir roleando en situaciones así, tienes cierta libertad para describir acciones de tus subordinados. A menos que sea algo muy incoherente harán lo que pidas sin necesidad a esperar por nosotros. 

----
Nota: tengo una duda con Viktor, así que dime si él sabe que sois espías o no. No es tonto, pero parece que entre el buen pago y que le gusta la compañía (nada sórdido) percibes que tampoco es un peligro.

Nota 2: si quieres aportar sobre el carácter de tus empleados eres bienvenido.

Cargando editor
26/10/2015, 20:07
Tyella Arena

Notas de juego

Pues mira que has ido a hablar con bueno. Tú tranquila. Estamos jugando, disfrutando. Obligaciones, las justas. Y ritmo, el que más te convenga. Respecto a las preguntas:

1.- Preferiría que lo supiera para obrar con mayor naturalidad.

2.- Puedo desarrollar ese aspecto, aunque dejo en tus manos potenciales traiciones, celos o lo que sea. Incluso aspectos de carácter que convengan a la trama y aunque me perjudiquen.

Cargando editor
26/10/2015, 21:57
HACEDORA

Notas de juego

Ok. Viktor sabe que sois espías y como que le trae al pairo o puede ser suministrado por la red dorniense. Eso ya lo comentas en tu próximo post, incluso unos pequeños detalles de cómo lo percibes para obrar en juicio. Nada minucioso.

Cargando editor
09/11/2015, 20:29
Tyella Arena

-En ese caso deberé hablar con Harwyn. No me gusta que alguien especialmente melodramático y llamado a la conmiseración ronde las puertas de nuestra casa. La piedad en alguno casos solo es fuente de problemas, especialmente cuando ignoramos el disfraz adoptado por nuestros enemigos. Si la muchacha vuelve o ronda nuestros muros, házmelo saber. Imagino que tienes preguntas -dijo en relación a la nueva muchacha. Dudaba que la identidad o naturaleza de la muchacha le preocuparan en exceso, pero Viktor, en su aparente falta de interés genérico, era un hombre minucioso al que no le gustaban las lagunas de información. En su particular modus vivendi, la ignorancia conducía a la muerte según afirmaba-. La muchacha, Samira. Debemos trabajar con ella. Convertirla en una de nuestras pupilas con objeto de modelarla hasta lograr un acabado más que aceptable y que responda a las necesidades particulares de su objetivo. Roes me citó y me la entregó como quien entrega un gatito huérfano. Por no hablar de someternos a prueba a los allí presentes. Yo y una muchacha llamada Allysa Arena. Investiga acerca de ella si puedes. Obviamente con discreción. Prefiero que no alcances a saber nada de ella que despertar la más mínima sospecha acerca de nuestra curiosidad -dijo al tiempo que le relataba los detalles de aquella reunión y lo que se e había dicho en torno a la muchacha-. Volviendo a lo que más nos interesa, contamos con un plazo de un mes para convertir a la mujer en una puta. Los Lannister van a organizar un torneo para el Festín de la Cosecha. Los Martell, obviamente, están detrás.

Notas de juego

Se me había ido la olla totalmente y estaba esperando post. Lo siento.

Cargando editor
15/11/2015, 23:08
Viktor Evans

Se mantuvo atento y en algún momento que otro reaccionaba acorde con lo esperado: un asentimiento aquí, una negación allá, un ligero resoplido... Le habías encomendado una tarea sencilla e idónea para un hombre que se movía con soltura por la ciudad.

- Comprendo, Tyella. Antes que la información, precaución -Asintió-. Me llevará la tarde comenzar a indagar sobre la Arena sin levantar sospecha. Parece que no ha tenido mucho tiempo de hacer amistades fuera de la fortaleza, así que... Preguntar en los establecimientos donde los nobles suelen enviar a sus sirvientes a comprar podría ser un comienzo, pero conozco a un Capa Dorada... -Casi podrías ver los engranajes de su cerebro moviéndose mientras sopesa brevemente lo más adecuado-. Voy a tomarme la tarde y puede que la noche. Tengo que localizarlo primero y de paso preguntar aquí y allá. ¿Cómo ves que me ausente esta noche?

Dicho eso poco más podía aportar más que salir a cumplir su cometido.

- Estás a salvo con Tongue, y dudo que Samira haya sido enviada para hacerte daño -No parece muy convencido, pero dudar es parte de su cometido-. Por cierto, si quieres a una cobaya para hacer de la hermosa muchacha toda una... profesional, un servidor se ofrece.

Con una sonrisa torcida se despide, y bien sabes que sólo es una de sus ocurrencias inofensivas. Ni una sola vez ha tenido un affaire con tus chicas, o chicos. Viéndolo partir te encaminas en busca de Harwyn que, a falta de tareas especificadas, lo hallas en el salón principal acotejando la estancia. Ahora mismo está colocando cojines mientras los mulle, pero, por ejemplo, ya ha cambiado las flores viejas por nuevas.

- Tyella -Sonríe al verte-. ¿Crees que unos pequeños peces de colores quedarían bien en la fuente? Me encargaría de cuidarlos. Parece que todo ha ido bien, Axel se ve contento.

Si no lo conocieras bien aquel pequeño comentario pasaría desapercibido.

Cargando editor
25/11/2015, 18:58
Tyella Arena

-¿Peces de colores? -repitió Tyella-. Por qué no. Pero procura que no sean demasiados y te recordaré lo que ha dicho acerca de sus cuidados cuando vea flotar alguno vientre arriba -una sonrisa adornó el comentario-. ¿Todo bien entonces? Me han comentado de la presencia de una mujer con un niño. Háblame de ella y de lo que aquí hacía, así como tu impresión acerca de lo que realmente buscaba. Prefiero pecar de exceso que de defecto.

Dio unos pasos hacia su chico.

-¿Axel contento? ¿Nuestro querido enfurruñado contento? ¿Y a qué se debe ese estado de gracia excepocional? Anda, habla. Sé que estás deseando cotillear.

Cargando editor
26/11/2015, 22:08
Harwyn

Una medio sonrisa fue suficiente para saber que Harwyn iba a pensar bastante sobre el asunto. No llegaba a ser un holgazán, pero si no estabas encima suya tendía a relajarse demasiado. Así que era probable que el estanque quedara tal y como estaba, siempre y cuando no decidieras obligarlo a que cuidara de ellos a modo de disciplina. Refunfuñaría por lo bajo hasta que al final terminara por cuidar por sí solo de ellos.

- Eso sería un gran inconveniente. Que mala imagen daríamos con esas pancitas boca arriba -Rió por lo bajo-. Me informaré , Tyella. Y que conste que he tenido mala suerte cuidando cosas; primero se me seca el mini cactus y luego ahogo al otro. Está claro que no sirvo para cuidar nada, ni a nadie...

Aquella última sonrisa estaba mermada, apagada. Pero si bien era un poco holgazán lo compensaba con su capacidad para dejar atrás un mal momento sobre la marcha.

- ¡Ah, sí! La muchacha -Asiente- Emi, Any... ¡Eyme! Su hijo se llama Harry, y por cómo lo miraba me dio la impresión que había una historia ahí. Padre muerto o hijo bastardo, cualquiera vale para esa mirada angustiada -Se encoje de hombros pues la ciudad está llena de casos así, y peores-. Tiene un claro acento norteño, y apostaría a que no es una campesina. Diría que fue sirvienta por lo bien que supo ofrecerse para trabajar aquí, sirviendo - Aclara-. No estaba por la labor de ofrecer su encanto. Y ahora que lo mencionas dijo algo bastante curioso. Déjame recordar... Comentó que estaba por esta zona porque una mujer recomendó que viniera ya que se había enterado que hace un par de días despidieron a una sirvienta de por aquí. Cosa que no es cierta o me habría enterado -Cierto, a Harwyn le entusiasmaban los chismes, y es ahora cuando adquiere un semblante detectivesco-. Esa mujer dio este lugar como referencia para orientarse, y de hecho, Eyme, preguntó primero si era aquí donde necesitaban una empleada. ¿Qué opinas? ¿Una excusa o alguien quería enviarla deliberadamente aquí sin que ella lo supiera? Lo primero sería aburrido, lo segundo... Reconozco que me dio algo de lástima y preferí que fueras tú quien hicieras de mala despachando a la muchacha mañana, y a su recién nacido -Recalca con una sonrisa socarrona.

Ahora su atención se centra en la escalera que conduce a la planta superior.

- En cuanto a Axel... ¡Pues eso! Que lo veo más contento que cuando salió -Esta vez el encogimiento de hombros no cuela. Es todo menos despreocupado-. Tenía un humor de perros en el desayuno, y anoche, y ayer... Pero me alegro -Se vuelve a ti con una sonrisa deslumbrante-. Le hacía falta salir -Mantiene el tipo unos instantes, sin abandonar tu mirada inquisitiva-. Uno no siempre tiene lo que quiere, Tyella. Y no me quejo pues he elegido mi camino. Y ahora, querida, ¿qué necesitas de tu humilde amigo para tener todo a punto esta noche?

Cargando editor
26/11/2015, 22:12
HACEDORA

Notas de juego

Dos cositas, Equis:

1. Para ir teniendo una idea de cómo montas tu tinglado putero coméntame cómo sería, algo así como una expectativa. Me servirá de plantilla para ir de lleno a la noche. 

2. Parece ser que algo pasa entre Axel y Harwyn. Puedes seguir indagando sobre el pequeño drama si quieres mientras planeáis vuestra vida nocturna. 

Cargando editor
01/12/2015, 19:33
Tyella Arena

-Así que debo ser la mala que niega un trabajo a una pobre madre que ha sido enviada a buscar cómo ganarse un plato para ocupar un puesto en esta zona que no existe -dijo una Tyella entre divertida y preocupada-. Me sobrevaloras. Debo entender que entonces volverá mañana aquí. Curioso cuando menos. ¿Le dijiste que no habías oído que nadie necesitara de una empleada por esta zona? Imagino que no. De todos modos, has hecho bien. Veremos qué averiguo de ella e incluso puede que juguemos un rato -se pinzó el lóbulo dela oreja, pensativa.

Al cabo de un par de segundos, sacudió la cabeza, como despejándola de aquella cuestión y tendió una mano a Harwyn.

-Paseemos un poco. Es una orden, por supuesto -sonrió cálidamente-. He dicho que me sobrevalorabas. También me atrevo a decir que te infravaloras. ¿Que es lo que ocurre con Axel? O mejor dicho, entre Axel y tú. Y por favor, evítame seguir insistiendo en este tema. No quiero evasivas. Hay muchas cosas en juego, Harwyn, confío en vosotros y sé que tenéis derecho a vuestras parcelas de intimidad. Puede que alguien vea esto -su mano libre voló señalando el paisaje circundante- como un simple burdel y a nosotros como mercenarios del sexo. Se les olvida que somos una familia. Y que soy vuestra madre. A veces es posible que incluso se os olvide a vosotros. Harwyn, pequeño mío, eres hermoso como un amanecer y no soporto esa tristeza que baila en el fondo de tus ojos. Ni que aceptes tan fácilmente no tener aquello que ansías. Pero como no quiero interrupciones cuando empieces a hablar, te responderé primero a lo que me preguntas. Quiero una noche temática. Caza. Axel y tú seréis cazadores. Buscaréis la presa que huye de vosotros, que cabriolea y se oculta entre nuestros clientes, una presa que no serán sino nuestras preciosas compañeras coquetamente maquilladas para representar ciervas, pavos reales o lo que estiméis exótico y oportuno. Música por supuesto. Percusión trepidante. La culminación, una falsa relación sexual aderezada con prolegómenos subidos de tono y que no calienten sino que enciendan a nuestros clientes. Quiero que hablen de nosotros en todo Desembarco. Asegúrate de que queden zonas despejadas y perfectamente visibles para todos y en las que lleguéis a ese clímax que acabará con una ronda invitación de la casa.

Sonrió tímidamente, como una virgen sorprendida por su idea. Una sonrisa que su mirada desvirtuaba con el fuego de la sensualidad.

-Tu turno.

Cargando editor
13/12/2015, 18:57
Harwyn

No sólo te coge la mano sino que la besa con dulzura, con un toque bien distinto del que ofrece a las damas a las que debe seducir. Años de convivencia y amistad se reflejan en un sencillo gesto, en una sonrisa afable. De entre todos es sin duda el más coqueto, y ligeramente frívolo, pero indiscutiblemente leal.

Su sonrisa demuestra que lo has pillado, pues otra de las características de Harwyn, para bien o para mal, es hablar de todo y nada. Pero su sonrisa es fresca, y a medida que explicas la temática se vuelve pícara. Sin duda su cabeza está ya en marcha y su entusiasmo avivará su creatividad.

- Tenemos accesorios que podemos utilizar y otros los haremos. No será difícil crear el ambiente que pides porque la idea es brillante, y divertida -Asiente con emoción, aunque su suave cambio de actitud te hace prever que ahora toca un cambio de conversación-. Es cierto, somos una gran familia, Tyella. Diferente, especial, única. ¿Sabes? Es curioso que sea yo quien no pueda soportar que otro hombre yazca con Axel. Pensé que sería algo pasajero, una especie de... íntimo compañerismo. No sé muy bien cómo explicarlo -Suspira como sin ello pudiera dejar atrás su pesar-. Nos preocupamos el uno por el otro, y con el tiempo se ha intensificado. Él es fuerte, fuerte de verdad. Es capaz de dejar a un lado lo que hacemos, los que otros nos hacen. Pero no tomes esto como una queja, en absoluto. Estamos entregados a la causa, a ti -Sonríe, sólo sus labios sonríen-. Llevo un par de semanas evitándolo, siendo más el niño mimado que soy pero que él en privado desviste y transforma.

Esas últimas palabras no hablan únicamente de pasión, pero sin duda reflejan un anhelo que ahora se escapa entre sus hábiles dedos. Dedos que ahora llevan tu mano hacia sus labios para otro beso.

- Y ahora, querida, tengo que aprovechar al máximo el tiempo para hacer de esta noche algo memorable -El habitualmente perezoso Harwyn está entusiasmado por empezar, y por no seguir hablando de un asunto delicado.

En seguida se dispone a organizar la velada mientras te anima a que descanses para que brilles esta noche. Y así, tras horas donde las chicas se dedican a elaborar algunos accesorios y el resto se pone a decorar la zona principal, el día se despide para dejar que las luces de la ciudad iluminen las calles y ensombrezcan otro tipo de escenarios más escabrosos.

Cuando bajas hacia el escenario que cada noche da placer y cumple deseos el ambiente es completamente diferente. Plantas colgantes simulan la vegetación necesaria, y grandes macetas con arbustos harán de refugio a las pobres presas que serán cazadas para disfrute de los invitados. Junto a la fuente presas y cazadores charlan entre sí animados, bromeando y ensayando poses. Hasta el aroma que se respira es fresco, una clara invitación para perderse en el deleite.

Los impresionantes ojos de Lyna combinan con las plumas blancas y azules que adornan su larga y morena melena, y la seda transparente celeste se desliza sobre sus sensuales curvas y bellos senos. Al verte extiende sus manos y la tela se expande para imitar sus alas. Rena es la perfecta gacela, con un improvisado peinado imitando unas pequeñas orejas y una diadema con pequeños cuernos. Sus expresivos ojos están exquisitamente pintados así como parte de su cuerpo prácticamente desnudo, sólo cubierto por una larga tira de seda marrón que recorre sinuosamente su cuerpo incitando a arrancarlo para mostrar sus virtudes. Otra ave deslumbrante, un pavo real como pediste, extiende también sus alas con algunas plumas cosidas a la transparencia. Oryssa usa tonalidades verdes y azules, y sus espectaculares ojos y cabello recogido bajo una corona de plumas de pavo real culminan la obra.

Al otro lado los cazadores. Axel y Harwyn están deslumbrantes potenciando su musculatura con una suave capa de aceite, y un diminuto taparrabo y unas tiras de cuero cruzadas en su pecho son la única indumentaria de estos cazadores rudimentarios. Por armas un hacha pequeña de mano para Axel, y un palo con punta ligeramente afilada y tiznada imitando una jabalina en manos de Harwyn. Sus rostros están maquillados para dar un aspecto bárbaro, y aún así no resta ni un ápice de atractivo. A su lado Samira, otra cazadora con apenas unas tiras de cuero para ocultar sus senos y un taparrabo de redecilla negra para deleitar la vista. Su pelo está suelto, casi salvaje, al igual que el maquillaje ahumado en negro para sus ojos. Para ella se ha elegido una ballesta ligera, sin cargar, que sostiene con soltura en una mano.

Como solicitaste, algunas partes se muestran despejadas para escenificar, y aquí y allá se encuentran bandejas con aperitivos y jarras de vino y cerveza.

Cargando editor
14/12/2015, 20:02
Tyella Arena

Amor, fidelidad, monogamia. Suspiró.

-No. No permito que te vayas aún. No te diré qué debes hacer y aún menos me atrevería a decir qué debes sentir, pero permite a esta joven ya vieja darte un consejo, o contarte algo si lo prefieres -su mano acarició la aterciopelada mejilla de Harwyn y revolvió suavemente la barba perfectamente recortada-. El amor conlleva sus privilegios, pero también sus esclavitudes. Se nos da, pero también se nos quita. Es por ello que debemos buscar a quien nos complementa. Nunca sabremos dónde encontraremos a ese extraño y maravilloso ser que hará que nuestro corazón vibre ante su visión, que nos acelere el pulso y que haga que nuestra mente se centre en él como una polilla ante un farolillo. Pero si lo hallamos, mi buen amigo, no debemos ni abandonarlo ni desatenderlo. Cueste lo que cueste, pues nunca el precio es demasiado elevado. Y añadiré que el amor no reside aquí -su mano voló a la entrepierna de Harwyn, apenas rozándola-, sino aquí y aquí -pecho y cabeza fueron las nuevas elegidas de su grácil mano-. Ama y sé amado. Que tu mente y tu corazón sean dueños y señores de aquel que el destino haya elegido para ti. Tú dispondrás de la persona. Otros solo de aquello que ni siquiera se regala, sino que se alquila, porque querido mío, aquí, en esta casa, no vendemos nada. Solo alquilamos. Somos actores en una representación y cuanto otorgamos solo es una ilusión. Pero lo que tú recibas de Axel será verdadero y auténtico, real, como lo que tú le des. Porque ambos sois libres, porque os amáis. Y aunque mañana el sol se apague, nadie ni nada podrá quitarte lo que es tuyo. Y si aún así, mis palabras no te sirven, veré qué puedo hacer de cara a un futuro próximo. Y ahora, a trabajar.

Las horas transcurrieron plácidas y cuando bajó, solo pudo sonreir de placer ante la visión que se ofrecía a sus ojos.

-Perfecto -sentenció aplaudiendo como una chiquilla y riendo con una musicalidad argentina. Su piel reverberaba a la luz de las lámparas y velas. Todo su cuerpo había sido bañado en aceite dorado, la mirada verde ahumada hasta parecer la de un felino salvaje, los labios rojos sangre. Una gasa blanca que dejaba sus hombros al aire y que se fruncía en un escote que dejaba vislmubrar la tersura de sus pechos se ceñía su cintura por una fina cadena dorada-. Abrid las puertas de nuestra casa y que la ciudad se extasie ante vuestra belleza.