Partida Rol por web

ZANDBAK

COSETTE

Cargando editor
21/04/2016, 21:09
Director

La cacería parece haber terminado, solo quedan cuerpos destrozados de saurios esparcidos por el suelo.
Emily baja del tanque y se apoya en el morro con su ametralladora en brazos, vigila la cueva y lanza fugaces miradas a los alrededores por lo que pudiera aparecer.

- ¿Ahí dentro? Apuesto a que hay mas saurios, esas mierdas se reproducen como conejos. Deben estar lo suficientemente dentro como para no oír la que hemos liado aquí.

El remolque se llena con los cuerpos de los saurios, a cada movimiento una gran cantidad de sangre y algunas vísceras se desparraman por el suelo. Algunas partes de la piel se pueden aprovechar y un par de cabezas también, solo una buena negociación hará que el día de hoy haya merecido la pena.

- Si tuviésemos más potencia de fuego podríamos entrar en esa cueva. Dicen que los huevos se pagan bien, pero seguro que hay que matar a cientos de estos antes de llegar a uno. Prefiero buscar un bar y olvidarme de todo.

Cargando editor
21/04/2016, 21:31
Cosette

Sí, yo también creo que es imposible - No había duda, ellas eran artilleras. Seguramente esto hubiera sido un paraíso para Elise. Pero a Cosette moverse fuera del tanque para pelear ya le era incómodo, más aún si tenía que entrar en una cueva solo con su subfusil y su cuchillo.

Cargado el remolque, apoyó la bota sobre la cremallera del tanque y se encaramó a la torre para echar un vistazo a la ametralladora, ver si tenía alguna salvación o tasar cuánto le iba a costar. Mientras desenrollaba la correa de la munición que había quedada atorada con los resortes interiores iba quejándose haciendo que el cigarrillo bailara en sus gruesos labios levantando volutas de humo frente a sí - ¿Pero qué demonios has hecho aquí? Hay que dispararla con cariño. No puedes tratarla como la polla de un guardia imperial. Hay que ser suave y delicada - A lo que cuando parecía que la maña no era suficiente, edulcoraba sus salvajes intentos de manipulación con palabras más propias de las que se dicen a un cachorro de pomedanean - ¿Eh que sí tessooro? ¿Eh que sí? Va venga dame ese muelle. ve~engaa

- Tiradas (1)

Motivo: reparar ametralladora

Tirada: 1d20

Resultado: 4(+8)=12

Cargando editor
25/04/2016, 10:10
Director

Con los alrededores en calma y casi todas las presas cargadas te dedicas a examinar la ametralladora fija del tanque.
El percutor y el cerrojo se han partido, posiblemente a causa de una bala mal sellada. Es una suerte que ninguna esquirla metálica haya herido a Emily, la cual observa tu comportamiento y contesta con humor.

- Cuando volvamos os reservaré una habitación para las dos solas. Así tendréis más intimidad.

No conoces los precios locales, pero seguramente sea más barata la reparación que adquirir una nueva ya que el resto del arma está intacto.
Tras unos minutos el trabajo ha terminado, la caza cargada y todo recogido. Tu compañera se sienta tranquilamente en el asiento del artillero a la espera de partir.

- ¿Donde vamos a vender todo esto? No se si es mejor buscar un coleccionista o intentar convencer a las aldeas cercanas de que les hemos librado de un peligro. Aunque puede que nos paguen con pieles y hortalizas...

- Tiradas (1)

Motivo: Avería arma

Tirada: 1d10

Resultado: 5

Cargando editor
27/04/2016, 02:50
Cosette

No ni hablar, puede que sea una fresca, una drogadicta y una gay, pero de imperial no tengo nada, ni siquiera la parte de mentirosa, así que buscaremos a algún coleccionista que quiera hacer algo con los huesos, o invitamos a la aldea a una barbacoa con la carne, da lo mismo

Hakuna Mattata

Aunque pensó en volver a aquella cueva el resultado sería idéntico. La artillería pesada era perfecta pero en esas junglas estrechas y cuevas minúsculas era inútil

Pasaremos unos días, pasémoslo bien, es nuestra primera vez por aquí. Podremos volver a las llanuras con Jim pronto, donde somos las reinas de la estepa.

A los mandos de Jim se dispuso a volver en busca de Zoe, por si sabía quien pudiera estar interesado en un montón de cuerpos de saurios y de paso encontrar quien repare la ametralladora

Cargando editor
01/05/2016, 13:15
Director

De regreso con Zoe os cuenta que ha encontrado un coleccionista y fanático de la caza residiendo en las afueras de una gran ciudad. Viendo que malvender las presas no es la mejor opción preferís hacer el viaje en busca de algún beneficio que cubra los gastos de los últimos días.

Siguiendo varias indicaciones dais con la morada del coleccionista, una enorme mansión que desentona radicalmente con la estética del país. Seguramente por eso se haya construido tan lejos de cualquier otra edificación, por eso y porque en el recinto que rodea la casa caben las últimas diez aldeas por las que habéis pasado.

Un guardia se encarga de haceros pasar con los vehículos por la puerta de servicio hasta lo que parece un pequeño desguace que recuerda, en versión mucho más pequeña, a los que abundan en el Imperio. El lugar está al margen de la casa y separado por un muro, aun así muchas ventanas dan a esta zona.
Todo el mundo allí trabaja para el dueño de las tierras, pronto escucháis que se trata de un viejo general retirado que hizo mucho dinero con la caza y, siempre según rumores, con la venta de tecnología avanzada a otras naciones.

Uno de los mecánicos locales tasa la reparación de la ametralladora en 100 monedas, teniendo en cuenta que una nueva cuesta como mínimo el doble no parece tan mal precio.
Os ofrecen 300 monedas por los saurios destrozados, en las aldeas que preguntasteis no superaban las cincuenta monedas.

Mientras estáis por allí uno de los empleados de la mansión se acerca a vosotras. Al igual que el resto del personal no es un kai, parece de Geld o de los Estados Confederados.

- Buenas tardes señoritas. No es muy habitual ver por aquí un grupo de cazadores extranjeros, bueno, de hecho no es habitual ver cazadores por esta zona del país. - mira brevemente como descargan vuestro remolque - Saurios ¿eh? Viendo las cicatrices de ese tanque apuesto a que habéis cazado cosas mucho más grandes. En Kaihatsu la caza se realiza en las costas, incluso en el mar. Las mayores bestias, y las más valiosas, viven bajo el agua. Cazar en el interior no sale rentable, aunque no estoy aquí para dar consejos de caza a nadie.

Abre una carpeta y saca tres sobres, uno para cada una de vosotras. Dentro hay una invitación genérica a una cena en la mansión del Señor Sirloin.

- Será esta noche, en apenas cuatro horas. Se requiere... ropa formal. Son libres de rechazar la invitación, aunque si lo hacen es porque no conocen a nuestro chef. Habrá algunas personalidades locales y varias personas vinculadas a la caza o al mundo que rodea esta noble actividad. Aunque prácticamente, si asisten, serán las únicas cazadoras en activo de la velada.

Tras responder a vuestras posibles dudas el hombre hace una breve reverencia y se marcha.

Cargando editor
03/05/2016, 19:32
Cosette

Cosette aceptó sin duda la oferta de aquel mecánico, un hombre largo y fino con una prominente nuez en su largo cuello llamado Shunyai que presumía tener siete hijos de cinco mujeres diferentes y que pese a lo aparentemente presuntuoso que podía parecer lo usaba en divertidas chanzas contra sí mismo que resultaban de lo más entretenidas y mantuvieron a Cosette un buen rato en aquel limpio taller.

De los doscientos restantes, los repartió entre Emily y Zoe - Muy buen trabajo Zoe encontrando a ese tipo, ha pagado mejor de lo que podía esperar.

El empleado de la casa les recibió con una invitación, debían sentir cierta curiosidad por las forasteras y Cosette tomó aquella invitación entre sus manos moviendo sus cejas traviesas - No voy a decir que no a un montón de comida gratis. - Además pese a que Cosette fuera una huérfana, pobre y desgraciada, nunca había tenido nada en contra de magnates o ricachones ególatras, así que estaría encantada. - Buscaré algunos trapitos por aquí

Vosotras mismas, pero si no venís, más os vale esperarme aceitosas y en lencería, que vendré con unas copas de más - No sabía como se lo tomarían, pero poco o nada le importaba. Habían fracasado sus intentos de encontrar un machote que astillara una mesa golpeando su cabeza y le hiciera sentir que le partía en dos allí donde el útero comenzaba, así que estaba más caliente que un calibre .35 después de dos horas de ráfagas.

Buscó un puesto y se encaprichó de una casa de ladrillo desnudo con un escaparate bastante colorido, aunque le gustaban los vestidos pensó en las pocas oportunidades que tendría de lucirlo, así que optó por unos pantalones ajustados y una camisa de color apagado encorsetada en cuero, con un sombrero de pinza como complemento. La dependienta le sirvió extremadamente amable, aún así le recomendó con gran tacto que se aseara "aqui le entrego la ropa... está limpia"

Pasó efectivamente por un motel en el que se dió un baño, mientras se secaba creyó ver a Emily callejeando por la avenida, después fué a la peluquería y por último de vuelta en la habitación de motel se probó el modelito... voilà como diría algún gelder

Mientras se probaba ropa pensó en lo que aquel hombre había dicho: la caza mayor estaba bajo el agua. Los pelos de la nuca se le erizaban de pensar en sí misma bajo el agua dentro de una lata. Emily y ella eran artilleras y Zoe una francotiradora... lo último que podían desear era estar en aquella trampa mortal. ¿¿Y qué se supone que hacían cuando la caza fallaba?? No ni hablar, ni por toda la metanfeta del país.

Cargando editor
05/05/2016, 18:48
Director

Tus compañeras también parecen entusiasmadas con la idea de una cena en la mansión de un millonario, algo que pocas veces se da en la vida si es que llega a darse para alguien con vuestro oficio.
El comentario sobre la lencería es recibido casi como era de esperar, Emily te guiña un ojo no sabes muy bien si siguiendo la broma o algo más; por su parte Zoe sonríe tímidamente y agacha la cabeza.

Cuatro horas después os encontráis en las puertas de la mansión de Sirloin, un edificio descomunal que bien podría pasar por una universidad o incluso un museo de grandes dimensiones.
El exterior está lleno de vehículos lujosos y bastante gente se dirige hacia la puerta principal, te cuesta encontrar alguien que no supere los sesenta años y el color predominante parece ser el negro.

Acudes al lugar donde habéis quedado y por primera vez os veis con algo diferente a la ropa de trabajo.
Emily un vestido negro que apenas tapa sus pechos y deja al descubierto su espalda y sus largas piernas. No ha cambiado de peinado, lo cual le da un aspecto general tan atrevido como sugerente.
Quién más te sorprende es Zoe, llega caminando elegantemente y llevando un vestido blanco que enseña más de lo que has podido ver en meses. Por fin se ha quitado la coleta y al verla nadie podría pensar que fue criada en una granja, de hecho podría pasar por la anfitriona de la cena.

Emily es la primera es abrir la boca.

- Vale, deberías vestir así siempre. Se acabaron las camisas de cuadros, esa es la ropa con la que debemos negociar los futuros trabajos.

Zoe se limita a sonrojarse y colocarse el pelo sobre el hombro.

No tardáis en entrar y ser guiados hasta un gigantesco salón dominado por una mesa con tanta plata que podríais cambiar todo el blindaje de Jim solo fundiendo los cubiertos.
Comienza una pequeña recepción donde dos docenas de camareros se pasean ofreciendo bebidas y aperitivos que los mas ricos se empeñan en nombrar de mil formas estúpidas.

No hay ni rastro del anfitrión, nadie pregunta por él y no parece haber un lugar destacado para su presencia durante la cena. Los que si tardan poco en hacer acto de presencia son los primeros hombres interesados en, con toda seguridad, las tres mujeres más bellas de la fiesta. Al menos las tres en mejor edad, el resto parecen duplicar vuestra edad de media.

Las preguntas sobre vuestra presencia en el lugar se suceden, alternadas con presentaciones de supuestos aristócratas y ofertas de trabajo muy alejadas de vuestro oficio, dignas pero carentes de emoción.
Al fondo ves a un par de hombres, aún teniendo a Zoe a la vista no dejan de mirarte e intercambian algunos comentarios pero sin sonreír en ningún momento.

Cargando editor
10/05/2016, 15:53
Cosette

Cosette asintió al comentario de Emily. Se aprueba por mayoría el nuevo uniforme de nuestra tiradora.

Era imposible no atraer las miradas, y varias conversaciones giraban en torno al poco discreto grupo de jóvenes chicas que tan difícilmente podía imaginarse subidas al fuselaje del tanque cruzando el desierto imperial. Emily y Cosette, muy alejadas de cualquier rasgo de cortesía o etiqueta comían y probaban todo, haciendolo bajar rápidamente con la bebida (preferiblemente limonada). Zoe comía también, pero tomaba una posición más comedida, podía resultar hasta coqueta en la que saludaba a todo el que pasaba, parecía que de alguna manera se veía cómoda con aquel vestido, quizá tiempo atrás tuviera algo que ver con la aristocracia. Debía preguntarle.

Cosette ya estaba bastante llena, y al igual que sus dos compañeras recibía un corrillo de mecenas, veteranos y exmilitares que le preguntaban a lo que Cosette respondía muy animada, ¡¡era imposible no estarlo con tanta atención y cumplidos!! - Eh sí, tenemos un modelo Garbaq, pero no lo cambiaría. Hemos viajado mucho.

Yo... bueno, soy mecánica, y sí, le hace falta algun arreglillo. Estaría bien revestirle el fuselaje por ejemplo. He oído de unos pulsos magnéticos. Me encantaría ponerle unos para la próxima vez que una bestia se enganche a él hehe.

¿Zoe? Sí sí, está soltera, pero no sé yo... si su nieto sigue soltero por algo será hahaha

Cosette sonreía de oreja a oreja, aquellos hombres, aunque canosos y arrugados o inflados, eran muy educados y la llenaban de halagos oooj podía estar ahí toda la noche. El grupo cambiaba y se disgregaba, volvían a juntarse y Cosette se acercó a la pareja de hombres que cuchicheaban sin ninguna sonrisa.

Cosette llevaba el carmesí en los labios y el colorete que te proporcionan un par de copas de vino cuando no sueles beber. Imitando torpemente la etiqueta que había ido escuchando aquella noche saludó - Buenas noches caballeros, aunque estoy disfrutando enormemente de la fiesta, la comi~da, la bebi~ida y la compañía, no veo al anfitrión ni veo el motivo de esta reunión. ¿Saben cuando llegará?

Cargando editor
11/05/2016, 00:01
Director

La velada avanza y la diversión aumenta, por un momento olvidáis vuestros problemas y os recreáis en la excelente atención que recibís. Zoe parece abrumada ante la situación, aunque lo sobrelleva bien. Por su parte Emily no puede evitar sonreír orgullosa cada vez que uno de esos viejos echa un vistazo a su escote.

Cuando te acercas a los dos hombres del fondo uno de ellos, de rasgos Kais, se marcha antes de que llegues dejando a su compañero para recibirte. Ves de reojo como el kai se dirige hacia tus compañeras mientras entablas conversación con el que se ha quedado, un tipo en buena forma con aspecto de Confederado.

- ¿Nuestro anfitrión? Lo tienes justo delante.

Tras un par de segundos sonríe rompiendo su rictus serio, aunque no tarda en recuperarlo.

- Estoy bromeando. Sirloin estará en alguna habitación cerrando algún acuerdo o reclutando a alguien para algún trabajo imposible. De hecho me extraña que no os haya hecho llamar todavía. Con todos los respetos, no creo que os haya invitado para que seáis la atracción de la fiesta, según he oído sois cazadoras y estas cenas se organizan para hacer negocios.

Levanta la copa para saludar a alguien a tu espalda, al girarte ves que se trata de Emily quien también eleva su copa hacia tu acompañante. Acto seguido te guiña un ojo de una forma tan cómplice como poco sutil.

- Si jugáis bien vuestras cartas podéis salir de aquí con un contrato, un vehículo nuevo y equipo para varios años. Muchos de esos hombres que revolotean a vuestro alrededor son fabricantes de armamento, y no veo a sus mujeres por la sala...

No tarda en darse cuenta de lo que ha insinuado y corre para arreglarlo levantando una mano en señal de disculpa.

- Lo que quiero decir es que pueden ser muy generosos a cambio de unas falsas esperanzas o de un poco de atención. A su edad dudo que las mujeres quieran hablar con ellos si tienen opción, y menos tres especímenes con tan buen aspecto. No lo consideres flirteo, es solo un cumplido.

El hombre apura su copa con tranquilidad, pese a todo mantiene una actitud relajada y da la impresión de que ha estado en tantas reuniones parecidas que nada le sorprende.

Cargando editor
11/05/2016, 01:12
Cosette

Cosette enarca una ceja, aunque a Emily parece divertirle. Aunque Cosette le encante flirtear, odia hacerlo si le insinuan que debe, no hay nada peor que decirle a una rebelde que debe ser rebelde para freírle el cerebro. Cosette pasa unos segundos debatiéndose entre sus naturalezas y al final sus ideas sobre buscar un rico arrugado pasan al fondo de su saco de ideas.

Según he oído la caza mayor se encuentra bajo las aguas del este. Y me temo que ni por todo el oro del mundo me metería en una lata de atún para ser cebo de tiburón. Pero si quiere hacer un trato en tierra firme - o hasta quizá en el aire- seremos todo oídos.

Cosette bebe, y debido a la torpeza de la embriaguez un poco de vino cae por la comisura de sus labios haciendo que se aparte de la copa de forma rápida y ridícula antes de que ése zumo de diablo toque su camisa nueva.

Cosette pensó un rato en un vehículo nuevo.... sí, realmente poder jubilar a Jim estaría muy bien. Pero el presupuesto que ella querría para un vehículo blindado era demasiado disparatado para siquiera planteárselo. No creía que Jim pudiera derribar nada que le proporcionara ese dinero. Casi necesitaría toda una tripulación por no hablar de qué haría el ejército cuando la vieran entrar en sus países con el monstruo de sus sueños. No definitivamente no, Jim aún tiene trote

Eh uhm sí. No estoy al tanto de las últimas armas. De hecho el modelo que conduzco es de principios de la guerra. Por sierto usté esssh... - La voz se le quedaba adormilada, y alargó la mano por unos canapés de carne triturada que le revestiría esos huecos extra salibados.

Cargando editor
14/05/2016, 23:54
Director

El alcohol no está precisamente ayudándote a mantener la compostura, aunque tampoco parece que les importe mucho a los obscenos ojos que te vigilan por todas partes.

- Me llamo Branson, mis amigos me llaman Bran y la gente que hace negocios conmigo me llama Señor Branson. Te podría aburrir durante horas hablando de los aviones experimentales que mi colega Seng y yo hemos diseñado, - señala a su compañero, el cual habla animadamente con Emily - pero tendrás mejores cosas que hacer.

Apura su copa de un trago y la deposita sobre una mesa cercana, echa un vistazo sobre tu hombro para comprobar como le va a Seng y después se acerca a ti un poco para que puedas escucharlo con un tono mas discreto.

- Escucha, he investigado un poco sobre vosotras. Los mecánicos me han dicho que cazáis saurios y que, como has dicho, tenéis un tanque que podría haber estrenado mi abuelo. No sois de aquí y no vais a encontrar nada en Kaihatsu que merezca la pena. Estos viejos solo quieren babear un rato pero no lograreis nada vestidas, así que te propongo algo.

Cuando pasa una camarera rechaza otra copa con un gesto de la mano y una sonrisa solo para volverse hacia ti y recuperar su rictus serio.

- Hay una isla a cien kilómetros de la costa, está deshabitada y se usa como campo de pruebas para determinadas armas. El caso es que allí vive algo, algo grande, que necesita ser eliminado para que los experimentos puedan proseguir. El dueño de la isla no puede recurrir al gobierno y tampoco a cazadores locales, pero alguien extranjero a quien nadie creería es la solución perfecta. Una caza en tierra firme, rodeada de agua pero tierra firme al fin y al cabo.

De repente suena un cristal rompiéndose y ves a Emily riéndose a carcajadas mientras una copa está hecha añicos a sus píes. Zoe se ha dado la vuelta y puedes sentir la vergüenza en su rostro, algunos miembros del servicio no tardan en acudir para limpiar la zona.

- Os pagarán bien, si quiere tu compañera podrá romper varias copas más de quinientas monedas como esa.

Cargando editor
15/05/2016, 00:52
Cosette

Hasta Cosette frunció los labios vergonzosa cuando Emily rompió aquella copa, y las copas de vino que había tomado le dieron una jaqueca terrible cuadno Bran mencionó que esas copas costaban quinientas monedas.... JoooorL.  Le supo mal que por segunda vez aquel tipo presupusiera que estaban allí para sacarle el dinero a los ricachones- Bueno, en realidad estamos aquí por la fiesta, no queríamos conseguir nada. Solo estamos de turismo.

Pero no perdemos nada por hablar con el supuesto dueño de la isla ¿Quien es? ¿Y qué sabe acerca de esa bestia que vive en la isla? - Cosette parpadeó un poco, sabiendo que había desordenado su discurso - Y por supuesto que tengo tiempo para hablarrr de suss aviones.

Yo me voy a comprar un avión ¿Sabe? Uno bien chulo, con muchas alas y muchas hélices lo llamaré.... Bala de cañón

Cosette acompañó su discurso haciendo despegar la palma de su mano y haciendo un picado sobre un objetivo imaginario. Pero si van a pagar tanto como dicen, quien sabe... Podría jubilarme, comprar un vehículo acorazado con su avión en su remolque y dedicarme a viajar por Zandbak el resto de mi vida

Notas de juego

Godzillaaaaaaa!!

Cargando editor
18/05/2016, 19:01
Director

Branson asiente sonriente ante tu interés sobre obtener un avión con el dinero del trabajo que te está proponiendo, cuando terminas tu escenificación relaja su sonrisa aunque no llega a ponerse serio.

- Bueno, no conozco tu tarifa pero no creo que os paguen tan bien como para poder jubilarse o comprar un avión. Al menos no de los míos, son tan caros como selectos.

Su última frase no suena tan vanidosa como podría parecer, de hecho casi parece una pega que pone a su propio trabajo.
Antes de que puedas responder sigue hablando.

- La identidad del dueño de la isla se quedará en el anonimato, podría decirte el nombre pero ahora mismo no sabrías de quién se trata. Aun así me han exigido máxima discreción, guardar el secreto ya está incluido en el pago. El cual por cierto asciende a medio millón de monedas, insuficiente para tu jubilación pero creo que llegará para la de tu actual tanque.

Parece que va a añadir algo más pero retiene las palabras en su boca, pronto sabes la razón, la música cesa y todo el mundo se gira hacia el fondo de la sala. Se abren un par de portones y aparece un hombre en una exageradamente elegante vestimenta. De repente todo el mundo aplaude y el recién llegado, el cual si está jubilado, no tarda en ponerse a dar un discurso. Es difícil no deducir que se trata de Sirloin, anfitrión de la velada y tan rico o poderoso para que un grupo tan selecto lo alabe de esa forma.

- Buenas noches y bienvenidos a mi humilde morada. Beban, coman y disfruten de la compañía, y no se dediquen solo a hacer negocios, la mayoría de ustedes ya tiene demasiado dinero.

Las risas, algunas incluso sinceras, se suceden durante su breve monologo.

- Hablaré con ustedes de lo que quieran excepto de trabajo y dinero, esta noche lo único que importa es pasarlo bien.

Los presentes vuelven a aplaudir y Branson aprovecha para entregarte su tarjeta.

- Si mañana sigues interesada en el trabajo de la isla ven a verme, te daré más información lejos de oídos curiosos.

Sin más se pierde entre los invitados mientras todos buscan un lugar donde sentarse a cenar. Emily y Zoe vuelven a estar solas, Zoe parece en calma mientras que Emily, a juzgar por los colores de su rostro, ha probado más de una copa de vino.

Cargando editor
18/05/2016, 20:16
Cosette

Cosette guarda la tarjeta y da dos pasos hacia Sirloin, pero claro, eso ha pensado todo el mundo y ya está rodeado de gente agasajándole. Así que Cosette se encoje de hombros y se acerca a Zoe, enarca su brazo derecho y levanta la barbilla poniendo  voz grave- ¿Un baile señorita? - Pronto la música comenzaría a sonar de nuevo, y Cosette no iba a pasar la noche sin bailar con la preciosa mujer que estaba allí plantada, sin duda toda una falta de etiqueta que divertiría a quienes les vieran bailar juntas.

A Cosette no se le daba mal bailar, aunque no tuviera ni idea sí poseía cierta gracia natural en sus exagerados gestos, pues en aquellos barracones donde conseguir un poco de metanfeta podía ser un calvario de impaciencia, ella también había soñado ser una princesa guapa y rica.

He conseguido un trabajito en tierra firme, en una isla. - Le comenta mientras sus pasos se mueven al compás.

Con los ojos esperaba que Sirlain tuviera entre sus ricos invitados, una apertura por la que atacarle frontalmente. No iba a renunciar a la oportunidad de hablar con su anfitrión y si las cosas se ponían insistentes... ya se abriría paso

Menudo escote gastas Zoe... ¿Has bebido suficiente? Se trata de una bestia gigantesca y apoteósica, me muero de ganas - Cosette alternaba los comentarios agasajadores con los de trabajo como si su desdoblado cerebro no distinguiera momentos para hablar de una cosa o de otra.

Cargando editor
22/05/2016, 12:32
Director

Mientras bailas con Zoe notas como todos aquellos que no están alabando la anfitrión os están observando, algunas con cierta envidia y algunos con ganas de meterse entre vosotras dos.

- ¿En una isla? Espero que sea grande. ¿Y como vamos a llegar?

Zoe se preocupa por la logística antes que por la bestia, una muestra más de que está hecha para algo mejor que ser cazadora.
Tras unos minutos Sirloin logra avanzar unos metros y te infiltras entre los vejestorios hasta llegar a él. Justo cuando termina de estrechar la mano de algún tipo de general kai u oficial de alto rango y viejo abolengo te plantas frente a él.

Puedes notar como su expresión cambia al verse delante de alguien que no ha vivido más de sesenta años, sin olvidar que se trata de una mujer joven y hermosa.

- Mi ayudante me dijo que había invitado a tres cazadoras recién llegadas al país. Puede que os sintáis fuera de lugar rodeadas de tantos desconocidos, pero confío en que disfrutaréis de la velada.

Un hombre con más galones que pelo aparece de la nada para estrechar la mano de Sirloin.

- Señor Sirloin, es el mejor vino que he probado en mi vida, y me avergüenza decir que no han sido pocos los que he podido catar.

- Muchas gracias comandante, necesitaba un vino a la altura de mis invitados y me alegra saber que lo he conseguido.

Con una habilidad impropia de su aparente edad se zafa del militar para continuar su ronda de saludos, al ver tu insistencia se detiene brevemente para atenderte.

- Está claro que te dedicas a la caza, no abandonas fácilmente una presa. No hablo de negocios en estas reuniones, o al menos no es publico. Sin embargo después de saludar a los invitados me retiraré a mi estudio, cualquier miembro del servicio estará encantado de acompañarte hasta allí.

Con una ensayada sonrisa estrecha tu mano y notas como deja algo en tu palma. Se trata de una pequeña llave, presumiblemente de la puerta del estudio.
Acto seguido vuelve a escabullirse al tiempo que se interponen algunas viejas esposas entre vosotros.

Cargando editor
01/06/2016, 00:57
Cosette

Cosette suspira resignada y se acerca a uno de los miembros del servicio devolviéndole la llave que Sirloin le había dado. Le había malinterpretado, pues Cosette lejos de toda la pantomima protocolaria a la que estaba sometido solo le quería ofrecer un poco de baile, hasta donde el viejo llegara, para agradecerle la invitación.

Volvió con Zoe - Ni idea, supongo que nos llevarán en barco. Mañana nos darán los detalles

¿Qué te parece si curioseamos un poco? Esta casa parece un museo, es espectacular...

Cosette echó a andar, pues realmente le fascinaba aquel lugar, mientras preguntaba a Zoe acerca de lo que encontraran - ¿Crees que debería tapizar a Jim por dentro? ¿O ponerle unas cortinas? ¿Debería darle una capa de pintura? Quiero comprarme un avión... ya sabes, para la caza de dragones, uno de esas avionetas con un par de ametralladoras delanteras y una trasera, y uno de esos motores de energía protónica ufff solo de pensarlo

Si se cansara de la casa, Cosette saldría al jardín, buscando algo realmente curioso y llamativo que ver, y al estar en la planta baja, sabiendo que los dormitorios estaban en la primera planta, con poco miedo de abrir una habitación que no debiera.

Cargando editor
01/06/2016, 17:32
Director

Tras el frustrado intento de acercamiento al anfitrión regresas con Zoe. Comenzáis a pasear mientras tu compañera busca a Emily con la mirada.

- Dijo que iba al aseo, aunque en su estado no temo por ella si no por aquel pobre que se cruce en su camino.

Zoe escucha tus deseos mientras salís al jardín, ves como levanta ligeramente su vestido para evitar que se manche con el césped.

- ¿Un avión? ¿Sabes pilotarlo? Dicen que para la caza es más peligro cuanto más grande es el avión, supongo que porque son más lentos o menos maniobrables. Con los tanques ocurre igual, aunque si te golpean no te estrellas contra el suelo.

El razonamiento de Zoe, tan aplastante como obvio, se ve interrumpido cuando os abordan un par de hombres. Parecen invitados a juzgar por sus elegantes trajes aunque deben rondar la treintena lo cual ya es la mitad de la media de edad de los demás.
Viendo como observan vuestros cuerpos y su forma estúpida de sonreír ya sabes lo que quieren antes incluso de que digan la primera palabra.

- ¡Hola chicas! ¿También os aburre la fiesta? Esos carcamales pueden ser muy pesados con las mujeres hermosas. Estábamos a punto de buscarnos un lugar discreto donde organizar una fiesta paralela, tenemos todo lo necesario.

Su compañero abre la chaqueta para mostrar un par de petacas y lo que parece ser algún tipo de droga local para fumar.

- Solo queremos vuestra compañía, nada de negocios ni charlas aburridas. Seguro que algunas de las muchas habitaciones de esta mansión está vacías y olvidadas, cualquiera nos servirá para divertirnos.

El portavoz parece claramente un charlatán, tiene mucha confianza en si mismo y sus gestos parecen muy ensayados.
El compañero, sin embargo, es mucho menos atractivo, se limita a sonreír como un estúpido, a asentir a todo lo que diga su amigo y a mirar a Zoe como si nunca hubiese visto nada parecido en su vida.

Zoe te mira algo avergonzada, no sabe muy bien como actuar en estos casos y está claro que la vida en la granja no le ha hecho coincidir con muchos hombres en su vida. Simplemente espera tu decisión y seguramente te siga hagas lo que hagas.
Te imaginas que haría Emily en ésta situación y si las petacas llegarían a la habitación.

Cargando editor
13/06/2016, 13:15
Cosette

Emily nos maldecirá por esto, pero total, yo ya tengo mi billete al infierno.

Cosette cogió con una sonrisa coqueta la droga y con una gran habilidad la preparó entre sus manos dando las primeras caladas, tras ofrecer un primer momento a Zoe, ésta rechazó tomarla, así que Cosette pudo disfrutarla para ella sola, no era amante del alcohol, pero la sonrisa que se le fué poniendo a medida que avanzaban por el pasillo enmoquetado era de una alegría que solo podía encontrarse en el fondo de una jeringuilla.

Me llamo Cosette -

Yo Richard - Respondió el charlatán - y él es Ulric. ¿Ella es....?

Ella se presentará cuando quiera

Zoe - Respondió casi sin dejar terminar a Cosette.

La puerta en madera pulida de una librería se abrió, tenía una gran moqueta, muchas estanterías, un sofá, un sillón y un diván además de una esfera Zandbakiana. Cosette entró marcha atrás invitando a los muchachos a seguirla, aunque Zoe quiso ser la primera el avispado charlatán fué el primero y antes de que abriera la boca Cosette ya lo arrastraba de la corbata contra sus labios, el humo se escapaba entre las comisuras de ambos a medida que sus lenguas echaban un pulso al ansía.

Las manos avariciosas del muchacho se colaron bajo la camisa de Cosette agarrando con fruición su piel como si pudiera atraerla hacia sí más de lo que físicamente era posible.

Mientras tanto Zoe había pasado y se había quedado parada delante del sofá, mientras el otro joven, más tímido había echado la llave a la puerta. Después miró a la escena y se acercó a Zoe, el muchacho tímido la tomó con delicadeza entre sus brazos y Zoe se dejó llevar con suavidad

Ah no eso sí que no - Cosette apartó con un empujón coqueto al atrevido Richard que empezó a desabrocharse la chaqueta y la camisa tomando una serie de cortos tragos a su petaca. Cosette se interpuso entre Ulric y Zoe - Me pedí el primer plato hace tiempo ricura. Tomando a Zoe de la cintura empezó a besarla con fruición, como si una vez tras otra le intentara arrancar el aire de los pulmones. Zoe trató de corresponder tomando a Cossette por detrás, notó como ella se le echaba encima volcándose ambas con suavidad sobre el sofá.

Los dos muchachos excitados y empalmados las rodearon tocando sus cuerpos con suavidad, demasiado excitados para permitirse esperar, demasiado excitados para cortar la escena. Se fueron desvistiendo con timidez uno frente al otro a medida que se pasaban la petaca

Cosette frotó su cuerpo con el de Zoe, que se retorcía inexperta. Cosette pasó la mano por el blanco y frío muslo de Zoe y se deslizó junto a él para quedar de rodillas frente a la chica tumbada. Cuando ésta quiso incorporarse, Richard masajeaba sus pechos en tanto que buscaba sus labios.

Cosette deslizó las manos entre la ropa interior de Zoe y deslizándola hacia abajo probó con suavidad el frío chochito de Zoe, sus labios exteriores temblaron tímidos cuando la lengua de Cosette empezó a probar la zona circundante, su cuerpo empezó a retorcerse mientras las manos de Richard masajeaban sus senos y la besaba sin parar.
Cosette fué lamiendo sus partes en tanto que se desvestía con un ojo puesto en el tímido Ulric que acariciaba el pelo de Cosette, el chochito de Zoe se fue humedeciendo y Cosette estaba cada vez más caliente, viendo como Richard se comía a Zoe....

Cosette no pudo aguantar mucho más, y medio desvestida mantuvo una mano en los muslos de Zoe para asegurarse que Richard no tomaba su zona, y alargando la mano hacia el pantalón del semidesnudo Ulric le instó a quitárselos. Su polla estaba empalmada y tan dura como un clavo, era gorda y lustrosa en el medio y tenía la punta cónica y pellejuda. Cosette la retiró hacia atrás en tanto se metía la mitad en la boca dejándola tan húmeda como pudo.

Sintió que Richard buscaba el chocho de Zoe, así que tirando con suavidad de la polla de Ulric volvió a sumergirse en los muslos de Zoe, echando atrás la piel que cubría el clítoris lo lamió provocando un descontrolado gemido de Zoe. Cosette se tambaleó ante esto, pero terminó de semi incorporarse para poner frente a Ulric su blanco culito.

Ulric no dudo, estaba cachondo y no podía más. Dejó con cuidado la petaca sobre el sillón y metió su verga entre los mojadísimos labios de Cosette. La polla de Ulric entró y salió con suavidad, abriéndose paso entre las paredes de la vagina de Cosette, haciendole sentir que si separaba las piernas podía partirse en dos ante el avance de aquella verga enorme.

Cosette empezó a gemir incontroladamente ante unas embestidas tímidas pero constantes, sus dedos jugaban con el clítoris de Zoe y Richard terminó de desnudarse para comenzar a desnudar la parte de arriba de Cosette

Cargando editor
16/06/2016, 16:47
Director

Agotar a dos sementales no es una tarea fácil, sobretodo mientras se protege un tesoro aún mayor. Sin embargo la noche terminó con varios orgasmos y con Zoe tocada exclusivamente por ti.
El amanecer os alcanza tiradas en un lujoso sofá, a medio vestir y abrazadas de una forma casi erótica. De los hombres ni rastro, una vez cumplida su misión seguramente se marcharon para presumir de ello ante quien los quiera creer.
Una vez vestidas salís de la habitación, Zoe parece distante, puede que avergonzada por lo sucedido o confusa por algún descubrimiento.
No tardáis en encontrar a Emily, por su aspecto parece que tampoco ha estado leyendo toda la noche. La sonrisa cómplice os delata, no hace falta decir nada.

Una vez aseadas y cambiadas de ropa os dirigís a la dirección de la tarjeta de Branson. Se trata de un enorme edificio metálico con forma de cúpula tras el cual hay un par de pistas de aterrizaje. Podéis ver algunos aviones y hangares, los vistosos colores denotan que son de pruebas en lugar de comerciales o militares.
Os presentáis en la recepción y tras unos minutos os permiten subir por el ascensor hasta la última planta. Allí os guían hasta el despacho de Branson, el cual tiene mucho mejor aspecto que vosotras tras la fiesta.
Todos tomáis asiento en unas comodisimas butacas y Branson comienza a explicar el trabajo.

- Medio millón de créditos para quien acabe con esa bestia. Los pocos que han vivido para contarlo hablan de un golem, algo distinto a los habituales de la Corona pero un golem al fin y al cabo. No es un dragón, no vuela ni escupe fuego. Yo me encargaré de la logística, puedo llevar vuestro tanque hasta allí en cuatro horas. Tranquilas, no os cobraré, consideradlo una ayuda para facilitar la solución a mi cliente.

Saca un plano de la isla, resulta ser casi un circulo perfecto con una costa bastante irregular. En el centro hay una montaña, posiblemente un volcán inactivo que ha formado la isla a su alrededor.
La isla mide unos diez kilómetros de circunferencia, el terreno es árido en su mayoría, algunas zonas rocosas y otras bastante despejadas.

- No os voy a decir como hacerlo, os dedicáis a esto y esa bestia caerá de un modo u otro. Solo aseguraos de que no se vuele a levantar, mi cliente quiere que sus equipos vuelvan allí cuanto antes y que no haya peligro para sus científicos.

El planteamiento suena sencillo y realmente poca información más parece poder dar, un lugar, un objetivo y un suculento pago por un trabajo rutinario.
Aún así se cruza de brazos y se recuesta en el sillón a la espera de dudas o comentarios.

Cargando editor
20/06/2016, 20:42
Cosette

Cosette ojea el mapa y busca una zona lo suficientemente árida para que sirva de autopista al tanque. - Esos gólems corren como diablos, no se pueden mantener a raya como a los saurios y Jim recién reparado aguantará un par de golpes antes de tener que retirarse, si puede.

El tamaño de los golems mide su fuerza.... ¿sabemos de qué clase de golem estamos hablando? - Cosette miró fijamente el volcán central, ¿qué tendría de especial para dar tantos problemas? - Con el poco efecto de las balas podemos desmontar la ametralladora de la torreta y colocar el francotirador de Zoe, dejarte por ahí parapetada es jugártela y tú no eres uno de los hermanos Marcus Zoe...

Con el trípode de la ametralladora y el probable tamaño de ese bicho no te debería ser difícil acertar al gólem en el corazón después que le abra un agujero en el pecho con Jim.

Cosette observó el mapa y buscó en las zonas más planas una especie de circuito en el que huir dando vueltas si podía abrir distancia para el golem.

Tú Emily manejarás el cañón del setenta y cinco, puede que no sea de raíles pero pega unos viajes que lo flipas.

Señor Branson, somos sus cazadoras