Partida Rol por web

Miss Sunshine ríe ante las palabras de la cambia formas, no se le había ocurrido pensar en darle chocolate, después de todo es un alimento muy sabroso, y aparte despierta ciertas emociones en los seres que pueden sentirlas, ¿despertara algo en Aquarina?

Aplaudo ante las palabras de Aquarina. 

-¡Por supuesto que sabemos lo que es el chocolate cariño! - Exclamo feliz de poder ayudar a la criatura en apuros - Es mas, tenemos una enorme variedad de chocolates que saben diferente, veras tenemos chocolates amargos, de leche, blancos, híbridos, de manteca de cacao... - Se apresura a explicar - Eso es de lo que se hace el chocolate, ¡también tenemos chocolates con rellenos!

Tomo de la mano a Aquarina y la guió a la despensa, rebusco entre las cajas aun selladas y saco una caja de bombones de chocolate y la abro (Casi al instante sientes diferentes aromas de chocolates, parecidos pero captas que son diferentes a la vez) y te los ofrece. 

-¡Vamos no seas tímida! - Exclamo con felicidad de poder ayudar - ¡Puedes comer los que quieras! 

Freydis se separa un poco de ambos se levanta un poco el top por la espalda, fijándolo en la base del pecho y extiende sus alas para terminar batiendolas y alzar el vuelo. Se pone a la altura de la ogra. - Como ha dicho Sekei Dante, mi nombre es Freydis, soy una valquiria. - Dice con tono serio pero respetuoso. - Es un placer conocerlos a los dos. -

Se inclina hasta mantener el vuelo de forma que su cuerpo esta en una linea casi horizontal y desciende hasta la altura de Dante. - Dígame señor Dante. ¿Qué ha pasado con el humano que estaba aqui ayer? Escuche algo de un hackeo, pero no se que es eso. -

La cara de Aquarina se inindó de felicidad. Su antigua ama no le dejaba comer tales ingestas de chocolate así sín más, almenos sin haber alguna escena de sexo por enmedio - ¡Vaya!, ya veo que vas directa al grano. - dije mientras cogía uno de aquellos extraños manjares de chocolate - ¿No te gusta juguetear antes con la comida? - le lanzo una mirada socarrona mientras relamo de una manera sensual una de aquellas jugosas bolitas de chocolate - Ten, prueba a imitarme - sonriendo le ofrecí una de aquellas bolitas de chocolate.

-Mi compatriota al parecer se ha ido por su propia cuenta, no sabemos los motivos pero no estaba aquí en la mañana - Niego con la cabeza - La gente de la agencia asegura que es común que sucedan cosas así, especialmente el primer día, de todas maneras, mejor, se ha ahorrado un problema innecesario... y respecto a lo otro, ¿un hackeo dices? Bueno, nosotros tenemos unas maquinas llamadas computadoras, que tienen acceso a un "espacio" llamado internet, poniéndolo simple, funciona como una red, que nos conecta, generalmente para enviar información de forma mas rápida, como un sistema de mensajes muy, muy rápido, un hackeo es cuando alguien irrumpe en el internet de forma ilegal, y cambia las cosas a su manera... bueno es complicado de explicar, pero espero que de algo haya servido mi explicación. 

Finalmente sonrió. 

-Y por cierto, el placer es mutuo. 

Me cruzo de brazos y sonrió con confianza. 

-No te preocupes si no lo entiendes mucho, a mi me costo entender eso del internet de los humanos, es demasiado complejo, y da la impresión que varios de ellos tampoco lo entienden, pero sin embargo es una cosa maravillosa. 

Mi animo sube cuando veo a la chica comer, definitivamente no me gusta ver que otras criaturas sufran, mis hermanas siempre decían que era una blandengue, pero después de todo no me molesta, si siendo así puedo ayudar a otros y hacerlos felices, pues por mi esta bien. 

-¿Quieres que juegue contigo? - Pregunto con una sonrisa - ¿Imitarte? Esta bien - Observo como la chica comienza a lamer el chocolate - ¿Esta coqueteando? ¿O realmente esta jugando? Es difícil de saber... pero si es lo primero esta funcionando, un poco sensual su manera de comer... - Tomo la bolita de chocolate y la imito, el dulce era sabroso y al contacto con la lengua, la calidez de esta producía que el producto se derrita. 

Miro extrañada a los dos por un instante mientras trataba de asimilar lo que le habían dicho. - Ese humano... me daba una mala espina. Ahora ya se que además hizo algo ilegal. Me imagino que esa red que conecta todo es como el puente arcoiris que unicamente Heimdall puede controlar. Aunque en el caso del puente no es información lo que controla... - Aprieta fuertemente el mango a la par que habló del anterior humano.

Luego aflojó la empuñadura. - Bueno, y ¿por qué no pasais dentro? Creo que os estaban esperando. Así podeís presentaros a la otra extraespecie, que sinceramente tampco se lo que es. -

En cuanto aquella chica empezó a imitar los movimientos de Aquarina, ésta la miró complacida - mi ama solía recompensarme con este tipo de manjares cuando me portaba bien - pensé en voz alta mientras seguía lamiendo aquella bolita de chocolate. Volvió a observar a la joven chica y sin apenas esperar respuesta le dijo - ¿alguna vez has jugado con chocolate? - acto seguido cogió la bolita y le manchó la mejilla de chocolate. Continuó recreándose, pintándole por toda la cara. Finalmente dejó caer hábilmente el dulce por el escote de la chica, sin llegar a perderlo de vista. Aquarina aguardó unos segundos esperando alguna reacción por parte de Karin - vaya, se me ha caído - Aquarina empezó a acercarse a su escote con la intención de recoger la bolita con la boca.

-¿Que clase de juego jugaban con ella? - Me pregunto mientras dejaba que la chica me embetunara con el chocolate, era todo un misterio - No, nunca he jugado con chocolate - Respondo a la extraespecie mientras continuo mis meditaciones para intentar deducir que clase de juegos eran los que ella jugaba, sin embargo estas se ven interrumpidas cuando siento algo cálido escurrir entre mi escote - ¡Eek! - Exclamo, la sensación de calidez y la situación en general me estaban excitando un poco, un mucho a decir verdad, la calidez de este, y lo experta que es Aquarina estaba produciendo que me sienta un poco inquieta pero excitada - N-no hay problema, y-ya me limpiare - Exclamo rápidamente.. 

Caminan de vuelta a la casa, en donde encuentran las primeras dificultades, ya que Yuuki al ser demasiado grande choco con el marco de la puerta, esta finalmente termina agachándose e ingresando tras el resto, Miss Sunshine se encuentra conversando con Rina, al menos a simple vista no esta Yurino ni Aquarina. 

Dante: -Saludos nuevamente - Sonríe el chico al encontrarse con la agente y con la maid. 

MS: -Veo que se han encontrado sin problemas, me alegro porque me tengo que ir en breve ¿Todo bien? 

Dante: -Si, creo que si.

Yuuki alza una mano.

Yuuki: -Solo una duda ¿Porque la casa es tan chica? - Pregunta la ogra.

Rina se mueve algo inquieta.

Rina: -Esto... Yuuki... la casa no es chica, pero tu eres muy grande.

Dante: -¿Donde esta la otra extraespecie? ¿No eran dos? 

Rina: -Esta comiendo, Yurino ha ido a prepararle algo. 

Aquarina se acercó al escote de Karin con la intención de lamer la bolita de chocolate. Ésta se estaba derritiendo y reduciendo poco a poco, Karin podía sentir el suave tacto de la lengua rozandole el escote, Aquarina lo hacía con suma delicadeza y sensualidad, vigilando que ésta no se acabara escurriendo hacia abajo, una vez se acabó completamente la bolita de chocolate, Aquarina empezó a subir por su cuello, acariciándola sensualmente con la lengua, repasando las manchas de chocolate.

Pasó su lengua por el exterior de su labio superior; luego pasó por el inferior, recreándose en su recorrido, mientras, con su mano derecha empezó a acariciar a Karin justo detrás de la oreja, estimulando una de sus partes erógenas.

Volvía a repasar los labios de Karin, jugueteando con aquellos rosados y pequeños labios. Empezó a morderle cariñosamente el labio inferior sin llegar a hacerle daño. Aquarina sentía que la excitación iba en aumento.

Cogió otra de las bolitas de chocolate, la mordió tímidamente y se la llevó a los labios de Karin. Los labios de Aquarina tocaban sensiblemente los de la chica, mientras en el interior se iba derritiendo la bolita de chocolate. La distancia se hacía más corta y los labios se iban cerrando hasta acabar en un sensual beso.

Podía apreciar como hacia las cosas Aquarina y bueno, las dudas en mi ya habían desaparecido, había comprendido que era ESE tipo de juegos los que ella acostumbraba, pero con la excitación en aumento y los sensuales juegos de la cambiaformas, no pude mantenerme totalmente firme y rechazarla, la extraespecie era experta en lo que hacia y yo lo puedo apreciar en todo su esplendor, sintiéndome algo torpe por haber caído en su juego, y a la vez bastante bien por la calentura, mis pensamientos divagan mientras siento sus caricias y lamidas, hasta recobrar totalmente la cordura cuando ella me da un beso, un suave pero apasionado beso, provocando que abra mucho los ojos.

-¡M-me ha besado! - Pienso alarmada, y excitada en mi mente - ¡Una chica me ha besado! y ¡No! a mi no me gustan las chicas... pero... ella... ¿es una chica? ¿se le puede considerar como tal? ¡Por supuesto que lo es! pero... ¿porque no me molesta? 

Confusa por la situación termino cediendo y cerrando los ojos para disfrutar, cuando nos separamos la miro de forma algo tímida y con la respiración agitada.

-Aquarina... no se si debamos continuar... - Trago saliva - Al menos no aquí... no en la cocina con todos al lado...

Freydis se sorprende al escuchar el golpe que se lleva Yuuki y la mira. - ¿Estás bien? - Le pregunta preocupada, más por el hecho de que tenga que entrar agachada que por el golpe. - ¿Vas a vivir con nosotras aqui también? Hay tanto movimiento que ya no se quien vive y quien no vive en la casa. - Nada más decir eso y escuchar la palabra comer su estómago ruge y se lleva las manos a la tripa. - Vaya... -

Observé a aquella chica mientras notaba como su excitación iba en aumento, de repente me detuvo un momento y me dijo - Aquarina... no se si debamos continuar... - casi se me escapa una carcajada cuando vi el rostro de la confundida humana, a su reacción dibujé una carita de pena mientras respondí - pero... si no estamos haciendo nada malo, estamos desayunando - tras decir esto me detuve un momento - bueno, está bien ... seguiré comiendo chocolate y ya está - cogí la caja de bolitas de chocolate y, sentándome sobre mis rodillas, espaldas a ella, empecé a comer bolitas con cara triste.

Mientras todos los demás siguen conversando fijo mi atención en Freydis. 

-Yo si viviré en esta casa, supongo que tendré que acostumbrarme - Suelto un suspiro - No estoy acostumbrada a vivir con gente tan baja, sin intensión de insultar, y eso que yo no soy la mas alta de los míos, de hecho, me consideraban baja antes de venir aquí, pero un golpecito así no me hará nada, somos gente dura... 

Tras escuchar el rugido de la tripa de Freydis sonrió.

-Si quieres podemos ir a la bodega, se que allí tienen almacenados los alimentos de la casa, los humanos tienen todo tipo de comidas extrañas pero sabrosas... muchas cosas vienen en es pelesteco... no, plástico, si así se llamaba, y hay que romperlo para poder tomarla. 

Al ver la carita de tristeza de Aquarina se me conmueve el corazón nuevamente, tal vez lo que hacía no era con mala intención ¿no? reemplazo rápido mi confusión por algo de vergüenza y de pena, suelto un suspiro.

-Lo siento señorita Aquarina ¿Hay algo que pueda hacer para que me perdone por ponerla triste? - No se si es correcto tocarla o no, por eso me quedo esperando su respuesta con la cabeza algo agachada.

Al ver que Karin había caído en su juego continué con la actuación. Me puse a sollozar, como si estuviera apunto de llorar, con la voz entrecortada le respondí - no.. snif.. está bien.. déjame sola.. snif.. abandóname como lo hace todo el mundo.. snif - tras decir esto empecé a comer bolitas de chocolate de manera impulsiva, como si tratara de hallar consuelo en aquel manjar.