Partida Rol por web

— Lord Byron no me gusta, Thomas.

Erissa suspiró, sentada encima de una de las piedras de la cala en la que solía refugiarse cuando necesitaba despejar la mente. Vestía un vestido ligero veraniego marcado con pequeñas hojas verdes que dejaba al descubierto sus largas piernas. A diferencia de su acompañante, Erissa parecía haberse librado del inclemente beso de los mosquitos de Avalon Motley con bastante destreza, mostrando una piel pálida y sin rastros del sol.

— ¿Y por qué no? ¿Has oído la pasión con la que escribe?

Thomas era compañero de clase suyo casi desde que tenía siete años. Inteligente aunque no genial, dotado con una memoria prodigioso y sincero hasta el agravio, parecía que el joven muchacho de pelo castaño y ojos claros era incapaz de entender el rechazo de Erissa hacia el famoso autor inglés. Se acurrucó al lado de la piedra, mirándola hacia lo alto con los ojos levemente brillantes. Carcomido de los mosquitos y el sol veraniego, ofrecía un contraste mundano a la etérea presencia de la dama sidhe.

— Es famoso cuando lo único que hizo fue intentar llamar la atención. Es un talento vacío solo encumbrado por su vida dejada en los escándalos. Y además, envidiaba a John Keats. Su pasión solo es la tuya recitándolo.

A la joven sidhe se le encendieron los ojos en una miríada de oro verdoso cuando habló de John Keats. Un jovencísimo poeta, algunos dicen que iluminado por las hadas, y provisto de una gracia natural para la poesía que podría sonrojar al mismo Petrarca. O al menos, eso pensaba ella.

— Siempre me hablas de John Keats, pero nunca me has leído nada suyo. ¿Por qué?

Erissa no pudo evitar el sonrojo. Bien es cierto que Keats había sido prolífico en su obra y que no debería darle vergüenza recitar nada suyo, pero aún así el mero hecho de planteárselo la turbaba. Era algo tan íntimo lo que sentía leyendo las lánguidas poesías de su autor favorito que incluso compartirlo con su soñador favorito era algo... ¿Que la avergonzaba?

Mirando a Thomas, tomó aire y se armó de valor. Le pasó la mano por el rostro suavemente mientras se erguía, acariciándoselo, antes de ponerse en pie y empezar a declamar en voz alta, con la voz meliflua inflamada de pasión y gracia. Ella era una Sidhe de la Casa Liam. No podía acobardarse. Y sentía, en cierta forma, que Thomas tenía que entender por qué el poeta muerto en Roma era tan importante para ella. Apenas se dio cuenta de que el Glamour se movía en el aire a cada sílaba, vibrando de pura añoranza arcadiana con cada nota de la voz de Erissa...

Mi idea es esta, es una nilla de nombre Simone Sharely. Seria la Hija de Errant y tendria 8 años, de su personalidad seria alguien que buscaria llamar la atencion de su madre, pero ella no le para mucha bola por estar ocupada, asi que intentara impresionarla creando bellos versos de poesia (Mal hechos :v) asi que iria mucho con Thomas, para que le ayude a mejorar en su forma de escritura.

Con los demás se comporta como una niña alegre y normal. Soliendo hablar mucho de sus series favoritas y teniéndole miedo a la alturas.

No se que le parecen ?

Pues que igual la tuviste un poco joven, ¿no? XD

Yo el finde me pongo con esto, gente, que quiero pensarlo bien y ahora mismo no me da el coco 

Errant no necesita usar anti-conceptivos, ella sabe que al final siempre tiene un duende magico que le quita la protecion :P

o no se, William te atreves a ser el padre no legitimo y tener un desastre de familia ? xDD

Por mí perfecto. Teniendo en cuenta que Errant es Childling, es probable que haya pasado mucho tiempo en feudos, y por tanto parezca un tanto joven para tener una hija de 8 años. Y es probable también que la custodia la tengan sus abuelos o alguien que viva de manera permantente en Point Avalon... pero bueno, aunque para una aventura más larga sí que me interesaría por esos detalles, para esta historia podemos dejarlos para "fuera de cámara", y lo importante es que ambas están en Point Avalon durante la historia.

Asumo que al ser hija tuya será Kinain (i.e., con sangre feérica). ¿Tienes alguna foto que quieras usar para ella?

@Von Hohenberg: Thomas es un humano normal encantado, ¿no?

Te parece bien o busco otra ?

Perfecta :-)

Síp, Thomas es un Dreamer de toda la vida : )

William apartó pausadamente la bolsita de azúcar del platito con la taza. Aún no había mirado a la cara a Beth.

-¿No dices nada? - Beth estaba empezando a decepcionarse.

-Ya lo tienes decidido. Te mudas y dejas la galería. Vas a perseguir tu sueño. Haces bien. Lo que no entiendo es por qué me preguntas mi opinión.- La voz de William era tranquila, pero la longitud del discurso indicaba algo raro.

-Tsk. Porque me importas, caray. Estabas allí conmigo desde el principio, cuando empecé la carrera.- Beth bebió un trago del zumo de arándanos mientras se ajustaba las gafas con montura redonda. Llevaba un vestido largo anaranjado de una pieza con dibujos que había diseñado ella misma. La falda larga del vestido se movió levemente cuando la puerta del bar se abrió. El pelo castaño y rizado se iluminó por un momento con la luz de fuera. Claro que no éra ésa la razón de preguntar a William su opinión.

-Entonces, ¿no es porque sospechas que el padre de Henry tiene una empresa de márketing en Florida? ¿No es porque quieres comprobar que realmente no quiere usar tu talento para vender productos de limpieza? - William levantó la vista y miró con una expresión aburrida a Beth. A Beth se le llenaron los ojos de lágrimas.

-Por... Cómo... 

-El pasado sábado su padre lo llamó al móvil. Yo estaba por ahí cerca. Les encanta tu página en DeviantArt. Tienen un puesto de trabajo esperándote, Beth... ¿No te lo ha comentado Henry?

-No. Henry y yo ya habíamos hablado de ésto. Yo dije que seguiría sacando dinero a mi modo y abriría una galería. Pero me parece que voy a tener que hablar con él del tema otra vez.-Beth endureció su expresión, ensayando en su mente lo que le diría a Henry.

-La verdad es que te echaríamos de menos- mientras lo decía, William apartó la mirada hacia el café y cogió la bolsita de azúcar. Beth relajó su expresión.

-Gracias, Will. En serio. Creo que me has salvado de otra mala decisión.- Se secó las lágrimas discretamente.

-Hey Beth, ¿sabes por qué la gente agita la bolsita de azúcar antes de abrirla?- Beth frunció el ceño con una expresión de resignación. William abrió la bolsa delicadamente. -Porque si la agitan después de abrirla, pasa ésto - dijo mientras agitaba la bolsa, esparciendo azúcar por la mesa, su propia ropa y la falda de Beth. Beth emitió un gritito y luego se puso a reir.

Beth no se iría.

El viejo Pete es un recuerdo de otra época, un fósil viviente que la marea ha arrastrado a las playas de Point Avalon. Aunque no nació en el pueblo, lleva más tiempo en él que la mayoría de sus habitantes, y su voz ronca y tranquila tiene un gran peso en la comunidad. Llegó hace tantos años que prácticamente no queda nadie que recuerde al joven capitán que desembarcó de su humilde pesquero con la intención de descargar sus mercancías, pero que cambió de idea tan pronto como conoció a la que se convertiría en su esposa.

No, no quedan más que un puñado de fotos ajadas que lo atestigüen, pero Pete se decidió entonces a echar el ancla, vender el resto del barco y, con el dinero que sacó, abrir una pequeña tienda con la que mantener al amor de su vida. Nunca se ha arrepentido, pero eso no quiere decir que su historia haya sido fácil. No hace mucho que su esposa murió y su negocio se fue al traste, pero nada ha hecho mella nunca ni en su estúpido romanticismo ni en la honradez que le caracterizan.

La relación con Cid le viene de lejos, y mucho de lo que el troll sabe de hacer arreglos lo ha aprendido del viejo. Hoy día, Pete se contenta con disfrutar de su jubilación y ayudar a Cid con sus chapuzas, cuando éste se deja. El anciano habla tanto como el troll calla, pero el respeto que se profesan el uno por el otro es enorme, y mientras que Pete ve en Cid al hijo que nunca tuvo, Cid confía en el viejo más que en nadie y le considera como una especie de guía. De hecho, todo apunta a que las conversaciones que han mantenido han hecho mucho en favor de la decisión del troll por cambiar de Corte. ¿Quién dijo que un mortal no podría inspirar nunca a un hada?

Hay algunas cosas que no he contado de la historia de Pete y Cid, porque me gustaría ver qué opinas y no sé si estaría mejor dejarlas un poco entre ellos dos y que, si alguien más se entera, lo hiciera durante la partida. 

Mi idea es que Pete podría haber tenido mucho peso en la decisión de Cid de cambiar de Corte. Antes de jubilarse, el pequeño negocio familiar de Pete podría haber estado pasando por un mal momento por la apertura del supermercado de una gran cadena que se estuviera comiendo el que hasta entonces había sido su pastel. El Cid de entonces todavía pertenecía a la Corte Oscura y tenía una forma de ver las cosas muy distinta a la que tiene ahora. Tanto es así, que podría haber intentado hacer un favor al viejo prendiendo fuego a la competencia, o bien dando una buena sacudida al gerente... sin medir mucho las consecuencias, claro, que acabó pagando otra persona, puede que incluso el viejo. De ahí que ahora el troll haya cambiado de Corte. 

Si te parece bien, esto abre la puerta a algunas cosillas que podríamos añadir al trasfondo. Si antes era un macarra, puede que entonces se llevara más con Lily y William que con Erissa o Errant, por ejemplo. O que el incidente en cuestión (la paliza, el incendio, o lo que sea) causara un gran tumulto en el pueblo (que supongo que es tirando a tranquilo) y antecediera de una forma un tanto sospechosa a su decisión de cambiar de chaqueta. Porque supongo que en parte se arrepiente. 

No sé. Dime qué te parece y amos viendo. 

Me parece perfecto :-)

Me encantan las historias. Vaya presión que me estáis metiendo para masterear la partida :-)

@Pazuzu:
—Tienes alguna imagen en mente para representar a Beth?
—En realidad no importa tanto que sea tu prima o no como saber si tiene sangre feérica, y por tanto puede percibir a los Changeling de manera natural, o si es una humana normal a la cual encantáis para que pueda percibiros. Ambos son posibles tanto siendo primos como no (aunque si sois primos esa sería una razón por la cual podría poseer sangre feérica).

@Vikmar: ¿Supongo que Pete es humano encantado?

Eh... sí. Si está encantado puede verme tal cual soy, ¿no? 

Sipes.

Pues sí, encantado.