Partida Rol por web

Adventure Path - Carrion Crown

Parte 1 - La última voluntad y el testamento de Petros Lorrimor

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12/01/2018, 13:27
Director

Algunos ya conocían Ravengro y algunos no. Otros, en cambio, aún sin conocerlo, ya habían dado con la taberna local de "El demonio sonriente". Fuera como fuese, todos os encontráis en el pequeño pueblo por el mismo motivo: Todos habíais recibido una carta de puño y letra de Kenra Lorrimor. En ella se os informaba de que el profesor Lorrimor, ese humilde y afable hombre que os trató tan bien, había muerto. Se hizo el silencio y la oscuridad por unos segundos en el momento en que leísteis aquella carta, motivo por el cual os encaminásteis a Ravengro, para asistir a su sepelio.

Mientras caminábais por el pueblo, no pudísteis dejar escapar la ocasión de admirar el hermoso templo a Pharasma que se erigía en la localidad. Del mismo, un carruaje fúnebre sale del templo y prosigue el polvoriento camino que conduce hasta las Restlands, lugar de descanso eterno. Seguís al carruaje, pues su paso, como rezan los cánones, es lento. Unos instantes más tarde, una mansión de dos plantas, altos tejados y madera blanquecina se alza entre los campos de maíz. Un arco de piedra sobre el que descansa un letrero permite entrar a la finca. En el letrero puede leerse: “Hacienda Lorrimor”. El carruaje no se detiene en su avance, y se adentra en la finca.

Delante del porche de la mansión, una esbelta figura femenina, vestida con un elegante traje de luto observa y espera abstraída en sus pensamientos junto a un ataúd de ébano. Para muchos de vosotros salta a la vista claramente de quién se trata, para alguien en particular nada le haría olvidar a la que durante muchos años compartió algún que otro juego y risas... Kendra Lorrimor.

El coche funerario se detiene, y el trío de acólitos desciende saludando a la triste muchacha. Acto seguido se dirigen hacia el féretro...

El coche funerario se detiene, y un trío de acólitos desciende saludando a la triste muchacha. Acto seguido se dirigen hacia el féretro...

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12/01/2018, 14:04
Myldre Telrakum

Myldre destacaba siempre allí donde fuera, siempre había sido su bendición y su maldición. Y siempre se había sentido orgullosa de ello... Hoy era un día distinto, hoy no le importaba, hoy no quería ni siquiera ser notada, sin embargo destacaba. Su altura de 2 metros la hacía destacar quisiera o no. Había cubierto su gran parte de su pelo con un sombrero discreto que había comprado para la ocasión, pero algunos mechones rebeldes que se escapaban de su melena daban color a un día gris.

Al llegar a la altura de la hija de su mentor avanzó hacia ella y la abrazó ¿Qué tal estás? le susurró al oído mientras le palmeaba el hombro para animarla.

Notas de juego

Lo del sombrero se me ocurrió mientras escribía y me lo compré a mayores, supongo que no te importa ^^

he dejado casi todo mi equipo (mochila, armas, antorchas...) por que me parece poco apropiado llevarlas al funeral, (un arma más pequeña tiene un pase, pero la guja cantaba mucho), así que si hay combate os toca a vosotros ocuparos :p

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12/01/2018, 20:22
Hugh Van Thell

Nunca había estado en la hacienda Lorrimor, encontrándola amplia y hermosa, más aún cuando se adentró hasta llegar al porche. Allí estaba aquella dama que debía de ser familia suya. Había llegado además una mujer de cabello rojo extraordinariamente alta.

- Miladys.

Hugh tenía voz grave y algo rasposa.

- Mi nombre es Hugh Van Thell, he recibido una carta solicitando mi asistencia. Siento de veras la pérdida del profesor.

Había venido con su equipo de trabajo porque el profesor nunca antes lo había contactado y si lo hacía ahora debía de ser porque necesitaba de sus servicios. Siendo como era alguien poco conocedor de las formalidades de la clase culta, decidió que lo mejor sería seguir a la dama, que ella ya iría dando indicaciones. Como todos seguian allí, parecía claro que esperaban a que llegaran más asistentes.

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13/01/2018, 11:00
Mondo

Saliendo de la taberna Mondo rapidamente cayó en la cuenta de que el oficio habia terminado y que el carruaje con el finado Profesor habia partido ya del templo. Algo que me he ahorrado, pensó en voz alta mientras corria a unirse a la comitiva.

Cuando se acercó al final de la comitiva varió su paso para no parecer que llegaba a toda prisa, saludó con un leve gesto de la cabeza a las personas que cerraban la comitiva mientras se unia a ella.

Mientras esta avanzaba su paso por la taberna se hizo sentir y unos gases del vino tinto avinagrado comenzaron a escapar por su boca, Blurrp intentó amortiguar el ruido con su boca, pero el olor acido del vino malo llego a su nariz. Tenia que haber tomado algo solido con el vino, maldición. No puedo presentarme así, cuidadosamente se descolgó de la comitiva, en un momento utilizo un arbol de parapeto para sacar rapidamente su cantimplora, enjuagarse la boca y volver a la comitiva. Arreglado, Mondo.

Ahora habian llegado a la hacienda del Profesor. Vió como una alta mujer y un hombre daban el pesame a la ¿huerfana?, será mejor presentarme

- Saludos señora, mi más sentido pesame, por vuestra perdida dijo haciendo una leve reverencia primero a la señora y luego a los asistentes. Mi nombre es Mondo y recibí vuestra carta para asistir al funeral de vuestro ilustre padre, y ver si el viejo profesor es tan generoso en sus ultimas voluntades como cuando estaba en vida

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13/01/2018, 11:31
Nerthen Vorodiel

Nerthen llega cansado y con retraso, ha sido un largo viaje desde Fort Rannick, allí al pie del Monte Garfio en Varisia. Su temor de haberse perdido el sepelio se desvanece; solamente se ha perdido una parte, pero atrapa a paso ligero a la comitiva que cruza lentamente el pueblo en dirección a la haciendo Lorrimor.

Ha sido complicado dar con el pequeño lugar; su relación con el profesor se remonta a las clases en la universidad, y nunca había pisado su lugar de origen. Es por eso que aparece a ojos de todos con todo su equipamiento de explorador, con un arco de buena manufactura cruzado a la espalda, las plumas de muchas flechas asomando por el otro hombro, embutido en una gruesa capa de viaje. Pese a ello, se incorpora a la respetuosa cola.

Cuando ve a la joven mujer, pese no haberla visto nunca la reconoce; el profesor hablaba mucho de su hija Kendra. En cuanto es su turno, se acerca y hace una leve reverencia. La acompaño en el sentimiento, señorita. Mi nombre es Nerthel, no nos conocíamos, pero coincidí con su padre en la universidad a petición suya, y créame que hablaba mucho de usted. Puede estar orgullosa de su padre. Serio pero con gesto tranquilo, deja paso al siguiente.

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15/01/2018, 09:16
Kendra Lorrimor

La muchacha se secó un par de lágrimas de sus hinchados y llorosos ojos. La costernación que pesaba sobre ella era claramente palpable, pero aun así, cuando Myldre se abalanzó sobre ella para abrazarla, sólo pudo mas que fundirse más si cabe en dicho lazo fraternal. Luego, poco a poco, fueron apareciendo las personas que habían ocupado sus días en la infancia y adolescencia...

- ¡¡Ooh Myldre!!...- exclamó intentando dibujar una sonrisa en sus labios - ¡¡Por Pharasma, estas igual que siempre!!- Luego sus ojos se posaron en el resto de los que llegaron al tiempo que su llanto volvía a quebrar quejicoso - ¡¡Gracias!!... -  mientras miraba con lágrimas sinceras de emoción a los cuatro presentes. Una mirada capaz de hacer palpitar a una piedra, y eso mismo es lo que todos sintieron en su corazón, una sensación olvidada o perdida que volvía a renacer cual ave fénix...

- Gracias por venir a todos...- continuó diciendo de forma atropellada - Él deseaba que jamás pasara este trance sola...- el llanto irrumpió de nuevo - Siento mucho que nuestro lazo se debilitara durante estos últimos años, pero nunca pensé que volveríamos a vernos por esta delicada circunstancia...- intentaba argumentar la muchacha dirigiéndose a la pelirroja, Myldre. - Sois tal cual contaban las historias de padre... - Comentó a los otros tres, que no eran desconocidos para ella aunque acabase de conocerles.

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15/01/2018, 13:51
Hugh Van Thell

Se congregaron allí otras personas que él desconocía, no así Kendra. Para empezar, Hugh no la había visto antes y le extrañaba que el profesor le hubiera hablado de él. Quizá es que fue un hombre muy conversador.

- Su padre era un buen hombre. Me ayudó enormemente. Gracias a él me proporcionaron una educación.

Y además de eso, un sentido vital, ya que el joven ahora se dedicaba a la búsqueda de criaturas malignas que amenazaran a la ciudad. No era algo oficial sino un servicio que hacían los seguidores de Abadar, con la esperanza de labrarse un buen nombre en tan supersticiosa región. Que Desna fuera tan querida allí era significante.

- Con gusto le ayudaré en lo que pueda.

Tenía por cierto que el profesor había pedido algún tipo de favor en su testamento, quizás algo como cuidar de su hija o podría ser incluso enfrentarse a una maldición o problema de otra índole. El hombre se dirigió al resto de recién llegados.

- Me llamo Hugh, amigos.

En estas circunstancias había que ser amable y respetuoso por encima de cualquier otra cosa.

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15/01/2018, 17:06
Myldre Telrakum

Según iban llegando los miembros de la comitiva, Myldre los iba reconociendo. En uno u otro momento de los cientos de viajes que hizo con el profesor los había visto. Era normal que no la reconocieran sin embargo, ya que algunos de ellos eran bastante pequeños cuando los conoció, y a la propia Myldre le costó identificarlos. 

Saludos. Mi nombre es Myldre. Respondió cuando el primero de ellos se adelantó para saludar

Después del saludo se quedó unos instantes mirando su reacción... No quería destacar. Y se había arreglado especialmente para no hacerlo. Pero algo dentro de ella se retorcía por que no la reconocieran. No estaba acostumbrada a ello, y no le gustaba.

Notas de juego

XDD siempre digo que los personajes toman su propia personalidad a medida que los creo y los juego, y esta me ha salido presumida XD

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17/01/2018, 07:29
Mondo

Vaya, que tierno todo pensó Mondo para sus adentros. Quizas por su origen estaba más acostumbrado a convivir con la muerte. Vayamos a lo importante.

- Me llaman Mondo, dijo de una manera natural, con una leve inclinacion de cabeza ante la dama

-Mnnn, bueno, dijo intentando encontrar la mejor manera de decir lo que pensaba, lo que no sabemos es como pasó lo del Profesor, la ultima vez que lo vi estaba en plena forma.

- Que vamos a hacer ahora, ¿asistir al funeral ? Por Desna que no sea así

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17/01/2018, 11:51
Kendra Lorrimor

- Le agradezco sus palabras, señor Van Thell. Ciertamente, mi padre me habló de usted, es más, siempre dijo que no le ayudó, simplemente le indicó el camino a seguir... - Comentó al hombre alto.

Acto seguido, al oír las palabras del otro hombre que conformaba el grupo, Mondo, Kendra trató de ignorar por unos instantes su última pregunta, centrándose en el otro interrogante que proponía.

- Pues a pesar de la edad de padre... la verdad es que hacía gala de buena salud...- Se apresuró a decir la joven mientras miraba con cierto tinte de amargura y tristeza. - Todo fue bastante repentino... Un... Un maldito accidente...- Prosiguió entrecortada - Una mañana fue a Piedra Atormentada. Las historias que se narran de dicho lugar ciertamente le apasionaban... - Una virginal sonrisa volvió a asomar en el demacrado y cansado rostro de la muchacha, cuando parecía recordar a su intrépido padre - ... Pero algo debió salir mal. Aquel lugar se encuentra repleto de ruinas y lugares poco seguros. Al parecer cayó desde una de las balconadas y se golpeó la cara contra una de las gárgolas salientes de los muros... La muerte fue en el acto... - Explicó Kendra con una cara nuevamente crispada por el dolor.

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17/01/2018, 13:42
Hugh Van Thell

Así que Petros tan sólo le había dado un empujón y en parte era cierto, pero no fue sólo eso sino que pudo primero el camino delante suyo pues habiendo crecido en un horfanato no había un gran porvenir por delante.

El inquisidor masculló cuando la mujer relataba acerca de las circunstancias de la muerte. Ese tipo de lugares no eran de fiar y no había que visitarlos en soledad. Quizá el profesor fue demasiado temerario sin saberlo. Y dependiendo de lo que sucediera ahora, quizá podría ir a echar un vistazo, aunque no sólo. Quizá estas personas quisieran acompañarlo.

- ¿Y quién lo encontró, señorita Kendra?

Porque alguien hubo de dar con él. Claro que estaba cayendo en la deformación profesional e iniciando una especie de interrogatorio y quizá lo mejor era callarse la boca por ahora.

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17/01/2018, 14:02
Myldre Telrakum

Myldre quedo consternada al oír esas palabras... Después de tantos años acompañándole a los lugares peligrosos y ¿ahora decidía ir solo a estas ruinas?... No lo entendía. Decidió que quería averiguar más sobre ellas ¿por qué se las había ocultado? Dentro de sus extravagancias era un hombre experimentado y cuidadoso ¿como habría caído?... Esas preguntas le atormentaban, pero las dejaría para después de la ceremonia. Ahora no era el momento.

Notas de juego

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18/01/2018, 19:26
Nerthen Vorodiel

Nerthel asintió de acuerdo a la pregunta del joven de pelo largo. Poco acostumbrado al tacto requerido para estas ocasiones, el elfo va incluso un paso más allá, olvidando que hay un tiempo y un lugar para cada cosa. No puede ser que el profesor fuera solo. Alguien le acompañaba? Y conociéndole, no llevaría un librito con anotaciones o información descubierta o por descubrir en ese lugar? No es que las ceremonias fúnebres le sean ajenas, entre los Flechas Negras es habitual que haya bajas en las agrestes laderas del Monte Garfio, luchando contra animales salvajes y ogros y los funerales son todo liturgia y sentimiento, pero Nerthel es eminentemente práctico y aprovecha el tiempo.

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19/01/2018, 09:53
Mondo

- Bueno bueno bueno, paró la reflexion multiple Mondo. Que yo aqui he venido por el testamento, Primero deberiamos acabar la ceremonia y dar nuestro ultimo adios al profesor, dice juntando las manos.

- Luego deberiamos ver que es lo que dicen sus ultimas voluntades, quizas podamos encontrar algo util, y ver si mi viejo amigo ha dejado algo util para Mondo, pensó mientras suspiraba pensando en el vino y los dados que le esperaban en cuanto convirtiese en monedas lo que le tocase

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19/01/2018, 14:51
Kendra Lorrimor

Ante la pregunta de Hugh, la joven palideció y agachó un poco la cabeza, puede que recordando el trágico incidente o más bien imaginándoselo en su cabeza.

- Padre fue encontrado por el alguacil local, Benjan Caeller...

Kendra miró al elfo, cuando le preguntó. Estaba claro que el grupo rezumaba sentido común por sus cuatro costados. Tras esto comenzó a hablar, dirigiéndose a todos:

- Pueees... Supongo que ya sabéis cómo era mi padre - Volviendo a dibujar una sincera sonrisa al evocar el recuerdo de su padre. - Clases en la Universidad de Lepidstadt, viajes a Absolom, conferencias en Magnimar... Una vida de lo más ajetreada. - Argumentó la joven, mientras dejó pasar un lacónico impás de tiempo para ordenar sus pensamientos. - Aunque debo decir que en estos últimos años en Ravengro, su salud se había visto afectada... Había perdido bastante visión y comenzaba a quejarse como un anciano. - Sonrió Kendra mientras las lágrimas volvieron a brotar de sus ojos. - Últimamente pasaba el tiempo hojeando multitud de manuales. La gran mayoría de ellos sobre esoterismo. Espíritus, poltergeists... Fantasmas...- Enumeraba la chica sin darle mayor importancia, pues desde pequeña sabía que su padre era un enamorado de esos temas, y si en algo era rico Ustalav, era en historias sobrenaturales. - Siempre iba solo, Nerthen, y aquel fatídico día también. No se si llevaba algún cuaderno de notas encima, pero pronto lo sabremos... - Contestó al arquero elfo. - Muchas noches salía a dar una vuelta por los campos de maíz... - Su rostro se enturbia debido a la tristeza. - Siempre argumentaba que la artrosis no le debaja conciliar el sueño y que necesitaba un paseo... Debería haberlo acompañado... - Finaliza Kendra sintiéndose culpable del destino de su difunto padre.

Por fortuna, las palabras de Mondo la sacaron de su ostracismo y volvió a recomponerse, mientras los acólitos del templo que habían llegado se disponían a cargar con el féretro de su difunto padre.

- Suerte que habéis llegado, pues comenzaba a temer que nadie acudiría a despedir a mi padre... - Fueron sus últimas palabras en tono de agradecimiento.

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19/01/2018, 14:59
Director

El coche fúnebre, ya con el féretro del difunto, salió de la hacienda con dirección hacia el Norte, siguiendo el polvoriento camino que llevaba hasta las Restlands. Cuando Kendra comenzó a seguirlo, os invitó a hacer lo propio con la mirada, para que todos siguieseis el camino hasta el campo santo de Ravengro. Algunos lugareños os contemplaban durante la procesión con rostro sombrío y severo, deteniéndose durante unos segundos hasta que el carruaje se hallaba lo suficientemente lejos como para continuar con su actividad. La escena resultaba cuanto menos curiosa.

Después de unos minutos de viaje, la procesión llegó hasta un camposanto limitado por muros de piedra y arcilla. Junto a la puerta principal, un pequeño séquito de personas notables se había acercado para darle el último adiós al profesor.

 

Entre ellos destacaba un  hombre de edad avanzada, perteneciente a la aristocracia de la aldea. Porta un corte de pelo bastante cuidado al igual que un fino bigote. Siempre sudoroso, resuella ante la más mínima exigencia física, debido a su descomunal obesidad mórbida. A pesar de eso, viste con ropas de exquisito lujo y se apoya en un magnífico bastón de madera y marfil. Sobre su espalda descansa el manto púrpura de líder del consejo de Ravengro. Con una depurada etiqueta se presenta como Vashian Hearthmount, primer consejero de la localidad.

Junto a él, otro aristócrata, pero a diferencia de maese Hearthmount, éste es espigado y desgarbado. La arrugada piel de su cara y sus manos le otorgan una edad que equívocamente se sugiere superior a la que realmente debe poseer. Sobre su cabeza reposa un enorme sombrero, que no duda en descubrir cuando se presenta como Gharen Muricar, consejero e historiador de Ravengro.

Un poco más apartados, un individuo achaparrado de frondoso bigote, vestido con ropas humildes y cuyo pecho se encuentra tupido por una profusa mata de pelo rizado se presenta como Zokar Elkarid, regente de la posada: El Demonio Sonriente. Acompañando a su padre, un joven muchacho de cara pecosa y pelo rubio, se presenta como Pevrin Elkarid.

Finalmente, una mujer de mediana edad, quizás unos años mayor que Kendra, vestida con ropas humildes y manos llenas de arañazos y rasguños, se presenta como Jominda Fallenbridge, apotecaria de la aldea. Sin duda es una mujer madura y bella, debido a sus exóticos rasgos Shaontís. 

Tras las presentaciones...

- ¡¿Quiénes desean contribuir al porte del finado?!- pregunta uno de los jóvenes acólitos al tiempo que comienzan a descargar el recio ataúd.

Notas de juego

Restlands: "Lugar de descanso", pero el nombre me gusta más así ;)

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19/01/2018, 18:09
Hugh Van Thell

Con cada nueva palabra de la dama la historia parecía más oscura. El profesor dedicándose a leer sobre historias de fantasmas y saliendo todas las noches a un campo de maíz. Si no estuviera en un entierro, el joven sería más inquisitivo.

No pudo evitar un suspiro. Se preguntaba si en el testamento les confesaría qué es lo que había tratado de hacer. Hugh tenía ahora mucho interés en lo que habría llevado al profesor a una actitud tan extraña y luego a la muerte.

- Contribuiré en el porte.

Siendo la complexión del inquisidor tan fuerte resultaría de gran ayuda en ese solemne transporte hasta la tumba. Hugh se lamentó de que no le hubieran llamado antes de la sepultura, para poder mirar el cadáver en busca de marcas o restos en el cuerpo. Pero al ser una persona respetuosa con los rituales y al no tener autoridad reconocida, no quiso decir nada.

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21/01/2018, 11:45
Mondo

Mondo se encogió de hombros, los trabajos fisicos no estan hechos para ti, recuerdalo se dijo a si mismo mientras miraba con aire dubitativo.

- Disculpen pero tengo la espalda muy dolorida del viaje, se disculpo ante los presentes, ademas no tengo una constitucion hecha para el trabajo fisico, como pueden ver. Mi torpeza podria causar un accidente

Mondo efectivamente no tenia unos brazos muy fuertes. Haciendo una reverencia se apartó del ataud

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21/01/2018, 23:44
Nerthen Vorodiel

Nerthen mira con desdén al último invitado que ha hablado, que prefiere escabullirse. Como si se tratara de un compañero caído de su hermandad, da un paso al frente. Yo también participaré, si lo tienen a bien. El elfo no destaca precisamente por su fuerza, pero sabe que a veces estas cosas se apañan mejor con maña que con fuerza; alternando el peso de un hombro a otro, cogiendo de una manera o de otra...

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22/01/2018, 11:22
Myldre Telrakum

Myldre, que hasta el momento se había mantenido al lado de Kendra, se separó de su amiga para acercarse a la comitiva.

Me gustaría ayudar a portar el féretro de mi amigo. Mi amigo. Pensó con tristeza. Después de tanto tiempo diciendo que era su guardaespaldas, se lamentaba de haber esperado a que muriera para llamarle amigo...

Avanzó hasta el féretro, y se situó en una esquina del mismo. Por su experiencia, con su tamaño, siempre que habían tenido que colaborar para llevar algo, su altura complicaba mucho las cosas... Al llegar a la posición de los que ya se habían colocado para portear, les hizo un leve saludo con la cabeza.