Partida Rol por web

Al llegar abajo, ambos vieron los pies de Michael desaparecer en el comedor. Entraron precipitadamente en la habitacion y casi se dieron de bruces con las piernas de sus padres, que estaban conversando de pie con el tio Steven. 

Michael estaba ahi, detras de su padre y agarrado a sus piernas, mirandolos con gesto desafiante, esperando para ver que harian en aquel lugar, a la vista de todos los adultos. 

Choqué con Arthur, que se había quedado clavado devolviendole la mirada a Michael. Si conocía de algo a mi primo, es que esto no iba a quedar así. Da igual dónde se escondiera el enclenque "señor de los darklings", que su primo le encontraría y le devolvería lo que había hecho. En el patio del colegio también era así. Cuando alguien se metía conmigo, Arthur se encargaba de que no se volviera a acercar a mí. Miré a Michael, escondido tras su padre. Me iban a regañar, lo más probable, pero teníamos que sacarle de allí. No podríamos hacer nada delante de nuestros progenitores, y teníamos que descubrir por qué nuestro primo había tomado la decisión de acabar con nosotros. Así que salí de detrás de Arthur y corrí hacia Michael, para dale un golpecito en el hombro y gritar entre risas un "tú la llevas", como si se tratara de un juego infantil. 

Sonrío maliciosamente cuando veo que mi primo se esconde bajo "las faldas" de papá.

- Maldito cobarde de mierda. - pienso.

Cuando Gabriella se me adelanta para simular que jugamos al pilla-pilla sonrío abiertamente.

- Bien hecho primita.

- Venga Michael, ahora vas tú. - comento sacándole la lengua. Veamos si puedes cogerme.

Era toda una declaración de intenciones. Los padres verían tan sólo un juego pero nosotros tres sabemos que no era eso a lo que me refería.

- Venga, valiente, tú y yo sólos. - pienso.- Enséñame de lo que eres capaz.

Ambos esperan a que su primo reaccione, siguiendoles la corriente con aquel juego, y los adultos evidentemente tambien lo creian asi, ya que los miran jugar y sonrien, aguardando a que Michael salga corriendo tras de ustedes, armando un griterio y haciendo resonar sus pies por la casa mientras van corriendo, comentando entre si lo divertido que era ser niño.

Pero Michael simplemente niega con la cabeza y se sienta en una silla proxima, diciendo: - No tengo ganas de jugar. Mis primos son malos y quiero que se vayan. Estan tratando de golpearme, todos ellos - exclama Michael, dirigiendose en particular hacia su padre.

- ¿COMO? ¿Golpearte, dices? - responde Steven, volteando para ver a su hijo y luego a ustedes dos, mientras exclama:

- ¿Como es eso, chicos? ¿De que esta hablando mi hijo? ¿Acaso estan jugando a golpearse mientras corren? Saben que no deben de hacer eso. Alguien podria salir lastimado. 

Sus padres asienten y comienzan a regañarlos por hacer cosas peligrosas y golpear a su primo. Los obligan a prometer que no volveran a hacer nada parecido y que se portaran bien, antes de mandarlos a sus habitaciones, mientras que Michael se queda en la cocina, junto a su madre. 

- Eso no es cierto. - digo a mis padres cuando empiezan a regañarme.

Cuando me mandan a la habitación les sigo la corriente pero realmente me quedo fuera vigilando a Michael sin ser visto.

Cuando me mandaron a mi habitación junto a mis primos, vi que Arthur se escabullía para vigilar a Michael y le seguí.

A pesar de la reprimenda que han recibido, ni Arthur ni Gabriella deciden hacer caso de lo que les han dicho sus padres y observan desde afuera de la cocina como Michael permanece cerca de su madre en la cocina, mientras ella prepara unas galletas. 

De vez en cuando su primo voltea para asegurarse de que no hay nadie por ahi, y pese a que en varias ocasiones Michael esta a punto de descubrirlos, ustedes consiguen ocultarse de el sin ser descubiertos.

Durante el resto del dia no pueden acercarse a el, ya que nunca se separa de su padre o su madre, siempre mirandolos con ojos llenos de hostilidad y pidiendo reiteradamente a sus padres que los echen de la casa. Sin embargo, Margo y Steven Edge no toman bien estos comentarios de su hijo y lo mandan a su habitacion sin cenar, mientras que ustedes no tienen mas remedio que quedarse a la cena en el comedor, bajo la atenta mirada de sus padres.

Pero finalmente terminan la cena y pueden retirarse a dormir, aunque bien saben que no van a hacer eso. Y por supuesto, su primo tambien.

Al dirigirse hacia la habitacion de Michael, encuentran la puerta cerrada con llave desde adentro.  

Trato de escuchar a través de la puerta y de ver a través de las rendijas para ver si Michael está ahí y si hay darklins con él.

Mientras Sebastián escucha tras la puerta intento abrir la misma.

Arthur intenta forzar la cerradura de la puerta con su navaja multiusos, pero el mecanismo de la cerradura no cede, por mas que el muchacho trata de destrabarlo, pero al menos saben que su primo esta dentro, pues escuchan un prolongado y agudo grito de Michael, proveniente del interior de la habitacion:

- ¡MAMA! ¡MIS PRIMOS ESTAN TRATANDO DE ENTRAR A MI CUARTO! - grita Michael con todas sus fuerzas, y su voz es escuchada tanto por sus tios MArgo y Steven como por sus padres, ya que las luces se encienden y comienzan a escuchar las voces molestas de los adultos, poniendose de pie.

Esta vez no hay forma de negar lo que su primo ha dicho, pues las marcas de los arañazos de la navaja de Arthur sobre la cerradura y la deformacion de esta indican claramente que alguien trato de forzarla. 

- ¡Gabriella! ¡Mas vale que te encuentre en tu cama cuando me ponga de pie, o te ira muy mal, jovencita! - exclama molesto el padre de su prima, cuya voz se escucha desde su habitacion. 

- ¡Lo mismo va para ti, Sebastian! ¡No se que les pasa desde que llegaron aqui, pero ya es hora de que se vayan a dormir y dejen en paz a su primo! - agrega el padre de Sebastian, a la vez que escuchan una puerta abrirse de un golpe seco. 

- ¡Arthur, tienes hasta la cuenta de 10 para irte a tu cuarto y meterte en la cama antes de que vaya por ti! - dice a su vez el padre de su primo, al que escuchan maldecir mientras se viste para salir de su recamara. 

- Maldito criajo malcriado. - mascullo cuando oigo como grita.

Inmediatamente nuestros padres se ponen en movimiento.

- Rápido, a las habitaciones. - comento empuñando a mis primos para alejarnos lo más rápido posible. Cerrad por dentro y encended la luz de la habitación. - prosigo mientras nos dirigimos raudos a nuestras habitaciones. Y mantened los cristales junto a vosotros para protegeros de los Darklings.