Miss Hemmens se rascó la barbilla intentando decidir si podía haber algo de verdad en lo que estaba sugiriendo John para exhalar un suspiro de exasperación e importencia
"Podría ser, aunque no creo que fuera para mi. Al ver el charco yo habría enviado alguien a limpiarlo y no le hubiera dado más importancia. Creo que el mensaje iba dirigido a otra persona" dijo mirando a Carl con una sonrisa beatífica, demasiado angelical para que no se pudiera ver que había algo más detrás de ella.
Desde el primer momento que vi el charco y sobretodo cuando noté que era agua salada, me di cuenta que ese mensaje iba dirigido a mí, aunque preferí obviar todo comentario. Una oleada de recuerdos llegaron a mi mente cuando vi la mirada de la señora Hemmens, quien rápidamente había notado ya la relación del mar conmigo, y alzándome de nuevo di un paso atrás alejándome de la trampilla.
Intenté calmarme con escaso éxito y solo logré balbucear...
- Parece ser que yo seré el próximo objetivo... y en cierta forma ya esperaba que esto fuese así. No creo que la trampilla sea una trampa pero la señal es clara. Por mi parte, no pienso acercarme de nuevo.
-No necesariamente tiene que ser el siguiente muerto, señor Vincent -dijo Hallard, observando al orondo empresario, extrañado de que la referencia hubiera ido dirigida hacia él. Tenía una gran curiosidad sobre cuál era la relación de Vincent con el mar, aunque prefería no preguntarle al respecto-. En la habitación de la señorita Stinson ya encontramos un peluche con un cuchillo en el estómago, que hacía referencia a la muerte de Nadia y, como puede ver, ella sigue viva. Dark sólo está tratando de atemorizarle. Eso es todo.
El británico se alejó igualmente de la trampilla, junto a Vincent.
-Sea quien sea el muerto, ha muerto ahogado, según el mensaje. No necesariamente tiene que ser uno de los que estamos aquí -apostó el remilgado empresario, pese a que intuía que debía existir una relación entre el descubrimiento que habían realizado y el nuevo mensaje del señor Dark.
Nadia le puso una mano en el pecho al ver que se iba de allí sin más ni mas
- Espera, espera - dijo con voz suplicante - ¿Te vas a ir así? Explicanos algo más... Además hemos acordado permanecer juntos - sus ojos tristes buscaban los del ex-policia. Aunque le había dolido su actitud en la sala quería creer en su lado bueno
- Nadia, es mejor que te quedes aquí mientras intento averiguar algo. - contestó el policia, con decisión - si permanecéis juntos no os debería pasar nada. - Sin esperar respuesta subió raudo hacia lo que iba a buscar.
Nate encaminó las escaleras sin detenerse demasiado en hablar con Nadia, Vanessa o Wallace. Tenía prisa en hacer algo y no quería perder tiempo calmando los ánimos o despejando las dudas de una embarazada cargada de hormonas. Subiendo los escalones de 2 en 2 el detective llegó a la planta baja.
La señora Hemmens permaneció en silencio mientras Carl y John intercambiaban hipótesis del destinatario del charco, mirando a ambos alternativamente mientras esbozaba una pequeña sonrisa de suficiencia antes de decirle
"Según mi información el señor Vincent tiene miedo al mar pero de ahí a pensar que un charco de agua salada está destinado a desestabilizarse va un abismo. No están viendo cosas donde no las hay? De todos modos aquí no hay nadie podemos seguir la inspección en otra estancia. Me gustaría acabar toda la planta baja antes de la cena. Señor Carter, sígame por favor" dijo con su habitual tono autoritario mientras comenzaba a dirigirse hacia la entrada.
LA seguís? investigáis por vuestra cuenta?
Notó como sus hormonas entraban en efervescencia. Y ahora iba en manoletinas, o sea que no le iba a ser muy difcil coger al policia en su subida. Subió detrás de él con los dientes apretados para no soltar palabras malsonantes.
"Va listo si piensa que le voy a dejar ir" pensó enfurruñada
Nadia, hazme una tirada de físico :)
LA señora Hemmens y su inseparable Greg aparecieron por el pasillo contrario por el que habían entrado. Habían dado la vuelta a la bodega pero ya no estaban todos, Nate les había dejado por algún motivo y la señora Hemmens no parecía ni más enfadada ni más preocupada de lo normal.
Con su acostumbrado tono seco y marcial dijo
"No está aquí. Los señores O'brien, Vincent y Hallard se han quedado inspeccionando una trampilla que según ellos tenía un charco de agua de mar" y con una sonrisa cínica remató "y elucubrando si es un aviso o no como el que encontraron en la habitación de la señora Stinson. En mi opinión solo están viendo fantasmas, pero es mi opinión. Voy a empezar la inspección de las habitaciones de los empleados, me gustaría revisar el piso de abajo antes de la hora de la cena. Vienen o van a esperar a sus amigos?"
Tirada oculta
Motivo: Fisico
Dificultad: 0
Habilidad: 0+1
Tirada: 4 7 9
Total: 7 +1 = 8 Éxito
Ahí la tienes ^^
-Prosigamos con la inspección entonces -decidió Hallard, cuando escuchó decir a Hemmens que allí no había nadie y que quería revisar toda la planta. Luego el británico palmeó levemente la espalda de Vincent-. No le dé más vueltas. Ese Dark solo busca torturarnos psicológicamente antes de juzgarnos por nuestros crímenes.
El británico echó a andar detrás de la institutriz para continuar investigando la mansión junto a ella.
Al escuchar la explicación de Hemmens el chico intervino y dijo.- Sinceramente pienso como ella, aunque tengas fobia al mar, es algo rebuscada esa causa... por lo que veo este hombre es más directo.
Un peluche con las tripas abiertas y ensartadas; o un gigolo desnudo con el corazón empalado...
Hallard intervino para seguir buscando por la planta baja. El chico asintió y siguió a Hallard, mientras volvía a centrar su atención en cualquier dirección y detalle, sin dejar de mirar atrás o dejar un punto ciego que no vigilar al avanzar.
Mira a Nate subir las escaleras y a Nadia seguirle enfadada.Ese hombre era insoportable.Desolada mira a Wallace mientras ve a la Vieja Loca acercarse.
-"¿Qué hacemos?"-pregunta al hombre.No quiere dejar a los otros solos pero tampoco se fía de esa mujer y no le gusta un pelo que se vaya sola
Diablo...
Asiento a las palabras de Dylan y el señor Hallard con un leve cabeceo agradeciendo sus palabras.
- Agradezco su buena intención, pero no entienden que esa fobia al mar ha sido la causante de los peores momentos de mi vida... y la causa de esas muertes que me pesan en la conciencia... Sí, estoy seguro que ese charco es un señal para mí...
Salgo detrás de mis compañeros alejándome de la trampilla aunque no si dar un último vistazo.
La respuesta no era exactamente lo que esperaba, resumido en un “siéntate y espera”, sabiendo que alguien había caído. Se frotó las manos en el pantalón al notarla sudorosas por los nervios, esperando que alguien más dijera o algo o se moviera.
Nadie abandonó la posición, intentando detenerla al articular sin éxito varias frases y estirando el brazo, pero no sabía bien si era lo recomendable. ¿Perder la posición? ¿Ir tras ellos? Temía que si se marchaba quien quiera que fuera el causante de todo esto aprovechara la soledad de la entrada para escaparse ahora que ellos habían abandonado el puesto, o que se perdieran y los cogieran por banda.
- Odio elegir, siempre pierdo.- Negó con la cabeza sin hablarle a nadie en especial, un pensamiento en voz alta seguido de un profundo suspiro que cortó al ver a Hemmens, poniéndose firme como si de un sargento se tratase. No sabía por qué, pero le infundía respeto y miedo a partes iguales, temiendo ser fruto de su ira.- No creo que ir solos sea lo idóneo, ya sabe que hay un asesino suelto esperando vernos desperdigados.- Estaba, literalmente, cagado por marcharse, pero sabía que si la dejaba sola y era la próxima víctima tendría su fantasma reconcomiéndole la cabeza durante noches eternas.- Permítame acompañarla, es más seguro.- Miró a Vanessa con una sonrisa forzada, sin saber exactamente si estaba haciendo lo correcto, sobre todo al imaginarse que no le hacía especial gracia estar en el grupo de Hemmens.- Tal vez encontremos algo útil.- Miró al camino donde el resto se había integrado, perdiéndose entre los pasillos. Se acercó un paso y, esta vez, habló en voz alta, casi gritó, para asegurarse de que el mensaje llegara a través de las paredes.- ¡Vamos a ir con Hemmens a inspeccionar las habitaciones de empleados! – Esperó unos segundos en completo silencio por si obtenía respuesta.- ¡Tened cuidado, nos vemos luego! – Se giró, esta vez mirando a la severa mujer.- La sigo.
Nadia salió disparada en pos de Nate, al menos todo lo disparada que puede salir una embarazada en su estado y llevando una desventaja bastante grande. Desde abajo su tripita se bamboleaba de una forma muy graciosa, desde dentro Andrea golpeaba furiosa para que todo aquello acabara. Fuera como fuese, Nadia llegó al vestíbulo de la planta baja sin más compañía que la de su hija no nata.
Poco tiempo después de la llegada de la señora Hemmens y de Greg el grupo de John, Carl y Dylan asomaron en el pasillo totalmente ilesos, todos salvo Carl que presentaba un color algo más pálido de lo normal y estaba en un silencio tenso.
La señora Hemmens miró a Vanessa y Wallace y les preguntó
"Donde está la señorita Stinson?"
Hallard arqueó una ceja al percatarse de que no se veía a la embarazada por ninguna parte. Dudaba mucho que ella fuera la asesinada y que Townsend y Bullocks, sobre todo Bullocks, se hallasen tan tranquilos.
-Por favor, no me digan que se asustó y decidió marcharse por su cuenta -afirmó el británico, con sorna, poniendo los ojos en blanco.
Después de haber visto cómo Nadia se había quebrado por completo a la hora de subir las escaleras por primera vez, sin querer separarse del detective, Hallard no descartaba que la joven hubiera salido corriendo de la bodega a toda prisa tras sufrir un ataque de pánico.
Mejor que la respuesta, recibir la llegada de uno de los grupos alivió sus agitados nervios.
- Cuando avisasteis de que habíais encontrado algo, el policía pasó por aquí y Nadia le siguió.- Señaló a las escaleras, lugar por donde habían subido.- Dijo que quería averiguar algo, pero desconozco a dónde fueron.- Se encogió de hombros sin saber muy bien si dejarla marchar había sido lo correcto. Era una mujer libre y lo suficientemente adulta como para decidir qué hacer, suponiendo que quería ser más útil que servir como cancerbero de la entrada.- ¿Qué habéis encontrado?
Creo que te equivocaste con los destinatarios Hallard.