Partida Rol por web

¿Emma? ¿Brooks? ¿Trent? ¿Estais bien? ¿Sabeis algo de Miller?

Me pongo a luchar con todas mis fuerzas para liberarme de las ataduras

Estos hijosdeputa me han atado a una camilla pero no saben con quien se las gastan...GRFMLÑÑÑÑÑÑ......¡En cuanto me libere van a saber lo que es bueno! ¡Malditos cabrones hijos de mil padreeeees!

Vale soldados, veo que estais todos listos, ¡Formad un pelotón y empezad a salir por esta puerta! alerta a cualquier cosa que se mueva, ¡no dispareis hasta que yo de la señal si ocurre algo!

Me pongo al lado de la puerta y comienzo a hacer señas para que vayan pasando los soldados y salir yo el último, así me percataría de que todos estubieran listos.

  Obedezco sin queja alguna. Este imbécil podría condenarnos a todos con su actitud...¿De verdad me arriesgaría a salvarle si me necesitase? El cansancio hace que piense absurdos. Trato de dejar de lado esas ideas y sigo mi marcha.

Una vez recibidas las directivas me pongo en marcha en conjunto con el resto de mis camaradas, los sentidos de agudizan a fondo, estando alertas ante cualquier situacion.

Con el arma apuntando al suelo como ordena el reglamento salgo de la estancia. ¿Disparar? ¿A quién demonios vamos a disparar? Esto está muy tranquilo hoy, espero que siga así.

Sí, señor.

Salgo detrás del soldado Cross, me he fijado en su identificación cuando pasó ante mi.

    Paul puso el arma en guardia baja y un ligero escalofrío recorrió su cuerpo cuando vio que empezaban a salir todos los compañeros.

    - La yema del dedo pulgar en el gatillo, la yema del dedo pulgar en el gatillo. -Se repetía para si Auster mientras salía detras de Clayton-. Una partida más en la que me veo involucrado sin saber por que y para que. En la instrucción no nos prepararon para este tipo de misiones o lo que sea. Maldita incertidumbre. Si por lo menos supusiese de que iba todo esto. Céntrate. No es el momento de pedir explicaciones, eres un soldado, no el maldito Serpico*. Concéntrate, tienes que cubrir las espaldas de Clayton, eres su retaguardia, esa es tu misión ahora mismo. Esos despojos humanos pueden salir de cualquier lado y a ellos no les asaltan las dudas, su misión esta clara y no dudarán en llevarla a cabo: Comer. Comerte.

    Justo antes de salir Auster apretó los dedos de sus pies, le hacián sentir la tierra bajo sus botas y eso le ayuda a tranquilizarse y por tanto, afinar sus reflejos.

    - Empieza la partida...

Poco a poco avanzáis por la base en busca de la habitación de la nota inquietados por lo que os encontrareis en ella una vez dentro de ella encontráis a un tipo de lo mas normal durmiendo en una de las camas.
Rápidamente lo despertáis y aunque el tipo parece totalmente desorientado y sorprendido le obligáis a que os acompañe.

Tyson sigue igual de desconfiado y en numerosas ocasiones empuja al tipo para que avance mas rápido.

Los demás solo os limitáis a seguirle.

Una vez llegáis a vuestro objetivo veis que en comandancia solo hay un tipo que por su uniforme y la graduación que presenta es el citado comandante Stinson.

-Muy bien...espero que no les haya resultado difícil traerlo hasta aquí...se dirige ahora a Ben señor le necesitamos para una misión que solo podría llevar usted a cabo. Ya se que usted no es nadie especial pero por si no se a dado cuenta es el único Americano que queda en la base de los civiles que tenemos...ejem..."hospedados". Los demás son o bien extranjeros, refugiados o que se yo...Le necesitamos y es por que es civil. El gobierno de los Estados Unidos estaría dispuesto a...recompensarle económicamente con una cantidad mas que generosa...en realidad solo tiene que decir una cifra y ese dinero al acabar la misión sera suyo.¿Riesgo? No le voy a engañar esas alimañas están por todas partes, pero le aseguro que esta lo mas protegido posible. De echo...mira a los militares de nuevo esta es su "escolta personal" que incluye a un medico.¿Y bien, que me dice al respecto?

Se vuelve a abrir la puerta vuestra espalda y entra otro soldado.

-Vaya finalmente si, el soldado Mcenroe también ira con usted.

Esperándoos ya cualquier cosa veis como entra alguien en los respectivos y comprobáis como vuelven a ser soldados.
Un tipo con una pinta realmente extraña y que no lográis ver su cara va pasando habitación por habitación y hablando tan alto que podéis oír todo lo que dice perfectamente.

-¿Que tenemos aquí? Vaya...aburrido...aburrido...aburrido...¿un puto viejo?...y..¿esta niña? por un momento parece que lo le interesa pero rápidamente cambia de opinión. ¿es...es Maria?.Mierda...es ella...la...la he encontrado?...Todd... mátalos...

Uno de los soldados rápidamente desenfunda una pistola y rápidamente manta a los otros 9 soldados restantes. Pero uno consigue reunir las suficientes fuerzas como para activar una alarma para luego recibir un nuevo disparo y caer muerto como el resto de sus compañeros.

-Buen trabajo, pero ahora tengo que irme...no dejes testigos. dice el tipo justo antes de salir corriendo con la pequeña Maria cogida en brazos.

-Emma, Emma!!!!! solo alcanza a decir la pequeña.

Me sorprendo un poco al encontarme con tanta gente de golpe. Cuando finalmente reacciono, oigo como me presentan como soldado. Lo siento, pero esa afirmacion es erronea. Yo no soy un soldado. Soy mas bien un... miliciano. Creo que esa es la palabra adecuada. No pertenezco al ejercito profesional, ni recibi formacion profesional. La unica formacion que tengo es la que me di yo mismo.

  Me acerco a John de manera agradable. Bueno, parece que con este tipo sí se puede hablar tranquilo. Hola, y bienvenido. Soy Mark Narrow, pero puedes llamarme Mark. Soy el médico del grupo.

Estaba con la ropa de todos los días, mi camisa a cuadros blancos y azules, mis pantalones vaqueros azul oscuro y mis zapatos negros. Apenas había dormido esta noche y las legañas me delataban como dormido.

¿Yo? - reaccioné a las palabras del soldado - ¿Se refiere a mí, seguro? ¿De verdad? ¿Mucho dinero, eh? Pero no creo que ahora valga de mucho... Y estoy hablando de mi vida, ¿seguro que estaré a salvo? ¿Y qué demonios tengo que hacer? ¿Seguro que me ha dicho a mí? Verá...soy un tipo que se cuida, aunque no nos engañemos, me sobran unos kilitos y ya no estoy para hacer filigranas, jeje.

Hablo sin parar, de hecho apenas respiro entre cada frase. Los que habían tenido el "placer" de conocer a Ben durante las comidas sabría que no para de hablar nunca, ni debajo del agua.

Por fin me callo, aunque seguramente la gente dejó de escucharme a los veinte segundos.

La ráfaga de disparos sorprende a Trent como al que más, pero permanece callado: trata de no llamar la atención. Si pareces conflictivo, serás el primero en recibir un balazo. En primera instancia, intenta probar la resistencia de sus ligaduras.

Miro semejante lio que hay formado Y saludo a mi comandante

¡Comandante cabo primero Tyson a su servicio!

Espero una respuesta del comandante y acto seguido me dirijo hacia el recién llegado

¡Usted miliciano! Ahora está en el ejército de los EE UU. Soy el Cabo Tyson, a cargo de este grupo, por lo que tendrá que acatar mis órdenes. Si no las acata será posteriormente juzgado por un tribunal militar por traición a la patria.

¡Saluda a tu comandante y a tu cabo soldado raso!

Espero el saludo del miliciano y me dirijo hacia el civil

Tu, menos cháchara, no tenemos tiempo, cada sucia palabra que pronuncia pone en peligro a una persona que necesitaría nuestra ayuda. ¿Acaso quiere que seamos devorados por esos caníbales? ¡Yo no!

Sin esperar respuesta me dirijo hacia el comandante de nuevo, y salundándole le digo

¡Señor, permiso para partir con el grupo!

Tieso como un alfiler y sin variar de expresión facial (impasible) con la mano en mi cabeza haciendo el saludo militar espero a recibir órdenes de mi comandante

Miro desconfiado al tal Mark. No por nada en especial, pero si algo me han enseñado las calles es a fiarse de uno mismo. Aun asi, le extiendo una mano. Permiteme presentarme. Me llamo Jhon McEnroe, pero algunos me llaman Luppi. Despues añado en tono mas bajo. Aunque no se por que.

Despues me giro hacia el cabo con aires de grandeza. Eh, relajate tio, viviras mas. ¿Se puede saber que coño te pasa? Soy escoces, lumbreras, y tu patria me come los huevos.

Mira al chico antes de dirigirse al comandante... Habla como si fuera de la calle... eso me da recuerdos grandiosos

mmm... un chico que parece de la calle... parece un chico duro...

Lo agarro por el cuello de la camiseta y me acerco hasta 2 cm de su cara con la mia

¿Crees que eres el unico de la calle? Si te hubiera pillado por mi barrio del ghetto te hubieran dado por el culo mis hermanos negros, puto cabrón. ¿Qué te dedicas a pintar trenes con sprays?

Le di un empujón hacia la pared, para que se diera un fuerte golpe y después le encañoné a una distancia considerable con mi AK

Estas balas son para esos hijos de puta que nos acechan fuera, pero como no obedezcas mis órdenes serás el primero de ellos en probarla

Seguí con mi acción anterior hacia el comandante

  Me aproximo al caído John. Tranquilo, tío. Este imbécil está mal de la cabeza. Cree que tiene poder absoluto, pero espera que nos necesite allí afuera. Luego de este trato no creo que nadie le extienda una mano. - Le digo en susurros.

Cuando el cabo empieza a armar trifulca me aparto lo máximo posible, tanto que me doy un golpe con la pared.

¡Au! - me froto la cabeza con la mano - Creo que no voy a ir, no me siento seguro con ustedes. Creo que me quedaré aquí. Será lo mejor. Además, ¿qué pinto yo con soldados?

Me quedo mirando todo el numerito.

Me froto la parte donde he recibido el golpe para reducir el dolor, al tiempo que le dirijo una mirada de furia al cabo. Vaya con el sargento de hierro. Disciplina militar? Disciplina los cojones. Supongo que te creeras muy valiente. Le coloco una mano en el hombro a Mark de forma amistosa. Gracias por tu preocupacion, colega. En un susurro le digo- mas le vale dormir con un ojo abierto. Espera a que bajes la guardia, negro de mierda. A la mas minima oportunidad aprovechare para darte por el culo. Pienso lleno de rabia

Me acerco discretamente al civil para susurrar a su oído sin que me oiga el cabo.

¡Pssst, eh! No tengo idea de por qué pero es usted la estrella hoy, puede pedir que saquen de su equipo de escolta personal al cabo "soy un sicópata y me como tus tripas" además de la pasta. Le aseguro que no todos estamos locos, de hecho creo que sólo él lo está. Y si le necesitan seguro que puede librarse de él.

Me aparto con más discreción tras guiñar un ojo al tipo charlatán.